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El Legendario Trío Matamoros

Por. Fabio Casas Arango

Uno de los grupos musicales cubanos más inuyentes y populares fue conformado por Miguel Matamoros, Siro Rodríguez y Rafael Cueto, el 8 de Mayo de 1925.

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Los orígenes del memorable Trío Matamoros se remontan a Santiago de Cuba, Provincia de Oriente, de donde son oriundos sus integrantes. El alma, el corazón y el nervio del afamado trío lo fue, sin lugar a dudas el gran Miguel Matamoros, nacido en la población de Santiago, el 8 de Mayo de 1894, en la calle San Germán, entre Gallo y Matadero en el barrio de los Hoyos. Su padre fue un hombre de mar de nombre Marcelino Verdecia y su madre, una mujer pobre dedicada a ocios domésticos llamada Ana Matamoros, de quien Miguel toma el apellido.

Desde los 7 años mostró su inclinación por la música; le interpretaba a los trabajadores tabacaleros danzones; a los 8 años, se dedicó al estudio de la guitarra. Utilizó la de su hermano Ignacio, que se la habían regalado sus padres; las primeras lecciones con este instrumento se las transmitió Ramón Navarro Pérez, quien le enseñó anación y las notas del pentagrama.

Su Primer Dúo

Aun siendo niño, hizo unos bongós utilizando los envases de las aceitunas, a los que les puso un par de tapitas de lona a cambio del cuero de chivo, bongós artesanales que fueron tocados por el niño Juan Corona, quien fuera su primer c o m p a ñ e r o a r t í s t i c o . M a t a m o r o s f u e monaguillo de la iglesia del barrio; mostraba su picardía al cura que lanzaba frases en latín, contestándole “apagá y vámonos”

Posteriormente formó un dúo con su amigo de infancia, Trino Martinelli, quien hacía la segunda voz y tocaba la guitarra. A los 15 años de edad ejecutaba bastante bien la guitarra, a tal punto que los más populares cantantes y guitarristas de Santiago de Cuba, reclamaban su acompañamiento para amenizar las serenatas que se daban en el pueblo. En su trasegar formó otro dueto y se hizo acompañar del compositor y guitarrista Salvador Adams.

Primeros Empleos

Antes de consagrarse como artista, Miguel Matamoros desempeñó diversos ocios: fue técnico reparador de líneas telegrácas y telefónicas; trabajó como minero en la extracción de cobre en la mina conocida como Pozo Harry; se dedicó a las labores agrícolas en la nca El Naranjal, propiedad de Facundo Bacardí y trabajó en la fábrica de rones

Bacardí. En 1912 hizo su primera presentación pública en el Teatro Heredia de Santiago de Cuba, a los 18 años de edad. En 1917, luego de estudiar mecánica automotriz, obtuvo el título de chofer expedido por el ayuntamiento de su ciudad natal y prestó sus servicios como conductor al señor Bartolomé Rodríguez. Durante esta etapa trabajó en una fábrica de mosaicos y en un aserradero. Fue, además, pintor de brocha gorda. A la par que desempeñaba estos ocios, se iba adentrando en el perfeccionamiento del aprendizaje de la guitarra y en el cultivo de su voz.

Visita a La Habana y El Trío Oriental

En el año de 1922 visitó por primera vez La Habana, en un viaje patrocinado por un coterráneo, quien lo hizo actuar en una serenata que brindó en un sitio exclusivo Fue esta la p r i m e r a a c t u a c i ó n d e Matamoros en la capital cubana. En 1924 llegó por segunda vez a La Habana, pero en esta ocasión lo hizo como compositor y director (voz prima y guitarra prima) del Trío Oriental, fundado en unión de Miguel Bisbé (voz segunda y claves) y Alfonso del Río (guitarra acompañante). A este segundo viaje a La Habana, Alfonso del Río no pudo acompañar al Trío Oriental y en su lugar actuó Rafael Cueto. El Trío se presentó en el Teatro Albizu y en el Teatro Actualidades. En 1926 Miguel regresó de nuevo a La Habana, para gestionar grabaciones que no cristalizaron en esos momentos.

Surge el Trío Matamoros

Fue el cantante y guitarrista Rafael Cueto quien, el 8 de Mayo de 1925, llevó a casa de Miguel Matamoros en Santiago de Cuba, al también cantante Siro Rodríguez, para ambientar el cumpleaños número 31 de Miguel. Es allí donde por primera vez unen sus guitarras y sus voces, Siro, Cueto y Miguel, constituyendo el inmortal Trío Matamoros. En 1927 Matamoros labora como conductor particular de un conocido político y continúa actuando con el trío.

Siro Rodríguez

El sonriente Siro Rodríguez nació en Santiago de Cuba, el 9 de Diciembre de 1899, en la casa señalada con el número 3 de la calle Marte entre Garzón y General Escario. Estudió mecánica y herrería Se trasladó a la nca llamada El Cilindro, en el barrio Sevilla del municipio El Caney, en donde atendió trabajos agrícolas en reemplazo de su tío, que tuvo necesidad de ausentarse al ser intervenido quirúrgicamente. Después regresó a Santiago de Cuba, donde continúo y nalizó el aprendizaje de la herrería. En 1918 se ausentó de su tierra natal y se trasladó a Palma Soriano, donde se desempeñó como segundo herrero en el taller de locomotoras.

Desde niño sintió vocación por el canto, entonaba muy bien las canciones en boga. Su primera actuación artística formal se produjo en el Teatro Oriente de Santiago de Cuba, en función benéca en favor del destacado trovador Rodolfo Ruvalcaba. Fue presentado en esta ocasión ante el auditorio por Sindo Garay, quien fue su guitarra acompañante. Cantó a dúo con Alberto Aroche, la criolla dominicana Olas que al norte Arrastran. Siro tenía 14 años y corría el año de 1913. Se unió a distintos trovadores de Santiago que cultivaban la voz prima Siro Rodríguez decidió actuar como solista y se dedicó al cultivo de la Romanza con acompañamiento de piano o de guitarra.

En esta etapa su guitarrista acompañante fue Rafael Cueto. Siro conocía a Miguel Matamoros por referencias y personalmente lo conoció el 8 de Mayo de 1925 día del cumpleaños de Miguel Siro Rodríguez fue un destacado compositor; entre otros sus boleros se encuentran: Un solo corazón (1927), Tu boca (1934), Martica ( 1934), En tu alma mujer (1929), Dudas (1936), Cien Veces (1952), Las Guarachas: La China en la Rumba (1922), Litigio (1934), El sueño de un indigente (1938), El puerquito en la yuca (1951), Las Rumbas: Llegó la rumba (1935), Nadie se salva de la rumba (1936). Guajiras: Guajira ven a gozar (1938). Falleció en la población de regla el 29 de Marzo de 1981.

Rafael Cueto

Vio la luz por primera vez, el 14 de Marzo de 1900, en la calle de San Agustín N°7, entre las calles de Pozo del Rey y La Enramada, en Santiago de Cuba. Sus primeras letras las aprendió en escuelas de su barrio, las que frecuentaba muy irregularmente, debido a su gran ación al béisbol, que practicaba al ausentarse de las clases. En vista de las reiteradas faltas al colegio, su padre decidió que estudiara un ocio, escogiendo el de sastre, pero de nuevo, la pelota unida a su ación a la guitarra, impidieron que aprendiera el ocio de sastre porque faltaba a menudo al trabajo. Rafael Cueto era miembro de una familia de cinco hijos. Esta circunstancia lo obligó a buscar un trabajo bien remunerado. Laboró en la fábrica de deos La Conanza y de allí pasó a la fábrica de ron Bacardí, donde fue recomendado por el capitán del equipo de béisbol Estrellas de Bacardí y de paso formó parte del mencionado equipo como receptor. Se destacó como un gran pelotero. De allí se fue a trabajar al depósito de la cervecería La Tropical, donde tenía que poner cajas llenas de cerveza en los camiones de reparto. Su padre, al verlo en tareas tan rudas, se dio a la misión de conseguirle otra labor, más acorde con los 16 años de edad de Cueto, y así fue como logró un empleo de mecanógrafo en la Junta Provincial de Oriente, ganando tres pesos diarios. De allí se emplea en la Jefatura de Policía de Santiago de Cuba, donde desempeñó la plaza de policía escribiente. Renunció y empezó a desempeñar cargo similar en la Jefatura local de Sanidad.

A los 7 años inició los estudios musicales; recibió clases de solfeo y teoría de la música. Antes, el niño había empezado a aprender por su cuenta a tocar el tres. Estudió guitarra, tres y cornetín. Como guitarrista, acompañó a casi todos los músicos de Santiago de Cuba, entre ellos a Siro Rodríguez, con quien comenzó a actuar desde muy niño. Siro cantaba y Cueto lo acompañaba en la guitarra. Rafael Cueto conoció de referencia a Miguel Matamoros, pero fue en el año 1924 cuando lo trató personalmente. Su presentación a Matamoros la hizo Bernandino Reboredo, buen amigo de ambos. Matamoros tenía necesidad en a q u e l l o s i n s t a n t e s d e u n g u i t a r r i s t a acompañante, que sustituyera a Alfonso del Río, del Trío Oriental, para realizar un viaje a La Habana. Así fue como Rafael Cueto se vinculó al Trío Oriental, que más tarde se convertiría en el Trío Matamoros. Rafael Cueto, al igual que Siro Rodríguez y Miguel Matamoros, además de intérprete, fue compositor. Entre algunas de sus obra están: Los Carnavales de Oriente, conga (1928); Quince, pregón (1928), Pico y Pala, Guaracha son (1935), Me la llevo, son (1942). Cueto muere en la Habana el 7 de Agoste de 1991.

Las Primeras Grabaciones

Corría el año de 1928 cuando los sueños de Miguel Matamoros de grabar los motivos de su inspiración, se cumplieron. La compañía RCA Víctor, por intermedio del empresario Mr. Terry, contrata al Trío Matamoros para grabar en Cadmen, Nueva Jersey, sus primeros temas así: 28 de Mayo: Promesa, Juramento, Son de la Loma; 29 de Mayo: Olvido, Mujer Celosa, Tito me rompió la máquina, Visiones, El Beso, Luz que no Alumbra, Mata y Beby, Pobre Bohemia, Mi ropa, Mariposita de Primavera, El que siembra su maíz; 31 de Mayo: Santiaguera (Una versión en Vals y otra en Bolero), Regálame el Ticket, Elixir de la Vida, El Voto Y La Mujer, Canción Triste, Porqué pasaron.

Estos 21 temas grabados en el año 1928, todos composiciones de Miguel Matamoros, ubicaron al Trio Matamoros en Cuba y en el mundo h i s p a n o p a r l a n t e , c o m o u n a d e l a s agrupaciones más populares y queridas por todos los públicos. A raíz de sus éxitos, abandonaron sus respectivos empleos y se dedicaron de lleno a la música. Su calidad vocal, melódica y rítmica situó al Trío en el primer lugar de los gustos populares. Se abrieron paso el Son y el Bolero Son en el año de 1928, teniendo como competidores a guras musicales de la talla de Guillermo Portabales, creador de La Guajira de Salón, quien debuta en ese año en la emisora CMHI de Cienfuegos. En 1928, Joseito F e r n á n d e z c o m p o n e s u G u a j i r a s o n Guantanamera y Moisés Simons entrega al público el famoso son pregón El manisero, dedicado a Rita Montaner, quien lo estrena y lo lleva a Paris ese mismo año.

Igualmente, en 1928, se forma la agrupación Charanga, de Belisario López y la conga causa furor y es llevada por Eliseo Grenet a Paris y luego a Nueva York. Los danzones de Antonio María Romeu causaban sensación. Fue el año de 1928 un periodo lleno de ritmos, alegrías y sones para Cuba y a pesar de la constelación de estrellas, el Trío Matamoros brilló con luz propia. Se tiene catalogado el tipo de son del Trío Matamoros como un son trovadoresco, que une a troveros, juglares y soneros, donde la picardía y el gracejo deleitan a propios y extraños. Miguel Matamoros se desempeñaba como primera voz y guitarra prima; Siro Rodríguez actuaba como segunda voz, además tocaba las claves y las maracas y R a f a e l C u e t o l o h a c í a d e g u i t a r r a acompañante. En ocasiones, según se necesitara, Rafael Cueto hacia la segunda voz tocando la segunda guitarra.

Después de estos primeros éxitos, comenzaron las presentaciones del Trío por toda la isla de Cuba y al siguiente año, es decir 1929, regresaron a Camden, (Nueva Jersey) a grabar nuevamente para la RCA Víctor: 26 de Julio: Advertencia, Nada más, Yo no dudo de tu Amor, La Mujer de Antonio, La Bomba Lacrimosa, El Manisero; 29 de Julio: Desle Lírico, Falsaria, Desolación, Ansias, El Huerfanito, L u c i f e r ; 3 0 d e J u l i o : S i c o g e e l t r e n , Demostración, Rosa, Reclamo Místico, Dulce Boca, Que hay en tu Alma, El Paralitico; 31 de Julio: Hojas para baño Las grabaciones realizadas, son todas composiciones de Miguel Matamoros a excepción de El Manisero cuyo autor es Moisés Simmons y Que Hay en tu Alma autoría de Siro Rodríguez.

Miguel inicio la modalidad del punteo vibrante en el instrumento; le arrancaba un sonido fuerte y limpio a la guitarra. Con el Matamoros nacieron los tríos bailables en el continente. Su técnica se “caracteriza por un rayado sumamente expresivo y el tumbao que realiza Cueto en el acompañamiento, consiguiendo de este modo una polirritmia. A esto habría que agregar los pasacalles que creaba Miguel de un estilo peculiar y de un exuberante sabor criollo “al decir de Helio Orovio en su diccionario de La Música Cubana. La clave, el bongó y el tres, unidos a la guitarra, las maracas y el bajo, c o n  g u r a n l a s i n g u l a r polirritmia del son cubano. La maraca aparece como instrumento musical en los bailes, estas y areytos indígenas, proviene de la lengua de los tamanacos y equivale a campana o calabaza hueca llena de cuerpecillos a la cual llaman maraca. El sensacional Trío Matamoros grabó los temas Las Maracas de Cuba y Soy M a r a q u e r o , s o n e s d e i n s p i r a c i ó n d e M i g u e l Matamoros, con una gracia sin par, en homenaje al sonoro instrumento.

Orquesta Matamoros

Para amenizar los guateques y verbenas, Miguel Matamoros ampliaba su grupo, convirtiéndolo en conjunto, orquesta, septeto, cuarteto; aunque siempre conservó la personalidad del trío. Dirigió el Septeto Matamoros, el Conjunto Baconao, el Cuarteto Maisí, la Orquesta Matamoros y el Conjunto Matamoros, con este último estuvo en México con el genial Benny Moré. Entre el personal artístico que integró los grupos señalados, recordamos a Mariano Mercerón, Francisco Repilado, Miguel Poveda, Lorenzo Hierrezuelo, Paquito Portela, Carlos Embale, Pedro Mena, Armando Beltrán, Manuel

Borguellá, Ramón Vueltas, Maximiliano Sánchez, Evelio Rodríguez, Raúl Dihigo, Pedro (Peruchín)Justiz, Rigoberto Díaz.

El Conjunto Matamoros de entonces estaba integrado por ocho músicos: Siro, Cueto y Miguel en las voces, el pianista Ramón Dorca, las trompetas de José Macías y José Quintero, el contrabajo de Cristóbal Mendive y Agustín Gutiérrez en el Bongó. Como Orquesta Matamoros, el grupo grabó en Nueva Jersey el 30 de Julio de 1934 las canciones: A una Ola, (composición de María Grever), Flauta y Saxofón (composición estilo son de Alberto Socarrás) y los sones de Miguel Matamoros: Tu no, Yo sí; El regreso del amor y Conciencia.

El año de 1934, fue de gran actividad para el trío. Además de las múltiples presentaciones, viajaron a N u e v a Y o r k e n v a r i a s ocasiones, y en total ese año grabaron 38 temas, de los cuales 14 fueron compuestos por Miguel Matamoros, a los que sumó la canción Los Sepultureros. El 3 de Agosto g r a b a r o n e l b a m b u c o colombiano de Emilio Murillo, El Trapiche. En 1935 grabaron 32 canciones, entre ellas una como Septeto Matamoros, el 19 de Noviembre. Entre algunas de las 32 piezas están los sones: La Cumbancha, de Agustín Lara; ¿Que Viste? De Los Cuates Castilla; el bolero son Retrato y Un solo Corazón de Siro Rodríguez, y Horas de Pasión de Matamoros. Destacada actuación fue la de Juana María Casas, “La Mariposa”, invitada especial en la agrupación de Miguel y su conjunto Maisí, cantando: Comentario en el Solar, Baila mi Pregón, Veneración, Olvido, Hoy la Rumba, Realidades, Oye ya, Mamá son de la Loma, En el Batey, Canto a la Sombra, Dulce Embeleso, Tu no, Yo sí.

Rompiendo la Rutina, (danzonete compuesto por Aniceto Díaz) y Mi Último Canto (danzonete de Fernando Collazo).

En 1930 grabaron Miguel Matamoros y Siro Rodríguez con la orquesta del maestro Antonio María Romeu, los temas: Quince, Bolichan, Rompiendo La Rutina, Mi Ultimo Canto y Caminando se va Lejos.

En 1936 el Trío grabó muy poco; en 1937 prensaron 15 canciones, todas en Nueva Jersey. De ahí en adelante continuaron grabando casi todos los años, pero no en la cantidad que lo hicieron entre los años 1928 a 1935. El 15 de Abril de 1930, se constituye La Federación de los Sextetos Musicales de la Habana. Participaron una treintena de agrupaciones musicales, entre ellas el Trio Matamoros, La Sonora Matancera, El Septeto Nacional de Ignacio Piñeiro y la Orquesta de Antonio María Romeu.

Producción Discográca y Ritmos

El Trío Matamoros grabó desde el 28 de Mayo de 1928, hasta el 20 de Junio de 1955, un aproximado de 300 canciones. Se han inventariado 308 títulos de canciones diferentes. Si tenemos en cuenta que existen números grabados en más de una ocasión, el total podría aproximarse a 400 piezas musicales. Más o menos la mitad de toda la producción musical es de inspiración de Miguel Matamoros, con 172 composiciones. Le sigue su compañero Siro Rodríguez, con aproximadamente 30 composiciones y Rafael Cueto con 10. Las canciones de autores no cubanos grabadas pertenecen a Emilio Murillo (1), colombiano; María Grever (1) y Agustín Lara (1) mexicanos; Manuel Jiménez (1) y Rafael Hernández (11) boricuas; corresponden a Rafael Hernández: Capullito de Alelí, Ay Simón, Buche y Pluma no má; Corazón no llores, La casita de Margot, La gata de Wenceslao, Lamento Borincano, Mi querer, No te Vayas Mulata, Pin Pon, Tanto y Tanto; de Manuel Jiménez es el bolero son Imposible; de Agustín Lara, La Cumbancha; de Emilio Murillo, El Trapiche y de María Grever, A una Ola.

En la discografía del Matamoros encontramos 99 canciones identicadas como son, 3 como son afro, 1 como son guajira, 7como guajira son, 2 como guaracha son, 1 como vals son, 5 como pregón son, 2 como son montuno, 37 boleros, 63 boleros son, 7 criollas; además encontramos géneros grabados como son bambuco, canción cómica, capricho, conga, corrido, danzonete, guajira, rumba, habanera, pregón, merengue y punto cubano.

Gira por Colombia

En septiembre de 1933, el Trío Matamoros, conformado por Miguel Matamoros, Siro Rodríguez y Rafael Cueto, sale de Cuba en una gira artística que lo llevará a Panamá, Curazao y Venezuela, para terminar en Colombia, donde llegan por Cúcuta a nes de 1933. A lomo de mula, según lo expresa Cueto, hacen el más largo recorrido de su vida musical por un país: Cúcuta, Pamplona, Málaga, Tunja, hasta llegar a Bogotá, en donde inician temporada el 5 de Enero de 1934, en el Teatro Faenza. Siguen hacia el interior de Colombia, presentándose en

Girardot, Ibagué, Armenia, Cali, Tuluá, Palmira, Pereira, Manizales, Buga, Rio sucio, Valparaíso, La Pintada, Medellín, Puerto Berrio, Barrancabermeja, Bucaramanga, Cartagena y Barranquilla. En el puerto toman un barco de regreso a la Habana a nales de Marzo de 1934.

En Medellín, el Trío Matamoros se presenta durante cinco días continuos en el escenario del Circo España, lo hacen por primera vez en la ciudad el jueves 22 de Febrero y se despiden de Medellín el Lunes 26. Visitaron Nuestra Tierra hace 80 años.

Benny Moré y el Conjunto Matamoros

El primer trabajo estable de Benny Moré lo tuvo con el Septeto Cauto de Mozo Borguellá, en la emisora Mil Diez, donde debutó y comenzó así la verdadera carrera artística del gran Benny cuando, en 1945 pasó a integrar el Conjunto Matamoros para cumplir numerosos compromisos con el grupo. La entrada a Matamoros se considera su verdadero debut como cantante profesional.

Por primera vez tuvo un trabajo estable y con ellos realizó sus grabaciones en Cuba el 9 de Noviembre de 1944 para la RCA Víctor: ¿Qué será eso?, La ruina del Bohío, Seré Dichoso, Mexicanita Veracruzana, Buenos Hermanos y La Cazuelita, prensados en discos de 78 R.P.M, en México. Al año siguiente, entre junio y julio, Moré continuó grabando con El Conjunto: Penicilina, Se Va A Morir, Me la Llevo, Ofrenda Criolla, Yo Haciéndome el Muerto…y se desplazaron a la ciudad de México para presentaciones en la radio y en cabarets.