Revistadigitalsep2015

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PRÓLOGO

Llega el mes de septiembre, y junto a él, la Edición Fiestas Patrias de nuestra Revista Nilontraro…..en la cual con mucho orgullo presentamos cuentos y poemas inéditos de nuestros socios y colaboradores, los cuales año a año preparan sus aportes literarios. Del mismo modo, y como ya es tradicional, incluimos en esta edición los cuentos ganadores de nuestro concurso “el 18 en mi Comuna”, en donde cada año contamos con los trabajos de alumnos y alumnas de Escuelas y Liceos de nuestro Ercilla, quienes, motivados por profesores y familia, muestran el interés y entusiasmo por participar. Agradecemos a cada una de las personas que colaboran en estas publicaciones… por hacer posible que nuestra Revista Nilontraro, sea conocida a nivel comunal, provincial y regional….


Yo tengo una yunta de g眉elles Y con ellos me mantengo Uno se llama flojera y el otro Vamos durmiendo.

(Vecino an贸nimo)


PERSONAJES DEL AÑO 60’ VEGOÑA En los años 60 aproximadamente, los recuerdos son muy hermosos, ya que cuando uno es niña es feliz con todo. En esos años existía mucha pobreza; y también muchos personajes, por ejemplo, los que vendían carbón en grandes carretas, (digo grandes porque le colocaban unos tablones para poner más sacos), se veían muy altos, eran más o menos 25 sacos o 30 sacos de carbón. Se sentían los bueyes a la vuelta de la rueda, los chirridos de las ruedas por el peso del carbón, sabíamos que eran los carboneros. Venían de lejos, ya que llegaban muy temprano y las carretas traían escarcha en los sacos de arriba. Vendían muy temprano, ya que a veces se juntaban más carretas con carbón y tenían que venderlo más barato, para entregar su carga, y para que descansaran sus animales. Después se iban donde amigos a tomar desayuno y dejar sus bueyes encargados; más tarde compraban su pulpería: todo lo que le encargaban su señora o sus familiares. Luego guardaban las compras en sus carretas, se juntaban con sus amigos o conocidos y con el dinero que les sobraba se iban a las cantinas a pasarlo bien junto a sus conocidos y vecinos del campo que también andaban vendiendo carbón. Yo creo que se quedaban dos días y después se preparaban para irse: compraban fardos, cargaban sus carretas y se iban felices, supongo que llevaban de todo, además de su chuica para el camino y llegaban muy contentos a sus casas. También estaban los depósitos de vino. Los dueños se habían venido del norte a vivir a Ercilla. Ellos traían grandes pipas en los trenes; ya que en ese tiempo todo se traía en el tren, ya sea trigo, animales, etc. En el carro venía vino, chicha, vinagre, chacolí y chichón, entre otros. Cuando llegaban los carros, buscaban hombres y a los dueños de las carretas grandes para sacar las pipas y ponerlas en las carretas para llevarlas a los depósitos; ya que ellos les vendían a las cantinas y también les entregaban a las ramadas, a las fiestas, a los que armaban las carreras, o en cualquier evento que había en Ercilla. A los caballeros que ayudaban, después de arreglar las pipas, les daban vino hasta que no se acordaban quienes eran, yo creo que dormían hasta el otro día. Cuando llegaban las pipas se avisaban y venían del campo o de otros lugares a buscar chicha dulce o vino bueno. Llegaban en carretas y estaban hasta las tantas de las tarde en los depósitos o cantinas. Algunos se iban en la carreta, los llevaban los puros bueyes, ya que los bueyes sabían el camino, el único problema era cruzar la carretera pero sus dueños durmiendo no se daban cuenta, de igual manera los que iban de a caballo. También los que arreglaban ollas (hojalatero), andaban con sus tarritos con carbón. Sus soldadores era un fierrito que los calentaban al rojo y tenían forma de hachita. Limpiaban bien la parte rota y le ponían soldadura, arreglaban ollas, teteras, jarros, fondos, hacían braceros y palas, y todo lo que les pidieran.


Estaba el que vendía helados en una carreta de mano. Tenía un tambor redondo grande y otro más chico, adentro estaban los helados y entremedio tenían mucho hielo. Los helados de leche eran muy ricos; también había de jugo y chocolitos. Ellos recorrían las calles y cuando salíamos del colegio frente a la iglesia, todos corríamos a comprar helados o pedirle un pedacito de hielo. Yo me preguntaba como harán el hielo… ya que uno no conocía refrigerador y para nosotros era novedad. Cuando gritaba sus helados tenían un grito muy especial, todos salíamos a mirar o comprar, eran tiempos muy hermosos. Los que vendían pescados en una carreta de mano o un carretón, los traían en el tren de Concepción. Llegaban como a las 10 de la noche. A veces los trenes se atrasaban y llegaban a las 12 de la noche, pero la gente los esperaba para comprar pescados frescos. Traían muchos ahumados, sardinas pescadas, sardinas chicas y hasta pancoras. Se compraban por cientos. Yo no era tan grande, pero eso yo lo recuerdo. También están los campesinos que venían con sus grandes canastos con quesos, mote, verduras y huevos. Muchos venían a tomar el tren para ir a vender sus cosas a Collipulli o a Victoria; también estaban las señoras que vendían flores y las que vendían cerezas; ya que en esos años había muchas cerezas: la paloma, la corazón de buey, la guinda y muchas frutas más. Los campesinos venían de a pie, nada de locomoción. Algunos de a caballo y carreta, eso era lo que tenían. Otro personaje era el cartero que tenía que llevar las cartas al tren, creo que tres veces al día, todos los días. Traía y llevaba cartas, muchas veces tenía que correr para alcanzar el tren. A veces les decía a los niños de las carretas de mano que le ayudaran, ya que ellos iban todos los días hacer un flete para ganarse unos pesitos. También habían gente que trabajaba en madera, haciendo yugos, ruedas para carretas y carretones, monturas, coyundas, riendas, chicoteras, bateas para lavar ropa y hacer pan. En esas labores trabajaban papás, hijos y la señora… nadie se salvaba. También hacían las carretas, carretones, es decir, trabajo completo .A veces no le daban dinero, hacían trueque con trigo, porotos, harina, un chanchito y otras cosas. Otro personaje era un caballero que castraba animalitos, El pasaba por las casas ofreciendo sus servicios para los perritos, gatitos, chanchos, potros y toros. Yo me preguntaba cómo lo hacían ya que en esos años ellos no eran “educados”, ni veterinarios, pero nunca escuché que algún animalito se enfermara o le pasara algo grave.

Fin


ARRUGAS LUIS LIZAMA

Ahora que estoy meciéndome en la silla de mis recuerdos, empujo hacia atrás el balancín de mi memoria, no soy el mismo, hay una caricatura de lo que fui, ya no soy joven, no… Estoy desenredando el polvo de mi vejez para analizar mi tiempo porque aún soy hombre, niño en un tiempo, viví lleno de esperanzas de tantas que no me di cuenta cuando el espacio se hizo años y su paso inclemente me pintó arrugas, arrugas que en cada una se cuentan historias de infancia feliz, adolescencia calma y juventud turbada de equivocaciones y aprendizajes sin fin. Escucho voces… vienen de las arrugas de mi frente donde se han plegado mis más agridulces recuerdos, me acaban de recordar tu rostro, tu sonrisa, tus ojos de primavera. Hace años que no te dibujabas con esa nitidez, Caminas en mis recuerdos directamente hacia mí, Parece una historia amarillenta, muy pasada, pero estás aquí, Estás a mi lado para recordarme joven y hermoso como hace muchos años fui, cuando mi cuerpo se desbordaba de ansias por esperarte, cuando el agua de un río era un manantial fértil y verde. Se alejan las voces…

Fin


DÉCIMAS POR MI PUEBLO I Primero pido permiso Pa presentarme al jurado Vengo de un pueblo agraviado Previamente les aviso Mi nombre no es muy castizo Yo soy Oliver Segal Quien ha venido a versear Con modestia y con honor Pues soy Adulto Mayor Como les voy a contar. II Vivo en el pueblo de Ercilla En la Provincia e Malleco Y me suena como un eco La obra de maravilla que Don Alonso de Ercilla Escribió en esos lugares Poetas grandes juglares Como nobles trovadores ellos tuvieron honores y hoy los tienen en altares. III Arrancando del tumulto Yo dejé la capital pues fue mi ciudad natal esto a nadie se lo oculto allá el viejo es un bulto molesta en cualquier lugar aunque esté en su propio hogar pierde don y pierde mando aunque todo lo esté dando en un rincón va a parar.

IV En esas grandes ciudades Donde la gente hormiguea El adulto no desea Llegar a aquellas edades Porque saben las verdades Su alma cuelga en un hilo Por eso que están al filo del cariño familiar porque van a terminar En un inhóspito asilo. V Es cosa de hacer conciencia Que queremos pal mañana Vivir una vida sana Como lo dice la ciencia Yo les cuento mi experiencia Por si a alguno le sirviera Porque de alguna manera He valorado mis años No quiero que con engaño Alguno de usted se riera VI. Que el anciano es venerado He visto y nadie me cuenta Pues pasado los sesenta Pasa a ser casi sagrado Esto yo le he comprobado En raza mapuche pura


VII El Longko es autoridad y es un Adulto Mayor Se respeta con fervor En aquella sociedad Dentro de la comunidad Los kimches los sabios son Que mantienen con tesón De su pueblo y de su gente La historia más elocuente Y el saber es su razón. VIII La Machi tiene experiencia Que en años recopiló Con el tiempo que paso Su vejez le dio sapiencia Lo demuestra su presciencia En medicina ancestral Con su longevo caudal De sabios conocimientos Por eso se los comento La edad le ha hecho cabal IX Para que voy a mentir La nostalgia me consume Tal cual como usted presume De verdad me hace sufrir Pero tengo que seguir Mi labor no ha terminado Lo mismo le habrá pasado A usted como a los demás Porque somos contumaz Para no decir porfiado.

X Aprendí en el silabario Pasé también por el Lea Al estudio hice pelea Sin tener ni diccionario Distinto fue el escenario Libro El Ojo en mis manos El Hispanoamericano También el libro Mi Amigo Al Normalista le digo Los sentíamos como hermano XI Mis respeto para aquellos Que fueron mis profesores No fueron tiempos mejores Pero fueron tiempos bellos Se usaba corto el cabello, Se revisaba el aseo, Y de acuerdo a lo que veo El mameluco fue un don Tampoco existe el bolsón Ni los juegos en recreo. XII La entretención hoy en día No existe como en antaño Fue muriendo año tras año Y es por la tecnología En recreo se veía El trompo y paco y ladrón El emboque, algún bribón


XII

Ni conversan como antes Los estudiantes de ahora el Celular les devora la palabra y el desplante Los tablet impresionantes Les mantienen aislados En un mundo conectados A una sociedad virtual De este modo cada cual Vive en un mundo aislado. XIV

Debemos ser realistas Estos son tiempos modernos Donde no somos eternos Ni cabemos en su pista Solo estamos en la lista De los Adultos Mayores Cuyos más grandes temores Son ligados a la salud Pensando en el ataúd Sufrimos los sinsabores. XV

Enfermos crónicos digo Con varias patologías A un viejito yo le oía No sé cómo sobrevivo Con la hernia en el ombligo Con hipertensión arterial Con la próstata tan mal Que me orino hasta el zapato Con la diabetes pal gato Y debo comer sin sal

XVI

Pero la vida es muy linda Y hay razón de disfrutarla La experiencia hay que escucharla La destreza que nos brinda De la torta somos guinda Cuando somos autovalente Hasta nos pelan los dientes Nos saludan con respeto Ser activo es todo un reto El mantenerse vigente. XVII Y no hay mayor alegría sentir el deber cumplido con todo lo pretendido pal bienestar de sus crías el esfuerzo día a día no termina en la vejez porque tal cual como ves se jubila ya de anciano cuando ya no dan las manos ni al derecho ni al revés

XIX Por último me despido Me voy pero no los dejo acá se respeta al viejo Y también al desvalido Lo único que les pido Es que sigan adelante Con esta idea brillante En que el Adulto Mayor Tiene un espacio de honor Para mostrar su talante


EL PUMA CURIOSO. Ana Rodríguez P. Siempre mis historias y chascarros fueron en comunidades de Ercilla, en los años 1961 al 1966 y son referentes a personajes, mitos, festividades religiosas o culturales mapuches. Esto ocurrió en Requén en el año 1963, reducción mapuche que tenía una escuela, una profesora que era de Collipulli llamada Bella; la persona, que cada día tenía dedicado a sus niños mapuches; recibirlos, instruirlos, darles valores humanos, enseñarles lo mejor que ella podía infundir en esas almas sencillas. Era la segunda ñuque, y todos en general la querían. Ahí nos tocó el destino de llegar y el Padre Eugenio, que sirvió de intermediario. Fuimos con Adelaida, hermana Elena, Teresa, una joven postulante y la que escribe. Veníamos desde los Ángeles en una misión durante 2 semanas .El sacerdote como siempre nos lleva en un jeep, por un camino que solo eran huellas, el elige las ñuques que nos daban alojamiento en sus rucas, nos deja con todas instrucciones y se devuelve a la Parroquia en Ercilla, diciéndonos ¡volveré al final! Con el corazón alegre de dar a conocer a Dios en esa comunidad; salimos temprano a visitar cada ruca que encontrábamos entre los bosques, matorrales y mucha distancia entre ellas; los peñis nos pasaron caballos para que no camináramos tanto. Cada día, al salir con Adelaida, mi compañera; admirábamos el paisaje y veíamos la expresión de asombro de los peñis, al ver a dos mujeres a caballo sin montura, sólo en pelos, con un saco que se nos caía a cada rato, pero era nuestra misión y debíamos seguir adelante. Un día nos internamos en una especie de selva, por lo tupido de vegetación. Con un poco de temor seguimos internándonos .Pero nos sucedió algo que nos dejó preocupadas: detrás de nosotras se oía pisadas cautelosas en las hojas secas del camino. Decidimos volver y pensábamos, “un peñi que nos vigila” Pero un día, en un lugar de muchos árboles nativos, mi caballo no quiso seguir y empezó a retroceder y encabritarse, pensamos “esto no es normal”, y presurosas nuevamente nos volvimos cuando el sol se estaba ocultando. Al llegar a la escuela, le comentamos a la Señora Bella, lo que nos había ocurrido, pero ella, al ver nuestras dudas, defendió a brazo partido a los peñis. “Ellos no pueden ser, son muy respetuosos” .Se volvió para ir al dormitorio que tenía la puerta hacia el lado


norte, frente a un pequeño cerro cubierto de altas malezas secas; estaba oscuro, pero empezó a salir la luna. Me vuelvo para mirarla, y veo al trasluz una cabeza y algo medio rojo entre la maleza ¡no puede ser! dije furiosa; -un peñi nos siguió y está fumando frente a la pieza- ; vuelvo, y tomando de la mano a la Señora bella le digo ¿quiere mirar ahí? Ella me miraba asustada y de repente grita: -¡es un león! Éramos seis mujeres y no supinos como nos encontramos atascadas en la puerta queriendo entrar todas a la vez. ¿Cómo termina aquello? ¡Gritando como locas pidiendo auxilio! ¿Cómo se escuchaban nuestros gritos en los cerros? Repercutían los gritos, con lo que el puma s asusto y se fue, en eso aparece un peñi, con una picana en la mano y nos dice: ustedes están locas, un león, no haría eso de visitarlas y sobre todo a ustedes y además eso no sucede aquí, nos miramos y dijimos: también él quería asistir a las charlas y conocer mujeres distintas. Nunca supimos, si este puma, volvió a esa escuela a visitar a seis mujeres jóvenes.

Fin


Yo me tomo una ca帽a llena Cuando tengo pena alguna Como pato en la laguna Me deslizo por la tierra.

(Vecino an贸nimo)


CONOCIENDO ERCILLA Adriana Yo nací en Temuco, en el año y me eduqué en Temuco; después de estudiar fui a trabajar en talleres de costura. Luego de un tiempo me fui a trabajar a Concepción en costuras, allí conocí al que es mi esposo, un Ercillano. Con el me casé un día 25 de Mayo de 1961. Un día de verano conocí a mis suegros y viajé en tren a Ercilla, yo ya tenía a mi hijo mayor. El viaje en el tren hacia Ercilla fue muy entretenido con mi esposo y mi hijo, el que lo pasó lo más bien en el viaje. Cuando llegamos a la casa de mis suegros, me recibieron con mucho cariño, igual mi cuñada y cuñados que estaban cosechando trigo, y nos dieron un tremendo susto porque nos dijeron que andaban culebras en donde estaban cosechando. Yo de puro susto me ponía a caminar, sentía que las culebras estaban subiéndose en mis piernas… la pasamos muy bien. En esta ocasión tuve la oportunidad de conocer Ercilla, fuimos al centro, allí conocí las Ramadas donde había mucha música, empanadas, dulces, comidas, bebidas… había de todo. También había juegos populares. También tuve la oportunidad de ir al rodeo donde lo pase muy bien, para mí fue un 18 de Septiembre muy lindo, con Ramadas, Volantines, Rodeo y de un todo, esto me hizo muy feliz. Y desde esa vez siempre pensé que llegaría la oportunidad en que me vendría por alguna razón a vivir a Ercilla, parecía como un sueño. Hasta que llegó el día en que cumplí mi sueño y me vine a vivir a Ercilla.

Fin


MI MARIPOSA “N” Vuela, vuela sin parar Mi bella mariposa Vuela cada vez más alto La vida es maravillosa. Los colores que te adornan Dan alegrías y amor Tu sonrisa es hermosa Mi bella mariposa. Cuando te veo venir Le digo a mi corazón Es hermosa y juguetona Es ella pedazo de amor Que no se puede igualar Tanta dicha y dulzura Mi pecho quiere estallar Eres mi mariposa Y siempre te voy a mar.

Fin


CHOLITA Marina

Llegaste a una casa vecina aproximadamente 4 años atrás. Pasado un tiempo se fueron tus dueñas dejándote abandonada a tu suerte; no les importó si lograrías sobrevivir o si tendrías donde cobijarte en los fríos y lluviosos días de invierno; pero tú, pobre animal, superaste toda adversidad y aún estás acá. “Cholita”, como cariñosamente te llamamos por tener tu pelaje de un negro azabache, has sido madre varias veces. Cuando presientes que nacerán tus hijos, haces hoyos en la tierra donde darás a luz, eso sí, lejos de las casas para que nadie les haga daño…cuidas a tus cachorros como deberían hacerlo todas las madres. La Chola no aparece mucho en el día; en la noche con sus ladridos frente a las puertas nos anuncia su presencia, indicándonos con eso que le demos algo de comer. Si tiene cachorritos, la comida que puede transportar la traslada para ellos. En una oportunidad, cuenta una vecina; atrás de su sitio había un perrito muerto… la Chola lo tenía rodeado de pedazos de pan, seguramente creía que su hijito estaba dormido, y continuaba llevándole comida. La señora que vio esto le dijo: - Chola, tu hijo está muerto -, y ella como si entendiera lo que decía llevó al perrito a esconderlo entre los árboles de un bosque cercano. Cholita, ahora se te ve cansada…estás sintiendo el paso de los años…y si no te has ido de acá, debe ser porque eres feliz con la vida que llevas. Analizo tu vida desde que llegaste, y he llegado a la conclusión de que eres un animal tremendamente inteligente, noble, y sobre todo, una madre ejemplar.

Fin


LA VUELTA DEL TRONCO José Navarrete (Pepe Lalo) Los pueblos y lugares también tienen sus historias, así como los personajes reconocidos en un lugar o sector, sea este urbano o rural. Aquí en Ercilla, pueblo de la de la novena región, a la salida sur del pueblo; había un lugar llamado “la vuelta del tronco”. Este lugar quedaba justo donde el camino salía hacia las comunidades Chacaico y otras que quedaban al lado sur de Ercilla. “La vuelta del tronco”… de este lugar se contaba muchas historias. Es el caso de Pedro, que vivía allá por Butaco. Decía que él se iba para su casa un día como a las ocho de la tarde. Se había tomado unos tragos en el pueblo y al pasar por la vuelta del tronco ya estaba oscuro… que le salió un hombre negro muy grande, lo asustó y le quitó todas las cositas que llevaba, pero en su casa nadie le creyó lo que Pedro les decía. También está el caso de Francisco que cierto día se pegó unos traguitos demás, pero que no estaba tan curado… también se fue un poquito tarde y al pasar por la vuelta de la esquina del tronco le salió un fantasma; le pegó y le quitó todas las cosas que llevaba para la casa, claro está que nadie le creyó nada de nada. Pero estas cosas pasaron por allá en los años 1960 época en que se creía mucho en fantasma y en espíritus que aparecían en lugares, por donde más traficaban las personas. La vuelta del tronco se hizo famosa en esa época porque se dice que a muchas personas se les apareció el fantasma, claro que muchas no contaban lo que les pasaba para que no se rieran de ellos. Pasaron muchos años en que este fantasma asustaba a las personas a la vuelta del tronco. Según se decía, las personas dejaban sus cosas botadas en el lugar y arrancaban lo más lejos posible. Cierta vez Juan y su esposa María, se dispusieron a ir a Ercilla. Como no vivían tan lejos (camino a Chacaico), salieron un poco más tarde en su carretón a comprar sus cositas que necesitaban para la casa. Llegaron al pueblo, compraron su cositas, y Juan pasó a tomarse unas copitas de tintito…fue más que una copita, ya que se anduvo mareando un poco pero no tanto.


Juan tomó sus cositas junto a María, cargaron el carretón y se fueron rumbo a su casa, claro que ya se había hecho tarde y estaba oscureciendo, y al pasar por la vuelta del tronco ya se veía poco ,cuando de repente allí justo, de un salto un hombre negro se subió al carretón y fue a pegarle a Juan, pero María agarró un palo que llevaba en la mano ,palo que parecía un astil de hacha, y con éste le dio unos cuantos palos al hombre negro que seguramente era el fantasma que salía en la vuelta del tronco. Fueron tan fuertes los garrotazos que el hombre negro o fantasma cayó del carretón y salió arrancando de ahí ,se empezó hablar que el fantasma no era tal ,sino que era un ladrón que le robaba a los que pasaban tarde por ahí . Con lo que pasó, para unos quedaron como un fantasma y para otros, como un ladrón que nunca se supo quién era ,lo seguro es que al ladrón o fantasma los palos tienen que haberle dolido mucho, porque se perdió…. esto dejó claro que los palos duelen.

Fin


Brindo dijo un leñador Por la leña y la hornilla También por esas chiquillas Que tiene la pierna harto güena

(Vecino anónimo)


PAJAREANDO José Nabi (Alquimista de Sueños) Por ir pajareando encontré arriba de un verde lingue, una paloma torcaza llorando me dijo… es por una loica herida, de rojo carmesí su pecho, que se fue riendo, rauda volando,

Y un tordo de negro y brillante luto, de rama en rama saltaba, el bosque recorría buscando un triste velorio, para de negro terno… ir a llorarlo

Y debajo de un árbol, silencioso y camuflado, un bobo cazador, con paciencia divina con su escopeta de madera, tiene esperanza que hoy en la mañana o en la tarde madure, un verde y escandaloso choroy.


Desde unos matorrales de mil hojas, entre verdes y secas, una diuca silenciosa, vestida de monja, me observaba con infinita… paciencia.

Una golondrina bicolor No sé si es, blanco con negro, o de negro con blanco, no lo sé esto sí sé… ese nido, que escondido, en un alero tiene, me avisa que la florida primavera ya viene.

Un pequeño e intruso gorrión, Sinvergüenza, macho, galán, mil veces y mil más… se sube y se baja de su compañera luego, levantado nubes de polvo, ufano de tierra, se baña,


orgulloso de tan grande hazaña. En lo alto de la cordillera, el rey de los cielos, besando las nubes blancas, escapado del escudo chileno, silencioso, con magnificencia planea, consciente de su realeza.

Me pregunto ¿que el camino a cruzado?, ¿Fue una colicorta y gritona perdiz?, que en raudo vuelo pasó preguntado… ¿ me viii?,¿me viiiii?, muchos pájaros vi, pero por ir pajareando a ésta solamente… la oí.

Fin


LA FELICIDAD MARINA

La felicidad viene a ser un estado de ánimo, una disposición de nuestro espíritu… más bien un conjunto de circunstancias en que nos vemos situados en la vida. Diríamos pues, que la dicha es una actitud mental; un sentimiento de paz, una serie de momentos placenteros; su recurrencia depende en gran parte de nosotros mismos. Cuando más a menudo suceden en nuestras vidas estos momentos placenteros, tanto mejor cimentada está nuestra felicidad…hasta podríamos tener el hábito de ser felices. Cualquiera puede ser feliz, porque la felicidad es algo bueno, y como es el caso de otras cosas buenas, para tenerla hay que trabajar por ella; es un engaño creer que la felicidad es algo que alguna persona pueda darnos; pero verdaderamente no podemos ser felices solos…únicamente podemos serlo de veras cuando lo son también otras personas. El deseo de hacer a otros felices, si es sincero, no puede arrancar sino del amor y, quien tiene amor, es feliz.

Fin


ES NOCHE YA LUIS LIZAMA Es noche ya, el día ha pasado tan rápido, la lluvia no ha cesado solo aquí en mi habitación siento las gotas caer y el tic tac del reloj que no calla ya Quisiera poder hablar contigo solo por un instante decirte como estas amor mío? y escucharte, contar tus historias tus locas aventuras de niña enamorada Cuantas veces nos sorprendió el alba, conversando, cuantas palabras de amor compartidas, cuantas caricias entregadas cuanto amor entre los dos existía Hoy solo quisiera sentirte aquí, muy cerca, abrazados contemplar la lluvia que suave se desliza y escuchar una vez mas un te amo de tus dulces labios Que hermoso sería escucharte en la distancia y poder transportarme con el solo deseo de mi corazón a la estrella donde tu descansas

Llegaría como la brisa alborotando tus cabellos regando de besos tu piel tantas veces acariciada y después de un tiempo prodigándonos abrazos y ternuras te diría: Buenas noches mi amor por hoy descansa, yo estaré a tu lado aún en la distancia Pero si hoy me alejo tienes la promesa que regresaré mañana.

Fin


CUENTOS GANADORES 4° CONCURSO “EL 18 EN MI COMUNA”


¡QUE RECUERDOS!

FRANCISCA OÑATE ROJAS 1° LUGAR CATEGORÍA INFANTIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015

Qué recuerdos, cuando era chica iba con mis abuelos a las ramadas, que lindo ver por primera vez una ramada, mirar con amor nuestra bandera hermosa y elegante, la más linda de todas, que feliz me sentía ver como todos celebramos nuestras fiestas patrias… ¡ay! Como me reía cuando no faltaba el curadito bailando en las ramadas; comer esas ricas empanadas hechas por mi abuelita y lo más lindo, ver como todos compartiríamos en paz, como si fuéramos una sola familia. Ojalá nunca se me borren esos recuerdos vividos con mis abuelitos, aunque los años han pasado y mis abuelitos ya no tengan las mismas fuerzas para llevarme a las ramadas. Todavía les quedan fuerzas para ver a su hermoso Pailahueque vestirse de gala para celebrar el cumpleaños de chile con un buen vaso de chicha y una rica empanada y decir: ¡VIVA CHILE ¡

Fin


LAS FIESTAS PATRIAS. NOEMY SÁEZ RIVAS. 2° LUGAR CATEGORÍA INFANTIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015

Hace mucho tiempo, en mi pueblito que se llama Pailahueque, el dieciocho de septiembre se celebra las fiestas patrias. Todos vienen a celebrar porque son muy divertidas, porque hay juegos como: el palo encebado, el trompo, rayuela carreras en saco, silla musical, carreras de caballos, carreras de galgos y otros. Entonces llegó el día en que tocaba cambiar de Alcalde, a él no le gustaban las celebraciones y mucho menos las Fiestas Patrias, pero él no contaba con que la gente no se lo permitiría; y se organizaron, hicieron manifestaciones todos los días sin cansarse de ello, hasta que no tuvo más remedio que aceptar lo que la gente le pedía. Finalmente se celebraron las Fiestas Patrias como antiguamente se hacía, con ramadas, bailes nacionales, la cueca, y todos fueron felices por siempre en Pailahueque, mi pueblo querido…

Fin


FONDA LA LACRE

ANTONIA MEIER SANDOVAL 3° LUGAR CATEGORÍA INFANTIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015

En un pueblito muy pequeño y lejano, vive Josefa, quien junto a sus padres y hermana, han armado una fonda para este 18 y le ha puesto “La lacre “ El nombre se lo han puesto porque el bisabuelo de Josefa tenía un almacén con ese nombre .Este almacén era el más importante del pueblito y era el único negocio al que le llegaban provisiones por grandes cantidades. Los bisabuelos de Josefa llegaron de Suiza hacen muchos años atrás y encontraron en este pueblo la felicidad de tener 3 hijos de los cuales Josefa es la tercera generación. Sin embargo, después de varios años, el almacén más próspero, se quedó sin abrir sus puertas debido a que su dueña se fuera de este mundo .El dueño , al quedar solo con sus hijos , no podía hacerse cargo del negocio y de ellos, cerrándolo para siempre. Después de 40 años, los padres de Josefa han decidido poner una fonda con ese nombre, que será una forma de agradecer a los antepasados que dieron vida y alegría a este pueblito: mucha gente aún recuerda con nostalgia lo próspero y visitado que era. Este nombre no sólo hace recordar a las personas dueñas de la Lacre, sino también, esa época en que el tren aún tenía su estación en el pueblo, en el cual viajaba mucha gente, entre otros los profesores que venían a hacer clases a la única escuelita de este pueblo. El año pasado fue la primera vez que se armó la fonda La Lacre y fue en ese momento en que Josefa cerró los ojos y pudo sentir la presencia de sus bisabuelos, incluso pudo oír sus risas como si estuvieran ahí presentes. Este año, Josefa nuevamente espera sentir la presencia de sus bisabuelos, sentir que ellos están orgullosos de haber pensado en ese nombre para la fonda, sentir que ellos están felices de recordarlos siempre.

Fin


EL VOLANTIN AZUL

ENIGER CID GONZÁLEZ MENCIÓN HONROSA CATEGORÍA INFANTIL Fundación Educacional San Francisco de Asís Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna Septiembre 2015

Amaneció y vi un hermoso volantín azul, lo fui a buscar, no tenía dueño, así que me lo llevé, al tomarlo vi unos de los mejores 18 que he vivido… era como que el volantín me trajera uno de los mejores recuerdos, y lo lancé al cielo para que otros niños lo encontraran y también recuerden esos hermosos recuerdos del 18.

Fin


SI VAS A BEBER NO CONDUZCAS

FERNANDA ORELLANA VIDAL MENCIÓN HONROSA ESPECIAL CATEGORÍA INFANTIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015

Había una vez un tío que quería ir a las ramadas a bailar y celebrar, pero él fue en su vehículo y bailó toda la noche y se emborrachó. Cuando se da cuenta, ya era de día. Su señora estaba muy preocupada por él y porque no había vuelto. Lo fue a mirar a las ramadas y él estaba sentado esperando a que se le pasara la borrachera, para poder irse a casa. Su señora le dijo: ¿por qué no te fuiste para la casa? Él le dijo: cuando bebo no conduzco. Ella estaba orgullosa de tener un hombre tan responsable y respetuoso de las señales del tránsito y de las personas, y se fueron para su casa. Comieron un rico asado en familia y decidieron hacerlo así siempre.

Fin


MI BANDA QUERIDA 1° LUGAR CATEGORÍA JUVENIL LISARDO AGUILERA R. Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015 Un viernes 18 de septiembre, cuando comenzaban los desfiles, juegos, etc., llegaron dos bandas: una se llamaba Salvador Allende, y la otra San Leonardo. Cuando comenzó el desfile, empezó a tocar la de San Leonardo. Tocaba el mismo toque que la salvador Allende; pero toda banda tiene su secretito; así que la banda del Salvador Allende hizo un toque para las autoridades, sorprendiendo a todo el mundo, y sobre todo a los de la otra banda. Lamentablemente, luego del desfile empezaron a discutir los instructores y luego los alumnos; pero habían carabineros y pararon la discusión, y las dos bandas tomaron su lugar de nuevo y se fueron a sus colegios. Sin darse cuenta, poco a poco se fueron mejorando las relaciones; los instructores por lo menos ya se hablaban un poco, y luego los alumnos se hicieron amigos. Ya conversaban y había unos alumnos que se habían enamorado de las niñas del San Leonardo. Gracias a Dios todos entendieron que las dos eran las mejores bandas del pueblo, y que no era necesario competir. Luego del desfile, llegaron los juegos: como el chancho enjabonado, el palo encebado, el salto del ganso; y las dos escuelas siempre iban y se juntaban, era un momento de compartir y pasarlo bien. Ese día Lisardo y José Luis se encontraron con unas niñas del San Leonardo y se enamoraron; sin darse cuenta ya pololeaban y salían a todos los juegos del 18 juntos. Pero un día, la polola de José Luis lo pilló con otra niña y se pelearon. José Luis desde ese día ya no era el mismo, ya no quería salir a los juegos; ya casi ni hablaba, estaba muy decaído y arrepentido por lo que había hecho. Antes de finalizar el 18, y producto de las ramadas y de lo mucho que le gustaba a todo el mundo bailar cueca; la polola de José Luis lo perdonó, y José Luis volvió a ser igual que antes. Nunca más la volvió a engañar y finalmente comprendió que el amor debe incluir respeto. Finalmente las Fiestas Patria terminaron y en el pueblo todo vuelve a la normalidad.

Fin


PEDRO Y SU CABALLO MÍTICO

YOVANNY GUTIÉRREZ MIERES 2° LUGAR CATEGORÍA JUVENIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015

Había una vez en un pueblo muy lejano y un poco desierto un niño llamado Pedro. Pedro tenía 13 años y añoraba poder participar en los concursos de caballos. Todos los años vio el concurso de caballos con ansias de poder participar. El problema era que su familia era muy pobre para comprarle un caballo y poder alimentarlo. Un día se armó de valor y pidió a su padre un caballo. El padre, al oír esto, dijo: - hijo, sabes que te amamos, pero no podemos comprar un caballo, o poder alimentarlo, lo siento mucho - .Pedro, al oírlo, salió corriendo desconsolado. Le susurró la luna, y pidió con todas sus fuerzas un caballo. La luna, al verlo, se apiadó de él y le concedió su mayor deseo. A la mañana siguiente Pedro despertó y vió un caballo a su lado y le preguntó: - ¿quién eres y por qué estás aquí?- : el caballo le dijo: estoy aquí para ti. Al oírlo Pedro se desmayó, y cuando despertó, el caballo le explicó todo lo que había pasado. Pedro le dijo que si era mágico, que lo probara. El caballo le mostró su único poder: dar vida a plantas y animales. Pedro lo llamó Roky, y desde entonces se hicieron los mejores amigos. Pedro le mostró Roky a su mejor amigo, Juan, quien al verlo y escucharlo quedó impresionado. Después les mostró el caballo a sus padres quienes llevaron el caballo a las autoridades. Después el alcalde consideró el caballo como un milagro viviente, y le pidió que le diera vida al pueblo; que estaba casi por completo desierto. Roky le dio vida al pueblo volviéndolo colorido. Pedro se había olvidado por completo del concurso; pero no le importó porque descubrió que era más importante valorar lo que tenía. Pedro lo pasó bien en el 18 de septiembre. Fue a las ramadas donde jugó con Roky todo el día, y a la noche hicieron un asado en honor y agradecimiento al caballo: por primera vez Pedro montó a Roky, y descubrió que nunca habría podido pedir un caballo mejor, era su mejor amigo, y vivieron felices para siempre.

Fin


UNA FIESTA DIFERENTE GABRIEL SOBARZO CALABRANO 3° LUGAR CATEGORÍA JUVENIL Escuela G – 122. San Ramón Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015 Había una vez un niño que quería celebrar el 18 de septiembre, por lo que su abuelo lo invitó a elevar volantines al cerro que está cerca de su casa. Había poco viento, por lo que elevar el volantín se hacía muy difícil. En eso estaban cuando al niño se le ocurrió construir una ramada en su casa. Intentó convencer a su abuelo para que lo autorizara y ayudarla a construirla. El abuelo entusiasmado, por hacer feliz a su nieto, se comprometió con la tarea. Partió junto a su nieto a buscar la carreta para ir a buscar las ramas que darían forma a la ramada. Iban pasando el puente de la comunidad, cuando se dieron cuenta que la rueda se había reventado. Luego de mucho trabajo por reparar la carreta, pudieron seguir su camino y recolectar las ramas que tanto necesitaban. Contento el niño llegó a casa y se dispuso, junto con su abuelo, a construir su ramada. En ella recibiría a una persona que quería mucho y que hacía tiempo que no veía. Al día siguiente, abuelo y niño se levantaron muy de madrugada e iniciaron sus labores. Fue un día de trabajo que valió la pena. Cuando se disponían volver a casa, el niño divisó una silueta muy a lo lejos. Traía un bolso en su mano, caminaba lento, seguro por el cansancio, y el viento sacudía sus ropas. Pasaban los segundos y no lograba distinguir quien era; hacía enormes esfuerzos por hacer memoria e intentar dar un nombre a quien venía a su ramada. Al cabo de unos minutos, pudo distinguir esa silueta: era su madre, que venía de la capital a pasar unos días con él. No se vio niño más feliz en el mundo que quien estaba en ese lugar. Daba brincos de alegría, saltaba, gritaba .Deseaba con todas sus ganas abrazar a quien por meses no veía, y celebrar ese 18 de septiembre en la ramada que él había ayudado a construir. Fueron días hermosos, de los más lindos que el niño recuerde. Pasar un 18 junto a las personas que quieres, es quizá lo más importante; más que comprar muchas cosas para comer.

Fin


UNA BÚSQUEDA COMESTIBLE

JAVIERA ORELLANA VIDAL MENCIÓN HONROSA CATEGORÍA JUVENIL Escuela Salvador Allende G. Concurso de Cuentos “el 18 en mi Comuna” Septiembre 2015 Había una vez en un pueblo llamado Pailahueque, una niña llamada Javiera. Ella tenía el pelo castaño, ojos verdes, y le gustaban mucho las celebraciones. Un día se dio cuenta que dentro de unos cuatro días se celebraría el 18 de septiembre; que era una de sus celebraciones favoritas, y empezó a prepararlo todo. Primero fue al negocio de doña Clementina a comprar los adornos, luego fue a comprar al negocio de don Sergio salchichas para los anticuchos, y le pidió a su mamá que si ella podía ir a comprar carne para hacer un asado, y claro, no podía faltar la bebida y una ensalada para comer sano. Después de tener toda la comida lista, empezó a buscar música, la más alegre que pudo, para animar un poco la fiesta. También se le ocurrió que podía invitar a los vecinos para que no estuviera tan sola la celebración. Ya había dejado todo listo, y sólo era cuestión de tiempo para que llegara la tan esperada fiesta y se fue a dormir. Dejó la puerta abierta, y apenas todos estaban durmiendo, su gato se metió a la cocina y se comió las salchichas, la carne y rompió los adornos.

Primero fue al negocio de doña Clementina a comprar los adornos, luego fue a comprar al negocio de don Sergio salchichas para los anticuchos, y le pidió a su mamá que si ella podía ir a comprar carne para hacer un asado, y claro, no podía faltar la bebida y una ensalada para comer sano. Después de tener toda la comida lista, empezó a buscar música, la más alegre que pudo, para animar un poco la fiesta. También se le ocurrió que podía invitar a los vecinos para que no estuviera tan sola la celebración. Ya había dejado todo listo, y sólo era cuestión de tiempo para que llegara la tan esperada fiesta y se fue a dormir. Dejó la puerta abierta, y apenas todos estaban durmiendo, su gato se metió a la cocina y se comió las salchichas, la carne y rompió los adornos. Cuando Javiera se despertó, fue a buscar al gato porque no lo había visto en toda la noche. Apenas entró a la cocina se dio cuenta de que todo estaba arruinado por completo, y que ya no podía hacer nada. Pero en ese mismo momento se le ocurrió que tal vez podría comprarlo todo de


nuevo. Fue a decirle a su mamá lo que había ocurrido. En vez de preocuparse fue a buscar al gato; lo echó afuera sin antes retarlo bien por lo que había hecho; no lo dejaría entrar y se quedaría en el patio trasero una semana. Inmediatamente fueron a comprar las salchichas, pero sólo quedaba un paquete, y eso significa que cuando sólo queda una cosa para comprar es el famoso concurso de preguntas de doña Clementina. El que gana se lleva un artículo totalmente gratis. En esta ocasión Jéssica, la peor enemiga de Javiera, quería ese paquete de salchichas, y Javiera no iba a renunciar sin luchar. Ya estaban las dos listas para las preguntas. ¡COMIENZA EL JUEGO! Primera pregunta: ¿De dónde desciende el mono? Javiera contestó que el mono desciende del árbol. Doña Clementina le dijo que esa respuesta es CORRECTA; y que era el turno de Jéssica. La pregunta fue: ¿Cuál es la capital de Perú? Jéssica respondió Lima; doña Clementina dijo CORRECTO; siguiente pregunta, ¿Cuánto es 5x5? 25 dijo Javiera, CORRECTO. Siguiente pregunta, ¿Cuánto años cumple Chile este año? Jéssica no pudo responder por no haber prestado atención en la clase de Historia del señor Marechal y se acabó el concurso; lo que significa que Javiera gana. De inmediato fue a comprar la carne para el asado. Por el camino se topó con unos amigos y su amiga Belén. Los invitó a su casa para el asado, el que no se haría si ella no conseguía la carne. Fue corriendo donde su mamá para que fuera a comprar la carne. Ya llegando al supermercado se dio cuenta de que estaba repleto y que tendría que sacar esa actitud de mamá en esos días en los que está con una actitud terrible. Tuvieron que empujar, dar codazos, y al fin pudieron llegar al mostrador de carne (suele pasar que en las fiestas todos compran a última hora), para poder comprarla, y le dijo a la vendedora lo que quería comprar, pasaron por la caja y se fueron. Llegando a su casa quiso comprar adornos, pero ya no habían; así que tuvo que hacerlos; por suerte para ella, el otro día en clases les enseñaron cómo hacerlos, así que compró papel crepé, pegamento y empezó a trabajar. Terminó justo a tiempo para cuando llegaron sus amigos. Se hicieron los anticuchos, también el asado, y cuando ya no se podía poner mejor, comenzó la música, y a darle no más, ¡a bailar! Y así nuestra amiga Javiera pudo tener unas de sus mejores “Fiestas Patrias” con sus amigos y sus vecinos. De vuelta a clases todos comentaron la increíble fiesta que Javiera había hecho y lo estuvieron comentando todo el día. Cuando llegó a su casa, le dijo el increíble día que había tenido en la escuela, y el resto del año también celebró todas fiestas que quedaban, pero ninguna tan singular como esa.

Fin


Teléfono: 555-555-5555 BIBLIOTECA PÚBLICA MUNICIPAL N° 275 CALLE ONGOLMO 279 FONO 045-922660 / 045 - 922456 WEB : www.biblioredes.cl/ercilla E-mail : b275bc1@abretumundo.cl biblioteca.ercilla@gmail.com

AGRUPACIÓN ESCRITORES COMUNA DE ERCILLA E-mail : escritores.ercilla@gmail.com Web : http://escritoresercilla.webnode.es/


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