UMBRALES Y PLIEGUES. ACERCA DEL INTERIOR Y DE LA INTERIORIDAD escenas evocan sobre todo jardines y composiciones arquitectónicas, ventana. Sabine Lietz, en su libro Das Fenster des Barock, muestra la y constituyen paisajes minúsculos dispuestos como si hubiesen salido continuidad de los tratados teóricos de las ventanas, ilustrados por por arte de magia de una caja de curiosidades o de una Wunder- Michelangelo, Vincenzo Scamozzi o, aun en el siglo XVIII, Sébastien Le kammer. Y lo más importante es que Zahn dibuja el equivalente Clerc o Jacques-François Neufforge; en los ejemplos citados, la arquitectónico de este dispositivo en la segunda edición del Oculus ventana está representada desde el exterior y es tratada bajo el artificialis (Nuremberg, 1702). Bautizado como conclave catoptricum, régimen de órdenes (dórica, jónica, corintia, etc.) que gobiernan la es una construcción hexagonal de dos pisos –una pieza situada sobre arquitectura. Por otra parte, las fuentes para el tratamiento de las un pedestal. La pieza está forrada de espejos en todas sus caras mismas ventanas del interior aparecen en una serie de grabados, por interiores, a excepción de una abertura en material semitraslúcido ejemplo, los de Nicolás Pineau, Pierre Ranson, Jacques-François que permite que la luz entre directamente. El tabique está lleno de Blondel o Jean-Démosthène Dugourc. De hecho, los retornos de la imágenes celestes. Como una maqueta, esta construcción parece decoración interior y la escultura, las partes de decoración, los estilos darnos un modelo casi perfecto del sujeto leibniciano, dividido entre de moda, el brutal cambio del gusto, vienen acompañados de la el cuerpo –el –zócalo, la planta baja abierta al mundo gracias a las contribución no solamente de arquitectos, sino también de realizaaberturas que representan los cinco sentidos–; y el espíritu o el alma dores de gabinetes, tapiceros, pintores de paredes, instaladores de –la cámara superior, totalmente cerrada e interiorizada, pero espejos, fabricantes de cortinas, y así sucesivamente. La sección que dejando abierta una puerta hacia el infinito, el más allá. El espíritu, muestra la puesta a punto del Château de Petit-Bourg, reconstruido como mónada, está representado como un mundo completo por la por el duque de Antin a principios de 1720, ilustra este modo de simple razón que a través de múltiples reflejos es posible imaginar el representación. En el siglo XVIII, en el interior del cuadro teórico de la arquitectura –como se observa en los dibujos de edificios existentes mundo entero en el interior de sus propios límites. Y, de hecho, el espacio monádico para Deleuze es “el ideal arquitec- en los tratados–, parece haber una separación clara entre la tónico de una pieza en mármol negro donde la luz solamente comprensión de las elevaciones interiores y el exterior de la ventana. penetra a través de dos orificios tan bien cerrados que no se pueden Vista desde el exterior, la morfología de la ventana obedece a unas ver desde el exterior pero que iluminan o colorean las decoraciones reglas del régimen clásico de la arquitectura. Desde el interior, sin de un puro interior...”. Ilustra esta definición, no con la arquitectura embargo, la ventana pertenece al registro de la decoración interior, y catóptrica de Zahn sino con los cánones de la luz de la capilla del no está atada a las reglas del clasicismo, sino orquestada por nuevos convento de la Tourette de Le Corbusier (Gilles Deleuze, El pliegue. imperativos de la conveniencia arquitectónica –distribución, beneLeibniz y el barroco, pág. 39). Si la fachada independiente barroca se ficio y bienestar (definido así por Blondel), gusto y moda. La ventana, presenta a sí misma como un “exterior sin interior”, entonces los desde entonces, no es tanto un umbral que funciona como interiores monádicos son “un interior sin exterior”: “puro interior sin separador, sino más bien el golfo abismal entre un aparato formal exterior, interioridad cerrada con ingravidez, tapizada de pliegues exterior y un interior que se está transformando bajo los nuevos espontáneos que no son más que los de un alma o de un espíritu”. dictados del confort. Estos dos espacios barrocos de pura exterioridad y de pura interio- Uno de los detalles fundamentales de la nueva decoración interior ridad son representados por Leibniz con dos vectores, uno, hundién- es el espejo. En el siglo XVIII, la óptica permite una serie de expedose en la parte baja, descendiendo al nivel físico, y el otro subiendo riencias sobre las ilusiones creadas tanto por dispositivos catóptricos hacia arriba, hacia la luz metafísica de las almas. Para Leibniz, estos como por la camera obscura, mientras que los espejos empiezan a espacios son coexistentes, como en la arquitectura barroca aparecer en los hoteles particulares de la ciudad y en las casas de la doméstica; el interior y el exterior habitan “una misma casa”. provincia. Durante la Regencia, los hoteles bellos de París son En los tiempos modernos, la ruptura entre arriba y abajo, el alma y decorados con entreventanas y espejos encuadrados, colocados el cuerpo, el interior y el exterior, se refiere a la distinción barroca, sobre la chimenea. A menudo, otra “entreventana de cristal” se pero es una referencia que, como un pliegue, articula claramente coloca en lo alto de la consola, en una posición simétrica, frente a la esta diferencia. El pliegue es pues la actualización de la diferencia chimenea. Los dos espejos crean así una perspectiva infinita y virtual entre “los pliegues íntimos que el alma encierra en el piso superior” (denominada espejos de repetición), paralela a la vista a través de y “los repliegues que la materia hace nacer los unos de los otros, una serie de puertas que conducen de una pieza a la otra, creando siempre en el exterior, en el piso de abajo”. El Zweifalt establece la una hilera o una vista axial. A lo largo del siglo XVIII, en ocasiones se diferenciación, lo que en términos heideggerianos se articula como colocan entreventanas y espejos entre cada abertura vidriada. Las el “doble pliegue” o “la diferenciación de la diferencia”. En la casa ventanas dan frente al muro recubierto de paneles de espejos y monádica de Leibniz, el pliegue es lo que conecta el nivel más alto crean así la ilusión de un vasto paisaje a su alrededor. Coexisten dos con el nivel más bajo, o lo espiritual con lo físico; esto sucede clases de perspectiva, una real, resultado de la hilera de puertas que porque, aunque el pliegue es doble, es imposible suprimir un lado distribuyen las piezas y que permiten la circulación por la casa; otra sin suprimir el otro. Como un dispositivo de reflexión, el espejo imaginaria, nacida de la proyección creada por los espejos que “cristal vivo” actúa de intermediario entre dos mundos, abriendo las multiplican hasta el infinito el paisaje exterior que se refleja en ellos. posibilidades de la imaginación y de la ilusión, y puede que ésta sea Así, colocado en la intersección de ejes perspectivos, el sujeto la razón por la que fue escogido para representar el espacio moná- descubre un mundo inmenso dónde se suman en un único volumen dico. No es solamente un medio entre el espíritu y la materia, lo lo real, la ilusión y el entorno. ideal y lo real, sino también tradicionalmente un mediador entre la Así, las habitaciones se revisten de espejos, creando el cabinet des eternidad y lo que termina, el infinito y lo acabado, o el interior y el glaces a la francesa, en el siglo XVIII, (como la “galleria degli specchi” exterior. Así concreta la cualidad gemela del medio, el ser doble del a la italiana) la más famosa de las cuales fue la de Versalles, intermediario y el doble de los opuestos –el separador, en otras construida hacia el 1680, y el nórdico Spiegelkabinett, que incluía la palabras, el que viene entre dos términos: el “entre dos” o bien, el geometría compleja del tabique de la Biblioteca del Castillo de Het “incidente” (der Zwischenfall), como la fórmula de Heidegger. Loo en Holanda. Hacia 1716, Johan Friedrich Nette y Antonio Bossi Otro dispositivo que parece que ofrece un ejemplo paradigmático de conciben en Ludwigsburg, en la región de Wurtemberg, un entorno la noción de umbral entre el interior y el exterior es, naturalmente, la de espejos esféricos, de formas caprichosas, cubriendo los muros y 30