Hay un clima de profunda irritación y descontento social en todo el país, que si bien se desencadenó con el famoso “gasolinazo” y la subida de precios –incluyendo la del peso/dólar- en realidad es producto de un acumulado de varios años (no sólo los de este gobierno) de: errores, injusticias, corrupción, violencia, pobreza, desigualdad y represión para toda la población, pero muy en particular para las mujeres.
En el norte del país ha habido varias protestas y manifestaciones muy nutridas, para ellos los aumentos de precios han estado acompañados de un crecimiento en la violencia y el narco, así como la fuerte depreciación del peso, que tanto afecta su economía familiar. Además, en estas ciudades hay mayor dependencia del automóvil, entre otras razones porque el transporte público es prácticamente inexistente y caro.
Los índices de aceptación del Presidente son los más bajos en los últimos 30 años, sólo una de cada diez personas aprueba su gestión...