ESPACIOS
LÍDERES
CREANDO Por: Carlos A. Rubi Molina.
Shantal de la Guerra Maceo, Pamela Marrón Cruchaga y Gabriela Sosa Aguirre (Arquitectura, Gen. 2010, 2012 y 2011, respectivamente).
S
iempre escuchamos que no existe el “yo” en un equipo. Sin embargo, Pamela, Shantal y Gaby forman un trío muy peculiar que desafía ese refrán. Son parte del talentoso equipo de Nuevos Proyectos en la inmobiliaria del Yucatan Country Club, donde cada una tiene su propia esencia, pero cuyas ideas, creatividad y talento, se conjugan en armonía para desarrollar importantes proyectos que involucran grandes retos. “La Universidad fue clave para poder integrarnos a la inmobiliaria del Yucatan Country Club, ya que dos de nosotras realizamos nuestras prácticas profesionales en esta empresa y Gaby encontró la vacante a través de la bolsa de trabajo Contacto Anáhuac,” afirman. “Nos graduamos hace aproximadamente 3 años y nuestra Universidad fue una plataforma importante, ya que además de la formación profesional nos vinculamos con el medio laboral y ahora estamos en un lugar donde hemos podido crecer y aprender como profesionistas”, señalan. Las tres jóvenes arquitectas son parte integral de los proyectos de interiorismo del Yucatan Country Club que incluye complejos tan diversos como las townhouses Serena, las villas Harmonia, los departamentos Anthea y las Country Towers, ubicadas en
Fachada de Anthea, uno de los complejos del Yucatan Country Club.
Altabrisa. Estas últimas, son las torres más altas del sureste, mencionadas en pasadas ediciones de Vida Anáhuac. “Trabajar entre amigas enriquece los proyectos, ya que disfrutas aún más tu trabajo, incluso a pesar del estrés o los contratiempos que puedan presentarse,” comentan. La carrera de Arquitectura está llena de retos: “aún recordamos los desvelos, trabajos en equipos, maquetas y mucho estrés durante el tiempo en nuestra alma máter, pero eso creó fuertes vínculos de amistad por lo que cada uno de nuestros compañeros tiene un papel importante en nuestras vidas.” También agradecieron la labor de profesores como el Arq. Luis Artigas; el esfuerzo, revisiones y desvelos rinden frutos a través de sus éxitos profesionales.
Como todos los estudiantes que están próximos a graduarse, llegas a un punto en el que te invade el miedo de no saber qué harás cuando egreses o si serás realmente bueno en lo que haces. “Actualmente, por el mundo globalizado y competitivo en el que nos encontramos, falta mucho por trabajar, por aprender y, en un futuro, por enseñar para poder consolidar nuestro trabajo con éxito.” “La arquitectura (y cualquiera que sea tu profesión) debe apasionarte; un arquitecto nunca dejará de fijarse en el más mínimo detalle al entrar a cualquier casa o edificio”, señalan. Nuestra próxima meta es cursar una maestría enfocada en el diseño de interiores o paisajismo, una rama que se ajusta a nuestra visión ya que se enfoca en el detalle,” concluyen las talentosas jóvenes.
VIDA ANÁHUAC 05