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Conflictos territoriales entre los subalternos de la ruralidad

Segundo, tal diferenciación de derechos ha roto las relaciones interculturales previas que podían existir entre indígenas, afrodescendientes y campesinos que habitaban un mismo territorio. Contrario al presupuesto del constitucionalismo multicultural, las identidades étnicas y culturales son dúctiles y pueden confluir en una misma persona simultáneamente. Como lo reseñamos en el capítulo 1, los resultados de la Encuesta de Calidad de Vida (ecv) para 2019 indican que, del 28,4 % de las personas mayores de 15 años que se consideran campesinas, el 11,7 % a su vez se reconocen como negro, mulato, afrodescendiente o afrocolombiano y el 7,9 % como indígena (dane, 2020). No obstante, la asimetría de derechos refuerza una identidad respecto a las otras, lo que ha intensificado los conflictos entre estos sujetos, como pasamos a exponer.

Conflictos territoriales entre los subalternos de la ruralidad

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La movilización rural de los últimos años ha hecho explícitos los conflictos interculturales. Uno de los momentos cruciales de ese diagnóstico fue la Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y Popular, de la cual derivaron unas mesas de seguimiento para la resolución de conflictos interétnicos, interculturales y territoriales. En esos espacios, las organizaciones sociales y el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural (incoder), con el apoyo del Instituto de Estudios Interculturales de la Universidad Javeriana de Cali, avanzaron en la caracterización de 37 conflictos en Antioquia, Atlántico, Arauca, Bolívar, Cauca, Caldas, Córdoba, Cesar, Huila, Tolima, Risaralda y Norte de Santander (Cumbre Agraria e Incoder, 2016).

Inicialmente, esas controversias parecían estar concentradas geográficamente, sobre todo, en el suroccidente, pues una parte importante de la producción académica se concentró en estos territorios. A medida que pasa el tiempo, dichas disputas se han hecho más evidentes a lo largo y ancho del territorio nacional. Según Carlos Duarte –investigador del Instituto de Estudios Interculturales–, a agosto de 2020, existen 129 conflictos territoriales en el país, de los cuales el 38 % (50 casos) corresponden a conflictos interculturales entre comunidades étnicamente

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La constitución del campesinado: luchas por reconocimiento y redistribución en el campo jurídico diferenciadas y comunidades campesinas, en comparación con el 17 % de conflictos interétnicos, el 12 % de conflictos intraétnicos y el 7 % de conflictos intraculturales (Duarte, 2020).

En Cauca, la movilización indígena, afrodescendiente y campesina es vigorosa, como lo ilustra la presencia del Consejo Regional Indígena del Cauca (cric), la Asociación de Consejos Comunitarios Afro del Norte del Cauca (aconc), el Comité de Integración del Macizo Colombiano (cima), el Proceso de Unidad Popular del Suroccidente Colombiano (pupsoc) y la Asociación Campesina de Inzá Tierradentro (acit) (Duarte, 2015). Ello se traduce en la pluralidad de formas de propiedad colectiva en resguardos, territorios colectivos afrodescendientes y zrc que, en no pocas ocasiones, están superpuestos. A modo de ejemplo, la tabla 17 presenta algunos conflictos que han sido documentados por la acit en asocio con la Agencia Nacional de Tierras.

Tabla 17. Descripción de algunos de los conflictos en el departamento de Cauca

Actores Descripción del conflicto Lugar

Campesinos e indígenas de los resguardos Totoró y Ambaló Desde los años noventa, los indígenas han buscado la ampliación de resguardos en veredas campesinas con tomas de tierras de predios pequeños, lo que desencadenó en desplazamientos. Existen veredas que ya han desaparecido para el campesinado como ocurrió con la vereda del Cofre. Vereda Santa Lucía en el municipio de Silvia

Campesinos y comunidad indígena del Resguardo de Quizgó Los indígenas de Quizgó adquirieron el título colectivo en 1998 sin que se hubiese hecho saneamiento de la propiedad, a pesar de la presencia de más de 138 propiedades de terceros que son campesinos, en las veredas de Chuluambo y Camojó. “El conflicto se origina cuando muchos campesinos quedaron bajo la jurisdicción indígena que culturalmente no ven en este tipo de ordenamiento y gobernabilidad especial, su juez y autoridad natural, siendo subordinados a la comunidad indígena por mandato de la ley. En este proceso familias campesinas deciden desplazarse a otros lugares, resistir a dicha autoridad o simplemente afiliarse al Cabildo del Resguardo de Quizgó” (Morales, 2017). Silvia

Actores Descripción del conflicto Lugar

Campesinos e indígenas Nasa Desde 2012, empieza la “clarificación de títulos republicanos de los Resguardos de Inzá, Turminá y san Antonio de Pedregal que incluye las tierras del Resguardo La Laguna. Tomaremos esos títulos porque son los territorios que actualmente son ocupados mayoritariamente por los campesinos y campesinas y en su gran mayoría con títulos de propiedad individual. Sobre estos territorios y otros más han solicitado la constitución de una Zona de Reserva Campesina-zrc” (Morales, 2016). El proceso se suspendió por la derogación de la norma reglamentaria del proceso de clarificación (Decreto 2663, 1994). Inzá

Fuente: elaboración propia con base en el trabajo realizado por Eliecer Morales en el marco del Convenio con el incoder en liquidación para la caracterización de los conflictos interculturales (2016, 2017).

Por su parte, en Putumayo, algunos de los conflictos interculturales entre campesinos e indígenas están asociados a la informalidad de la propiedad rural que, sumada a la falta de tierras, ha resultado en que dos o más actores aspiran a la titulación de un mismo territorio. La tabla 18 enlista algunos de los conflictos de este tipo, que fueron identificados por La Rota-Aguilera et al. (2015), en este departamento.

Tabla 18. Conflictos entre pueblos indígenas y campesinos en Putumayo

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Campesinos/Ingas y Cofanes

Campesinos/Cofanes En 1973 se constituyó la reserva indígena, con casi 20.000 ha (en términos de la Ley 135 de 1961), dentro de la cual se constituyeron 2 resguardos en 1998: San Marcelino Yarinal, de 2900 ha y El Afilador Campoalegre, de 887 ha. El resto del área que fue reserva indígena es ocupada por campesinos que piensan que son baldíos de la nación. Los indígenas reclaman su propiedad como parte de la antigua reserva indígena.

En 1973 se constituyó la reserva indígena Cofán de 3000 ha (en los términos de la Ley 135 de 1961), en la cual se constituyó el Resguardo Cofán de Santa Rosa del Guamuez, de 700 ha. En el resto del área de la reserva indígena cofán hay asentadas veredas de campesinos, y los cofanes reclaman la totalidad de la tierra. San Miguel

Valle del Guamuez

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Campesinos/ Emberas Chamís

Campesinos/Ingas

Pastos/campesinos/la nación

Campesinos e indígenas/ indígenas

Sionas/ Kichwas y campesinos Dentro del Resguardo Simorna (Embera Chamí), constituido en 2005, hay comunidades campesinas de las veredas Río Blanco y Brisas de Río Blanco con posesión de algunas tierras. Los indígenas alegan su propiedad; mientras los campesinos sostienen que “de ahí los sacan muertos”. Se requiere saneamiento de resguardo.

Los campesinos habitan el predio Michoacán hace más de treinta años, cuando el incora instó a su ocupación mediante acuerdos productivos con los colonos. Sin embargo, en 1982, el incora lo tituló a indígenas del cabildo de la parcialidad Inga de Colón. Tras años de ocupación, los campesinos se encuentran totalmente instalados en la zona –con escuelas, iglesia, casas y el hospital psiquiátrico del departamento–. Los indígenas aparecen hace un par de años para reclamar las tierras, lo cual ha suscitado un conflicto. Al parecer, los indígenas nunca registraron el título en instrumentos públicos.

Conflicto entre el pueblo de los Pastos –cabildo de Males, municipio de Córdoba (Nariño)– y la comunidad campesina de la inspección de Siberia (Orito). Los Pastos alegan la posesión de un título colonial que se extendería por Putumayo, por lo que inician la venta de tierras en Orito. Según el incora, esas tierras hacen parte de los baldíos de la nación. Se venden 3 ha por $120.000. El asunto se ha institucionalizado de tal forma que los Pastos tienen una oficina en El Placer desde donde coordinan las ventas. Cuando los campesinos que les han comprado tierra a los Pastos se dirigen a instrumentos públicos a registrar el título otorgado por el cabildo de Males, les informan que el documento que presentan es inválido.

Cerca de la vereda El Águila se creó un nuevo cabildo indígena, que ya fue reconocido por el Ministerio del Interior. Ha habido reclamos de campesinos y de otros indígenas sobre las tierras adjudicadas a los indígenas.

Las aspiraciones de ampliación del Resguardo El Tablero hacia el Parque Nacional La Paya se ven limitadas por una finca campesina que se interpone. Orito, Putumayo

Colón

Orito

Puerto Asís

Leguízamo

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Muruis/ campesinos Un grupo de dieciséis familias Muruis desplazadas de Huitorá (Resguardo Uitoto en Caquetá y Putumayo) están asentadas en tierras que les está donando un campesino para que se constituya allí el resguardo La Primavera. Sin embargo, los campesinos de la comunidad La Esperanza aspiran a ocupar estas mismas tierras. Leguízamo

Fuente: elaboración propia a partir de La Rota-Aguilera et al. (2015).

Si ampliamos la visión a otros conflictos, encontramos una dispersión en la zona norte del país. La investigadora Adriana Fernández (2019) ha descrito los conflictos en la región de Catatumbo, concretamente las tensiones territoriales entre el pueblo binacional Barí y el campesinado. Como lo destaca su investigación, el conflicto inició en los años noventa, cuando el pueblo Barí presentó las solicitudes de constitución y saneamiento del resguardo en un territorio en el que los campesinos y afrodescendientes han habitado desde los años setenta. En 2009, los campesinos solicitaron la constitución de la zrc, lo que profundizó las controversias.

En la altillanura –específicamente, Vichada y Meta– también se registran conflictos entre indígenas y campesinos por la falta de tierra (CesPaz, s. f., pp. 15-17). Allí, la dinámica del conflicto armado, la expansión de los cultivos de uso ilícito y los acelerados procesos de deforestación han reducido notablemente el territorio disponible para estas comunidades. Mientras los indígenas se han articulado y han consolidado los resguardos, los campesinos no han formalizado sus derechos territoriales. Sumado a esas tensiones, ambos sujetos enfrentan el avance de la agroindustria y las políticas gubernamentales de desarrollo, tales como las Zonas Integrales de Desarrollo Económico y Social (Zidres).

En el Caribe, los conflictos interculturales se han focalizado en Montes de María, debido a la constitución de una zrc desde 2011. En 2018, un área logró quedar legalizada en uno de sus polígonos, pero otra porción aún está en proceso de formalización, dado que está pendiente la consulta previa con comunidades étnicas. Pese a que las conversaciones interculturales han sido

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La constitución del campesinado: luchas por reconocimiento y redistribución en el campo jurídico adelantadas en esta región, no se ha logrado una solución que articule las demandas de los procesos comunitarios (La RotaAguilera et al., 2015).

En el Cesar también se registran conflictos interculturales. El 12 de agosto de 2016, seis autoridades indígenas del pueblo Yukpa –que está ubicado en los municipios de La Paz, Becerril, Agustín Codazzi, San Diego y La Jagua de Ibirico– interpusieron una acción de tutela contra el Ministerio de Interior con el objetivo de exigir la garantía de los derechos étnicos a la consulta previa frente a los procesos de constitución de la Zona Veredal Transitoria (zvt) en el municipio de La Paz y la Zona de Reserva Campesina, en la serranía del Perijá (Sentencia T-713, 2017). Con todo, el conflicto no es reciente, según los estudios elaborados por Josefina Cuello y Paola Villazón (2019), María Aguilera-Díaz (2016, pp. 9-20). Con el ánimo de llevar el conflicto a espacios de diálogo y crear escenarios de resolución no violenta, las comunidades campesinas pidieron apoyo a la Pastoral Social de Valledupar, en 2017 (Comunidades Campesinas del municipio de La Paz, 2017).

Tabla 19. Conflictos interculturales en la serranía del Perijá

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Pueblo Yukpa/ campesinado de la serranía del Perijá El pueblo Yukpa presenta poblamiento precolombino, junto a otras etnias, en la serranía del Perijá. Entre los años cuarenta y cincuenta, la población campesina llegó por la dinámica económica regional y La Violencia. Durante la década de los setenta, la colonización se intensificó en la zona. La zona también fue de interés para los grupos armados por su ubicación estratégica dentro de la región y con Venezuela. El Estado ha ido comprando terrenos campesinos para ampliar el resguardo indígena. A esta situación, se suman otras afectaciones por la consolidación de figuras de protección ambiental como lo son las reservas forestales y los páramos, que han limitado la territorialidad campesina. Municipio de la Paz- Cesar

Fuente: elaboración propia a partir de Josefina Cuello.