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1. Eduardo Adams es amante de las finas piezas elaboradas a mano e inspiradas en el estilo Novohispano, como este mueble rojinegro (de Agustín Parra) sobre el que se observa un jarrón en mármol negro con accesorios en bronce (de la diseñadora Hilda Flack). 2. En la habitación, la cama (tipo daybed, para aprovechar al máximo el espacio) está fabricada por artesanos dominicanos; al fondo se observan dos obras de la artista Ada Balcácer. Esta área es otra de las áreas de la autoría del arquitecto Eduardo Álvarez, quien ideó vestir de blanquinegro a esta cama de caoba, logrando un excelente resultado visual. 3 Y 4. En esta estancia, contigua al aparta-estudio (que mide 60 metros cuadrados en su interior, 62 en la terraza y 72 en el techo), se ve una lámpara de cristal de Quorum (casa que la distribuye) junto a una obra del maestro Yoryi Morel. También se observa un cofre marroquí, con piedras incrustadas y un precioso trabajo de repujado en hojas de aluminio.
Al fondo y en una de las esquinas, un reloj de piso (de La Nacional Home Gallery) fue una de las primeras piezas que amuebló a este lugar. Durante el paso del tiempo, esta reliquia que mide el tiempo llegó a atesorar en sus entrañas, desde insignias, piezas de cubertería y de vajilla (pertenecientes a la familia Trujillo), hasta un souvenir de cada país en el que Adams ha estado. Cerca de este vestigio, un caballo de madera (policromada y estofada a mano por el artista Agustín Parra) parece flanquear a una butaca, otra de las obras de este pintor, escultor, retablista, diseñador y mueblero mexicano. Al proseguir con el recorrido de la sala, Aretes Rosados, de Antonio Prats Ventós, se adueña del espacio desde el centro de una pared lateral. También se hace acompañar de otras obras maestras ejecutadas magistralmente por pintores dominicanos…
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“Este apartamento ha evolucionado tal y como lo ha hecho el soltero que habita en él”, Eduardo Adams, gerente general de las tiendas La Nacional, sobre su propio apartamento.
Lacasa
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