
3 minute read
Cómo evitar un dulce final
La
diabetes es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. En los casos en los que no hay control pueden causar ceguera, disfunción renal, enfermedad cardíaca y otras afecciones graves. Antes de que se diagnostique la diabetes, hay un período en el que los niveles de azúcar en la sangre son altos, pero no lo suficiente como para recibir el diagnóstico. Este se conoce como prediabetes.
Ustedpuede tener prediabetes durante años sin presentar síntomas específicos, por lo que frecuentemente no se detecta hasta que aparecen graves problemas de salud. Por eso es importante hablar con su médico para que le haga una prueba de azúcar en la sangre, si presenta alguno de los siguientes factores de riesgo de la prediabetes:
• Tener sobrepeso
• Tener 45 años o más.
• Tener uno de los padres, un hermano o una hermana con diabetes tipo 2.
• Realizar actividad física menos de tres veces a la semana.
• Haber tenido alguna vez diabetes gestacional (diabetes durante el embarazo) o haber dado a luz a un bebé que pesó más de 4 kilos. La raza y el grupo étnico también son factores. Los latinoamericanos en especial tienen un riesgo más alto.
Se estima que hasta 70% de las personas con prediabetes pueden desarrollar diabetes tipo 2. Afortunadamente, que la prediabetes progrese a diabetes tipo 2 no es inevitable. Aunque existen ciertos factores que no se pueden cambiar, como la genética, la edad o el comportamiento en el pasado, existen varias medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo de desarrollarla.
Con la prediabetes usted puede elegir dos caminos: si la ignora, su riesgo de tener diabetes tipo 2 aumenta, pero puede prevenir que la prediabetes se convierta en diabetes o retrasar su aparición con cambios en su estilo de vida que son simples, pero de comprobada eficacia. A continuación, se describen algunas medidas que ayudarán a evitar llegar a la diabetes:
Comer alimentos ricos en carbohidratos refinados y azúcar aumenta los niveles de azúcar en la sangre y de insulina, lo que puede conducir a la diabetes con el tiempo. Evitar estos alimentos puede ayudar a reducir el riesgo.
Realizar actividad física con regularidad aumenta la secreción y sensibilidad a la insulina, lo que puede ayudar a evitar que la prediabetes progrese a diabetes.
Beber agua en lugar de otras bebidas puede ayudarle a controlar el azúcar en la sangre y los niveles de insulina y, por lo tanto, a reducir el riesgo de diabetes.
Bajar de peso si tienes sobrepeso u obesidad. Tener peso de más, particularmente en el área abdominal, aumenta la probabilidad de desarrollar diabetes. Perder peso puede reducir significativamente el riesgo de diabetes.
Dejar de fumar está fuertemente vinculado con el riesgo de diabetes, especialmente en fumadores excesivos. Dejar de fumar ha demostrado reducir el riesgo con el tiempo.
Seguir una dieta muy baja en carbohidratos, puede ayudar a mantener los niveles de azúcar en la sangre y de insulina bajo control, lo que puede proteger de la diabetes.
Tener cuidado con el tamaño de las porciones. Evitar las porciones grandes ayuda a reducir los niveles de insulina y de azúcar en la sangre, así como a disminuir el riesgo de diabetes.
Evitar el comportamiento sedentario. Cambiar el comportamiento sedentario puede ser tan simple como pararse del escritorio cada hora y caminar durante unos minutos, pararse mientras se habla por teléfono o usar las escaleras en lugar del elevador son acciones que nos pueden ayudar. Comprometerse con estas acciones concretas y sencillas puede ser la mejor manera de revertir las tendencias sedentarias.
Consumir mucha fibra es muy benéfico para la salud intestinal y el control del peso. Consumir una buena fuente de fibra en cada comida puede ayudar a prevenir picos en los niveles de azúcar en la sangre y de insulina, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar diabetes.
Optimizar los niveles de vitamina D es importante para el control del azúcar en la sangre, consumir alimentos con alto contenido de vitamina D o tomar suplementos puede optimizar los niveles de esta vitamina en la sangre, reduciendo el riesgo de diabetes.


Minimizar el consumo de alimentos procesados y enfocarse en los alimentos naturales con efectos protectores puede ayudar a disminuir el riesgo de diabetes.
Tomar café o té. Aunque el agua debería ser la bebida principal, las investigaciones sugieren que incluir café o té en la dieta puede ayudarte a evitar la diabetes. El café y el té tienen antioxidantes conocidos como polifenoles que pueden ayudar a proteger contra la diabetes.
Además, el té verde contiene un compuesto antioxidante único llamado galato de epigalocatequina (EGCG) que se ha demostrado que reduce la liberación de azúcar en la sangre del hígado y aumenta la sensibilidad a la insulina.
Tenemos el control sobre muchos de los factores que influyen en la diabetes. En lugar de ver la prediabetes como un trampolín para tener esta enfermedad, debemos tomarla como un motivador para realizar cambios que pueden ayudar a reducir el riesgo.


Comer los alimentos correctos y adoptar otros comportamientos en el estilo de vida que promuevan niveles saludables de azúcar en la sangre y de insulina, ofrecerán una mejor oportunidad de evitar la diabetes.








