LAS PREGUNTAS Bueno, yo os voy a hablar sobre las preguntas. Todos hacemos preguntas a todas horas y nos las plantean muchas a nosotros también. Sin embargo, hay algunas preguntas peculiares y muy comunes en nuestra vida diaria y de esas preguntas os voy a hablar. Muchas preguntas ridículas las hacen los profesores en los exámenes. Para empezar a esas preguntas deberían llamarles pluripreguntas, porque en una hay máximo cinco y si no son cinco, son dos: la general, y la maldita “azaldu”. Si hay una pregunta fácil tiene que tener “azaldu”. -“Zer dira dekrazio olerkiak?”- Un tipo de poesía- “Azaldu”.- Eso lo ponen para fastidiar porque sino yo no entiendo para que lo ponen. Otra pregunta las hacen a los pelotas de clase al decir una frase concreta, con mala estructura gramatical: -“Andereño, ikusi NIZUN igandean!” -“Zer ikusi zenidan ipurdia?” Pero ¿Por qué dicen “ipurdia”? ¡Solo tienen que decir “ipurdia”! ¡Prohibido “sudurra” u “oina”! ¡Tiene que ser, “Ipurdia”! Aparte de los profesores, los niños también preguntan mucho. Sobre todo ¿Por qué esto? ¿Por qué lo otro? Siempre. Yo ya me imagino el diálogo de un niño que intenta meter los dedos en el enchufe y la madre que va corriendo detrás, y le tira de la mano: - ¡No metas los dedos en el enchufe! - ¿Por qué no? - Porque te dará un calambre. - ¿Por qué me dará un calambre? -
Porque la electricidad se pasara a ti.
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Y ¿Por qué se pasara a mí?
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Porque ummmmmmm… ¡se siente muy solo!
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¿Por qué se siente solo?
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Porque no tiene amigos
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¿Por qué no tiene amigos?