Hathakatu N°3

ANTROPOLOGÍA Proyecto Editorial de Investigaciones Etnográficas y Científicas

Año III N° 3 - 07/2022

El camino por donde transitan todas las generaciones (Ichuña 2002) REFLEXIONES SOBRE LA PANDEMIA, LOS MITOS Y LA CULTURA (Y lo que alguna vez fue la campiña) Escuela Profesional de Antropología - UNAP Puno, Perú

Fotografía: Ale Bellido

HATHAKATU Director Editorial y Fundador

Juan B. Carpio Torres Email: jubaucato@yahoo.es

Consejo Editorial

Jorge Apaza Ticona Marco A. Saavedra Pinazo Alfredo Calderón Torres Marilyn M. Lanza Arocutipa Adderly Mamani Flores

Consejo Académico

Vicente Alanoca Arocutipa Guillermo Cutipa Añamuro María Del Carmen Valdez Ortiz Héctor Velásquez Sagua

Diseño Editorial

Elizabeth A. Carpio Sánchez

Dirección de Prensa y Comunicación Dennis Ramírez Sánchez

Traducción

Inglés - Francés Elizabeth A. Carpio Sánchez Español - Aymara Adolfo Chambilla Laquiticona

Apoyo Logístico

Adderly Mamani Flores

Asesoría Jurídica

Carlos Ramírez Sánchez

Hecho el depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú N° 2018-04333

Hathakatu © 2022 Publicación de los cursos de Antropología y Etnografía de la Escuela Profesional de Antropología UNA - Puno.

Edición Digital.

Derechos Reservados.

CONTENIDO Presentación

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Cultura Alienígena: ¿Coincidencias o mensajes de la tierra al cosmos?

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Efectos Culturales de la Pandemia: ¿por qué no cambiamos?

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La primera ola: un caso de endosanación en el C. P. Virgen de la Candelaria, Madre de Dios

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El encanto del Khapía

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Sapa Yuqall Wawa

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Vilque y la Feria en la Fiesta de Pentecostés

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E. Alejandra Carpio

Brian N. Álvarez Díaz Juan B. Carpio Torres

Roulia R. Mucho Luque

Lisseth N. Mamani Medrano Luz Y. Mamani Zapana

Juan B. Carpio Torres

Adderly Mamani Flores

Hathakatu en ruta

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Había una vez una campiña

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Juan B. Carpio Torres Juan B. Carpio Torres

Arequipa, vista al Misti y la campiña Fotografía: Paula Heid

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Presentación La humanidad nuestra, es más fuerte que los virus y gusanos que nos atacan HATHAKATU, en su tercera edición, aparece en los días postreros a la tregua que nos da esta pandemia. Aparecemos como sobreviviendo ante este dramático apocalipsis para nuestra humanidad, tan frágil ante este poderoso virus que nos ataca por oleadas, cuyo resultado global alcanza a más de cinco millones de fallecidos y, en nuestro suelo, la cifra sobrepasa largamente los doscientos mil. Para colmo, en el mundo se llevan a cabo guerras fratricidas entre estados, una de las cuales es el ataque infame de la rusiaputin contra Ucrania. ¡Basta ya de muertes! Estos infaustos sucesos deben merecer una revaluación del concepto humanidad. En todo caso, cuánto de humanidad hay en cada individuo. Poner en debate local, regional y global la humanidad, inhumanidad, animalidad, por tanto, nuestra civilización. La realidad que vivimos nos obliga a realizar esfuerzos, aún con sacrificios, para lograr vivir en paz, por lo menos en estos primeros años del siglo XXI. En esta edición aparecen ensayos de jóvenes profesionales y estudiantes de la Escuela de Antropología de la UNA Puno. E. Alejandra, presenta un novedoso ensayo que nos permite observar los secretos que guarda la cultura andina; Juan Carpio y Brian N. Álvarez proponen algo que está en actualidad: la pandemia y por qué los ciudadanos se resisten a cambiar. Roulia Mucho, como estudiante aún, nos muestra una realidad que tal vez esté oculta ante los ojos del mundo, cómo un pueblo y su vecindad ha luchado para combatir el virus y lo ha logrado. Nos acompañan las estudiantes Lisseth N. Mamani y Luz Y. Mamani Zapana, con dos interesantes relatos. A continuación, Carpio y Adderly Mamani presentan novedades para la grandeza de Vilque. Nuestra acostumbrada ruta de Hathakatu, esta vez por Umachiri, donde se iniciaron las históricas luchas por la independencia de la patria.

Finalmente, unas notas históricas que nos recuerdan lo que fue la campiña arequipeña, para no olvidar que, por muchos años, hubo una campiña, tierras labradas con amor y sacrificio para entregar el alimento a los habitantes, en todo tiempo.

Sin embargo, Hathakatu no es una publicación que se quede en el fondo de las quejas de la infamia que, lamentablemente, nos ocurre a la humanidad. Es una ventana que abre los horizontes de jóvenes que quisieran iniciarse en la práctica de la escritura, descubriendo en su quehacer estudiantil y profesional, los problemas y necesidades en la realidad de pueblos y comunidades tradicionales de la región sur del Perú. Por suerte, es una oportunidad para ellos que, cada día alcanzan mejoras, a partir de las prácticas que se realizan en algunas materias del plan de estudios de la Escuela de Antropología.

Sinceramente, El editor.

Lima, 16 de mayo del 2022.

Un sector del distrito de Ichuña, Moquegua - 2002 Fotografía: Archivo propio

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Presentation Our humanity is stronger than the viruses and worms that attack us

Notre humanité est plus forte que les virus et les vers qui nous attaquent

HATHAKATU, in its third edition, appears in the last days of the truce that this pandemic gives us. We appear as surviving in the face of this dramatic apocalypse for our humanity, so fragile in the face of this powerful virus that attacks us in waves, whose global result reaches more than five million deaths and, on our soil, the figure far exceeds two hundred thousand. To make matters worse, fratricidal wars between states are taking place in the world, one of which is the infamous Russian-Putin attack on Ukraine.

Enough of deaths! These unfortunate events should deserve a reassessment of the concept of humanity. In any case, how much humanity is there in each individual. Put humanity, inhumanity, animality, therefore, our civilization, into local, regional and global debate. The reality we live in forces us to make efforts, even with sacrifices, to live in peace, at least in these first years of the 21st century.

HATHAKATU, dans sa troisième édition, paraît dans les derniers jours de la trêve que nous accorde cette pandémie. Nous apparaissons comme survivants face à cette apocalypse dramatique pour notre humanité, si fragiles face à ce puissant virus qui nous attaque par vagues, dont le bilan mondial atteint plus de cinq millions de morts et, sur notre sol, le chiffre dépasse largement les deux cent mille. Pour aggraver les choses, des guerres fratricides entre États se déroulent dans le monde, dont l’une est la tristement célèbre attaque russo-poutine contre l’Ukraine. Assez de morts!

Ces événements devraient mériter une réévaluation du concept d’humanité. En tout cas, combien d’humanité y a-t-il en chaque individu. Mettre l’humanité, l’inhumanité, l’animalité, donc notre civilisation, dans le débat local, régional et mondial. La réalité dans laquelle nous vivons nous oblige à faire des efforts, pour vivre en paix, du moins dans ces premières années du XXIe siècle.

In this edition there are essays by young professionals and students from the UNA Puno School of Anthropology. E. Alejandra, presents a new essay that allows us to observe the secrets that the Andean culture keeps; Juan Carpio and Brian N. Álvarez propose something that is current: the pandemic and why citizens resist change. Roulia Mucho, still a student, shows us a reality that may be hidden from the eyes of the world, how a town and its neighborhood have fought to combat the virus and have succeeded. We are joined by the students Lisseth N. Mamani and Luz Y. Mamani Zapana, with two interesting stories. Next, Carpio and Adderly Mamani present news for the greatness of Vilque.

Our usual Hathakatu route, this time through Umachiri, where the historic struggles for the independence of the homeland began. Finally, some historical notes that remind us of what the Arequipa countryside was, so as not to forget that, for many years, there was a countryside, lands tilled with love and sacrifice to deliver food to the inhabitants, at all times.

However, Hathakatu is not a publication that remains in the background of the complaints of infamy that unfortunately befalls humanity. It is a window that opens the horizons of young people who would like to start in the practice of writing, discovering in their student and professional work, the problems and needs in the reality of traditional peoples and communities in the southern region of Peru.

Dans cette édition, il y a des essais de jeunes professionnels et d’étudiants de l’École d’anthropologie de l’UNA Puno. E. Alejandra, présente un essai qui nous permet d’observer les secrets que garde la culture andine; Juan Carpio et Brian N. Álvarez proposent quelque chose d’actuel: la pandémie et pourquoi les citoyens résistent au changement. Roulia Mucho, encore étudiante, nous montre une réalité peutêtre cachée aux yeux du monde, comment une ville et son quartier se sont battus pour combattre le virus et ont réussi.

Nous sommes rejoints par les étudiants Lisseth N. Mamani et Luz Y. Mamani Zapana, avec deux histoires intéressantes.

Ensuite, Carpio et Adderly Mamani présentent des nouvelles de la grandeur de Vilque. Notre route Hathakatu habituelle, cette fois par Umachiri, où les luttes historiques pour l’indépendance de la patrie ont commencé. Enfin, quelques notes historiques qui rappellent ce qu’était la campagne d’Arequipa, pour ne pas oublier que, pendant de nombreuses années, il y eut une campagne, des terres travaillées avec amour et sacrifice pour livrer de la nourriture aux habitants, à tout moment.

Luckily, it is an opportunity for them that, every day they achieve improvements, from the practices that are carried out in some subjects of the study plan of the School of Anthropology.

Cependant, Hathakatu n’est pas une publication qui reste en retrait des plaintes d’infamie qui s’abattent malheureusement sur l’humanité. C’est une fenêtre qui ouvre les horizons des jeunes qui souhaitent s’initier à la pratique de l’écriture, en découvrant dans leur travail étudiant et professionnel, les problèmes et les besoins de la réalité des peuples et communautés traditionnels de la région sud du Pérou.

Heureusement, c’est une opportunité pour eux que, chaque jour, ils réalisent des améliorations, à partir des pratiques qui sont menées dans certaines matières du plan d’études de l’École d’anthropologie.

Sincerely,

Sincèrement,

The editor.

Lima, May 16th, 2022.

L’éditeur.

Lima, le 16 mai 2022.

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Cultura Alienígena: ¿Coincidencias o mensajes de la tierra al cosmos?

A lo largo de nuestra historia hemos sido testigos de numerosas evidencias que reflejan un hecho indiscutible: la visita de seres extraños. Los llamaron “extranjeros, desconocidos, incluso dioses”.

Hoy, no podemos evitar pensar en que bien pudieron ser extraterrestres.

Throughout our history we have witnessed numerous pieces of evidence that reflect an indisputable fact: the visit of strange beings. They called them “foreigners, strangers, even gods”. Today, we cannot help but think that they could well have been aliens.

Tout au long de notre histoire, nous avons été témoins de nombreux témoignages qui reflètent un fait indiscutable : la visite d’êtres étranges. Ils les appelaient «des étrangers, des inconnus, même des dieux».

Aujourd’hui, on ne peut s’empêcher de penser qu’il pourrait bien s’agir d’extraterrestres.

Por: E. Alejandra Carpio I. INTRODUCCIÓN A lo largo de la historia de la humanidad han existido diversas culturas y grupos humanos, en distintos tiempos y, en algunos casos, en simultáneo. ¿Será posible que tengan en común algo más que haber habitado la misma tierra? Quizás la respuesta esté en los restos arqueológicos, el arte rupestre o los mitos que todas aquellas civilizaciones nos han dejado y cuyos misterios persisten hasta el día de hoy.

Ya sea en forma de pirámides, como las de Egipto, las cuales servían el propósito de monumentos funerarios para facilitar el viaje de los faraones hacia el otro mundo; o la de Chichén Itzá, en México, centro ceremonial de la civilización Maya. En ambos ejemplos el tema de “lo sagrado”, “lo divino” y “lo desco-

Podemos reseñar a detalle culturas ancestrales como la egipcia, la sumeria, la hindú, o incluso centrarnos en la cultura andina, y llenarnos de páginas y más páginas sin terminar de compilar toda esa información. Sin embargo, el objetivo que deseo perseguir en este breve artículo, desde la perspectiva de una comunicadora maravillada por la riqueza cultural del mundo, es hilar diversas coincidencias para determinar si hubo una relación (o visión compartida) entre las culturas milenarias y un posible encuentro con la vida extraterrestre.

Abrir esta posibilidad quizás nos ayude a entender mejor nuestro pasado histórico, cultural y social; y las razones detrás de la creación de grandes obras de arquitectura, ingeniería e incluso artísticas. Obras y re-descubrimientos que hasta la fecha siguen manteniendo a la comunidad científica en total asombro y perplejidad. ¿Existe un código que una a las pirámides de Egipto, las de México o las ciudadelas en los Andes del Perú?

Más allá de ahondar en las diversas teorías de historiadores e investigadores OVNI, lo que me interesa destacar es la conexión entre casi todas las culturas importantes, desde el inicio de la vida en la tierra, y la creencia de una intervención divina o alienígena (extranjera a nuestro modo de entender el mundo).

II. LA COSMOVISIÓN Y LA DIVINIDAD Si cada cultura posee sus propias creencias, tradiciones y formas de hacer las cosas, ¿es posible hablar de una cosmovisión global compartida en términos de divinidad? Dejando de lado el hecho de que cada una cree en un Dios en particular, el tema de fondo es que todas mantienen la fe en un ser superior, divino, extranjero. Y esta conclusión, naturalmente reducida a la idea básica de creer, la podemos encontrar en todas las culturas y civilizaciones milenarias.

Al mirar al cielo, ¿qué estamos viendo realmente? ¿qué vieron nuestros ancestros?

Fotografía: Greg Rakozy Fuente: Unsplash.

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nocido”, se entremezclan y conviven en el imaginario colectivo.

Es decir, permanece en forma de sitios arqueológicos o mitos.

En el mundo de los Mayas, “Chichén Itzá” significa boca del pozo de los itzaes, aludiendo una vez más a la religiosidad. Y es que ese gran pozo era considerado como una de las entradas principales al inframundo.

Se cree que Pariacaca nació de cinco huevos y, al tomar forma humana, fue en busca de Huallallo Carhuincho, quien era conocido como el devorador de hombres. Antes de enfrentarse a él, arrasó a varios pueblos con una lluvia de granizo, como castigo. Lo interesante de la batalla entre ambos es la presencia de elementos como el fuego, los rayos y el agua.

En el libro Dioses y Hombres de Huarochirí, impulsado y traducido al castellano por José María Arguedas, encontramos una gran riqueza de mitos que nos abren una puerta al mundo andino prehispánico y colonial. Así, “ofrece un cuadro completo, coherente, de la mitología, de los ritos y de la sociedad en una provincia del Perú antiguo” (p. 9).

Según dice el mito, Huallallo se convirtió en un inmenso fuego que llegaba hasta el cielo; y Pariacaca hizo caer torrentes de lluvia (amarilla y roja), que luego se convertirían en rayos que provenían de cinco direcciones distintas (al estar conformado por cinco hombres). De esta pelea, se formó una laguna llamada “Mullococha”. Gracias al agua de las lluvias torrenciales, Pariacaca apagó finalmente el fuego y venció a Carhuincho, quien huyó hacia la región denominada Anti.

III. LOS MITOS EN LA CULTURA AYMARA Pero, ¿quiénes y cuáles son los dioses de Huarochirí? La lectura nos lleva a conocer el mito de Huallallo Carhuincho y Pariacaca. Sobre este último, Francisco de Avila se refiere de esta manera: “Otro ídolo hay tras éste, que lo es de toda la Provincia. Y en esta de Huarochirí, lo es el famoso Pariacaca que es un pedazo de Cordillera nevada bien conocida de cuantos han pasado a

Diferentes culturas han identificado al rayo como una deidad cósmica. Los egipcios lo llamaban “Shu”, los griegos “Sos” o “Sosis”. Y simbolizó en todos los casos al dios creador. ¿Sería posible vincular esta asociación divina (fuera del mundo terrenal) con la cultura andina? ¿Esta historia habrá querido representar una batalla de luces extraterrestres? Al respecto se han formulado diversas teorías; sin embargo, algo que no podemos negar es la estrecha relación a lo largo de las creencias de diversas culturas ancestrales.

IV. EL ENIGMA DE LAS LÍNEAS DE NAZCA Reconocidas como los geoglifos más importantes del mundo, Las Líneas de Nazca continúan sorprendiendo con nuevos hallazgos y teorías respecto a su creación. Pero, por sobre todo, destacan tres peculiaridades: su monumentalidad, su ubicación en medio de uno de los desiertos más áridos del mundo, y sus asombrosos y gigantescos diseños que solo pueden ser admirados desde los cielos. ¿Quiénes se suponían que debían ser los espectadores de estos dibujos?

Archivo: Juan Carpio

Figuras geométricas de gran tamaño, con dos mil años de antigüedad aproximadamente, fueron vistas por primera vez hace un siglo. ¡Apenas 100 años de su vasta existencia! Entre ellas se distinguen formas humanas, de animales (alpacas, llamas, gatos, serpientes, entre otros), abstractas, y las más grandes se extienden por sobre 90 metros. ¿Cuál es el propósito de estas líneas? Maria Reiche, arqueóloga y matemática, dedicó su vida a la preservación, investigación y estudio de estas figuras enigmáticas. Así llegó a la conclusión de que eran parte de un calendario astronómico. Reiche desarrolló esta teoría en base a que las figuras apuntaban hacia la salida de diferentes astros en fechas determinadas, marcando momentos propicios para la agricultura. Además, resaltó el factor ceremonial y religioso. Debido al gran tamaño, las líneas de Nazca debían estar destinadas a ser vistas por los dioses.

este reino porque se pasa por ella desde esta ciudad a la del Cuzco y es un cerrillo como pan de azúcar cubierto de nieve”.

Más allá de reconocer la riqueza de los testimonios orales y la memoria de estos pueblos, es interesante hallar ciertos elementos en común con otras culturas y relatos en diferentes contextos, territorios y lenguas. En ese sentido, voy a centrarme en la relación entre Huallallo Carhuincho y Pariacaca, ambos enemigos, ambos seres divinos en la cosmovisión Andina.

Siguiendo la línea de la divinidad, el autor suizo, Erich Von Däniken, propuso en 1968 una teoría más increíble: las líneas de Nazca sirvieron como marcas de aterrizaje para visitas extraterrestres. Es decir, seres superiores, dioses si se quiere, que en cierta manera vigilan y cuidan a estos grupos humanos. ¿No hallamos aquí una coincidencia con los fines ceremoniales de las construcciones Maya?

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Sitio Arqueológico Puma Punku, Bolivia Fotografía: Itinari.com

V. OTRAS CULTURAS, EL MISMO MUNDO A continuación daremos un repaso por el resto arqueológico de Puma Punku y por un aspecto intrigante de la mitología de la India. Ambas evidencias, tanto físicas como intangibles, nos llevan a un paso más para comprender qué era lo que querían representar sus antiguos habitantes y por qué.

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Puma Punku, Bolivia: En Aymara significa “La puerta del Puma”, y la peculiaridad más asombrosa de este sitio arqueológico es su conformación de bloques megalíticos. Grandes piedras de arenisca cortadas en formas geométricas encajan perfectamente entre sí. ¿Cómo lo hicieron? Esa respuesta nos intriga hasta el día de hoy e, incluso con toda la tecnología que científicos del primer mundo gozan, nadie puede dar certeza respecto a su construcción.

El Vimana de la mitología Hinduista: Según el texto más antiguo de la India, Rig-veda, el dios del Sol se transporta en un vehículo luminoso que vuela (Vimana). Esta creencia ha sido incluida tanto en la poesía como en la literatura hindú. Por ejemplo, la encontramos en el poema épico Ramayana. Así, se reconocen vimanas de diversas formas y tamaños. Algo similar a un carruaje de dioses. Incluso, hay descripciones que se asemejan a grandes casas o palacios aéreos. Esto nos hace pensar inmediatamente en los avistamientos de naves extraterrestres, donde se resaltan siempre objetos voladores con algún tipo de iluminación intensa.

VI. ¿ALIENÍGENAS EN LA BIBLIA? Finalmente, si revisamos el texto bíblico y sus relatos podemos encontrar también algunas evidencias de vida extraterrestre.

Quizás ese término suene descabellado y podamos reemplazarlo por celestial. ¿Hay alguna diferencia más allá de la palabra utilizada? En algunos pasajes se hace alusión a los ángeles, seres divinos que bajan de los cielos para ayudar a

Representación gráfica del Vimana Imagen: Conclusión Diario Digital

los humanos o comunicar algún mensaje importante. Incluso la asunción de la Virgen María es cuestión de debate a nivel teológico. ¿Sería posible pensar en que fue abducida por naves extraterrestres? ¿Los ángeles serían en realidad seres de otros mundos?

Y es que otro factor innegable es la espiritualidad y la religiosidad como fuerzas motivadoras para crear impresionantes templos, pirámides y demás construcciones.

Sin duda, las antiguas civilizaciones desarrollaron una conexión mística que no podemos concebir al día de hoy.

El tema de fondo es llegar a una raíz en común respecto a quiénes eran los dioses adorados. ¿Serían seres o criaturas mitológicas, tal y como lo estudiamos en el colegio con la mitología griega? Quizás se referían a visitantes de otro mundo, ajenos a la Tierra, que llegaron para brindar conocimientos fundamentales para el desarrollo de nuestra humanidad. Pero esa es otra interrogante. Lo que no se puede negar es que en diferentes momentos de nuestra historia, hubo grupos humanos y culturas que dejaron evidencias de algún contacto con seres superiores (dioses extranjeros), ya sea en monumentos o en mitos y tradiciones orales.

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Efectos Culturales de la Pandemia: ¿por qué no cambiamos?

Se intenta explicar cómo es que, a pesar de haber sufrido las oleadas letales del coronavirus, con una suma muy elevada de muertes, no hemos cambiado, o al menos, las barreras para cambiar son fuertes aún.

This article tries to explain how it is that despite having suffered the lethal waves of the coronavirus, with a very high number of deaths, we have not changed, or at least, the barriers to change are still severe.

Cet article tente d’expliquer comment il se fait que, malgré avoir subi les vagues meurtrières du coronavirus, avec un nombre de décès très élevé, nous n’avons pas changé, ou au moins, les barrières au changement sont encore fortes.

Por: Juan B. Carpio Torres y Ps. Brian N. Álvarez Díaz I. INTRODUCCIÓN Estas notas son parte de un proyecto que se viene desarrollando en Arequipa y Puno, sobre las consecuencias o efectos que nos deja esta crisis sanitaria, a raíz de la pandemia. Si bien este fenómeno es algo nunca antes visto entre nosotros, queda claro que, la sociedad nuestra no está preparada para “nada”, diríamos en términos relativos. En algo más de un año calendario, las muertes se han precipitado a nivel nacional a más de doscientos mil.

En Arequipa han ocurrido 9,745, en tanto que, en Puno las cifras se elevan a 4239, al finalizar el año 2021. Sin duda, el año de la muerte ha sido el 2020, porque como hemos señalado, los contagios nos encontraron durmiendo, las autoridades sin atinar a nada en los primeros meses de crisis, entre muchas otras cosas. A pesar de los problemas en los que estamos envueltos, la población no cambia, a lo sumo escasamente. La pregunta es por qué.

II. ¿POR QUÉ NO CAMBIAMOS? Desde el pasado se han venido acumulando una serie de patologías culturales, desinteresadamente, por las que no se les ha dado la debida importancia. Por ejemplo, el descuido familiar de la forma de criar a los infantes, tan crucial en cualquier sociedad, o el sistema educativo que tenemos que no forma al individuo en y con humanidad. Entre otras cosas, tenemos un salvajismo suelto en las calles y así nos encuentra la pandemia. ¿Qué está ocurriendo? En el pasado podíamos reconocer a nuestros amigos y vecinos en el barrio. Hoy, ya no sabemos con quién vivimos o quiénes son nuestros vecinos.

Como todo mundo sabe, hay una sumatoria de problemas que ya ponen en peligro la condición humana: violencia generalizada, corrupción, narcoterrorismo, quiebra del sistema político, los poderes del Estado enfrentados, desorganización familiar y para mayores males la pandemia que nos elimina, dramáticamente. Asumimos que, todo esto tiene explicación en el tipo de sociedad que tenemos y la cultura que en ella se abriga, todavía tradicional con graves secuelas como: A) Autoritarismo. Propio de sociedades despóticas, en las que la sumisión de las personas ante el tirano, es la regla, enraizada desde la época prehispánica, seguido durante toda la administración colonial y continuado en la época republicana hasta nuestros

días. Características representadas en el patriarcalismo machista todopoderoso, del que se desprenden la mayoría de inconductas que reducen la condición humana, a su estado más animal. Estas actitudes pueden representarse: inca (curaca)- rey (virrey)- presidente elegido (secuaces de provincia) – padre o jefe de familia machista, autoritario, pegalón.

B) Fatalismo. Plagado en la vida cotidiana de las poblaciones, sobre todo tradicionales, en donde las actitudes se someten a una suerte de voluntad “dejar hacer”, “dejar pasar” de una manera casi religiosa. Lo que ocurre, está más allá de la voluntad humana.

C) Resignación. Ante tal cantidad de conductas adversas a la dignidad humana, la población se resigna a todo lo que el destino le pueda deparar, incluso la pandemia y la propia muerte. Es una suerte de aceptar todo lo que ocurre, entregándose a la voluntad de quien ordena, por cierto, el individuo pierde su autonomía para decidir lo que debe y puede hacer. Esto es observable en los pueblos tradicionales, sobre todo, en el caso de la pandemia: es un castigo de Dios, Aleluya. En otros ámbitos, es la corrupción, qué podemos hacer, ellos tienen poder, están o son allegados a las autoridades.

D) Conformismo/inconformismo. Si bien un gran sector de la población tradicional acepta o se conforma con lo que tiene, para muchos esta condición les resulta insuficiente y sobrepasan a una situación de inconformidad: no están conformes con lo que tienen, con nada se conforman, lo que obliga a redoblar esfuerzos para conseguir el bien que desean, al precio de codiciar los bienes ajenos. No obstante, la legalidad es un impedimento y, para conseguirlo, se envuelven en actividades ilícitas, por lo que siempre están al margen de la ley o viven camuflados, caso del robo sistemático, el narcotráfico, la vida familiar, la corruptela enraizada sistemáticamente en las instituciones y permitida hasta en los hogares entre la familia, entre otros.

E) Otras Inconductas. Como el utilitarismo, oportunismo expresadas en lo que vulgarmente se conoce como “criollada” o “pendejada”. Sacarle la vuelta a lo legal, es la regla, tan generalizada en nuestra sociedad de hoy, como la corrupción enquistada en todos los niveles.

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Sin duda alguna, estas particularidades condicionan la vida de la población, porque son un referente cultural del diario vivir y no encontramos otras opciones para poder mejorar.

Son una suerte de cadenas que se arrastran desde el pasado e “inconscientemente” se trasladan a las generaciones venideras.

En estas condiciones funciona la cultura.

III. SISTEMA CULTURAL A una sociedad tradicional, corresponde un sistema cultural tradicional. Diríamos, es la cultura con todos sus elementos, la que permite el sostenimiento de relaciones sociales tradicionales, con las secuelas antes señaladas. Claro, no todo lo tradicional es malo, pero sí todo aquello que se opone al cambio. Se trata de un conjunto de creencias, actitudes, hábitos, valores y conocimientos que orientan la vida de la gente, ya sea en los pueblos pequeños o en las ciudades. Aquí no se trata de una discusión de lo tradicional o lo moderno, se trata de describir el escenario en el que ocurre este fenómeno de la pandemia que, a no pocos, atemoriza.

Si nos atemoriza, por qué no abrigamos la voluntad de cambiar. Difícil situación, dado que la cultura del pasado todavía es fuerte y opera en los ámbitos tradicionales, como tradicional es la forma en que socializamos nuestras cosas en el día a día.

La casa, la calle, el grupo, la escuela, el trabajo, etc. Los hábitos formados aquí tienen rango de fuerza que se impone, ante todo.

Por ejemplo: salir al mercado todas las mañanas para comprar solamente un producto: pan, reunirse con los amigos todos los días a las tres de la tarde. Son hábitos que se deben cambiar, no sabemos si hasta que pase la emergencia o la pandemia se convertirá en endemia.

IV. ESTADOS EMOTIVOS La pandemia ha caído como “baldazo de agua fría”. Los primeros meses han sido horribles. Los contagios se han multiplicado estrepitosamente y las muertes como una maldición. Salir del confinamiento era un desafío a la propia muerte, pues no se sabía cómo una persona se contagiaba y ésta contagiaba a los demás. Incluso familias íntegras han caído presas de este flagelo. A tal punto que la gente estaba desesperada, angustiada, una suerte de pánico, si no una locura prematura. Los contagios daban lugar a la muerte inminente.

Los hospitales se llenaban, no había camillas ni atención a los enfermos graves.

En casos urgentes se atendía a los más jóvenes y menos graves, los viejos ya estaban demás. A las afueras de los hospitales se formaban colas y hasta se amanecían en las calles para poder internar a los enfermos del COVID. Desesperación, llanto, sufrimiento, muertes, pero la población continuaba en sus hábitos tradicionales, congestión de gente en los mercados: en Arequipa, el mercado Mariscal Cáceres, en Puno el de Unión y Dignidad. Juliaca, un caso excepcional, hacían su vida normal y las muertes se sucedían.

Aquí, una frase expresada reiteradamente por personas allegadas al negocio, puede pintar de cuerpo entero la situación: “prefiero morir de covid y no pobre”. En las circunstancias que señalamos la situación en la sociedad, se exhibe el desprecio por la vida, la falta de respeto a la vida propia y la vida de los demás. Pero así se vive y a nadie le importa.

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Cómo controlar una situación como la que se describe, complicado el asunto. Para colmo, las autoridades municipales y regionales han estado ausentes. No había quién conduzca las acciones para frenar esta mortandad. Los medios de comunicación solamente informaban hechos y denuncias, sobre todo la inacción de las autoridades. Ante tales hechos de dolor y sufrimiento, la gente se ha resignado a vivir así.

V. INHUMANIDAD Esta crisis sanitaria ha quebrado nuestra humanidad. La ha pulverizado. No se trata de si los individuos llegan a un bazar y arrasan con los productos, los unos y, otros, llevan tan solo lo que pueden comprar escasamente. Se trata de la humanidad en espíritu, con valores y amor por la vida y la vida del prójimo.

Hemos ingresado al principio de la supervivencia, cuando se creía que esto ya se había olvidado, como propio de un estado natural animal. Sobrevive el más fuerte, aunque no el más apto. El más fuerte es aquél que lo tiene todo y vive una vida holgada. Entonces, éste tiene las posibilidades de sobrevivir en una situación como la que se nos presenta. Los poderosos sobreviven, los débiles y vulnerables perecen. Se ha puesto en práctica aquella expresión “sálvese quien pueda”. A muchos les parece bien y hasta es el titular de un medio de información.

Pero, ¿qué ha hecho la humanidad para merecer este flagelo?

Desde hace un buen tiempo atrás, hemos venido sosteniendo esta expresión (inhumanidad) debido a los graves problemas que se tiene en la sociedad. Hoy, todo esto se ha subvertido, es decir la inhumanidad ha aflorado como en los tiempos más duros para nuestra especie. Estar afectados permanentemente por esta pandemia, significa asegurarse de recursos, acceder a los servicios de salud y estar en mejores condiciones que otros, de un lado y, por otro un grueso de población sin la posibilidad de acceder a satisfacer sus necesidades básicas. Claro, la justificación es el aumento de población, que los recursos son hoy escasos y el desequilibrio ambiental anda acelerado.

Entonces entramos en un dilema: “la tierra no es para todos”.

Acabamos de descubrir esta condición. Tal vez son los elegidos y no los más aptos y capaces. Por eso los comunistas creen que los ciudadanos no deben tener acceso a la propiedad, solamente los elegidos por el régimen.

Se puede entrar en muchos detalles, pero debe quedar claro que, la inhumanidad es la negación del hombre hecho humano.

Se observa en todo cuanto ha ocurrido en esta crisis sanitaria: el origen del virus, los contagios, la escalada de muertes, el acceso a los servicios de salud y la atención médica, el gran juego de las clínicas y las farmacias, aún cuando desde el sector salud público, se han descubierto mafias ligadas al uso de las camas UCI. El casi nulo accionar de las autoridades civiles de municipios y de las autoridades regionales, sobre todo la conducta de la gente tan irresponsable, al no tomar en serio las disposiciones de las autoridades de salud.

Fotografía: Frosina Polazarevska | Unsplash

Todo esto parece ser una situación confusa y estamos como estamos: muriendo en la calle, en las puertas de los hospitales, los hospitales (en casos) convertidos en recepción de pacientes para ser embolsados y luego llevarlos al crematorio, sin conocimiento de los familiares, so pretexto de los protocolos.

Conductas indignas de los propios familiares y vecinos: “saquen esa cosa de acá”. Expresión hecha por una vecina, al ver que su vecino, que por muchos años se han visto en la calle y han compartido una vecindad, ha caído muerto en la puerta de

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su casa, preso del virus que recorre los rincones del planeta. “Quiten esa cosa”, sería el titular de lo inexplicable o una portada para exhibirla en el museo, para la historia. Esta es la humanidad que tenemos, entre otros casos que se verán más adelante.

VI. MEDIDAS CULTURALES O QUÉ HACER DESDE LA CULTURA En alguna parte de este informe se ha señalado que, la cultura como mecanismo que mueve el sentido y destino de nuestra humanidad, está en la necesidad de proponer medidas a fin de coadyuvar en sostener nuestra sobrevivencia, en esta coyuntura. La ley que propone el maestro B. Malinowski, sobre la “sobrevivencia”, explica que, en una sociedad, si la cultura no logra satisfacer las necesidades de la población, puede ocurrir: primero, que el hombre perece y la sociedad desaparece; segundo, evitar una extinción, significaría cambiar los patrones culturales, es decir, cambio de conductas. Por esta razón, producida la emergencia sanitaria y con ella el confinamiento o cuarentena desde marzo del 2020, se nos ocurrió proponer que, la sociedad peruana, puneña arequipeña debía elegir: la vida o la economía. Esto se explica de la siguiente manera: A) Elegir la vida, es la mejor forma de preservar nuestra integridad frente al letal virus que nos afecta. En la cuarentena ha podido funcionar positivamente, pero en una suerte de subsistencia, con los recursos restringidos, hasta que pase la emergencia. Significa que la vida se pone a resguardo y se evita los contagios, no saliendo a la calle, ni al mercado, porque éste es el vehículo de los contagios. El mercado habría que acercar a los hogares, a cada familia a través de los gobiernos locales y regionales, disponiendo de todo su aparato logístico y el personal que labora. Esta medida debe estar acompañada de los medios de comunicación a fin de informar a la población a través de varios mecanismos.

Las cuarentenas han significado la inmovilidad y la restricción de toda actividad humana, salvo las de emergencia como los centros de salud, que no han tenido éxito y la pandemia se ha expandido dramáticamente. No hemos sabido elegir la vida, porque poco la valoramos. En sobrevivencia, el hombre ha vivido miles de años,

Fotografía: Franco CP | Unsplash

como nuestras actuales comunidades campesinas. Si ellas han sobrevivido en estas condiciones, ¿por qué nosotros no?

B) En cambio, se ha elegido la economía. La gente no puede vivir sin plata, por eso hasta los congresistas juran “por Dios y por la plata”. En cuarentena, la población ha seguido en sus actividades: mercados, empresas, gente por calles y plazas, sobre todo, a pesar de las restricciones que, después del primer mes, se ha continuado con las cuarentenas, pero con control policial y el ejército, hasta meses recientes. Los contagios se han multiplicado y las muertes se han sucedido por cientos y miles cada día.

La economía significa eso, maximizar las ganancias aún en emergencia, como el caso de las farmacias, cuando no, miles de negocios han cerrado y muchos han perdido sus empleos.

La vida moderna se ha habituado a esta economía y no se la puede abandonar, desgraciadamente, pero se debe insistir en obtener los recursos para la subsistencia de una forma en subsistencia y poner en seguridad nuestra vida hasta que pase esta tormenta, aprovechando las restricciones ciudadanas de cuarentena y de inmovilidad, aun cuando para muchos no les interesa la vida de las personas: “si sobreviven, bien, si se mueren, mejor”.

Creo que la humanidad de estos días no ha aprendido nada del pasado, después de haber superado muchas crisis y muchos virus, no porque la historia no los registra, sino porque las generaciones se olvidan de lo ocurrido y no transmiten a sus herederos lo vivido. Aquí hay una trampa por resolver. Tal vez la educación, a falta de la información generacional a través de la cultura, pero no es así. La educación va por otro lado del camino de la humanidad.

Lo que puede hacerse en el futuro, porque necesitamos retornar a la vida social y económica, es cambiar de hábitos, valores y actitudes en todos los niveles, horarios en las jornadas laborales y de estudios. Se trata de evitar los contagios, ya que, como se viene diciendo, la gente no ha aprendido lo suficiente de este desastre.

Hemos cambiado muy poco. La población se deja llevar por los hábitos del pasado, por ejemplo, el saludo con “besito” o el estrechar la mano. Tal vez en el futuro próximo, no en el inmediato.

De igual forma para las concentraciones de gente, prácticas recreativas, fiestas, salones llenos de estudiantes o colegios con miles de alumnos, entre muchas otras cosas. Necesitamos operar un cambio rápido. No podemos confiar únicamente en las vacunas. El problema está en las conductas, es decir la cultura.

Esperamos que así sea.

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La primera ola: un caso de endosanación La pandemia en el Centro Poblado “Virgen de la Candelaria”, de condiciones todavía precarias, ha sido derrotada. La población se ha puesto a salvo tomando un medicamento prohibido por las instituciones de salud.

The pandemic in the “Virgen de la Candelaria” Population Center, with still precarious conditions, has been defeated. The population has been saved by taking a medicine banned by health institutions.

La pandémie dans le centre de population “Virgen de la Candelaria”, avec des conditions encore précaires, a été vaincue. La population a été sauvée en prenant un médicament interdit par les établissements de santé.

Por: Roulia R. Mucho Luque Al presentarse la pandemia como un monstruo que devoraba la vida de la gente, sobre todo los de mayor edad, los pueblos rurales como el Centro Poblado Virgen de la Candelaria, en la jurisdicción de la región Madre de Dios, quedaron sorprendidos, pues se trataba de algo nunca antes visto.

Los noticiarios informaban de un virus llamado “Coronavirus 19”, por el que la gente que adquiría el contagio, difícilmente se podía salvar, ni acudiendo al hospital. Muchos se preguntaban: ¿qué es esto? ¿de dónde viene? Los de mayor edad atinaban a decir: “es un castigo de Dios”, “es el fin del mundo”, entre otras expresiones de uso popular.

Este artículo trabajado por la señorita Roulia, reseña las vicisitudes ocurridas en esta población, con el deseo de sobrevivir ante este flagelo letal, para el cual se generalizó el uso de un medicamento que les ha logrado salvar la vida, pero que, contradictoriamente, las autoridades sanitarias lo prohibía y los medios de información lo satanizaban hasta el cansancio, hechos que seguramente deben merecer una sólida explicación.

El ensayo se escribió cuando Roulia era estudiante del IX semestre de la E. P. de Antropología, el año 2021-I, curso de Seminario de Producción Intelectual.

Aquí los detalles (Juan B. Carpio Torres).

“Acostúmbrense a dos cosas: ayudar, o al menos, no hacer daño”- Hipócrates.

I. RESUMEN La región de Madre de Dios, fue una de las regiones que acudió al uso de la ivermectina para combatir el COVID 19, a fin de prevenir y evitar la muerte que se cernía sobre la población de mayor edad, sobre todo. Su uso se debió a la

Estado inicial de la pandemia, 2020 Fotografía: Erik Mclean

distribución de forma gratuita hecha por las autoridades de la localidad que, sin ninguna duda, lograron controlar el pánico y la desesperación en la gente, los contagios y la sanación en general.

Además, se consumía los productos que habitualmente se usan para el caso de resfriados y otras afecciones, al punto de liberarse completamente de este virus, se normaliza las actividades económicas, ya no se usa la mascarilla y la gente hace su vida normal. Pero claro, no hay que confiarse y la población está prevenida.

Para cualquier enfermedad, cualquier medio es bueno para su sanación.

II. INTRODUCCIÓN A días de advertirse la propagación del virus por todo el país, el gobernador regional de Madre de Dios, Luis Hidalgo Okimura, tomó medidas contra el COVID 19, dado que las poblaciones

de la región, se vieron envueltas en un torbellino de contagios, al punto de generar pánico y mucho miedo.

Una de estas medidas fue popularizar el uso de la ivermectina, haciendo campañas para su distribución, conformando equipos con los médicos, enfermeros y técnicos de la dirección regional de salud.

Se inició la distribución de este insumo en el distrito de Iñapari, Iberia, Mazuco y el centro poblado Virgen de la Candelaria, recayendo la responsabilidad en cada jefe de familia, atendiendo las necesidades de sus miembros.

Este informe ha sido posible gracias al empeño y la paciencia de observar detalles de lo que ocurría, a pesar de las restricciones impuestas, a fin de cumplir con las exigencias del curso de producción intelectual.

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III. UBICACIÓN DEL CENTRO POBLADO El centro poblado Virgen de la Candelaria está ubicado dentro del distrito de Inambari, provincia de Tambopata, en la región de Madre de Dios. Es una población localizada a ambas márgenes de la vía de acceso hacia la capital de la región, aun cuando es una zona de minería informal.

IV. LOS SUCESOS A inicios de la pandemia, algunos negocios empezaron a elevar los precios de los productos e incluso otros cerraron sus puertas, debido a rumores infundados de desabastecimiento o incursión en estos establecimientos. Lo cierto es que los precios iban en alza, acompañado de cierre de negocios y muchos perdían sus trabajos. Era una situación de crisis y de temores.

Por otra parte, las personas empezaron a desesperar, algunos salieron de viaje, empezaron a comprar víveres por sacos, los que podían. Compraban medicamentos, mascarillas, alcohol, gel, tapetes, etc.

Aproximadamente en el mes de mayo del 2020, empezaron los contagios con gran intensidad en el centro poblado, viviendo así un caos de miedo. Por esa razón, las personas que tenían síntomas de COVID y las que se hacían la prueba y daban positivo al COVID, empezaron a tomar infusiones de limón, kion, cebolla y ajo; algunos se mejoraron con dicha infusión, pero los otros no lo lograron.

Es por ello que algunos fueron trasladados al hospital de Puerto Maldonado que es el único y el más cercano del centro poblado, sin embargo, estaba colapsado el hospital. Por esa razón, no quisieron ir por temor a morir en el hospital por falta de atención.

En la desesperación por salvar a su familiar del COVID, empezaron a comprar de manera ilegal la ivermectina, ya que solo lo podían comprar las personas con receta médica, sin embargo, algunos empezaron a comprar de manera ilegal y con alto costo. Por otra parte, las de bajos recursos y por recomendación de vecinos o amigos, empezaron a consumir el medicamento Avibacterium paragallinarum (medicamento contra el moquillo de los pollos).

Fotografía: Archivo propio

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Fotografía: Archivo propio

Viendo el caos y el elevado contagio que había en la región de Madre de Dios, el gobierno regional, junto con los alcaldes distritales y en coordinación con el cuerpo de médicos y enfermeras, empezaron a distribuir la ivermectina de forma gratuita, cada quincena.

En los primeros viajes hacia los distritos, se les hacía el llamado con parlantes a todos los habitantes, los mismos que hacían su cola para recibir el producto, así mismo, iban casa por casa para hacer la entrega gratuita de la ivermectina. Ésta era repartida en vasos pequeños de plástico con tapa, a cada persona se le daba veinte gotas, sin embargo, según las indicaciones médicas, en ese tiempo, se debe de considerar el peso y la estructura corporal para consumir, lo que en realidad no fue así.

Sin embargo, pese a consumir la ivermectina sin considerar las indicaciones (peso y talla), hicieron efectos positivos, las personas que tenían síntomas o dieron positivo al COVID, empezaron a mejorar y cuando se conocía algún caso de COVID, se le recomendaba consumir la ivermectina.

A principios de agosto del 2020, se reflejó de forma positiva la mejora, por esa razón, las personas empezaron a ya no cuidarse, al punto de no usar las mascarillas y no respetar

el distanciamiento social. De la misma forma se empezó a reabrir las instituciones educativas privadas de forma presencial. Los negocios con aforos completos como los restaurantes, discotecas, bares, etc. De la misma forma las fiestas de cumpleaños, quinceaños, aniversarios, etc., se realizaron con toda normalidad.

V. A MODO DE CONCLUSIÓN

En el centro poblado Virgen de la Candelaria todo continúa con normalidad, como si no existiera el virus.

La mayoría de la población ya no usa las mascarillas, por lo cual las personas ya no le temen al virus, porque en la misma población se comenta que, se volvieron inmunes, porque la mayoría pasó por el COVID y lo superaron.

Por sus bondades curativas, el producto ha salvado la vida de la población, aun cuando sectores de la población no lo admitan, diciendo que no tiene valoración científica.

En estas circunstancias, desde hace cinco meses atrás, ya no se realiza la entrega de la ivermectina, por razones de que ya llegaron las vacunas.

Pero esta iniciativa de la distribución de la ivermectina fue necesario y una decisión acertada, ya que la mayoría de personas que dieron positivo y tenían síntomas de COVID empezaron a mejorar, gracias a este producto que tantas veces se le ha denigrado por la prensa nacional, incluso ha sido prohibido por la OMS y las entidades sanitarias del país. Qué raro. Algo debe estar ocurriendo.

El centro poblado Virgen de la Candelaria, con una población mayoritariamente de migrantes y dedicados sobre todo a la minería informal, con el apoyo de sus autoridades, han superado la crisis sanitaria curándose con la ivermectina.

Por lo que se sugiere hacer investigaciones de esta postura del universo de la profesión médica y las instituciones representativas que tienen a mal el uso de este producto como medicamento, el cual probadamente ha salvado vidas. Así se desprende de esta reseña. Nunca es tarde.

La necesidad de compartir los conocimientos teóricos con la realidad, nos lleva a recorrer distintos contextos culturales, de vieja tradición.

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El Encanto del Khapía El Khapía, llamado también “Achachila”, es la montaña más representativa para los lugareños, de la cual se advierte la existencia de una variedad de creencias y tradiciones orales.

The Khapía, also called “Achachila”, is the most representative mountain for the locals, of which the existence of a variety of beliefs and oral traditions is noted.

La Khapía, également appelée “Achachila”, est la montagne la plus représentative pour les habitants, dont l’existence d’une variété de croyances et de traditions orales est notée.

Por: Lisseth N. Mamani Medrano

Fotografía: Wikipedia

I. PRESENTACIÓN La Señorita Lisseth, es estudiante del primer semestre de la Escuela Profesional de Antropología. El interés puesto en el desarrollo de la materia introductoria al mundo de la antropología, ha logrado producir una reflexión acerca de la tradición oral de la zona sur de Perú, particularmente de Yunguyo, aun cuando, en el relato se halla una referencia a Ilave, con la ciudad perdida o el matrimonio convertido en piedra.

Todo el conjunto abarca las jurisdicciones territoriales de los distritos de Pomata, Zepita y Yunguyo, comprensión de las provincias de Chucuito y Yunguyo, respectivamente. Desde el punto de vista

cultural, el cerro o montaña poderosa, tiene una práctica y significación extraordinaria. No tanto por las tradiciones orales que de ella se cuentan, sino por las prácticas que en ella ocurren.

Una suerte de leyenda que refiere un matrimonio frustrado, acaso también en Yunguyo o en inmediaciones del Khapía, existe un caso parecido (Juan Carpio).

II. RESEÑA DE UBICACIÓN El Khapía es un conjunto montañoso, conformado por varias estructuras de elevada altitud, posiblemente sobrepasen los cinco mil metros s.n.m.

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Fotografía: Andina Agencia de Noticias

De ahí que nadie puede meterse en la zona, ni el gobierno ni los mineros.

Un dato a exponer es el “Aymarazo”, trasladado a la ciudad capital, Puno, en una suerte de torbellino social que paralizó toda actividad en Puno, con lamentables consecuencias. Qué misterios guarda la montaña, es materia de descubrir en el futuro.

III. LA LEYENDA Cuenta la tradición que, en una ocasión, en el lugar, parece ser Ciudad Encantada (Chilligua-Ilave), se celebraba un matrimonio. Se hallaban presentes los novios, los padres de los novios, el cura y los invitados.

Había comida en abundancia, producto de la voluntad de los familiares y de los que participaban en la ceremonia. En inmediaciones del centro de la actividad, se hallaban los regalos consistentes en animales y alimentos que servirían para el sustento de los futuros esposos.

En plena fiesta y jolgorio de los visitantes, apareció el dios sol en el firmamento y con mucha intensidad, fuerza y calor, a todos los presentes los calcinó y se

volvieron piedras.

Ahí se observan, unas monumentales piedras en forma de personas, representan a la pareja de novios, el cura y los padrinos, bajo la denominación “El Casarasiri” (matrimonio). En cuanto al encanto del Kaphía, en esta montaña, en su cima, se encuentra la laguna de Warawarani. Esta expresión es propia de la lengua aymara y significa, en castellano, “estrella”.

De esta suerte, la tradición sostiene que: En ciertos días de la semana, a media noche, bajan las estrellas del cielo y se bañan en la laguna, la misma que cambia de colores: morado, azul, verde, etc.

Cuando llega la hora mala, salen dos patitos de oro y nadan por la laguna.

Al observar esta escena, las personas que asisten al evento, se sienten atraídas, como encantadas y desaparecen.

Se cuenta que, en el lugar hay un guardián en forma de puma, grande. En su lomo aparece una “silla” de oro que brilla con el resplandor de la luna. En este lugar crecen frutas y plantas de todo tipo, las cuales están al cuidado del puma. El cerro, en esta parte, presenta una puerta.

Cerro Khapia, Puno, declarado Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura.

Fuente: Andina Agencia de Noticias

En su hora mala, se escucha la melodía de una banda de músicos. Al oír esto, la gente que se halla presente, por curiosidad, se animaban a entrar y veían que, dentro del cerro, era como una casa y en ella había oro en cantidad.

Las paredes (rocas) eran de oro, así como todo cuanto había. Era una habitación llena de oro. Si la gente lograba salir, se volvían locas. Corrían por todo el entorno buscando una salida para poder salir y nunca lo lograban.

Se quedaban atrapadas y nunca volvían a su casa.

También se cuenta que, en este lugar, se hacen pagos con seres humanos.

(Puno, noviembre del 2021)

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Sapa Yuqall Wawa Un relato que nos lleva a la recreación de la existencia de un gigante, nacido en la abundancia y engreimiento de los progenitores, cuyo final concluye con una muerte trágica, la cual se rememora en una montaña de piedras colocadas por los que transitan por el lugar.

A story that leads us to the recreation of the existence of a giant, born in the abundance and conceit of the parents, whose end concludes with a tragic death, which is remembered in a mountain of stones placed by those who pass through the place.

Une histoire qui nous conduit à la recréation de l’existence d’un géant, né dans l’abondance et la vanité des parents, dont la fin se termine par une mort tragique, dont on se souvient dans une montagne de pierres placées par ceux qui traversent le lieu.

Por: Luz Y. Mamani Zapana I. PRESENTACIÓN La señorita Luz, es alumna del primer semestre, período 2021 II, de la Escuela de Antropología. En su preocupación por presentar las tareas que se asigna acerca de los elementos de la cultura, nos presenta el relato que se conserva en la memoria de los ancianos, referido a la presencia de un gigante que, luego de vivir una infancia casi normal, deriva en un ser abominable, para todos los lugareños.

Es un relato con variantes en la zona altoandina de Puno: Acora, Pichacani y Laraqueri. (Juan Carpio) II. EL RELATO Los ancianos cuentan que, una pareja de esposos, dedicados a la vida campesina, después de vivir juntos toda la vida, no pudieron tener descendencia.

Preocupados por su vejez, como por un milagro, Dios les concedió un hijo, por lo que estuvieron felices.

Al nacer el niño, por nombre decidieron llamarle “Manuel”. Fue criado con todos los cuidados, no le faltaba el alimento.

No le faltaba nada, lo tenía todo.

Con el pasar de los días, se fue convirtiendo en un glotón y crecía rápido, cada día se le veía más grande y requería de más alimentación.

Pintura al óleo, disponible en Artelista.com Artista: Oscar Tintaya Quispe, Bolivia

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Pintura al óleo, disponible en Shop Fashion Artista: Roberto Mamani Mamani, Bolivia

“Pronto se dedicó al pillaje y asaltó a todo aquel que transitaba por esos lugares, sobre todo los que viajaban hacia los valles de la costa” Ya estando joven, se alimentaba con carne de vaca, diariamente, hasta hacerse un gigante. Al comienzo, los padres no notaban estas particularidades, porque contaban con mucho ganado.

Pero poco a poco, con el pasar de los días, el ganado mermaba. En fin, se terminó el ganado vacuno. Luego empezó con el ganado ovino, luego los alimentos de primera necesidad de la casa.

La alegría de los padres se convirtió

pronto en tristeza y preocupación.

Empezaron a faltar los alimentos y el joven requería de más comida. Pronto se dedicó al pillaje y asaltó a todo aquel que transitaba por esos lugares, sobre todo los que viajaban hacia los valles de la costa.

El muchacho se convirtió en personaje de cuidado y le empezaron a temer, caso de sus propios vecinos.

Los vecinos temerosos, se reunieron y decidieron dar fin con el joven, a pesar del dolor que les producía a los padres.

Aquellos, al tomar la decisión, llegaron a un promontorio y empezaron a cavar un hoyo profundo, haciéndose ayudar con el gigante. Cuando ya tenía una profundidad considerable, con engaños, hicieron que el gigante bajara al hoyo, a fin de probar cuán profundo era. El joven gigante obedeció a la petición. Bajó al

hoyo y estando allí, los vecinos hicieron caer piedras con tierra hasta sepultar al joven. Así terminó la vida de este niño, tan esperado por sus padres.

Los que transitan por el lugar, cuentan que el sepulcro se puede observar y dejan piedras pequeñas, sobre una montaña de piedras que se forma, cada día, a fin de que les vaya bien en el viaje.

(Noviembre del 2021).

Nota: Las imágenes fueron replicadas de dos sitios webs dedicados a la exhibición y venta de arte.

En este caso, ambos son artistas bolivianos, que buscan representar en su arte al mundo Aymara y su cosmovisión.

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Vilque y la Feria en la Fiesta de Pentecostés La Feria comercial realizada en la primera quincena de junio de cada año, congregaba a una gran población del sur peruano, de Bolivia y del norte argentino por algo más de quince días. Aquí, documentos de archivo que evidencian el traslado de mercaderías del país y de España a fines del 700 y comienzos de 1800.

The trade fair that was held in the first fortnight of June each year, brought together a large population from southern Peru, Bolivia and northern Argentina for just over fifteen days. Here, archive documents that show the merchandise trade between the country and Spain at the end of the 700s and the beginning of the 1800s.

La foire commerciale qui se tenait la première quinzaine de juin de chaque année, rassemblait une importante population du sud du Pérou, de la Bolivie et du nord de l’Argentine pendant un peu plus de quinze jours.

Ici, des documents d’archives qui montrent le transfert de marchandises du pays et de l’Espagne à la fin des années 700 et au début des années 1800.

Por: Juan B. Carpio Torres Adderly Mamani Flores I. INTRODUCCIÓN A fin de reconocer etnográficamente las diferentes actividades que se producen en la feria que, ocasionalmente cada año se realiza en el distrito de Vilque, con los estudiantes de etnografía e introducción a la antropología, hemos visitado este lugar hasta en tres ocasiones.

Ciertamente, el pueblo es pequeño, localizado en las proximidades a la laguna de Umayo y a pocos kilómetros de la ciudad de Puno. Su estado actual es desolado, sus habitantes en su mayoría sobrepasan la edad adulta, pocos niños y las actividades económicas escasas, salvo pequeñas tiendas, dos o tres vendedores ambulantes en la Plaza Principal y la actividad agropastoril que no se nota a simple vista.

Los días de feria se producen una vez a la semana. Lo cual congrega a comerciantes de Puno y Juliaca, a los que se agregan los lugareños. Por cierto, son productos de la tierra y los que habitualmente se expenden en las ciudades: arroz, azúcar, harinas, menestras, hortalizas, frutas, plásticos en general, ropa, golosinas, licores, animales y otros tantos. En cambio, la feria dedicada a la fiesta de Pentecostés, cobra otro espíritu, tal vez como añorando el pasado que, solamente está en el recuerdo senil.

Fotografía: Archivo propio.

Sin duda, encontramos algunos vestigios,

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pero no se iguala a aquellas ferias llenas de vigor y fastuosidad, en donde se expendían mercancías del país y de España o Europa, como también se llamaba. De estas cosas se habla en el presente documento.

II. VILQUE Este vocablo identifica un lugar, un pueblo localizado a pocos kilómetros de la ciudad de Puno. Es la capital del distrito que lleva este nombre. Al parecer, deriva de la voz aymara “Villca”.

Bertonio, en su vocabulario de la lengua aymara (edición original de 1612, publicado en Juli), consigna las siguientes acepciones (escribiremos según nuestro vocabulario, debido a que la digitación en estas computadoras, no respeta la escritura del siglo XVII): • •

• •

•

Villca: el sol, como antiguamente decían, y ahora dicen Inti.

Villca cuti: el solsticio cuando comienza a desviarse del Trópico de Capricornio a Cancro (Cáncer).

Villca: adoratorio dedicado al sol, u otros ídolos.

Villcanuta, adoratorio muy célebre entre Sicuana y Chungara: significa casa del sol, según los indios bárbaros.

Villca: es también una cosa medicinal… (Bertonio, L. p.386).

Por estas consideraciones, podemos concluir que, “Villca”, significa “sol”, “adoratorio dedicado al astro rey”, en el pasado pre-inca. De modo que, Vilque, el nombre del distrito de la provincia de Puno, deriva de este vocablo “Villca”, con el que presumiblemente se designaba a un grupo humano los “Villcas” o “Willcas”. Pero aun cuando estas expresiones están ausentes en la lengua actual de los habitantes de la zona, creemos importante resaltar su significado y asociar a un relato mítico que lo hemos reconocido a través de un documental del “History Chanel”: batalla de los dioses.

Si bien esta oralidad se aplica para la sierra central de Perú (Lima), es posible

Canal por el que discurre el agua para el consumo de la población. No está potabilizada. Vilque, Puno - 2005.

Fotografía: Archivo propio.

pensar que el relato alude a contextos de nuestro altiplano, caso de Vilque.

Resumiremos al máximo el mito para resaltar lo más significativo al sol o Willcas. Dice así: Pachacamac, dios del cielo, tenía un hermano llamado Wa Kon, de características que representan al mal. Un día logran conocer a Pachamama, diosa de la tierra, de la cual quedan enamorados, motivo por el cual se enfrentan en una pelea de la que, Pachacamac resulta vencedor, logrando arrojar del cielo a Wa Kon hacia el inframundo, a un lugar oscuro.

mata a Pachamama y comienza una persecución a muerte de los niños. Éstos son ayudados por los animales: el cóndor, el puma o jaguar, la culebra y la zorra. Esta última esconde a los niños en su madriguera y logra engañar al perseguidor Wa Kon, llevándolo a la cima de una gran piedra, en la que se detiene el hombre y en un descuido, resbala y cae al precipicio, matándose entre los peñascos. Así se salvan los niños, luego de lo cual se transforman, el Villca varón en el sol y, la mujercita en la luna.

Nota: El mito es relatado intercaladamente por Simeón Orellana, Fedora Martínez, Carlos

Pachacamac y Pachamama se unen y de cuya relación logran tener dos hijos gemelos, hombre y mujer, llamados “Willcas”, “Villcas”… Éstos son ascendidos al cielo por una soga lanzada por sus padres Pachacamac y Pachamama, quienes desde el cielo ven las vicisitudes que atraviesan los niños. En el momento del ascenso, ambos se convierten: el Villca varón en el “sol” y, la Villca mujer en la “luna”. Por tanto, son los astros que alumbran a la humanidad de día y de noche.

El relato confirma la muerte de Pachacamac. Wa Kon, enfurecido, se venga de la mujer Pachamama y de sus dos hijos. Al pretender poseerla,

Martínez S., Juan Ossio y otros.

Aquí la idea central es el sol o Villca (en la cultura aymara), producto de la conversión de un niño salvado de las garras del mal que, bien puede explicar los albores del distrito de Vilque. Ahora, en el pensamiento de Julio C. Tello, el primer dios en la cultura andina fue Kon, venido del septentrión. En una segunda generación de dioses, se ubicaría Pachacamac, pero con la condición de mantener vivo el recuerdo del primer dios Kon. Por eso, en el relato expuesto y en otros para la sierra central, se sigue sosteniendo la presencia de aquéllos, en una variada trama de funciones, mucho antes del reinado de los incas.

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III. CONSIDERACIONES ETNOGRÁFICAS A pesar de no ser este artículo una etnografía en el sentido real de la expresión, nuestras tres visitas a esta localidad, ha permitido acumular información importante para un documento más acabado. Sin embargo, para fines del presente trabajo haremos algunas acotaciones iniciales.

Como se ha dicho, Vilque está a corta distancia de la ciudad de Puno, entre las localidades de Tiquillaca y Mañazo, esta última a un poco más de distancia, en la ruta del “Camino Real de Chucuito” que une la ciudad de Arequipa con el Altiplano y el centro minero de Potosí. Se asienta sobre una explanada en la cuenca del sistema hídrico del Umayo que, en épocas de intensas lluvias, sus tierras se convierten en humedales, en los que los pastos naturales crecen con todo vigor, fuente de alimentación para los animales de cría y pastoreo. Es posible que estas condiciones aseguren las pasturas para los animales que se compran y venden en la feria de Pentecostés, sobre todo en los tiempos de apogeo.

Sus casas son aún tradicionales. En la parte central se localiza la Plaza principal, la iglesia y el local de la municipalidad. En el entorno se estructuran las viviendas, muchas de las cuales hoy se hallan abandonadas por la fuga de sus habitantes hacia los centros urbanos de mayor desarrollo. Ciertamente, la ruina de la feria y del propio pueblo, se debe al auge de Juliaca con la presencia de la estación del ferrocarril y el apoyo de los políticos en su desarrollo.

En cambio, la suerte de Vilque está para el olvido, inmerecidamente. Es de destacar la presencia de la iglesia, de modesta construcción, pero en su interior interesantes obras de arte como el órgano, localizado en el coro, utilizado para amenizar las ceremonias religiosas. En sus días de más gloria, el sonido de sus tubos se oía a varios kilómetros a la redonda, según refieren las personas del pueblo de mayor edad.

Es posible que así hubiera sido, pues las dimensiones de uno de los tubos mayores alcanzan más de dos metros con un diámetro de 15 a 20 centímetros, aproximadamente.

Sin detallar dimensiones, a primera vista, el órgano es gigantesco, nunca visto por nosotros, pero está en deterioro, sin que nadie haga algo para restaurarlo. Bien vale la pena hacerlo, pues constituye un valioso patrimonio cultural religioso.

IV. LA FIESTA DE PENTECOSTÉS La palabra Pentecostés deriva del latín “Pentecoste” y ésta del griego. Según el diccionario, es la “fiesta de los judíos instituida en memoria de la ley que Dios les dio en el monte Sinaí, que se celebraba cincuenta días después de la Pascua del Cordero.”

(Gran Enciclopedia Espasa, T 18 p.9143).

Siguiendo esta tradición, para los católicos es la fiesta que conmemora la venida del Espíritu Santo, el domingo cincuenta después de la Pascua de Resurrección. Para el caso que nos ocupa, fue introducida por los españoles desde la fundación de Vilque. A partir del cual, cada año se ha celebrado en el calendario litúrgico, acompañado de la feria que hasta la fecha se lleva a cabo.

Como hemos podido notar en los libros parroquiales, sobre todo en el siglo XVIII, todavía exhibía población española de origen, dedicada a la minería. Ciertamente, la población nativa se dedicaba a las labores productivas. La fiesta ocurría después de transcurrida la Pascua de Resurrección, entre la primera quincena del mes de junio y en la que ocurre la feria comercial, tan afamada durante la colonia hasta entrado el siglo XX. Sin duda, en muchos pueblos celebran esta festividad, ciertamente no necesariamente en esta fecha, pues es variable según se celebre la Pascua.

Iglesia de San Martín de Vilque, Vilque - Puno.

Fotografía: Aldeanita - Flickr

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Hoy, el pueblo es casi inadvertido y abandonado hasta por sus propios pobladores. La feria es una pequeña plaza que ocupa una de las calles o espacio acondicionado para esta fecha, en la que todavía asisten comerciantes de Ichuña, pueblo alto andino de Moquegua que todavía no abandona el cordón umbilical, de su tierra madre.

Son los hijos de los hijos los que vienen trayendo sus productos y también llevan los que se producen aquí, en una suerte de intercambio de productos y bienes complementarios para su sobrevivencia.

Nota: Las fotografías fueron recuperadas del Facebook de la Municipalidad Distrital de Vilque, Junio 2022.

V. LA FERIA COMERCIAL DE VILQUE Como se viene señalando, esta feria ocurre con ocasión de la celebración de la Fiesta de Pentecostés. El historiador Alberto Flores Galindo, advierte su fastuosidad al acoger a comerciantes y compradores de diversos puntos de la región sur del Perú, Bolivia y norte de Argentina, en un tiempo posterior a la Colonia, pues la feria viene desde antaño, en donde se comerciaban productos de la zona y de ultramar.

Un pueblo generoso por su minería, se enorgullecía con su afamada feria mentada por viajeros y hasta por diplomáticos extranjeros que, en su recorrido por el territorio con destino a otros lares, se alojaban en los toldos que, por la ocasión, se levantaban en estas gélidas tierras. Anonadados por la multitud que ocupaba este pequeño pueblo por algo más de quince días, no tenían más que suscribir sus apuntes de todo cuanto veían: productos (lana, cueros, coca, comestibles, etc.), animales provenientes de diferentes zonas, sobre todo los que traían desde el Tucumán (Argentina).

Venir desde tan lejanas tierras era una proeza, que seguramente les llenaba de recompensas, hasta impregnar el alma de los lugareños y de más al sur, como Matalaque en Moquegua, por ello sus muchos años de vigencia como alternativa para las relaciones comerciales, de modo que se movilizaba la economía del sur andino. También había alojamientos, bares, casas de juegos y diversiones.

Por cierto, como ocurre en toda feria, se incurría en la bebida y borracheras hasta perder todo lo ganado en la compra venta de sus productos. Amoríos y futuros compromisos familiares. Era en realidad una movilización extraordinaria que no volverá a ocurrir.

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VI. NUEVAS INFORMACIONES

2 piezas de cucharitas de idem /madera/

Cuando visitamos Vilque, nos preguntamos si pudiéramos encontrar en los archivos de la municipalidad, los recibos de las alcabalas o alguna información de la distribución de los puestos de venta, los nombres de los comerciantes u otra información sobre el asunto. No hemos podido ubicar estos datos. Sin embargo, en nuestra actividad archivística, con el apoyo de los amigos Sonia Sotomayor, Chester Samudio y Adolfo Rojas del Archivo Regional de Puno, hemos accedido a una información para los últimos años de 1700 y los primeros del s. XIX que detallaremos a continuación:

Todo lo cual para su venta cuyo real derecho afianzó Don Francisco Sánchez, término de dos meses.

Expediente suelto. Tres folios. Papel sellado para los años 1816-1817 Expediente que trata sobre el remate de la Plaza de Vilque por los días de la Feria del presente año de 1816.

Señor Gobernador Intendente, La Plaza del pueblo de Vilque en su actual feria debe rematarse a favor de la Real Hacienda, con sujeción a lo últimamente mandado por el Excelentísimo Señor Virrey del Reino, y así se practicó el año 1812, en la cantidad de ciento y un pesos que se enteraron en vuestras cajas. Los años sucesivos se celebró el mismo acto, corriendo su inspección y percibo a cargo del Cabildo Constitucional de esta capital que graduó este Ramo en la esfera de propios y arbitrios.

Abolido ya ese cuerpo y restituida la primordial costumbre, debe en el día celebrarse en pública almoneda por la junta de ellas al indicado remate.

Así piden a ustedes los ministros se sirvan mandarlo y que, realizado en el mejor Postor, se entere en Cajas Reales su valor. Contaduría Principal de Puno, y mayo 29 de 1816.

Firman: Victoriano de la Riva, Fernando Pacheco.

Folio dos, documento anexo: “La administración Principal de Alcabalas del Cusco para el Partido de Carabaya, Abril de 1791” Fianza No. 164 En 6 de dicho /mes/, al pie de pedimento se dio guía a Don Ramón Andagua para que conduzca al Santuario de Vilque, Partido de Lampa, lo siguiente: Efectos de Europa: 5 Bocadillos cinta de medio listón 1 docena de cuchillos de marca menor Media docena de Idem /_cuchillos_/de marca mayor Media docena de pañuelos de nariz Efectos del País: 1 libra de anil 3 docenas de listón de algodón 3 docenas de rosarios de Coyol 20 piezas peynes de madera

Fianza No. 178 En 13 de dicho /_mes_/, al pie de pedimento se dio guía a Don Carlos Ortiz para que conduzca al Santuario de Vilque, Partido de Lampa.

Efectos de Castilla: 6 Bocadillos cinta de medio listón 4 Bocadillos de idem /_cinta_/ de a real 1 docena de cuchillos de marca menor Efectos del País: 30 pares de zapatos. Los 15 de Bagueta y los otros 15 restantes de Ocota 2 pabellones de algodón 70 varas de tocuyo angosto ordinario.

Todo lo cual para su venta, cuyo real derecho afianzó don Ysidro Pilcotupa, término de dos meses.

Fianza No. 185.

En 16 de dicho /_mes_/ al pie de pedimento se dio guía a Don Juan Delgado para que conduzca al Santuario de Vilque, Partido de Lampa, lo siguiente: Efectos del País: 1 libra de ojalillo falso de oro y plata, avaluado según el lugar de su venta en ocho pesos...........................................8 5 piezas de peynes ordinarios en seis pesos..........................6 4 piezas de ruecas en cinco pesos.........................................5 Parcial.................................................................................19 Su alcabala al 6 por ciento..................................................1,5 Efectos de Europa: 10 Bocadillos cinta de medio listón surtido a doce reales cada bocadillo.....................................................................15 pesos Media docena de pañuelos ordinarios en 5 pesos.......5 Parcial........................................................................20 pesos Su alcabala al 6 por ciento.........................................1,2 pesos Que pagó este interesado, un peso un real y medio por los efectos de la tierra y un peso dos reales por los efectos de Europa, que uno y otro adeudo hacen dos pesos tres reales y medio.

Despacho No. 195.

En 27 de dicho /_mes_/, al pie de pedimento, se dio guía a Don Martín Monrroy para que conduzca al Santuario de Vilque, Partido de Lampa, lo siguiente: Efectos de Castilla: 4 Bocadillos cinta de medio listón, avaluados según el lugar

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de su venta a 13 reales 6 pesos 4 r.

Su alcabala al 6 por ciento, 0 pesos 3 y medio reales.

Efectos de la tierra: 2 Rollos de listón de algodón a 8 reales cada uno.........2 pesos 2 docenas de rosarios de Coyol, a 4 reales docena..........1 peso 2 docenas de peynes de madera a 2 reales docena......0 peso 4r 2 gruesas de botones de estaño a 2 reales la gruesa...0 peso 4r Parcial........................................................................4 pesos Su alcabala al 6 por ciento..............................0 pesos 2 reales.

Fianza No. 196.

En 27 de dicho /_mes_/, al pie de pedimento se dio guía a Don Joaquín Escalera para que conduzca al Santuario de Vilque, Partido de Lampa, lo siguiente:

VI. A MODO DE CONCLUSIÓN La gran feria de Vilque deviene desde la colonia, la cual ha dinamizado la economía de los lugareños y de comerciantes venidos de muchas partes, en la que circulaban mercancías venidas desde Europa (España) y las que se producían en la región, por algo más de quince días.

Por la documentación expuesta, se puede advertir productos como cuchillos, tijeras, entre otros y los de la región: lana, coca y demás.

Efectos de Castilla: 5 piezas de medio listón Media docena de pañuelos azules ordinarios de nariz Media docena de idem /_pañuelos_/ colorados 2 docenas de cuchillos de marca menor 1 pieza de Bretaña ancha corriente 2 gruesas de botones de metal amarillo chicos 2 paños de aujas (agujas) chicas.

Efectos de la Tierra: 1 libra de anil 6 cortes de puntas de algodón del país para fustanes 4 gruesas de botones de estaño chicos 4 docenas de badanas coloradas 2 docenas de idem /_badanas_/ negras 1 docena de idem /_badanas_/ blancas 1 libra de comino 1 libra de alusema Todo lo cual para su venta, cuyo real derecho afianzó Don Matías Pomaynga, término de dos meses.

Despacho No. 197.

En 28 de dicho/_mes_/ al pie de pedimento, se dio guía a Juan Cutimanco para que conduzca al santuario de Vilque, Partido de Lampa, los efectos de Castilla siguientes:

Inicio de la semana de Feria. Vilque, Puno - 2005.

Fotografía: Archivo propio.

5 Bocadillos cinta de medio listón avaluados según el lugar de su venta a 12 reales...........................................7 pesos 4 r.

3 Bocadillos de listón entero a 18 reales................6 pesos 6 r.

1 docena de tijeras ordinarias chicas en 10 reales...1 peso 2 r.

Media libra de seda surtida en seis pesos.................6 pesos 1 gruesa de botones charquesillo en 18 reales........2 pesos 2 r.

Parcial............................................................24 pesos 6 reales Su alcabala al 6 por ciento................................1 peso 4 reales Que pagó este interesado.

Firmado: Joseph Joaquín de Pinedo

Iglesia San Martín de Vilque, Puno - 2005.

Fotografía: Archivo propio.

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Hathakatu en Ruta La actividad académica la compartimos con viajes de estudio a pueblos y lugares de la región. En esta ocasión, compartimos nuestra experiencia en Umachiri, Puno.

We share academic activity with study trips to towns and places in the region. On this occasion, we share our experience in Umachiri, Puno.

Nous partageons l’activité académique avec des voyages d’études dans les villes et lieux de la région. A cette occasion, nous partageons notre expérience à Umachiri, Puno.

Por: Juan B. Carpio Torres

Escenario conmemorativo de la Batalla de Umachiri, Puno.

Fotografía: Archivo propio.

Las actividades académicas en las materias de mi competencia, me han permitido salir de las aulas y recorrer, conjuntamente con los estudiantes, muchos lugares de la región y algunos que están en íntima relación con el contexto cultural Aymara, zonas alto andinas de Moquegua y Tacna.

En esta ocasión, reseñaré la visita a Umachiri.

UMACHIRI: Es un distrito de la provincia de Melgar, Ayaviri. Lo hemos visitado hasta en cuatro oportunidades con mis alumnos de etnografía y Trabajo Social. En la primera visita ocurrida el 2006, el distrito no tenía señal de telefonía móvil

y a duras penas funcionaba un teléfono satelital en uno de los negocios del pueblo.

Es el primer detalle que nos viene a la memoria, y claro, la vía de acceso era una trocha carrozable que, en tiempo de lluvia, el tránsito se hace muy dificultoso.

La vía sale de Ayaviri, pasa por Umachiri en un tiempo de 40 a más minutos y continúa hacia Llalli, Cupi y Ocuviri.

Lo más representativo es la Plaza Principal con una pileta de mármol, donada por la Municipalidad de Arequipa, por la amistad que une a ambos pueblos, ya que en uno de los muros del cerco de la Iglesia de San Francisco de Asís del pueblo, ejecutaron al Mártir de la Batalla de Umachiri, al poeta mistiano Mariano Melgar.

Las calles lucen sin pavimento y la mayoría de casas son de adobe y techos de calamina. En algunas viviendas se puede ver, todavía, los techos de paja a la usanza tradicional.

Para el año 2009, encontramos la vía de acceso en construcción con salida hacia Arequipa. Muchas viviendas están abandonadas, a pesar de ser una población dedicada a la actividad ganadera, pues se cree que Umachiri representa la Cuenca Lechera del norte de Puno. Los alcaldes han priorizado la construcción del local del municipio.

Las actividades educativas son poco regulares debido a la pérdida de clases por las paralizaciones de los maestros y otras justificaciones.

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IGLESIA SAN FRANCISCO DE ASÍS: Es bueno destacar la iglesia de la localidad: “San Francisco de Asís”, cuya arquitectura, a pesar de ser sencilla, en el interior se detalla una primorosa pintura mural, con escenas de la vida cotidiana de un pueblo español, de la época del medioevo. Posiblemente se trata de un pueblo de Ciudad Real en Castilla la Mancha. Además, está el lugar de fusilamiento de Mariano Melgar, quién siendo muy joven, abrazó las ideas libertarias de la patria y se enroló en el maltrecho ejército de Pumacahua, dejando atrás su accidentado amor por “Silvia hasta la muerte”.

Un amor poco comprendido, que finalmente, cumpliendo sus deseos, encontró una muerte trágica. De este prócer de la independencia, no se conoce mucho, salvo el lugar de fusilamiento, el cual se repite de boca en boca entre las generaciones. Tampoco hay interés en hacer conocer, dado que las autoridades poco participan del destino del pueblo y, la población anda ocupada en sus actividades habituales. La mayoría de habitantes ya han salido del lugar a otros contextos.

Fachada de la iglesia San Francisco de Asís, 2010 Fotografía: Archivo propio.

Melgar tiene que ser un ejemplo a seguir, no por su dedicado amor a una mujer que no lo quería querer, sino por su humildad y valentía para estar frente a un enemigo militarmente profesional.

Su entrega a una causa que, en la época, ni los mismos puneños pudieron aceptar. Pero él, siendo un hombre de letras, con conocimientos en las ciencias y humanidades, no dudó y se puso al lado de los libertarios dirigidos por Pumacahua, cuando este último ingresaba por el valle de Majes, desde el Cusco, hacia Arequipa.

Nació en Arequipa un 12 de agosto de 1790, hijo de don Juan de Dios Melgar y Sanabria, y de doña Andrea Valdivieso, arequipeños con raíces en la madre

patria. Su abnegado amor por la tierra y su amada Silvia, le llevó a componer los versos más tristes y fecundos que fueron convertidos en yaravíes, cantados por músicos y vecinos de la patria chica.

“Silvia es mía y yo soy de ella” afirmó hasta la posteridad. Ejemplo para los jóvenes con valores y heroísmo. Que así sea.

En esta ocasión (2009), la salida tuvo el objetivo de realizar “Una etnografía del conflicto”, a propósito de la batalla que lleva el nombre del distrito, a indagar qué recordaban los habitantes de aquella tan importante gesta. A partir de esta visita, nos propusimos gestionar la conmemoración del “Bicentenario de la Batalla de Umachiri”. Lo que finalmente se logró, pero ésta es otra historia.

Los alumnos presentes en esta salida fueron: Trudy, Mirian, Nimia, Lidia, Mariela, Yésica, Johny, Nilda, Inés, Rigoberto, Willian, Sergio, Juan Carlos, Ángel, John, Rossel, Yeni, Ada, Guicela, Vilma, Nuee, Rusbelth, Frida y Alan.

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Había una vez una Campiña...

Así empezó la destrucción de la campiña, con ello, la imagen de Arequipa, blanca y bella, de tierra y gente gentil y generosa.

Thus began the destruction of the countryside, with it, the image of Arequipa, white and beautiful, of land and people kind and generous.

Ainsi commença la destruction de la campagne, avec elle, l’image d’Arequipa, blanche et belle, de la terre et des gens gentil et généreux.

CHACRA EN MIRAFLORES

pueblos de esta provincia y al asiento minero de Potosí) -nota de Juan Carpioy chacras del monasterio de Santa Teresa; por el pie, Callejón de Santa Rosa; por un costado, chacra del Sr. Romaña; por el otro costado, la Lloclla.

Don Francisco Ballón, casado y funcionario público, es propietario de una casa, huerta y chacra con una extensión de 137,283 varas cuadradas.

La mensura y delimitación de colindancias fue practicada por el agrimensor don José Antonio Vivanco, en fecha 22 de febrero de 1872.

una serie de acontecimientos, uno de los cuales es la expropiación forzosa a favor de la Universidad Nacional de San Agustín. La que hoy es considerada como “Ciudad Universitaria”, en 1955. Parte del fundo rústico, hoy es la residencial “La Negrita”, desde aquellos años.

Tiene los siguientes linderos: por la cabecera, camino que conduce a Chiguata (antigua Calle Real de Chucuito, por el que se llegaba a los

Por ser un bien sujeto a enajenación, derechos de herencia a fallecimiento del propietario, desde estos años hasta la década del 50 del siglo XX, se suceden

Por: Juan B. Carpio Torres

A

requipa, una ciudad representativa de la región sur, se ha caracterizado por sostener una próspera y ubérrima campiña, desde su remoto pasado, aun cuando la característica de las viviendas de los arequipeños era la “huerta”.

La ciudad y la campiña han consumado una unidad de hondo significado y es lo que ha llevado a que la UNESCO declarara a la “Blanca Ciudad” patrimonio de la humanidad.

Sin embargo, al culminar el siglo XX, la campiña ha ido perdiendo su vigor, los antiguos agricultores han ido falleciendo y los herederos no han tenido la valentía y el interés de continuar con la producción agrícola, en cuyo caso, las inmobiliarias han estado al acecho como buitres, con la anuencia de las autoridades y la propia corrupción.

Hoy, la campiña está totalmente destruida, las huertas eliminadas de cada hogar, generando así una fisonomía impropia que desdice de la auténtica Arequipa.

Hathakatu quiere hacer un espacio para recordar la campiña, anotando algunas pinceladas históricas, producto del trabajo estudiantil en el archivo arequipeño y los registros de la propiedad inmueble, hace ya más de cuarenta años. ¡cómo ha pasado el tiempo!

Los terrenos que están localizados a uno de los lados, posiblemente hacia el norte, de propiedad de Dámaso Romaña, hoy es la residencial “La Victoria”.

(Fuente: Registros Públicos Arequipa, Tomo 1 folio 334, asientos del 1 al 37.

Fecha de consulta, 1979-1980).

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“Hoy, la campiña está totalmente destruida, las huertas eliminadas de cada hogar, generando así una fisonomía impropia que desdice de la auténtica Arequipa”

Plano general de la campiña, acorralada por el cemento.

Fotografía: Archivo propio.

El fundo del que es objeto esta reseña, estaría localizado entre la Avenida Independencia, al “oeste”; por la parte de arriba, la Avenida Mariscal Castilla o Camino Real de Chucuito; por la parte oriental, la Lloclla y la Avenida Venezuela; por el sur, la prolongación del Pasaje Santa Rosa.

En fin, estamos asistiendo a la urbanización de las tierras de la campiña, por el lado oriental de la ciudad de Arequipa.

Detalle de la construcción de una iglesia en la colina de Carmen Alto (Cayma) - 2018 Fotografía: Diario La República

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HATHAKATU

Un descanso en la ruta hacia el Chichicapac, Carabaya.

Fotografía: Archivo propio.

“Para volver a la tierra y valorar sus maravillas” Carabaya tiene un territorio maravilloso y un pasado prodigioso.

Desde los abrigos rocosos que cobijaron la vida del hombre, a la formación de los partidos o corregimientos. Para 1800, Carabaya contaba con los repartimientos: Sandia, Quiaca, Phara, Coasa, Ayapata y Macusani ( A.R.P. Legajo 17). A propósito, cuenta la tradición oral (una de las tradiciones) que: “En los primeros tiempos, un hombre llamado Allinccapac, al sostener un romance con la “reina Macusa”, se convirtió en nevado (el nevado que lleva su nombre). En cambio, la mujer quedó embarazada y logró tener un hijo, al cual puso por nombre “Huamanlipa” (si acaso no es Chichicapac). Este Huamanlipa, conforme avanzaba en edad, adquiría la sabiduría de los ancestros hasta convertirse en “curandero”; quien al morir, se convierte en “planta medicinal”. Al parecer, la reina Macusa, se quedó para vivir en un poblado que lleva su nombre (f.r. Angie R. H. 2018).

El otro nevado de la cordillera de Carabaya, llamado Cchichiccapac, hermano o hijo del personaje del relato precedente, al que hemos llegado, significa “rey o señor del oro”. Razones no faltan, ya que en la zona el metal precioso “fluye como el agua”.

Juan B. Carpio Torres

Nevado Allincapac, Carabaya - Puno.

Fotografía: Chihuanco | Flickr