
2 minute read
Cómo la educación para directivos puede contribuir al desarrollo sostenible?
Lidia López
Licenciada en Derecho, Magister en Dirección de Comercio Internacional
Advertisement
Desde hace unos años las grandes empresas y organizaciones han definido lo que hoy conocemos como desarrollo sostenible, que no es más que una visión del uso de los recursos naturales y humanos con miras a garantizar su conservación en el tiempo para que futuras generaciones puedan disfrutarlos. Se habla de autosuficiencia, cuidado de la naturaleza, desarrollo de actividades económicas que garanticen mejor calidad de vida, igualdad, equidad, eficiencia, reciclaje, reutilización, economía circular. Para poder hacer posible la sostenibilidad en todas las demarcaciones de la humanidad, se requiriere de hombres y mujeres con una visión mucho más evolucionada del mundo y capaces de mejorarse constantemente, sin miedo a desaprender y aprender y con muchos deseos de un mundo mejor. De hecho, si estudiamos la historia de la humanidad, veremos que esta ha logrado sus mayores transformaciones, intencionalmente o no, gracias a la conformación de grupos influenciados por personas con cualidades extraordinarias e integrales. Hombres y mujeres con deseos de cambios, con alto compromiso por el bienestar de la comunidad, con iniciativa, valientes y con objetivos bien definidos. El factor común que más resalta a este grupo de líderes es precisamente la educación
50
que recibieron en los primeros años y la que continúan recibiendo a través de capacitaciones y transformaciones del conocimiento; las grandes empresas que hoy conquistan la mayoría de los mercados económicos y sociales, son lideradas por personas con una visión del mundo evolucionada para el momento en el que se encuentran. Las organizaciones son los motores de productividad de la sociedad y si deseamos alcanzar la meta de un desarrollo sostenible, es precisamente a través de los directivos que las tutelan que seremos capaces de mantener el ritmo. Por eso es necesario comprender y multiplicar, no sólo el desarrollo sostenible como marco referencial y de acción, sino también es necesario que capacitemos lideres sostenibles, capaces de comprender y ejecutar una integración equilibrada de las tres áreas más importantes del ser humano: economía, ambiente y sociedad. Solo a través de la educación en gestión a largo plazo, desarrollo humano, responsabilidad ambiental y trabajo en equipo podremos garantizar el desarrollo sostenible para las futuras generaciones. Para quien suscribe, el futuro de las generaciones se encuentra en manos de todos los que hoy vivimos el presente, y conformar organizaciones con líderes formados en sus áreas de expertos y capaces de transformarse y mejorarse constantemente a través de la educación, parece ser la idea más acertada. Atrás quedó el liderazgo centralizado en un solo conocimiento y se le ha dado paso a la diversificación, el crecimiento y la mejor versión.







