Cuatro años ya con vosotros

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Parece que fue ayer, cuando un grupo de, aproximadamente, quince nerviosos y jóvenes muchachos LA HISTORIA DE BARUC - “LA SAVIA”, eran invitados por una corporación “grande”, como nosotros llamábamos a las corporaciones señeras de Puente Genil, “LA HISTORIA DE TOBÍAS”. Fue un cuarto Sábado de Romanos; y os puedo asegurar que a mi no se va a olvidar en la vida, y estoy seguro que a todos los demás integrantes de aquel entusiasta grupo tampoco.

Tras esto, pasamos dos Semanas Santas, intentando engrandecer nuestra corporación, pero siempre en la memoria aquella gran invitación que nos brindasteis. Hasta que un día nos disteis la oportunidad que formáramos parte de lo que ya somos con orgullo, “EL PEZ”. La noticia la acogimos con sorpresa, pero con gran agrado. Y tras un tiempo, no dudamos en arriesgar todo lo que habíamos fundado, para formar parte de esa corporación que hace dos años nos invitó a una comida de hermandad, y que lo que sentimos en esa cena, lo sintiéramos todas las Cuaresmas, Semanas Santas y demás actos que la corporación pudiera tener.

El primer año fue un año muy difícil, pero a la vez muy especial. Difícil porque entrábamos a un lugar totalmente nuevo para nosotros; sus costumbres, sus hermanos y, en definitiva, sus pautas de comportamiento. Por eso, estábamos algo tímidos y expectantes para observar como se desarrollaba todos los acontecimientos y después, poder nosotros “comportarnos como se debía”. Quizá por ello no estábamos participativos. También fue duro, ya que sufrimos el golpe de la primera muerte de un hermano. Pero también especial, porque era la primera vez que veíamos a algún hermano emocionarse por algún motivo y compartirlo con todos los hermanos. La primera vez que experimentábamos lo que se siente al colocarse un rostrillo y transformarse en ese personaje bíblico que ves desde niño tan entusiasmado; y el vuelco que te da el corazón al empezar el desfile ·11·

con tu corporación, algo que hay que vivirlo para poder comprenderlo. Y también lo que se siente al ver como un hermano que, todavía lo conoces de poco tiempo, explique, emocionado, que espera y que esta seguro que nosotros mantengamos la llama viva de “LA HISTORIA DE TOBÍAS” con el paso de los años; y todo eso, cuando lo vives por primera vez, se vive de una forma distinta, especial.

Después en el segundo y tercer año, ya estábamos más integrados en la corporación, ya habíamos compartido más momentos juntos. Sentíamos que la corporación nos necesitaba, nos sentíamos “algo más importantes en ella”, siendo todos los hermanos importantes para la corporación, pero que hasta ese momento no nos dimos cuenta; incluso se empezaba a contar con nosotros para cargos directivos.

En estos años vivimos momentos muy importantes para nuestras vidas. Como lo que se siente al imponernos la insignia de la corporación (uno de los momentos más bonitos que he pasado en mi vida), al bautizarnos el Jueves Santo nuestros hermanos y darte la bienvenida a tu corporación; o al pasear orgulloso de “rebate” por las calles con el bolsillo representando a todos tus hermanos… En fin, muchísimos momentos difíciles de explicar y que siempre se llevará en el corazón, incluso cuando este pare de latir y nos vallamos con el terrible.

Lo que pido a vosotros, hermanos veteranos de la corporación, es que sigáis todos los años enseñándonos vuestra sabiduría cada día que compartamos, para que así LA HISTORIA DE TOBÍAS-“EL PEZ”, siga siendo lo que es hoy en día. Será empresa difícil, pero con vuestra ayuda, apoyo y enseñanzas seguro que se conseguirá.

Por todo lo que nos habéis hechos sentir y enseñado y lo que queda por que nos hagáis sentir y enseñar, MUCHAS GRACIAS HERMANOS.

Vuestro hermano: MARIO QUERO DELGADO .