
3 minute read
población económicamente activa
l a dinámica del ajuste del mercado laboral 31
TABLA 2.1 Componentes cíclicos del crecimiento del PIB, la tasa de desempleo y flujos netos desde la población económicamente activa
Tasa de desempleo Flujos desde la población activa
Países Correlación MCO MCO
Argentina -0,557 -0,061 *** -1391,3 Brasil -0,444 -0,098 ** -291,5 Chile -0,489 -0,110 ** -1403,9 Ecuador -0,520 -0,159 *** -687,3 México -0,533 -0,079 *** 12980,1 ** Perú -0,143 -0,035 2519,0 **
Fuente: Sousa 2021. Nota: Esta tabla presenta los coeficientes de correlación y los coeficientes de una regresión simple de MCO de las tasas de desempleo y crecimiento del PIB (ambas sin tendencia), con desfase de un trimestre, de los seis países estudiados. MCO = mínimos cuadrados ordinarios; PIB = producto interno bruto. Nivel de significación: * = 90 %, ** = 95 %, *** = 99 %.
Informalidad
No todos los flujos del mercado laboral que surgen con las crisis son pérdidas de empleo. En América Latina en particular, el voluminoso sector informal amortigua la relación de la ley de Okun entre el crecimiento del PIB y el desempleo (David, Lambert y Toscani 2019). Por lo tanto, caracterizar totalmente el margen cuantitativo del ajuste durante las desaceleraciones en dichas economías implica no limitarse a la dinámica del desempleo. El escaso acceso de la región a la cobertura del seguro de desempleo probablemente disminuya los salarios de reserva y acorte las búsquedas de empleo. Aunque estos factores reducen el desempleo a corto plazo, también pueden dar lugar a coincidencias laborales de menor calidad.4 En la región de ALC, donde la mayoría de los puestos de trabajo son informales —empleo por cuenta propia (23 %) y trabajo asalariado dependiente informal (35 %)5— un recorte de puestos en el sector formal podría provocar que cada vez más trabajadores se incorporen al sector informal.6 ¿Está haciendo la informalidad el «trabajo sucio» de mantener el empleo en las economías de América Latina?
Estudios previos han demostrado que, aunque el empleo informal no siempre es inferior al empleo formal en la región de ALC, probablemente absorbe parte de los trabajadores del sector formal desplazados durante las recesiones. Maloney (1999), que se basa en datos de México, presenta uno de los primeros análisis de transiciones laborales entre trabajos formales e informales. El autor concluye que el mercado laboral para trabajadores relativamente poco cualificados podría estar integrado por los sectores formal e informal, y ofrecer puestos de trabajo atractivos con distintas características. Bosch y Maloney (2008) observan que la composición sectorial de propio empleo es cíclica: el empleo informal generalmente es contracíclico, mientras que en el empleo formal ocurre lo contrario. Bosch y Maloney (2010), que emplean datos de panel de encuestas de Argentina, Brasil y México y procesos de transición de Markov de tiempo continuo, hallan pruebas que apoyan la incorporación voluntaria al empleo informal, especialmente al trabajo por cuenta propia. Sin embargo, al considerar las tasas de transición en todo el ciclo económico, describen una mayor probabilidad de transitar del empleo asalariado formal al informal durante las recesiones, especialmente en el caso de trabajadores jóvenes.
De hecho, los flujos netos de trabajadores en los seis países estudiados sugieren que el trabajo informal e independiente actúa como un amortiguador del empleo durante las recesiones económicas en la región de ALC. El gráfico 2.2 muestra los flujos netos, la diferencia entre el número de nuevos trabajadores que entran y salen de un sector en cada trimestre, para puestos de trabajo del sector privado formal y puestos de trabajo informales o independientes. Existe una fuerte correlación negativa entre los flujos de empleo formal e informal en cinco de los seis países analizados. Es decir, en dichos países, las reducciones en los flujos netos hacia la formalidad suelen ir acompañadas de un aumento de los flujos hacia la informalidad y el trabajo independiente, y viceversa.