"El juego de las sonrisas" Augusto Godachevich - Libreto 03 (2003-2005)

EL JUEGO DE LAS SONRISAS Augusto Godachevich (Escenas cómicas, 5 cortas y 1 larga) Teatro completo – Libreto

2003 – 2006

1

“Soy Augusto Godachevich, argentino. Nací en Pergamino, provincia de Buenos Aires, en el año 1979. De chico fui un niño introvertido y de pocos amigos. Mí constante pasatiempo era el de crear y dibujar personajes en cuadernos que iba almacenando.

Nunca fui a aprender dibujo (o no lo recuerdo). Al terminar la secundaria viajé a Capital Federal, en donde pasé once años de mi vida estudiando diversas carreras (Diseño Gráfico, Psicología y Dirección Teatral) y tomando diferentes cursos y talleres (Actuación, Guitarra, Composición Musical, Fotografía, etc.) Con el pasar del tiempo fui entrenándome en diferentes artes. Fui componiendo temas musicales y escribiendo las letras de los mismos; fui escribiendo obras de teatro, dirigiéndolas y actuándolas; fui escribiendo cuentos; y fui haciendo otras cosa que en este momento no pienso desarrollar.

(Dibujos, Pinturas, Afiches etc.)

Como cantautor: Grabé los discos “Asco” (2010) y “Nausea” (2013), y presenté los espectáculos “Asco en Vivo 1” y “Asco en Vivo 2”(2010), “Nausea en Vivo”(2013) y “Carne Picada de Diván”(2014).

Como director, y en la mayoría de los casos también actor: Estrené en Capital Federal las obras “Relaciones Clasificadas”(2005),“Relaciones Clasificadas versión extendida”(2006),“Reflexiones Empetroladas”(2007),“Cristal, el Hada del Bosque”(2007); y en mi ciudad natal, Pergamino, estrené las obras “Represiones Recicladas”(2008),“Agonías Transitadas”(2009),“Querequetedequé”(2011),y “Por las Paredes”(2013) [Ésta última dirigida por Ana Julia Vigo].

Como docente, junto a mi esposa Ana Julia Vigo: Dirigimos a nuestro grupo de “Entrenamiento y Formación Actoral” en mis siguientes obras: “Ombligo Universal” (2009),“Patetismo Encarnado”(2010),“Repuestos Biológicos”(2011),y “Cerca”(2013).

Y como dramaturgo: Escribí todas estas obras que aquí les presento en esta extensa colección. Cada libreto especifica que tipo de material contiene: (Escenas cortas, escenas largas, unipersonales, etc.)

Espero que el material les sea de utilidad tanto para el placer de la lectura misma, o para realizar alguna escena u obra.

Me despido agradeciéndole por ser mi lector, y por sobre todo por ser lector de teatro.

Gracias” Augusto Godachevich 2015

2

Este libro digital forma parte de la Colección Teatro Completo de Augusto Godachevich, la cual está conformada por los siguientes libretos: 01: “Mira entre mis Nalgas” (8 escenas cómicas cortas y una larga) (2002) 02: “Revancha Celestial” (9 escenas cortas tragicómicas) (2002–2004) 03: “El juego de las sonrisas” (Escenas cómicas, 5 cortas y 1 larga) (2003-2006) 04: “Relaciones Clasificadas” (Obra cómica compuesta por escenas y canciones) (2005-2006) 05: “Tahuacos” (Obra infantil para 5 actores) (2007) 06: “Reflexiones Empetroladas” (Obra tragicómica compuesta por escenas y canciones) (2007) 07: “Conejo negro” (Obra infantil para 5 actores) (2007) 08: “Equilibrio Marital” (Obra tragicómica en 5 actos para 7 actores) (2007) 09: “Represiones Recicladas” (Obra tragicómica compuesta por diferentes escenas) (2008) 10: “Competencia Tercermundista” (9 escenas unipersonales tragicómicas y extras) (2008) 11: “El sueño de la empanada” (8 escenas tragicómicas) (2009-2011) 12: “Agonías Transitadas” (Obra tragicómica para 2 actores compuesta por diferentes escenas) (2009) 13: “Agradecimientos desencontrados” (9 escenas tragicómicas y una adaptación blasfema) (2009) 14: “Ombligo Universal” (Obra tragicómica compuesta por diferentes escenas) (2009) 15: “Acá” (Obra Unipersonal masculina) (2010) 16: “Patetismo Encarnado” (Obra tragicómica para 2 actores compuesta por diferentes escenas) (2010) 17: “Mierda en los ojos” (Diez escenas tragicómicas) (2011-2012) 18: “Querequetedequé” (Obra Infantil para 2 actores o más) (2011) 19: “Ex (con equis)” (Obra en 6 actos para 6 actores) (2012) 20: “Niño de Cristal” (Obra en 6 actos para 7 actores) (2012) 21: “Por las paredes” (Obra en 1 acto para 2 actores) (2013) 22: “Madres e hijos” (Obra Unipersonal femenina) (2014)

3

El juego de las sonrisas: Escenas cortas: 01 – El juego de las sonrisas 02 - General Puentes 03 – Licenciada en prostitución 04 – La primera palabra 05 – Hot-Line Escenas largas: 06 - Carlos y Carla

4

01 - El juego de las sonrisas Personajes: Gretel Graciela Griselda (Se encuentra Graciela, la madre, leyendo un libro en el living. Se escucha un grito.

Graciela se asusta. Entra corriendo Gretel en camisón. Tiene sangre entre sus piernas y también deslizándose por estas.)

GRETEL – ¡Mamá¡ Me desangro. ¡Ayudame mamá!

GRACIELA - ¿Qué pasó, hija?

GRETEL – No se mamá estábamos...

GRISELDA – (Entrando con la boca ensangrentada)... jugando, estábamos jugando, y de pronto todo rojo, mucho rojo, no lo podíamos parar, yo no la mordí te juro que estábamos...

GRETEL - ...jugando nada más, jugando. Tengo mucho miedo.

GRACIELA – (Observa la situación) Tranquilas, chicas. No pasa nada...

GRETEL – ¿Cómo que no pasa nada, mamá? No ves que tengo todo...

GRISELDA –...rojo, mucho rojo, no lo podía parar. Curala, mamá.

GRACIELA – Chicas, es normal que pase esto. El día se hizo esperar pero al fin llegó.

GRETEL - ¿Qué día, mamá? ¿Me voy a morir? ¿Por qué? ¿Si solo estábamos...

GRISELDA - ... jugando...

GRETEL - ... y jugando...

GRISELDA –... y jugando. Nada más que jugando.

GRETEL - Es muy lindo jugar así, má. Con nuestros cuerpos. Es muy...

GRETEL - ...placenteroso. Es como que una comienza a sonreír. Y de a poco...

GRISLEDA - ...a poco...

GRETEL - ... a poco.

GRISELDA - ...una va sonriendo cada vez más, y entonces… (feliz) ¡Fua! Una sonrisa enorme.

GRETEL – (Feliz) ¡Fua! GRISELDA – Y además es súper-rico...

GRETEL - ...riquísimo...

GRISELDA - ... como tu torta de chocolate...

GRETEL - ...o tu flan con dulce de leche…

GRISELDA - Pero yo no la quería lastimar a Gretel, má. Creéme. Quizá la mordí, pero no muy fuerte. Lo que pasa es que cuando una está ahí...

5

GRETEL - ... jugando...

GRISELDA –... y jugando...

GRETEL –... es difícil parar...

GRACIELA – ¿Cuántas veces les dije que nunca se miren ni se toquen cuando están solas? ¿Cuántas veces les dije que nos se miren desnudas? Se los tengo terminantemente prohibido.

GRETEL – Pero estaba con el camisón, má.

GRISELDA – No estaba desnuda.

GRETEL – Estaba vestida.

GRACIELA – (Tratando de tranquilizarse) Tranquilicensé un momentito. Sientensé.

GRETEL – No, má...

GRISELDA - ...le va a doler mucho...

GRETEL - ... mucho, seguro.

GRACIELA - Sentate, no te va a doler, haceme caso. (Se sientan. Ven que no duele) Escuchame una cosa, Gretel querida. No te estás desangrando. Solamente estas indispuesta.

GRETEL - ¿Indis...

GRISELDA - ...puesta?

GRACIELA – Sí, hijas, cuando una mujer llega a cierta edad se indispone. Y desde ese momento es que puede quedar... (Suspenso y misterio) embarazada.

GRISELDA - ¿Emba...

GRETEL - ...razada?

GRACIELA – Así es, hijas mías.

GRETEL - ¡Embarazada, embarazada, embarazada! (La madre sonríe) GRISELDA - ¿Y yo, má? ¿Yo no puedo quedar embarazada?

GRETEL – (Burlándose) No, yo sola.

GRACIELA – No, por ahora no, mi Griselda. Pero pronto te pasará lo mismo que a tu hermana. Y entonces vos también podrás quedar embarazada.

GRETEL Y GRISELDA - ¡Sí! ¡Embarazadas, embarazadas, embarazadas!

GRETEL - ¿Y cómo hacemos para...

GRISELDA - ... quedar embarazadas?

GRACIELA – Llegado el momento, mamá va a traer del mundo de afuera, unos cositos muy chiquititos que se llaman espermatozoides...

GRISELDA - Esperma...

GRETEL - ...tozoides.

GRISELDA – Qué nombre raro.

GRETEL – ¿Y eso cuándo va a pasar?

GRISELDA - ¿Quién los fabrica a esos cosos?

GRACIELA – Ya mami les va a avisar con tiempo llegado el momento. A los espermatozoides los fabrican unos animales que se llaman hombres. Son unos animales 6

muy parecidos a nosotras, pero con una diferencia: ellos tienen un órgano que es el que fabrica estos (deletreando) es – per – ma (aprendiendo) GRISELDA Y GRETEL - (aprendiendo) to – zoi – des.

GRISELDA – ¿Y no hay fotos de esos animales en...

GRETEL - ...nuestros libros?

GRACIELA – No. Y es mejor que no los conozcan. Son muy peligrosos. Sólo sirven para fabricar estos...

GRETEL Y GRISELDA – es – per – ma – to –zoi – des. (Ríen) GRACIELA – Muy bien.

GRISELDA – ¿Y hay muchos de estos animales...

GRETEL - ...en el mundo de afuera?

GRACIELA – Muchísimos.

GRETEL – Qué miedo má, me dá...

GRISELDA - ...mucho miedo...

GRETEL - ...mucho.

GRACIELA – No se preocupen. Mamá nunca va a dejar que estos hombres se les acerquen.

GRISELDA Y GRETEL – Gracias má GRISELDA - ¿Podemos seguir jugando, má...

GRETEL - ... a que sonreímos cada vez más...

GRISELDA - ... y más...

GRETEL - ...y más?

GRACIELA – No. A ese juego no quiero que jueguen más. Nunca más. ¿Estamos?

GRETEL - ¿Por qué?

GRISELDA – Si es re-lindo.

GRETEL – ¿Y si jugas con nosotras? Quizá...

GRISELDA - ... de a tres es más...

GRETEL Y GRISELDA - ... divertido.

GRACIELA – (Enojándose) Ese juego les hace mal. Así que nadie va a jugar más.

GRETEL Y GRISELDA - ¡No! GRACIELA – Ahora diganmé una cosa. ¿A quién se le ocurrió empezar con ese juego?

GRETEL – A mí, má.

GRACIELA – Sí, a Gretel. Pero a mí me encanto, má, que Gretel me haga sonreír así, tanto...

GRETEL - ...tanto...

GRISELDA - ... tanto.

GRETEL – Fue un día que, sin querer, la vi bañandosé, má. Y le vi el cuerpo, y era súper-lindo.

GRISELDA – Vos también sos re-linda Gretel. (Se besan en los cachetes) 7

GRETEL – Tenía el cuerpo parecido al mío. ¿No? (Griselda asiente con la cabeza) Y entonces le toqué donde a mí me gusta tocarme y...

GRACIELA – (No la puede parar. Sacudiéndola) ¿Cuántas veces te dije que nunca mires a tu hermana sin ropa, Gretel?

GRISELDA - ... pero a mí me encantó, má..., entre las dos podemos llegar a partes que solas no podemos llegar...

GRETEL – Sí, má, es re-rico...

GRISELDA - ... como tu torta de chocolate, má...

GRETEL - ...sí, riquísimo (pasándose la lengua por los labios)...

GRSIELDA – Má..., no puede ser malo si es...

GRETEL - ... tan lindo.

GRACIELA – Pero es malo y se acabó.

GRETEL – Al final todo es malo...

GRISELDA - ...todo...

GRETEL - ... el mundo de afuera...

GRISELDA - ...los animales...

GRETEL - ...los hombres...

GRISELDA - ... sólo te conocemos a vos, má...

GRETEL - ... y a esta casa con sus paredes...

GRISELDA - ...paredes...

GRETEL - ... paredes...

GRISELDA - ... paredes ¿cómo sabemos, má..., GRETEL - ... que no nos estás mintiendo?

GRACIELA – (Asombrada y violenta) ¿Qué dicen, desagradecidas de mierda?

GRETEL - (Señalando a su madre) Dijo una palabrota... (Se tapan los oídos y hacen ruidos con sus bocas) GRISELDA - ... una palabrota fea...

GRETEL - ...fea.

GRACIELA - (Arrepintiéndose) No, yo no quise. Bien saben que mamá nunca dice palabrotas. Es que me exasperan, hijitas mías.

GRETEL – (Le pregunta a Griselda) ¿Se exaspera porque...

GRISELDA - ...miente?

GRACIELA – Yo no miento.

GRETEL – Mamá está un poco...

GRISELDA - ... nerviosa.

GRACIELA – Yo hice todo por ustedes. Y si no las dejo salir al mundo de afuera, es para protegerlas de lo que hay allá. Para protegerla de los hombres. No tienen idea de cuánto mal pueden hacer los hombres....

GRISELDA - ¿Cuánto?

GRETEL – ¿Mucho?

8

GRACIELA – Sin ir más lejos, el que me dio los espermatozoides para quedar embarazada de ustedes dos, era una animal horrible.

GRETEL – ¿Qué te hizo...

GRISELDA - ... ese hombre?

GRACIELA – (Dándose cuenta de que se está yendo de lengua) Nada, no importa.

GRISELDA - ¿No te dejaba jugar con él?

GRETEL – ¿Se puede jugar con los hombres?

GRACIELA – Sí, se puede. Pero ellos no saben jugar. Son muy brutos.

GRETEL – Quiero jugar con un hombre, má.

GRISELDA – Sí, má, con un hombre. Dale, conseguinos uno.

GRACIELA – ¿Están locas? Nunca les voy a conseguir un hombre.

GRISELDA – Yo quiero un hombre, a mi me gusta jugar bruta también...

GRETEL - ...es verdad...

GRISELDA – A veces muerdo. (Ríe) GRETEL – Queremos un hombre, má. Un hombre que nos muerda mucho.

GRACIELA – Nunca va a entrar un hombre a esta casa, se los juro.

GRISELDA – Entonces vamos a salir a buscar uno.

GRACIELA – Ni se les ocurra. Antes las mato.

GRETEL – (Pasmadas ambas) Mamá hablo de la muerte...

GRISELDA –...dijo sobre la muerte.

GRACIELA – (Exasperada) Basta. Vayan a sus piezas y encierrencé. Y nada de jugar a sonreír.

GRETEL – Mamá hablo sobre muerte...

GRISELDA - ... ¿Y a qué podemos jugar sino podemos jugar a sonreír?...

GRETEL - ... mamá hablo de muerte...

GRISELDA – (Comienza a sacarse el cinto del vestido)... ya sé a qué podemos jugar...

GRACIELA - ¿Qué hacen? Dejensé de payasadas y vayan a sus piezas, carajo.

GRISELDA - ... dijo otra palabrota...

GRETEL - ... y hablo sobre muerte...

GRISELDA – (Comenzando a atarla) Sin mamá habrá sonrisas...

GRETEL - ...hombres...

GRACIELA – Sueltenmé, desgraciadas. Sueltenmé.

GRISELDA –…más sonrisas...

GRETEL –…mundo de afuera...

GRISELDA - ... sonrisas para siempre.

GRETEL – (Levanta la cuchilla contra su madre. Apagón y risas)

9

02 - General Puentes Personajes: Viviana Puentes Pedro (Programa de Tv. Música propia del programa. Aplausos grabados. Luz. Entrevistado y entrevistador sentados) VIVIANA – (A público) Bueno, seguimos aquí en “Entrevistas candentes”, con un invitado de lujo: el general Hipólito Puentes, quien se postula para presidente de la nación en nuestras próximas elecciones. (A Puentes) Cuéntenos Puentes ¿Cuál es su...

PUENTES – General.

VIVIANA - ¿Cómo?

PUENTES – General Puentes. Es obligadamente compuesto.

VIVIANA - Ah, sí, disculpe. Cuéntenos más acerca de sus propuestas, General Puentes.

PUENTES – (De sopetón) Tengo principal interés en los jóvenes.

VIVI - (Asombrada) ¿En los jóvenes?

PUENTES – ¿Qué pasa? ¿Le cuesta creerlo?

VIVI - No, por favor. Imagino que usted también habrás sido joven.

PUENTES – No, por suerte nunca lo fui. Es una etapa que, gracias a mi rígida educación, pude saltar.

VIVI –Mire usted. ¿Qué es lo que tiene pensado para los jóvenes?

PUENTES - El servicio militar obligatorio.

VIVI - ¿Otra vez?

PUENTES – Así, es. Otra vez. El servicio militar es el mejor remedio para nuestra enferma y descarrilada juventud. Es el mejor modo de formar hombres hechos y derechos. Basta de pelotudeces. Llego la hora de madurar.

VIVIANA – ¿Entonces usted cree que la juventud está enferma?

PUENTES – Obviamente. Casi se podría decir que la palabra juventud es sinónimo de enfermedad. (Parándose enérgico) Los militares no hubiésemos dejado avanzar a aquellos homosexuales portadores del flagelo del Sida. Bien escondido adentro del orto lo traían.

El culo se usa para cagar carajo. (Sacando un papel y leyendo) Los militares no hubiésemos dejado avanzar a las drogas, ni a los tatuajes, ni esos aros que se ponen en la lengua... (Sacado) ¡Hijos de puta como mierda se van a poner un aro en la lengua!

VIVIANA - ¿Usted tiene hijos, general?

10

PUENTES – (Guarda el papel y se sienta) Así es. Dos valientes muchachos, rectos, fornidos y respetuosos de las autoridades. No como los chicos de ahora que no son capaces de levantarse a dar el asiento a un pobre anciano. (Saca el revólver y apunta a uno del público) Parate pendejo, parate… Dale el asiento al abuelito…

VIVIANA - ¿Y cómo podría solucionar esta falta de educación en nuestros jóvenes?

PUENTES – (Guardando el revólver) Represión.

VIVIANA - ¿Cómo dice?

PUENTES – Con un poco de mano dura se transformarán en ciudadanos dignos. Se transformarán en patriotas.

VIVIANA – Muy bien. Son claras sus propuestas. Veamos que opinan nuestros espectadores. Escuchemos algunas llamadas.

1 – LLAMADA – Hola, soy Luján de recoleta, y estoy de acuerdo totalmente con los conceptos del general Puentes. Estoy harta de la inseguridad. No puede ser que una no pueda ir de compras sin que uno de estos mugrosos... morochitos... me esté suplicando con sus manos de chimpancé por un par de moneditas. Así no se puede vivir. Con los militares estábamos mejor, nadie me lo puede negar.

GENERAL – (Se para orgulloso) Sabias palabras.

VIVIANA – Escuchemos el segundo llamado.

2 – LLAMADA – ¡Eh, Puentes, corrupto! ¡Vos te afanaste la guita del hospital Muñoz! ¡Te vamos a meter una molotov en el centro del ojete! ¡Forro!

GENERAL - ¿Quién era ese? Pero... ¿Cómo permiten?

VIVIANA – (Le informan a través de la cucaracha) Parece que fue un llamado anónimo. ¿Qué opina usted de este segundo llamado?

GENERAL – No sé de qué habla ese tipo. Debe ser otro Puentes. Yo nunca he robado nada... Imagínese. Una de mis exigencias será la pena de muerte a quien ejercite lo que denominé “Hurto mínimo”. Habrá pena capital tanto sea para el que robe una camisa, un botón, o un pedazo de pan.

VIVI - ¿Y para los robos mas grandes?

GENERAL – Eso todavía lo estamos analizando.

VIVIANA – Muy bien. (Sin perder su sonrisa) Ahora vamos a nuestro último llamado.

Este es un llamado sorpresa. Escuche...

3 – LLAMADA – Hola pá. (Aspira) Quería decirte que antes de venir para casa pases por lo de Néstor porque queda muy poca... (Aspira)... Escuchá pá, te hice una canción...

Papi, 11

gracias por el polvo mágico... tan puro y blanco como las palomas de la libertad.

Duro, estoy tan duro como una roca... como una roca...

(Gritando) roca... (Silencio. Aspira) VIVIANA – Parece que se cortó la comunicación.

GENERAL – (Riendo falsamente) ¡Qué gracioso este muchacho! Siempre haciendo esos chistes tan divertidos. Es la joyita de la familia. El alma de todas las fiestas.

VIVIANA - ¿Era un chiste?

GENERAL – (Ofendido) ¿Qué otra cosa podría ser?

VIVIANA – Volvamos a las preguntas.

GENERAL – Sí, por favor.

VIVIANA - ¿Qué hay de cierto en todos los chimentos que corren sobre su relación con el tenista Pedro Del Giovanni?

GENERAL - ¿Mi relación? ¿Qué está insinuando? Yo sólo lo he ido a ver a un par de partidos, ya que me interesa el deporte de riesgo.

VIVIANA - ¿Acaso usted no es o fue pareja del afamado deportista?

GENERAL – (Sacado) Pero... ¿Qué dice? ¿Cómo yo voy a tener relaciones con un hombre? Eso... sería... una aberración, contra este país y contra Dios. Yo soy un ferviente cristiano. Me siento orgulloso de nuestra iglesia; la que en mejores épocas nos ha ayudado a evangelizar insurrectos. Como decía un párroco amigo, no hay mejor mano dura... que la mano de Dios.

VIVIANA – (relajada) Tomeló con calma, general.

GENERAL – Sí, es que... los perversos son un germen para nuestro país. (Repite) El culo se usa para cagar, carajo.

VIVIANA – Bueno, ahora vamos a unos comerciales. No se levante del asiento que seguiremos con más “Entrevistas candentes”.

(Música propia. Aplausos. Baja una luz) GENERAL - ¿Qué pasa acá?

VIVIANA – Discúlpenos general, nos tendríamos que haber dado cuenta del estado de su hijo antes de mandar la llamada al aire.

GENERAL – Ese no era mi hijo. Basta de llamadas al aire.

VIVIANA – Pero tenemos...

GENERAL – (Grito) Basta carajo. Es una orden. ¿Qué sigue?

VIVIANA – (Mirando el texto) Un par de preguntas más sobre sus propuestas y lo largamos.

GENERAL – Hagaló rápido.

12

OFF – Venimos, 4, 3, 2 GENERAL - ¿Ya pasó la publicidad? (Vivi denota indiferencia. Música. Aplausos.

Luz) VIVIANA – Bueno, aquí estamos de vuelta. Ahora veremos unas imágenes...

GENERAL - ¿Qué imágenes?

VIVIANA – (Sin escucharlo)... Producción... ¿Está listo el tape?... Ok..., vamos.

(Sonidos del perro y del general) GENERAL - ¿Qué es esto?

VIVIANA – Estas imágenes fueron tomadas hace dos días en plaza Irlanda alrededor de las tres de la mañana.

GENERAL - ¿Qué tiene que ver esto conmigo?

VIVIANA – Podemos ver al general, aquí presente, manteniendo relaciones sexuales con un… perro. Para ser más precisos con un pastor alemán.

GENERAL – Esto es una injuria. Ese no soy yo.

VIVIANA - ¿Cómo que no? Ahí podemos ver un primer plano de su cara que lo favorece maravillosamente.

GENERAL – Debe ser alguien muy parecido. Apaguen eso por favor.

VIVIANA - ¿Usted trata de decirnos que esos gemidos y jadeos de placer no son suyos?

GENRAL – (Ya no sabe que decir) No sé, deben ser del perro… míos no son. (Explota) ¡Basta ¡Basta carajo! ¡Apaguen las cámaras!

VIVIANA – (Calma) Vayamos a unos comerciales y enseguida volvemos con esta jugosa entrevista. (Música. Aplausos) GENERAL – (Saca el revólver) ¿Qué pasa acá? ¡La concha de tu madre!

VIVIANA – Tranquilicesé, Puentes.

GENERAL – General Puentes le dije. (Tratando de calmarse) Ese no era yo.

VIVIANA – Le creemos.

GENERAL – Pero.... ¿Cómo van a mostrar eso? Con un perro…

VIVIANA – No volverá a suceder. Sientesé.

GENERAL – Dios mío. Lo primero que voy a hacer apenas asuma es cancelar este programa y a la mierda la libre expresión. ¡Se acabo, me voy a la mierda!

VIVIANA – No se vaya, mi general. Antes informemoslé al público acerca de este malentendido. (El general afirma con la cabeza) Maquillaje (Entra maquillaje y lo pinta como una mujer sin que este se de cuenta) OFF – Venimos 4, 3, 2 (Música. Luz) VIVIANA – Estamos de vuelta. Ahora haremos entrar a nuestro invitado sorpresa.

GENERAL - ¿Qué?

VIVIANA – Pedro del Giovanni. Un aplauso para él. (Aplauso) PEDRO – (Entrando. Loca total) ¿Cómo estás, preciosa? Cada día más linda. (Al general) ¿Y vos? ¿Todo lo que me dijiste era mentira? ¿Dónde quedaron tus promesas de 13

amor eterno? ¿Dónde quedaron aquellas noches de amor cuando te decía mi general y te quitaba el slip camuflado con mis premolares?

GENERAL – ¿Estás loco? Estamos en vivo, tarado.

VIVIANA – (A los espectadores) Y para todo el país.

PEDRO – Ahora entiendo por qué tenías tanto interés en sacar a pasear a mi Tintín a la plaza. Seguro que el problema de caderas que tiene es culpa tuya.

GENERAL – Callate, Pedro. (Tirándose al piso) Arruinaron mi carrera política. ¡La arruinaron! (Buscando el revólver) ¡Hijos de puta! ¡La puta que los recontra parió a todos! (Ve que no lo tiene. Sale la maquilladora con el revólver y lo apunta sonriendo) PEDRO – (Histérica) Quiero que confieses nuestro amor.

GENERAL – (Sacándoselo de encima) Andate puto de mierda. Te voy cagar a trompadas. Me cagaron la imagen.

PEDRO – No me tratés así. (Sollozando) No me podés tratar así.

(Sube la música suavemente) GENERAL – Me cagaron la imagen.

VIVIAN – Y como sabemos que una imagen vale más que mil palabras, nos vamos y cerramos el programa con esta imagen tan conmovedora. Con la imagen del general y su amante. Con la imagen de un hombre que quiso imponer las reglas que él nunca supo cumplir. Gracias queridos televidentes. Nos vemos mañana con una nueva “Entrevista candente”.

(Apagón y música que sube al palo)

14

03 - Licenciada en prostitución Personajes: Prostituta (Entra ella recitando su pregón cual si vendedora de empanada de mil ocho diez se tratara o tratase) Coger, ¿quién me quiere coger?

Garchar, para en vano no eyacular.

A ver si hago algún cliente por acá. (Como contestándole a alguien del público) Sí, buenas noches, soy prostituta. Desde que tuve sexo por primera vez supe que quería ser prostituta. A mis padres no les pareció mala idea. Ellos siempre habían esperado que yo sea: médica, abogada o prostituta. Les daba lo mismo cualquiera de las tres carreras.

Aunque todo el mundo sabe que en Argentina se gana más como prostituta.

Además, siempre fue el sueño de mamá. Debe ser porque cuando ella quiso hacer la carrera todavía estaba mal visto. Siempre les dice a sus amigas que ella es una prostituta frustrada. Me acuerdo que mamá, ya desde chica, me regalaba vibradores. Era muy gracioso, ya que yo en mi cartita a papá Noel siempre pedía muñecas Barbie o Bebotes.

Pero bue, no me puedo quejar. Si no fuera por mamá no sé si hoy gozaría del bienestar económico que garantiza esta profesión. (Recordando) Pobre papa. Recuerdo que tuvo que empezar clases de teatro. Fue la manera más fácil que encontré para poder cumplirle los deseos sexuales a mamá. Papá volvió loco a su profesor de actuación para que le enseñe la composición de diferentes personajes. Y así fue que de a poco, papá fue teniendo en su haber gran cantidad de diversos supuestos clientes que alimentaban la fantasía sexual de mamá de ser una prostituta. Recuerdo haber escuchado a mamá jactarse delante de sus amigas de tener unos 20 clientes regulares. Pobre papá.

Rcuerdo que mi primera experiencia sexual fue con un amigo de papá, Jorge Muñoz. Lo habían dejado para cuidarme un día que salieron de compras papá y mamá. Ellos nunca lo confesaron pero sé que estaba todo planeado. Todavía conservo en mi memoria su cara de tremenda estupefacción. El tipo tenía cuarenta y pico de años. No podía entender como yo tenía tanta experiencia. No tenía noción del entrenamiento que noche a noche hacía con mi colección de juguetes. Me acuerdo que al otro día le pidió la mano a papá.

Pobre Jorge, se había enamorado. Hasta dejó a la esposa y todo. Pero bueno, las prostitutas bien sabemos cuán efímero es el amor. Por eso lo cobramos tan caro, porque bien lo vale.

15

Recuerdo cuando me fui a anotar a la UBA. Primero tuve que hacer el CBC, como todos.

Realmente no sé para que me hicieron cursar: pensamiento científico, y sociedad y estado. Igual debo reconocer que a la larga me sirvió saber algo sobre el tema, ya que muchos de mis clientes son filósofos y políticos prestigiosos. (Recordando) Si nos habremos quedado discutiendo después del acto sexual sobre el marxismo o el nihilismo de Nietzsche. Lo que nunca pude entender bien del todo es la teoría de la caverna de Platón. Me la han intentado explicar miles de veces, pero siempre, quizá por analogía, terminamos haciendo uso de mi propia… caverna.

Tarde cinco años en terminar mis estudios. Me costó muchísimo. Si no fuera por mis adinerados padres que me bancaron toda la carrera, todavía la estaría cursando. Del que siempre me acuerdo es del profesor de la materia “Introducción” Me había tomado de punto el viejo sin vergüenza. Siempre me hacía pasar al frente a mí para explicarles a los demás compañeros el ejercicio. Cuando llegaba a casa no me podía ni sentar. Igual reconozco que me sirvió. De a poco el constante golpetear me fue endureciendo los músculos de las piernas, y ahora tengo más resistencia cuando, en los días de suerte, me caen varios clientes.

Así fue que una vez recibida, con titulo en mano, empecé a hacer la calle. (Emocionada) ¡Qué hermoso era ya estar trabajando de lo mío! Porque en este país no es lo mismo tener un título que no tenerlo. Es como dicen papá y mamá: “El título te abre puertas”. Y es verdad. (Con sonrisa socarrona) Si me habrá abierto puertas de adinerados coches y de moteles de lujo.

La verdad es que hoy me siento orgullosa de todo lo que pude lograr con el tiempo.

Tengo mis buenos ahorros y tengo un cirujano plástico excelente. El mismo que me hizo estas lolas divinas que tengo.

Bueno, para despedirme, y a modo de anzuelo para mis cariñosos clientes les dejo esta hermosa canción que hice en mis clases de composición y contrapunto.

Canción: Dígame cuál es su perversión Dígame cual es su perversión que yo le cumpliré su fantasía.

Sáquese toda la represión 16

y dígame lo que usted me haría Quizá imagina usted que con su semen me nutriría.

Le costaría 50 pesos, nada más.

O quizá imagina usted que entre mis pechos acabaría.

Le costaría 15 pesos, nada mas.

Dígame cual es su perversión que yo le cumpliré su fantasía.

Llámeme como quiera usted Yanina, Mirta o Estefanía.

Yo no me quejaré, pegame y decime María Pía.

Le costaría 30 pesos, nada más.

Raje de su mujer, descanse un poco por este día.

Le costari – i - a

57pesos con 80 centavos, nada más.

17

04 - La primera palabra EL ELLA (Entra un joven muy aburrido. La ve a ella danzando en un rincón. Se enamora. Se acerca hasta ella) EL - Mantén tus labios sellados. No digas ni una mísera palabra. Tengo un profundo terror a que se desvanezca en mí, la perfecta sensación que me embriaga. Tu bello cuerpo, tu sonrisa, tus ojos hicieron nacer estrellas en esta oscura nada que conformaba mi alma. Tiemblo con solo pensar en que esa primera palabra que me dirijas sea inferior a todo lo que irradias externamente. Eres tan maravillosa que quisiera mantenerte callada por el resto de mi vida, así, intacta. Pero sé que eso no puede ser posible. Así que, quítame de una vez por todas, la tremenda agonía del esperar. Dime la primera palabra...

(Ella va a hablar. Él le tapa la boca)... pero piénsala bien. Observa en tu mente cómo está conformada. Cuáles son sus vocales y cuales sus consonantes. Fíjate si es un sustantivo o si es un verbo; quizá sea un adverbio, o quizá tan sólo un artículo. (Silencio. Ve que ella no sabe que responderle. Desesperándose) ¡Dime la primera palabra! Necesito saber si eres lo que espero. Necesito saber si tu alma es tan exacta para mí como lo es tu divino cuerpo. Separa de una vez esos perfectos labios de princesa y suelta aquella palabra para que pueda volar por los aires, para que le de la libertad a este amor que me colma de vida.

Dime esa primera palabra de una vez. (Él queda arrodillado con los ojos cerrados esperando la respuesta) ELLA – (Masticando un chicle grotescamente) ¿Qué decís flaco? No entendí nada lo que me dijiste. Sé más claro, please.

EL – (Al escucharla pierde todas sus expectativas) Dejá, no importa. Hace de cuenta que no te dije nada. (Él sale casi llorando)

18

05 - Hot-Line Personajes: Denis Roberto (Entra ella vestida arrastrando un banco. Trae puesto un camisón antiguo y feo, y en los pies, unas pantuflas. Atiende el teléfono con voz sensual) DENIS – Hola. Sí... ¿Cómo estás precioso?... ¿Cómo te llamás?... ¿Rubén? Me encanta. (Saca una pincita de depilar y se comienza a sacar los pelos de las patas y luego los del sobaco) ¿Te puedo decir Rubi?... (Ríe) ¿Sí?... Ok... ¿Yo?... ¿Cómo querés que me llama, mi amor?... (Ríe) ¿Florencia?... Bueno, soy tu Florencia, tu flor... ¿Me querés desflorar?... (Ríe)Y sí, ya hace rato... ¿Querés saber cómo soy?... Sí, soy hermosa... ¿De arriba?... 90... De cintura 60, y de abajo... adivina... No, 100... ¿A sí? ¿Como te gustan a vos? Picarón... ¿Sabes qué?... me acabo de sacar el sostén... sí... sí... Claro, el corpiño...

(Se rasca una teta)... Es que tu voz, me da... un poco de calor... Sí, tenés una voz hermosa... sí... (Lo dice lentamente) Sólo me queda por sacarme la... (La interrumpe)... exacto... la bombachita... sí... sí... (Se apoya el teléfono en el hombro y se empieza a cortar las uñas de las manos y después de los pies)¿Qué me harías si me la saco?... epa... epa... ¿No vas demasiado rápido?... ¿No?... ¿A sí que estás muy caliente?... Sí, se te siente... Debes estar muy bien dotado ¿no es así?... ¿No?... Pero bueno, debe ser juguetona... ¿A no? ¿Ni eso?... Pero no te desalientes... yo te... te la agarraría y... (Él se pone mal) Para, pero... no te pongas angusties... no, no te pongas así... no me llores... quizá tenés otros atributos... ¿o no?... Seguro que sos una excelente persona... ¿Ah, no?... ¿Con la novia de tu mejor amigo?... pero si vos... ¿Con los dedos?... Bueno, algo es algo... Entonces juguemos con tus dedos... ¿Cómo son?... ¿Largos cómo los de un pianista?... (Sorprendida)... ¿Qué? ¿Cómo que te falta un dedo?... ¿Un camión? ¡Qué horror!... (Iluminada) ¿Y con la lengua? ¿Seguro que sos bueno con la lengua?...

Imaginate lamiéndome... ahí... sí... (Orgásmica)... Me harías sentir muy bien, me harías...

(Muy sensual. Se rasca el ojete) Sí... contame alguna experiencia que hayas tenido con esa lengüita tuya... ¿Sólo una?... pero debe haber sido ex – ce – len... (La interrumpe)... ¿Se te acalambró? ¿Cómo que se te acalambro la lengua?... ¿Al hospital fueron?... Pero fue grave entonces... Y no... la verdad que no te sale una... pero... no, tampoco es para tanto... no te pongas mal otra vez... por favor... no llores... No, no digas que sos un fracasado... ¿Y qué sos?... No sé. No sé qué sos... sos... sos... (Ya podrida)... Y sí, sos un fracaso... ¿Qué querés qué te diga?... (Silencio. Asustada) No tampoco es para matarse.

No querido, no... (Silencio)... Ey... Rubi... Rubi... No, no abras... Rubi, alejate del balcón, no hagás locuras... Sí... hola... hola... (Ya desesperada) Hola. (Corta con cierto fatalismo) 19

06 - Carlos y Carla Personajes: Carlos Rubén Carla Vanesa ESCENA 1 (Entran dos jóvenes caminando por derecha y se ponen a charlar en el medio del escenario) CARLOS – Creeme, es así.

RUBEN - ¿Y de dónde me conoce tu hermana?

CARLOS - Me dijo que te cruzo una vez en la calle.

RUBEN – (Pensando) No, no… No insistas más. Yo no voy a salir con la hermana de un amigo.

CARLOS - ¿Por? RUBEN - Porque no. Esas relaciones así, siempre terminan mal.

CARLOS - Pero está muerta con vos.

RUBEN - No me importa. Antes que nada es tu hermana.

CARLOS - ¿Y? RUBEN - ¿Cómo, y? ¿A vos te gustaría enterarte que yo me… me…

CARLOS - ¿Me garcho?

RUBEN – Bueno, sí… ¿Te gustaría enterarte que me garcho a tu hermana?

CARLOS – (Sincero) La verdad que sí. Me encantaría.

RUBEN - ¿Qué?

CARLOS - Sí, vos sos un buen tipo. Además... (Mirándole entre las piernas)… siempre estuviste bien dotado.

RUBEN - ¡Che! Pará.

CARLOS – Todavía tengo tu imagen en las duchas después del futbol. La va a pasar bomba mi hermana.

RUBEN - ¡Che, pará! Te estás zarpando. ¿Cómo vas a hablar así de tu hermana?

Pareciera que disfrutás de que se la anden empomando.

CARLOS – Es que yo quiero lo mejor para ella.

RUBEN - ¿Y yo soy lo mejor?

CARLOS – Dentro de lo que conozco…

RUBEN - Pero no es así…

CARLOS – (Tratando de cerrar el compromiso) Bueno entonces… ¿Pasás esta noche?

20

RUBEN - Te dije que no.

CARLOS - Dale, pasá a conocerla, nada más.

RUBEN – (Vencido por la insistencia) Está bien. Con tal de que no me rompas más las bolas.

CARLOS - Joya.

RUBEN - Pero solamente paso. Y si me cae bien… después vemos.

CARLOS - ¿Pero para qué querés que te caiga bien?

RUBEN - No voy a estar con alguien que me cae mal.

CARLOS - Pero si yo ya te dije que está re-buena.

RUBEN - Ya sé, me dijiste mil veces que esta re-buena, pero no alcanza con eso si es que pretendo conservar una relación.

CARLOS - Pero yo quiero que le des masa, nada más.

RUBEN - ¿Me estás jodiendo? ¿Vos no querías que estemos juntos?

CARLOS – No, quiero que te la empomes no más.

RUBEN - ¿Eh? CARLOS - Mirá, hace lo que quieras, pero andá.

RUBEN – Sí, ya te dije que voy a ir.

CARLOS – Te espero a las doce.

RUBEN - ¿De la noche?

CARLOS – Sí, a las doce de la noche.

RUBEN - ¿No es un poco tarde?

CARLOS – No. Vos haceme caso. Andá que tomamos un café.

RUBEN - Bueno chau. Nos vemos a las doce. (Sale por la izquierda. Apagón) ESCENA 2 (Casa de Carlos. Hay una mesa a la derecha, un reloj y un sillón a la izquierda, con adornos varios. Suena el timbre. Sale por la izquierda, Carlos, poniéndose un hermoso vestido de mujer. Se acerca a la puerta de calle) CARLOS - (Simulando voz de mujer) ¿Sí? ¿Quién es?

RUBEN - (Desde afuera) Rubén ¿Está Carlos?

CARLOS - (Mira el reloj. Con voz de mujer) Rubén, no son las doce todavía, faltan unos segundos.

RUBEN - Sí, es que... (No sabe que decir)… andaba por acá… y como está lloviendo… no me quise… andar… mojando… (No sabe más que decir)… ¿Todo bien?

CARLOS – Sí, bastante bien. (Mira el reloj. Con voz de mujer) Ahí te abro, espera que no encuentro la llave.

RUBEN - Bueno. Espero… acá.

CARLOS - (Sale por la derecha terminando de cambiarse. El reloj da las doce. Entra una mujer, es Carlos transformado, por la derecha, ya con el hermoso vestido puesto. Va 21

hacía la izquierda) Ahí te abro (Le abre) Pasá, qué tal. Disculpá la demora. Mirá. (Le muestra el reloj) Ahora sí.

RUBEN - ¿Ahora sí qué?

CARLOS - Ahora sí que son las doce.

RUBEN - Ah. (Se queda mirándola. Anonadado) Sos hermosa.

CARLOS - (Riendo) ¡Ay! Muchas gracias.

RUBEN - Tenía razón tu hermano, sos preciosa.

CARLOS – Ese Carlos.

RUBEN - ¿Dónde está?

CARLOS - ¿Quién?

RUBEN - Carlos.

CARLOS - Se…fue.

RUBEN - ¿Se fue?

CARLOS – Sí, se fue. Me dijo que era algo urgente.

RUBEN – Bueno, entonces paso en otro momento. Un placer haberte conocido.

CARLOS - (Tomándole la mano) No te vayas, Rubén.

RUBEN - ¿Cómo?

CARLOS - Que no te vayas. Quédate. No me gusta estar sola.

RUBEN - ¿No? CARLOS – No, me da... miedito. Y con la lluvia...

RUBEN - ¿Sí?

CARLOS - Sí, vení, sentate. ¿Querés un café?

RUBEN - Es que yo…

CARLOS – Sí, ya sé: viniste a hablar con Carlos.

RUBEN - Claro.

CARLOS - Pero quedate un ratito nomás.

RUBEN – Bueno, está bien.

CARLOS –Sentate. (Rubén se sienta) ¿Un café o mejor un licorcito?

RUBEN - ¿Vos que va a tomar?

CARLOS - Licor, pero muy poco.

RUBEN - Entonces tomo licor.

CARLOS – Bueno, ya vengo. (Sale por la izquierda. Rubén está excitado. No lo puede creer. Entrando con dos copas y una botella de licor) Tomá, servite. (Se sienta) Es de huevo, es exquisito.

RUBEN – Riquísimo.

CARLOS – Tomá. (Sirviéndole otra copa) RUBEN - Pero…

CARLOS - No digas nada, por favor RUBEN – Sabés que… me caés muy bien.

CARLOS - Vos también. (Se acerca para besarlo) 22

RUBEN - (Antes del contacto) ¿No iremos muy rápido?

CARLOS - ¿Sabés qué no? Aunque no me creas hace muchísimo tiempo que estoy esperando este momento. Siempre estuve… enamorada de vos.

RUBEN - Entonces no me dejes hablar más. Quizá sea amor a primera vista.

CARLOS - Quizá (Risita. Se besan profundamente. Se levanta) Vení. (Lo lleva de la mano al sillón) RUBEN - Pero…

CARLOS - Vení, está todo bien (Lo acuesta sobre el sillón. Le comienza a desprender los botones de la camisa salvajemente) RUBEN – Pero… ¿Y Carlos?

CARLOS - Carlos no viene hasta mañana al mediodía.

RUBEN - Entonces…

CARLOS - (Sensualmente) Entonces tenemos toda la noche.

RUBEN - (Le termina de desprender la camisa) Pero es que… (Le quita la camisa)… yo no sé… (Ella ronronea. Le comienza a desabrochar el cinto)… yo pretendía una relación… (Le baja la bragueta)… no sé, diferente… (Le saca los pantalones de un tirón)… algo a largo plazo.

CARLA - (Se saca el vestido por arriba, quedando en ropa interior) Yo también pretendo algo largo… (Rubén queda asombrado)… algo largo y duro. (Le muerde los labios. Apagón) ESCENA 3 (Sube de a poco la luz simulando el amanecer. El escenario está igual. Carlos, ya con su cuerpo de hombre, está recostado sobre Rubén, ambos en el sillón y tapados con una frazada. Carlos despierta. Se destapa suavemente para no despertar a Rubén. Lleva puesta la misma ropa interior que cuando tenía el cuerpo de mujer en la escena anterior. Sale por la izquierda en puntas de pie. Rubén se despierta. Se destapa y se sienta en el sillón.

Busca su ropa en el piso y se la comienza a poner. Entra por la izquierda Carlos ya vestido) CARLOS - (Con una sonrisa) Buen día.

RUBEN - (Sorprendido) ¿Carlos? ¿Y tu hermana?

CARLOS - Se fue.

RUBEN - ¿Adónde?

CARLOS - A…trabajar.

RUBEN - Pero... ¿cómo? ¿No me dijiste que no trabajaba?

CARLOS - Es que… es una changuita, está siendo promotora, es por estos días no más (Comienza a levantar la mesa) Parece que la pasaron bien.

RUBEN - ¿Bien? Fue genial, fue... lo mejor que me pasó en la vida. Carlos decime… ¿A qué hora llega?

23

CARLOS –Creo que... a la noche.

RUBEN - ¿A la noche?

CARLOS - Sí, es que tiene que hacer unas cosas.

RUBEN - ¿Qué hora es?

CARLOS – La una y medía.

RUBEN - No, no voy a poder aguantar hasta la noche.

CARLOS - Che, no seas exagerado.

RUBEN - No aguanto, en serio. Decile que venga... decile... decile que la necesito, que no puedo estar más sin ella.

CARLOS - (Sorprendidísimo) ¿Qué?

RUBEN - (Gritando emocionado) Decile que la amo, que amo sus ojos, su boca, su manera de tocar, de hablar, de moverse. Decile que la amo toda, toda… Así tal cual es.

Decile que venga (Suplicante) Por favor, decile que venga, que venga ahora.

CARLOS - (Mirándolo estupefacto) ¿En… serio?

RUBEN - (Enfureciéndose) ¿A vos te parece que te estoy jodiendo? Obvio que es en serio.

CARLOS - Pero…

RUBEN - Yo no puedo creerlo, tanto que me rompiste las bolas con tu hermana…

Ahora que estuve con ella me mirás con esa cara de pelotudo y me preguntás: (Haciendo una ridícula imitación) ¿En serio?

CARLOS - Pero yo no quería que te enamores. ¡Yo quería que te la garches! ¡Que te la garches!

RUBEN - ¡Pero me enamoré!

CARLOS - Bueno, hiciste mal. Porque ella…

RUBEN - ¿Qué? ¿Qué pasa con ella?

CARLOS - Nada.

RUBEN - ¿Cómo que nada? Decime, decime.

CARLOS - Ella no puede…

RUBEN - ¿No puede? ¿El qué no puede?

CARLOS - Enamorarse.

RUBEN - Todo el mundo puede enamorarse.

CARLOS - Ella no, así que no jodas mas y andate.

RUBEN - Dejame hablar con ella.

CARLOS - (Empujándolo) Andate te dije.

RUBEN - (Levantándolo del cuello de la camisa) ¿Vos no entendés? Yo la amo. ¡Yo la amo!

CARLOS - ¡Pero ella no! ¡Nunca te va a amar! (Rubén le da una piña en la cara y Carlos cae al piso. Rubén se va por la derecha. Apagón) ESCENA 4 24

(Sobre el escenario hay un par de mesas simulando un bar, en una de ellas hay sentada una chica, Vanesa. Entra por la derecha Rubén y se sienta en la mesa con ella) RUBEN - Hola, ¿Qué tal?

VANESA - Hola.

RUBEN - Disculpa que te haya hecho venir hasta acá.

VANESA - No hay problema.

RUBEN - Es una situación muy incómoda para mí, pero es muy importante que me ayudes. ¿Le dijiste a Carlos que venias a hablar conmigo?

VANESA – No, no le dije nada, no te preocupes.

RUBEN - Es que… yo pensé que éramos… amigos, pero lo que me dijo tu novio…, no sé.

VANESA - ¿Qué te dijo Carlos?

RUBEN - No sé si contarte.

VANESA - Contame, confía en mí. Yo sé que no me conocés muy bien, pero si me llamaste debe ser algo importante, así que dale, contame.

RUBEN – Gracias, espero que me sepas entender.

VANESA - Dale, decime.

RUBEN - Resulta que él ya hace rato que me viene pidiendo que yo tenga… relaciones… sexuales con la… hermana.

VANESA - (Se para de un salto indignada y furiosa) ¿Qué?

RUBEN - Sí, yo también me puse así cuando me dijo.

VANESA - Jurame que no me estás mintiendo.

RUBEN - (Sorprendido por la exagerada reacción de Vanesa) Te juro por lo que más quieras, pero pará, que todavía no te conté nada.

VANESA - ¿Hay más?

RUBEN - Sí, hay más. (Vanesa se sienta y se tranquiliza) Después de mucho insistirme, yo le dije que la iría a conocer y entonces fui.

VANESA - ¿Y? Dale contá.

RUBEN - Cuando fui anoche Carlos no estaba en la casa.

VANESA - Pero ella sí.

RUBEN - Sí, ella sí. Me invitó a pasar y bueno…

VANESA - ¿Y bueno qué?

RUBEN - …y pasó lo que tenía que pasar. Lo importante…

VANESA - (Exaltada) ¿Qué pasó? ¿Qué fue lo que tenía que pasar?

RUBEN - (Intimidado) Vos sabrás entender...

VANESA - (A los gritos) Dejate de vueltas y decime: ¿Qué pasó?

RUBEN - Y (Le hace señas con la mano) ¿entendés?

VANESA - ¿Te la cogiste? ¿Te la cogiste?

25

RUBEN –Sí, sí, está bien. Me la cogí.

VANESA - Te la cogiste ¡¡Pero qué hijo de mil puta!!

RUBEN - Pero Vanesa, pará, no me digás así…

VANESA - No te digo a vos.

RUBEN - ¿En serio?

VANESA - Le digo a Carlos. Hacerme esto a mí, a mí.

RUBEN - ¿Qué? No entiendo nada.

VANESA - ¡Es un hijo de puta!

RUBEN –Escuchame, lo que te quiero contar, es que yo me enamoré, y Carlos me dijo que ella no me puede amar a mí. Pero yo estoy loco por ella. Necesito que le hables y le digas que me vea, que le digas que la amo.

VANESA - Carlos tiene razón, sacatelá de la cabeza. Ella no te ama.

RUBEN - ¿Y vos qué sabes?

VANESA - Yo sé. Creeme. (Se levanta y se va) RUBEN - Pero pará. ¿Adónde vas? (Mirando hacia abajo) No entiendo, no entiendo nada. (Apagón) ESCENA 5 (Se abre la misma escena. Rubén sigue mirando hacia abajo. Sobre la mesa hay cinco tazas de café vacías. Entra por la izquierda Vanesa) VANESA - Menos mal que te encuentro. (Rubén apenas levanta la cabeza para observarla) Ya te solucioné todo.

RUBEN - (Alegrándose de repente) ¿En serio?

VANESA - Sí, hablé con Carla.

RUBEN - ¿Carla?

VANESA - Sí, ¿no sabías que se llamaba Carla?

RUBEN - No. ¿Qué te dijo?

VANESA - Que vayas esta noche a las doce.

RUBEN - ¿Pero te explicó algo?

VANESA - Me dijo que eran todas cosas del hermano, y que ella también te ama.

RUBEN - (Saltando de alegría) ¡Siiiiii! Me ama, me ama. La quiero ver ya... ya...

VANESA - No, tenés que aguantar hasta las doce.

RUBEN - Está bien, está bien. (La abraza a Vanesa) Gracias, muchísimas gracias. Sos un ángel.

VANESA - No es para tanto. Ah, me olvidaba. Me dijo que vayas con los ojos vendados.

RUBEN - ¿Por? VANESA - A Carla le gustan mucho los juegos sexuales.

26

RUBEN – Sí, ya me di cuenta. A mí también.

VANESA - Bueno, esto debe ser parte de uno de sus juegos. Si vos respetas sus reglas, quizá puedas ganártela.

RUBEN –Sí, voy a hacer lo que ella me pida. (Dándose cuenta)¿Y vos cómo sabés todas esas cosas de ella?

VANESA - Es que somos muy amigas.

RUBEN – No sabía. Gracias, no me voy a cansar de agradecerte. (Emocionado) Mozo, la cuenta (Apagón)

ESCENA 6 (Casa de Carlos. Como en escena 2. Suena el timbre. Sale Vanesa por la izquierda. Abre la puerta y entra Carlos con los ojos vendados) RUBEN - ¿Ya me saco las vendas? (Vanesa le ata las manos) ¿Las manos también?

(Silencio) ¿Carla? ¿Sos vos?

VANESA - ¡Sh! (Lo besa) RUBEN - (Feliz) Escuchame.

VANESA - (Le tapa la boca) ¡Sh!.

RUBEN - Pero es que Carlos… (Vanesa lo lleva al sillón y le empieza a quitar el cinto) Carla ¿No querés que hablemos antes? (Silencio. Dubitativo) ¿No querés? Bueno, sólo quería decirte… que me enamoré de vos, que te amo, que ya no quiero vivir sin vos.

(Vanesa lo mira sorprendida. Sonríe con ternura) ¿Me das un beso? (Se lo da y lo abrazar) Te abrazaría pero… tengo las manos atadas (Apagón)

ESCENA 7 (La misma habitación. Entra Carla por la derecha. Enciende la luz. Ve a Vanesa acostada sobre Rubén en el sillón. Se acerca al sillón espantada) CARLA - ¿Vanesa? ¿Rubén?

RUBEN - (Se despierta. Sigue con los ojos vendados y las manos atadas) ¿Quién es? ¿Carla sos vos? (Carla le saca la venda de los ojos. Sonriendo) Carla, mi amor. (Se percata de que hay alguien acostado sobre él. Mira y ve a Vanesa. Sorprendido) ¿Vanesa?

VANESA - Buen día mi amor.

CARLA - ¿Qué? (Lo agarra a Rubén de un brazo y lo hace parar. Éste está maniatado y con bóxer. Carla gritando) ¡Explicame! ¿Qué es todo esto? (Vanesa se envuelve en la sabana. Se sienta con aire de triunfo en el sillón) RUBÉN - ¿Qué te explique qué? Yo no sé, yo… no entiendo nada (Carla le desata las manos).

27

CARLA - Ya entiendo, me hiciste ir hasta lo de mi vieja diciéndome que estaba enferma para tener tiempo de acostarte con Rubén.

VANESA - (Orgullosa) Exacto.

CARLA - (Enfurecida) Te voy a reventar. (La encara a Vanesa que está sentada en el sillón) RUBEN - (Parándola enfurecido) Quedate quieta ahí. Y vos Vanesa ¿Me podés explicar porque me hiciste esto a mí?

VANESA - (Irónica) ¿Qué? ¿No te gustó?

RUBEN - (Perdiendo la paciencia) Vanesa…

VANESA - Perdoná, fue un chiste.

CARLA - Vanesa no le expliques que va a ser peor, deja que todo quede así.

RUBEN - Las pelotas queda así. A mí me van a explicar…

VANESA - Rubén…perdoname, te usé para vengarme…

CARLA - (Desesperada) Callate, estúpida.

VANESA - No, no me voy a callar. Vos empezaste esto, así que ahora te la bancás.

RUBEN - (A Vanesa) ¿Para vengarte de quién?

VANESA - (Señalando a Carla) Para vengarme de ella. Ella me fue infiel.

RUBEN - (Sorprendido) ¿Qué? ¿Ustedes son…? ¡Dios mío! Pero si yo te vi con Carlos…

VANESA – No, pará. No es lo que pensás.

CARLA - Dejá Vanesa, yo le explico.

VANESA - ¿No te alcanza conmigo? ¿Por qué lo fuiste a buscar a él?

CARLA - Pero…entendeme…

VANESA - Una trola, eso es lo que sos.

CARLA - (El diálogo siguiente es escuchado por Rubén estupefacto) Entendeme, yo aparte de ser un hombre soy una mujer, y una mujer necesita….

VANESA – Si, ya sé lo que necesita. (Señalando la entrepiernas de Rubén) Eso necesita.

CARLA - Sí, eso.

VANESA - Bueno, ahora que ya lo tenés quedateló.

CARLA – No. Fue para sacarme las ganas… Yo te quiero a vos.

VANESA - No parece.

CARLA - Pará, aflojá que vos ya te vengaste.

VANESA - Pero la empezaste vos.

CARLA - No importa, ahora ya está. Volvamos a como estábamos antes.

VANESA - No. CARLA - ¿Por qué no? Perdoname ¿No sé que querés que haga? Yo te amo…

VANESA - Yo no. Ya no te amo más.

CARLA - ¿Qué?

VANESA – No, Carlos.

28

RUBEN - (Repitiendo) Carlos.

VANESA – Sí, él es Carlos, y también es Carla. De día es él y de noche...

RUBEN - ...ella?

VANESA – Sí.

RUBEN - ¿Me están jodiendo?

VANESA - No Rubén.

CARLA - Entonces… ¿Se terminó?

VANESA - Sí, se terminó.

RUBEN - Entonces me acosté con…mi…amigo.

VANESA - Nunca fue tu amigo… Lo único que quería era acostarse con vos.

RUBEN - Qué asco. ¿Y vos cómo…?

VANESA - Yo ya me había acostumbrado. Pero a él parece que no le alcanzaba conmigo.

RUBEN - Esto es demasiado para mí. Me voy.

VANESA - Esperame, yo me voy con vos (Se levanta del sillón envuelta en la sabana) CARLA - ¿Qué? No, vos te quedas acá. Tenemos mucho de qué hablar.

VANESA - No hay nada de qué hablar. Me enamoré de Rubén.

RUBEN - ¿Qué?

VANESA - Sí, quiero estar a su lado como él me pidió.

RUBEN - ¿Qué? Basta de engaños…

VANESA - Es en serio, nunca hablé tan en serio. Vamos.

CARLA - Pará Vane.

VANESA - Disculpame Carlos, pero esto se terminó.

RUBEN - Chau Carla. (Le da un beso en la frente) Chau Carlos (Le da un apretón de manos) Hubiésemos sido buenos amigos. (La abraza a Vanesa. Ella lo besa. Salen abrazados por la derecha) CARLA - No se vayan… (Se sienta en el sillón. Mirando la nada. Apagón. Luz. Aparece Carlos sentado en la misma postura. Apagón. Luz. Aparece ella. Apagón)

FIN

29

Si usted está interesado en realizar esta obra, o alguna de sus escenas, comuníquese con el autor para recibir la autorización, y para que se le acerque la música original del espectáculo: Contacto via Facebook: Augusto Godachevich.

(O por mail Godachevich@hotmail.com) Blog del autor: http://augustogodachevich.blogspot.com.ar/ Gracias y hasta luego.

30