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GERMÁN MOLANO BAQUERO Presidente ANGÉLICA MARTÍNEZ CABRERA Vicepresidenta HÉCTOR GARZÓN DÍAZ Secretario General NELSON ROMERO ROMERO Tesorero LUIS EDUARDO GARCÍA Vocal MARTHA ALVARADO ÁLZATE Vocal LUIS FERNANDO ACEVEDO PEÑALOSA Vocal GRACIA PATRICIA CALDERÓN LÓPEZ Vocal MAURICIO ORTÍZ GALINDO Vocal GLORIA INES RUSSI B. Administración y Publicidad CRISTIAN VARGAS P. Diseño, Diagramación y Fotografía GUSTAVO RUSSI Fotografía JACQUELIN CONTRERAS Redacción
www.caphbogota.com colegiophbogota@gmail.com Marzo 2016
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EDITORIAL
Carta del Presidente.............................................................................P7 Por Germán Molano
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NORMATIVIDAD
Los Administradores de Propiedad Horizontal y la Informaldad...................................................................................P8 Por Germán Molano
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PORTADA
El Parque Metropolitano Simón Bolívar..........................................P10 Por Jacqueline Contreras
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RELATOS
Parque Santander, en Honor a un Prócer Libertador..................P20 Por Jacqueline Contreras
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EDITORIAL
CARTA DEL
PRESIDENTE POR GERMÁN MOLANO BAQUERO
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l año inmediatamente anterior fue muy productivo para la gestión inmobiliaria especializada en la administración de propiedad horizontal. En diferentes foros se expuso por parte del suscrito presidente la necesidad de contrarrestar el efecto negativo de la informalidad en la actividad de quienes actúan como representantes legales de los edificios, conjuntos, centros comerciales y otras tipologías constructivas. Con contundencia dispone la ley que quienes administren inmuebles en este régimen, deben tener idoneidad en el ejercicio; si el Gobierno no se ha preocupado por este asunto, no quiere decir que los administradores puedan ejercer su cargo con absoluto desconocimiento de su labor; por el contrario, su iniciativa y responsabilidad debe conducirles a prestar un servicio con honestidad, seriedad, agilidad y excelentes resultados. Por lo anterior, hacemos un llamado a los copropietarios y en forma especial a quienes han sido elegidos como consejeros de administración para que cuando seleccionen y designen al administrador para su edificio o conjunto, lo hagan con seriedad y mucha responsabilidad, analizando si las personas (naturales o jurídicas) escogidas tienen experiencia en el ramo, se han capacitado sobre los temas especiales y pertenece a alguna agremiación reconocida. Deben rechazar el principio tradicional en las copropiedades “quien menos cobre por sus servicios es el mejor”. No les debe olvidar que quienes designen al administrador, asume su responsabilidad frente a los copropietarios. De tiempo atrás, se ha venido insistiendo sobre la profesionalización de la actividad de quienes se dedican a estos menesteres, y por ello se realizan foros especiales, estudios y otras actividades con el objeto de encontrar eco en los legisladores colombianos para que con su gestión se obtenga la regulación de los perfiles y protocolos para ejercer la administración y representación legal de inmuebles sometidos al régimen especial. Cursa por tal motivo en la Cámara de Representantes y con iniciativa de la Representante Olga Velásquez el proyecto 120 de 2015, unificado con el proyecto 020 de 2015 radicado por el Representante Pedrito Pereira, con contenidos para adicionar y/o modificar temas de la ley 675 de 2001, como la reglamentación de la actividad de los administradores, su idoneidad, formación académica y su agremiación. Deseamos que a estos legisladores les sean aceptas y tramitadas sus propuestas para beneficio de los copropietarios, usuarios y administradores de propiedad horizontal.
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NORMATIVIDAD
LOS ADMINISTRADORES
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DE PROPIEDAD HORIZONTAL Y LA INFORMALIDAD
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Por Germán Molano Baquero
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Presidente CAPH BOGOTA
os antiguos pensaron que los dioses eran los dueños de la tierra, y los sacerdotes sus representantes, por lo tanto ellos eran quienes estaban facultados para venderla o alquilarla. Surgieron entonces los primeros administradores inmobiliarios. Desde sus inicios la labor de administrar inmuebles en Colombia ha sido meramente informal. Para la propiedad horizontal no ha ocurrido lo contrario y tanto el legislador como los tribunales han tenido que acudir a las normas civiles de la comunidad y a la ley de reformas civiles (ley 95 de 1890) para resolver que el manejo de la cosa común estará a cargo del administrador. La gestión de negocios ajenos que realiza el administrador como representante legal, compromete exclusivamente a la persona jurídica de la propiedad horizontal. Obviamente la actividad del administrador genera para él responsabilidades y riesgos para su libertad individual y patrimonio. Expresa la ley que quien se dedique a la administración de edificio o conjuntos debe demostrar idoneidad en los términos señalados por el gobierno nacional; como este no ha decidido nada al respecto, será el congreso nacional quien origine un marco legal para los administradores de propiedad horizontal. Mientras tanto personas sin el más mínimo asomo de cultura sobre el tema manifiesta ser administrador y los copro-
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pietarios le creen. Surge entonces la participación de quienes se manifiestan como los sabios en el régimen especial y aplican la tradicional decisión “quien cobre poco o no cobre es el mejor administrador de propiedad horizontal” y bajo ese supuesto, designan al representante legal del edificio o conjunto. Esa informalidad está arrasando con el excelente ejercicio de los administradores de propiedad horizontal, personas naturales y jurídicas, que durante muchos años se han dedicado a cuidar e incrementar el patrimonio ajeno, que permanentemente acuden en busca de conocimientos sobre el tema y actúan con el rigor y cuidado de un buen padre de familia. Estos profesionales tienen un costo justo frente a su honestidad, responsabilidad y profesionalismo, en el manejo del patrimonio ajeno. El informal, no cumple el básico nivel de cobertura en seguridad social; si ocurre un imprevisto de salud, los copropietarios deben responder por ello. Como administrar edificio o conjuntos no exige títulos ni experiencia, es viable que quien maneje los bienes comunes no tenga conocimientos mínimos del asunto. La informalidad laboral entre quienes asumen la administración de la propiedad horizontal es palpable; como no hay quien los vigile, el informal o los terceros a su cargo pueden convertirse en una carga para los copropietarios.
La gestión de negocios ajenos que realiza el administrador como representante legal, compromete exclusivamente a la persona jurídica de la propiedad horizontal.
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NORMATIVIDAD
Bogotá D.C - Colombia
La carga fiscal no hace parte de los informales, quienes reciben estipendios sin el rigor de lo tributario y laboral. La informalidad crea discriminación de parte de muchos copropietarios frente a quien les administra su patrimonio, mirando a este como “el sin futuro”, “bueno para nada”. Se le considera como persona de poco valor dentro de la sociedad de la propiedad horizontal. Los medios no ayudan a mejorar la imagen de los administradores de propiedad horizontal cuando en forma insistente señalan que todo lo que malo que realizan determinados copropietarios o residentes de un edificio, es culpa del administrador; si es un informal, es peor. Hoy, el Colegio de Administradores de Propiedad Horizontal de Bogotá, se dedica a nuclear a todas las personas naturales o jurídicas que pretenden convertirse en gestores idóneos, de reconocimiento profesional y como verdaderos administradores del patrimonio ajeno y para ello presenta formación no formal para sus asociados y terceros con intención de agremiarse, precisamente para que la comunidad pueda distinguir entre informales y profesionales del ramo. Durante doce años el CAPH BOGOTA ha logrado penetrar con el profesionalismo de sus asociados a un porcentaje muy alto de copropiedades y la contratación se ha obtenido con la certeza de una buena gestión, honestidad, responsabilidad y acompañamiento para que
la gestión se realice a plena satisfacción de los contratantes. El colegio ha superado esa informalidad y al generar confianza en los copropietarios, se ha conseguido que los patrimonios incrementen su valor teniendo como factor importante la seguridad en el manejo de los bienes y gastos comunes, dineros bien manejados, y capacitación permanente. Se han creado colegios de administradores en Barranquilla, Cartagena, Villavicencio, Medellín y Antioquia, Región Tequendama, y pronto asumirán esa posición diferentes administradores de otras ciudades del país, para fortalecer el ejercicio profesional que ya tiene el reconocimiento nacional. Para lograr ese profesionalismo el suscrito ha participado en el impulso al tema a partir del acompañamiento del proyecto que cursa en el Congreso Nacional para obtener ese profesionalismo y la dignidad de la actividad. Esto nos ha de permitir que se formalice el oficio, se obtenga una representación institucional para los administradores, se ajuste la competencia y no se permita la deslealtad, y se beneficie a los destinatarios de los servicios. Para reconocer el profesionalismo de los administradores de propiedad horizontal debemos tener en cuenta su conocimiento, experiencia y honradez. Administradores siempre tengan en cuenta que: “Ninguna copropiedad se merece tu angustia, solo requiere tu atención”.
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UN EXTENSO ENCUENTRO CON LO NATURAL,
.. .. EL PARQUE METROPOLITANO
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SIMÓN..BOLÍVAR .. Por Jacqueline Contreras
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ía tras día, el cielo capitalino reviste de atardeceres al pulmón metropolitano de la ciudad de Bogotá, entre inmensos recorridos por los frondosos árboles y bajo los reflejos incesantes emergentes de la profundidad de los lagos que allí reposan, el Parque Metropolitano Simón Bolívar es quizá uno de los destinos turísticos, recreativos y culturales más importantes de la capital de Colombia. Aquí, la magnificencia del firmamento atrapa la presencia de cientos de personas que a su llegada, olvidan por instantes el caos citadino para disfrutar de los diversos escenarios que ofrece el sector; con cada puesta de sol y tras su marcha, la mística naturaleza palidece para continuar luego con un nuevo amanecer y con este, son abiertas las puertas nuevamente bajo el afable aroma de sus prados. Conmemorando los 200 años del natalicio de aquél recordado libertador, el parque más reconocido de Bogotá llevaría ilustremente su nombre… Así, bajo la Ley 31 de 1979, jurídicamente la esencia histórica y la denominación de Simón Bolívar, serían fijadas eternamente dentro de uno de los espacios más significativos no sólo de la ciudad sino de la nación. Decretada su estructuración, para el 22 de julio de 1983 los capitalinos recibirían la primera parte de uno de los agasajos arquitectónicos y naturales que hasta hoy son atesorados no sólo por estos, sino por todo aquel que emprenda su recorrido; tras ultimar la estructuración de la plaza ceremonial conocida actualmente como Plaza de Eventos y en cuyo interior pueden albergarse hasta 80 mil personas, se dio luego el acondicionamiento del lugar con un sistema de iluminación artificial, concluyendo esta misma etapa con la siembra de alrededor de 3.300 árboles.
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Y así… Dicho parque lleva consigo el matiz de lo genuino, inmerso en una ciudad cambiante que busca regalar una parte de la esencia pura de la naturaleza…
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1968. Bajo la intensión de efectuar una solemne misa campal y en el marco del 39° Congreso Eucarístico Internacional, es construido dentro de los terrenos del actual Parque, un pequeño templete eucarístico… Aquel que para el entonces, sería testigo de uno de los eventos más memorables geográfica e históricamente en Colombia, tras albergar la espiritualidad del máximo representante de la Iglesia Católica: el Papa Pablo VI, quien visitó la ciudad ofreciendo una rebosante eucaristía recordada hasta el presente. En relación con esto último y finalizando el año 1983, dicho templete sería remodelado tras la segunda fase de entrega del Simón Bolívar; simultáneamente, fue dotado también de un puente peatonal que permitiría la comunicación de este con el Museo de los Niños. Con un ocho toneladas de peso y una altura de 2,2 metros, otra de las estructuras instaladas y fielmente conservadas dentro de este mismo periodo de tiempo dentro del Parque, corresponde al busto de Simón Bolívar; el cual fue donado por el Gobierno Venezolano de aquel entonces y que desde dicho instante, reposa firmemente bajo el cielo que le cubre, mientras su particular mirada atrae la de cada viandante. Entre tanto y posterior a la visita de Pablo VI, esta no sería la única suntuosa liturgia que acontecería dentro del Metropolitano ya que en 1986, otra santa visita colmaría el Simón Bolívar con una multitudinaria audiencia, aquella que encontraría en las palabras y oraciones del Papa Juan Pablo II, un aliento de esperanza; tras su tenue y amable carisma, el paso por la nación de aquel representante de la fe cristiana, reuniría nuevamente una ferviente aglomeración de creyentes congregados dentro de sus instalaciones y que marcaría así, otro imponente advenimiento antes de su inauguración oficial el 15 de diciembre de 1991.
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Dada la gran acogida del Parque tanto por colombianos como por extranjeros; la administración Distrital de 1995 emprende un ambicioso proyecto de readecuación y estructuración para este símbolo cultural de la ciudad
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14 Dada la gran acogida del Parque tanto por colombianos como por extranjeros; la administración Distrital de 1995 emprende un ambicioso proyecto de readecuación y estructuración para este símbolo cultural de la ciudad; como parte de una iniciativa que buscaba aumentar el potencial turístico del mismo, fue realizada la recuperación del lago que allí reposa, luego del proceso de limpieza efectuado a las 10 hectáreas que le conforman, este fue revestido con una original dotación de botes de pedal y en remo que atraerían nuevamente a los visitantes, a través de uno de los ejercicios deportivos más relajantes y que para aquel entonces comprenderían una novedosa actividad, el paseo en bote. Junto a ello, el aspecto del extenso atractivo natural y cultural de Bogotá se transformaría gracias a su acondicionamiento y que incluiría entre otros, la delimitación de todo el escenario con 4 km lineales de malla; así mismo, la instalación de tres nuevos puntos de acceso al público, junto con la construcción de nuevos senderos peatonales cuya medida abarcaba entre cinco a 10 metros de ancho; conjuntamente, fueron instalados: un parque infantil, seis módulos de cafeterías y baterías para baños y finalmente una zona de parqueadero. Concluyendo entonces; otra de las importantes instauraciones al Simón Bolívar comprendió la realizada para la Plaza de Eventos, cuya extensión abarca 37 mil metros cuadrados y en la cual fue desarrollado un cerramiento desmontable para conciertos y eventos; para ello, también fue adoquinado el camino peatonal junto con el alistamiento del ciclo paseo interno, el cual incluye una longitud de 3650 metros, permitiendo un agradable y cómodo recorrido por todo el lugar. Finalmente y como parte del mismo proceso; fueron contratados los servicios de seguridad privada, mientras se generó un refuerzo de la estructura lumínica interna y externa del sector; por último, fueron adelantados los diseños para la cicloruta y los andenes externos del mismo, con el fin de garantizar completa seguridad y tranquilidad al visitante.
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Enalteciendo toda su magnificencia, el Parque Metropolitano Simón Bolívar no sólo cuenta con prolongados senderos y una frondosa vista; ya que también hacen parte de este, el Parque Los Novios (o parque El Lago), el Complejo Acuático, el Centro de Alto Rendimiento, la Cancha Popular de Golf, la Plaza de los Artesanos, el Salitre PRD (Recreodeportivo), el Museo de los Niños, la Biblioteca Virgilio Barco, la Unidad Deportiva El Salitre, el parque Salitre Mágico, el parque acuático Cici Aqua Park y el Jardín Botánico; todo un vasto complejo que lleva consigo una inimaginable diversidad de escenarios propicios para un sinfín de actividades, estas que permiten la unión y el compartir a nivel personal, familiar, grupal y empresarial. Y es así… Que bajo la intensión de enaltecer la memoria del prócer libertador y tras su fundación, el Parque ha sido escenario de múltiples eventos de gran envergadura; desde el año 1996 y hasta la actualidad, este se convirtió en la sede principal de algunos de los eventos más importantes a nivel cultural y musical no sólo del país sino en Latinoamérica, tras el desarrollo de masivos festivales como Rock al Parque, Salsa al Parque, Jazz al Parque, Hip Hop al Parque y el Festival de Verano; además, existen otro tipo de eventos a nivel astronómico, deportivo, educativo y militar (entre otros), que son desarrollados anualmente dentro de las instalaciones del mismo, ofreciendo carta abierta a la gran oferta cultural brindada por la ciudad y acogida por todos y cada uno de sus residentes y visitantes.
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PORTADA 910.000 metros de zonas verdes han convertido al Simón Bolívar en un referente ecológico de preservación; así la biodiversidad ecológica del pulmón de la ciudad, envuelve el agitado panorama capitalino, abstrayendo los más apacibles pensamientos… Ya que no hace falta describir su esencia, si tan sólo el alma se sacia de su verde inagotable, el Parque Metropolitano lleva consigo el matiz de lo genuino, inmerso en el desarrollo de una ciudad cambiante que busca ofrendar un trozo del candor de la naturaleza, aquella que se entremezcla con la existencia del ser para comprender que todos los espacios habitables pueden ser parte de un mismo todo, como muestra de una urbanidad que no puede dejar de lado el equilibrio que sólo lo elemental puede llevar consigo. Como una de las joyas arquitectónicas de la ciudad, aquel sector poco conservado y que progresivamente ahora se ha convertido en uno de los ejes recreo-deportivos y culturales de libre entrada más significativos de la capital, hoy por hoy comprende un escape a la cotidiana realidad en donde a dar el alba, la ciudad recibe un nuevo día y con este… La magia de un encuentro con lo natural.
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el Parque Metropolitano lleva consigo el matiz de lo genuino, inmerso en el desarrollo de una ciudad cambiante que busca ofrendar un trozo del candor de la naturaleza
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RELATOS
EL PARQUE SANTANDER,
EN HONOR A UN PRÓCER LIBERTADOR
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Por Jacqueline Contreras
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“Un espacio que guarda consigo… La huella imborrable de la Colonia, la fuerza imparable de la Independencia y la contemporánea vida de la ciudad…”
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ogotá, una de las ciudades latinoamericanas con mayor riqueza arquitectónica y de patrimonio cultural, actualmente se posiciona como uno de los principales destinos turísticos del continente; brindando así a sus transeúntes, el encanto de sus calles junto con la esencia de la historia fundida entre sus edificaciones, estas que datan de un sinnúmero de acontecimientos, aquellos que marcaron su fundación, su edificación, su transformación y actualmente su reestructuración. Y es así; bajo incansables recorridos por senderos, avenidas, plazas, iglesias y parques de la ciudad, que se evocan también los matices de aquellos indelebles momentos en tiempos de la colonia; época para la cual un particular espacio público conocido como la Plaza de las Yerbas, es ahora reconocido como el Parque Santander. Ubicado estratégicamente dentro del sector fundacional de la capital, inicialmente la Plaza de las Yerbas comprendía el mercado regional en donde por aquel entonces, eran comercializadas algunas carnes, dulces, frutas, verduras y especias entre otros especímenes propios del departamento; además, algunas de las primeras y más representativas edificaciones del sector fueron construidas alrededor de la misma; es así como el fundador Gonzalo Jiménez de Quesada, decide dar inicio a la edificación de su residencia; luego, entre los años 1542 y 1544 se erige la Capilla del Humilladero. www.caphbogota.com
RELATOS Dentro de aquellos primeros años de conquista y sublimando su reconocimiento histórico, la Plaza de las Yerbas cambia su denominación a la Plazuela de San Francisco, dada la llegada al sector en 1557, de una de las más importantes órdenes religiosas del momento, los Franciscanos. Sin embargo, aquel tranquilo aspecto fue transformado tras los acontecimientos independentistas; como parte del “escarnio público”, en la Plazuela fueron llevados a cabo los fusilamientos más implacables dentro de la historia colombiana, hechos en donde la muerte de algunos de los próceres de los sucesos que buscaban la independencia, son ahora ilustres figuras recordadas con honor; Policarpa Salavarrieta, José Manuel de Arrubla, Francisco José de Caldas y Francisco Morales entre otros, marcaron con su fallecimiento la historia de aquel sector que luego de obtener la liberación del yugo español sería renombrado como el Parque Santander. Dada la independencia, Francisco de Paula Santander consigue instalarse dentro de una propiedad ubicada en el ala norte de la Plaza; luego de las condiciones que anteceden y bajo artificio del escultor italiano Pietro Costa, es levantado un monumento en honor a su nombre para el año de 1877; así, la plaza dejaría de serlo, para convertirse en un parque; hecho por el cual surge el actual nombre de Parque Santander y cuya acción fue dictaminada por los delegados de la llamada Nueva Granada, correspondientes al Senado y la Cámara de Representantes.
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El paso de los años, trae consigo cambios memorables dentro del territorio; a su vez, tanto las condiciones socioeconómicas como las situaciones políticas, influyen de manera trascendental dentro de los cambios en infraestructura de cualquier ciudad; por ello, el Parque Santander no fue una excepción a estas modificaciones. Debido a la constante transformación del sector, los alrededores del Parque adquirieron importantes edificaciones que llevaron a la demolición la Capilla del Humilladero, la cual es recordada históricamente tras la celebración de la primera ceremonia religiosa de la nación, el 6 de agosto de 1544. En efecto y para 1923, el Parque Santander afronta nuevas modificaciones como parte del proyecto del Banco Central Hipotecario, a través de la firma Esguerra, Sáenz Urdaneta, Samper y Cia., proceso que aún se conserva bajo la misma firma. Ubicado sobre dos de las más importantes avenidas de Bogotá, que para este caso corresponden a la Carrera 7 y la Avenida Jiménez; adicionalmente, el Parque Santander alberga en su alrededor algunos de los más prestigiosos edificios entre los cuales se encuentran: hacia el norte, el edificio de Avianca; hacia el sur, el Banco de la República; por el oriente se encuentra el Museo del Oro y finalmente hacia el occidente, las iglesias de San Francisco, Veracruz y la de La Orden Tercera. Concluyendo con el enriquecido recorrido por las calles de la ciudad y luego de encontrarse dentro del Parque Santander, este puede no ser el final, mas sí el inicio del goce de todo su alrededor; actualmente, el escenario se viste de multitudes de transeúntes que a diario recorren los senderos entre algunos árboles nativos y una notable fuente de tres chorros; desconociendo quizá, que en algún momento de la historia nacional, aquella Plaza fue testigo de los hechos más relevantes de la misma y que ahora, se entremezclan entre las historias de quienes como guías desdibujan cada una de sus líneas al pasar del tiempo… Recordando a nativos y turistas que el Parque Santander guarda consigo, la huella imborrable de la Colonia, la fuerza imparable de la Independencia y la agitada vida de una ciudad que pareciera nunca descansar… www.caphbogota.com
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Vista de la Avenida JimĂŠnez hacia el occidente
Hotel Granada - Parque Santander
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