Manual de campo - Colección Entomológica Maria Sibylla Merian (CEMS) - Álvarez & González 2021

MANUAL DE PROCEDIMIENTOS DE CAMPO COLECCIÓN ENTOMOLÓGICA MARIA SIBYLLA MERIAN (CEMS)

VERSIÓN 1 (2021-08-01)

GRUPO DE INVESTIGACIÓN BIOTA Y SOCIEDAD FUNDACIÓN TRÓPICO ALTO RED DE RESERVAS NATURALES DEL TRÓPICO ALTO Foto: A.E. Ojeda-Rodríguez

CONTENIDO INTRODUCCIÓN ............................................................................................................................................................... 3 OBSERVACIONES PRELIMINARES ..................................................................................................................................... 4 GRANDES AMBIENTES MONTAÑOSOS............................................................................................................................ 4 Bosque subandino ................................................................................................................................................ 4 Bosque andino........................................................................................................................................................ 5 Bosque altoandino ................................................................................................................................................ 5 Páramo ...................................................................................................................................................................... 5 MÉTODOS DE MUESTREO ................................................................................................................................................ 6 Captura e inspección manual ............................................................................................................................ 6 Red entomológica ................................................................................................................................................. 7 Trampas van Someren-Rydon .......................................................................................................................... 8 Tipos de cebos........................................................................................................................................................ 9 Red de golpeteo o batido del follaje ............................................................................................................. 9 Trampa de caída .................................................................................................................................................. 10 Trampa automática de luz ultravioleta ........................................................................................................ 11 Aspirador ................................................................................................................................................................ 12 Trampa de Intersección en vuelo .................................................................................................................. 12 MANEJO Y TRANSPORTE DE MATERIAL EN CAMPO ..................................................................................................... 13 Sacrificio y preservación ................................................................................................................................... 13 FOTOGRAFÍAS EN CAMPO ............................................................................................................................................. 14 INFORMACIÓN BÁSICA .................................................................................................................................................. 15 FORMATOS DE CAMPO .................................................................................................................................................. 15 LITERATURA CITADA ...................................................................................................................................................... 20

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MANUAL DE PROCEDIMIENTOS DE CAMPO COLECCIÓN ENTOMOLÓGICA MARIA SIBYLLA MERIAN (CEMS) Sandra Milena Álvarez Gómez. Directora – Curadora General. smalvarez@tropicoalto.ong Juliana González Arteaga. Curadora Asociada. jgonzalez@tropicoalto.ong Bogotá, D.C., Colombia. coleccion_cems@tropicoalto.ong Versión 1 (2021-08-01) Cítese como: Álvarez-Gómez, S.M. & J. González-Arteaga. (2021). Manual de procedimientos de campo. Colección Entomológica Maria Sibylla Merian (CEMS). Versión 1 (2021-08-01). Recurso electrónico. Colección Entomológica Maria Sibylla Merian, Grupo de Investigación Biota y Sociedad, Fundación Trópico Alto, Red de Reservas Naturales del Trópico Alto: 22 pp. Bogotá. DOI: 10.13140/RG.2.2.13079.70568 URL: https://bit.ly/3uf0Lco

INTRODUCCIÓN El desarrollo de las ciencias naturales experimentales es fundamental para comprender el entorno en el cual se desarrolla la vida en el planeta y promover la sostenibilidad de nuestras sociedades humanas. Dada su importancia, su ejercicio debe adelantarse mediante procedimientos adecuados efectuados por personal idóneo. Países como el nuestro han reconocido estas necesidades y han impulsado marcos legales que les ofrecen sustento y regulación.

El Proyecto de Ley 157/2018 presentado ante la Comisión Sexta de la Cámara de Representantes de Colombia reconoce a la biología como profesión en el país, vinculándola en su Artículo 2 con toda actividad relacionada con la aplicación de los principales conocimientos y técnicas propias de las diferentes áreas que conforman esta disciplina, incluyendo actividades como la dirección, administración, asesoramiento, evaluación y ejecución de acciones dirigidas a la docencia, investigación, manejo, conservación y uso sostenible de la biodiversidad (CC, 2018).

De la misma manera, la normatividad resumida en el Decreto 1076 de 2015 expedido por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS 2015) integra diversas disposiciones para la recolección y depósito de los ejemplares obtenidos en trabajos de investigación científica y estudios ambientales desarrollados en país, los cuales deben estar amparados bajo permisos de recolección de especímenes, y promoviendo la divulgación pública de su información asociada bajo los criterios establecidos por el Sistema de Información sobre Biodiversidad de Colombia (SiB), cuyo proceso es reglamentado por el Ministerio, el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt (IAvH), la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) y las Corporaciones Ambientales Regionales (CARs), de acuerdo con la jurisdicción en donde se lleven a cabo los estudios.

Acogiéndonos a estas disposiciones, presentamos a continuación una síntesis de los métodos técnicos considerados por la Colección Entomológica Maria Sibylla Merian (CEMS) para el desarrollo de sus prácticas de campo. El procesamiento de los ejemplares recolectados junto con su depósito, su administración y la gestión de su información asociada será coordinada por CEMS de acuerdo con los lineamientos complementarios trazados en su Protocolo de Manejo y su Reglamento Interno (Álvarez-Gómez y González-Arteaga, 2021; Álvarez-Gómez et al., 2021), en todo caso ajustándose a los fines y objeto definidos para la Fundación Trópico Alto (FTA) y los propósitos de las instituciones asociadas.

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OBSERVACIONES PRELIMINARES De manera general, se tendrán en cuenta las recomendaciones para el desarrollo de inventarios de biodiversidad descritas por Andrade-Correa et al. (2013), Fernández-García et al. (2017) y Ríos-Málaver (2019).

Previo al inicio de las labores en el terreno, los responsables de los proyectos deberán definir con la Colección un Código Único de Identificación (CUI), correspondiente a una sigla de tres letras que representa a los proyectos y los investigadores responsables de las recolectas, destinada a asegurar ante CEMS y la Fundación Trópico Alto (FTA) la trazabilidad de los especímenes recolectados, las fotografías y demás metadatos generados durante la fase experimental (Tabla 1).

Tabla 1. Códigos Únicos de Identificación empleados por los responsables de diferentes proyectos de la Colección CEMS (2018-2019) ID SMA JGA PPS

Coordinador de Inventario Álvarez-Gómez, S.M González-Arteaga, J. Proyecto Páramo Subachoque

Para la obtención de información de calidad, uso eficiente y trasparencia en los datos de cada uno de los proyectos se adoptarán las siguientes medidas: ▪

Actualización periódica de formatos relacionados con la toma de datos geoespaciales, ecológicos y demás áreas de interés del proyecto.

▪

Implementación de formatos para el ingreso y seguimiento de los ejemplares depositados, bajo los estándares legales nacionales vigentes.

▪

Capacitación del personal sobre el manejo, propósito, y seguimiento de los procesos de recolecta de entomofauna.

GRANDES AMBIENTES MONTAÑOSOS La historia natural de los Andes colombianos nos permite comprender cómo la evolución de las cordilleras emergidas del mar ecuatorial ha configurado los paisajes cambiantes que hoy conocemos, condicionando en nuestro país la formación de franjas de ambientes contrastantes que se suceden a diferentes elevaciones, abarcando selvas y sabanas tropicales, sistemas montanos subandinos y andinos, y la alta montaña con bosques altoandinos, páramos y glaciares. Esta sucesión altitudinal ha sido descrita por autores como Cuatrecasas (1934, 1958), Rangel-Churio et al. (1997), Rangel-Churio (2000) y van-derHammen (2008), entre otros.

Con el ánimo de establecer una aproximación rápida sobre el estado y la conservación de los ecosistemas en los sitios donde la FTA desarrolla sus investigaciones ambientales (con énfasis en la cordillera Oriental colombiana), se reconocen los siguientes grandes ambientes propios de nuestras zonas de montaña, de acuerdo con la estructura general de las formaciones vegetales que allí se presentan:

Bosque subandino

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Corresponde a la franja boscosa ubicada a partir de 1000 m, definidos como una transición entre el trópico propiamente dicho y los ambientes de alta montaña, razón por la cual comparte una buena proporción de sus especies con ambas formaciones vegetales. El dosel del bosque puede alcanzar alturas de hasta 35 m, y en ellos es común la presencia de palmas y especies de las familias Lauraceae y Sapotaceae, así como diversas variedades de epífitas, orquídeas y helechos arborescentes.

En cuanto a fauna, esta zona es bastante rica en endemismos de aves, así como variedad de anfibios, reptiles y mamíferos (Rodríguez-Eraso et al., 2006). En la cordillera Oriental representan ca. 4,4% de los bosques montañosos, sin embargo, han sido reducidos a relictos debido a la fuerte presión antrópica por actividades como cultivos y ganadería. Su importancia radica en la prestación de servicios ecosistémicos, considerados fuentes de almacenamiento y regulación de agua, sumado al mantenimiento de los suelos (Rudas et al., 2007).

Bosque andino La franja de bosque Andino se presenta regularmente a partir de los 2400 m, generalmente húmedos debido a sus altos niveles de precipitación, con temperaturas medias entre 5-15°C. Sus límites altitudinales varían, ya que en las vertientes lluviosas las formaciones tienden a desplazarse hacia arriba (Rangel-Churio et al., 1997, Rodríguez et al., 2006). La diversidad de fauna y flora es numerosa, en esta última destacan familias como Laureaceae, Melastomataceae y Rubiaceae, sumado a endemismos importantes de mamíferos, aves e insectos (Kattan, 2003).

Bosque altoandino En el país estos bosques se encuentran ubicados generalmente por encima de los 3000 m, ocupando cerca del 8% del territorio nacional, drásticamente reducidos por cuenta de la fuerte presión antrópica a la que han sido sometidos (Rodríguez-Eraso et al., 2006). Según Cuatrecasas (1934,1958), el bosque altoandino se sitúa entre los 3000-3300 m, sin embargo, su distribución fluctúa de acuerdo con las condiciones edáfico-climáticas locales, la exposición al viento, y factores antropogénicos, entre otros, evidenciándose que su límite superior llega a descender en zonas con baja precipitación, ascendiendo en zonas con vientos altamente húmedos como en las laderas exteriores de las cordilleras (van-der-Hammen et al., 2002).

En esta franja se observan algunas condiciones ambientales como elevada humedad atmosférica, temperaturas medias entre 6-12°C y bajas tasas de radiación e insolación, las cuales son compartidas con diversos ecosistemas tropicales montanos, no obstante, se distingue por la presencia de nubosidad permanente, llegando a ser considerados como “bosques nublados” debido a la persistencia de este fenómeno a lo largo del año, sumado a sus bajos niveles de evapotranspiración inducidos por las altas tasas de precipitación horizontal anual, las cuales oscilan entre 4000-5000 mm (Rodríguez et al., 2006). De esa forma, su microclima representa un factor determinante en estos bosques (Mora-Osejo y Sturm,1995).

Páramo Los páramos ocupan cerca del 2,5% de la superficie total del país, conformando unos 36 complejos geográficos que equivalen al 50% del total de páramos andinos, cifra sobresaliente entre los países de la región (Sarmiento-Pinzón et al., 2013). La riqueza faunística y florística que poseen es sobresaliente, con cerca de 128 familias de plantas vasculares distribuidas en unos 578 géneros y 2947 especies. En cuanto a fauna, se han registrado alrededor de 70 especies de mamíferos, 11 de lagartos, 4 especies de serpientes, 87 de anfibios, 154 de aves y 130 especies de mariposas (Morales-Betancourt y Estévez-Varón, 2006; Rangel-Churio, 2018), albergando un gran número de endemismos. Constituye una región natural heterogénea definida por la interrelación entre el suelo, el clima, la biota y la influencia humana (Hofstede et al., 2003).

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Diferentes autores han propuesto una zonificación de los páramos con base en variaciones en la dominancia y distribución de la vegetación en tres franjas: subpáramo o páramo bajo, páramo medio o propiamente dicho, y páramo alto o superpáramo (Cuatrecasas, 1934; van-der-Hammen y Otero-García, 2007).

El subpáramo constituye un cinturón de vegetación con abundantes elementos arbustivos de las familias Asteraceae y Ericaceae, representando una zona de transición entre el bosque altoandino y el páramo de gramíneas entre los ca. 3000-3200 m, conformando un ecotono entre la vegetación cerrada de la media montaña y la abierta de la parte superior. El páramo propiamente dicho se encuentra distribuido principalmente entre los ca. 3500-4100 m, presentando una vegetación achaparrada de doseles abiertos con predominancia de pajonales, rosetales-frailejonales y chuscales, sucedido altitudinalmente por el superpáramo, en donde se destaca la vegetación baja y discontinua con gran proporción de sustratos descubiertos (Cuatrecasas 1934, 1958; Rangel-Churio 2000).

MÉTODOS DE MUESTREO Los ecosistemas de alta y media montaña del neotrópico se caracterizan por su riqueza significativa. En el caso de los insectos terrestres, se destacan órdenes como Lepidoptera, Coleoptera, Hemiptera y Diptera.

Para inventariar su diversidad se han empleado diferentes estrategias de muestreo, siendo utilizadas con regularidad en inventarios y monitoreos (Fernández-García et al., 2017). Describimos a continuación algunos de los métodos adoptados en el presente protocolo, indicando los grupos entomológicos que pueden ser detectados con mayor frecuencia.

Captura e inspección manual Consiste en inspeccionar cuidadosamente el área de interés, registrando piedras, troncos o materia orgánica en descomposición como hojarasca, corteza de árboles y arbustos, epífitas, ramas huecas, flores, hojas, nectarios, entre otras estructuras. Los ejemplares que sean encontrados serán capturados manualmente con pinzas, frascos y cámaras letales (Figura 1).

Una de las principales ventajas de este método es la posibilidad de obtener datos acerca de la historia natural de la especie, estadios de su ciclo de vida, planta hospedante, hábito alimenticio, abundancia, entre otros.

Para el caso especial de los insectos del orden Hemiptera pertenecientes al suborden Sternorrhyncha, que viven adheridos a las plantas, deben recolectarse con una muestra vegetal empleando tijeras de podar, y deberán ser introducidos en un vial de plástico o de vidrio con alcohol etílico al 70%, garantizando la integridad de la muestra y/o el ejemplar.

Figura 1. Cámara letal usada para métodos de captura manual.

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Red entomológica Esta clase de red puede tener diferentes dimensiones en función del grupo que se recolecte: -

Redes con mango más largo, mayor diámetro del alto y bolsa más larga, son usadas para la captura de mariposas.

-

Redes con mango corto, diámetro menor del aro y bolsa más corta, son usadas para la captura de los demás órdenes de insectos (p.ej. Coleoptera, Orthoptera, Diptera, Hemiptera, Hymenoptera).

Deben tener cualidades como ligereza y resistencia de su armazón metálico, permitiendo su fácil manejo y la seguridad necesaria para el barrido que se hace sobre el follaje (jameo).

La recolecta de insectos con la red puede realizarse de dos formas: -

Directa: usada cuando es posible visualizar el insecto. Después de ser capturado, se toma el fondo de la red con dos dedos, dejando la entrada abierta y vuelta hacia abajo (Figura 2a), esto debido a que la mayoría de los insectos se quedarán en el fondo, cerca de los dos dedos, y pueden ser traspasados hacia una cámara letal con alcohol/éter etílico al 70%, o para el caso de las mariposas, sacrificadas mediante presión digital en el tórax (Gibb, 2015).

b.

a .

Figura 2. Captura manual usando la Red Entomológica: a. Recolecta indirecta; b. Recolecta directa. Ilustración: J. González-Arteaga (2021)

-

Indirecta: usada cuando no es posible observar de manera directa a los insectos. La red debe estar abierta y por encima de la hierba, realizando movimientos de barridos rápidos en forma de 8 sobre la vegetación, o por las ramas de los arbustos de 2 m de altura, de acuerdo con el recorrido que lleve la persona que se desplace por el área de muestreo. Después de un número determinado de pasadas por el follaje, la red se gira o dobla rápidamente tapando la apertura de esta para impedir el escape de los insectos (Figura 2b). Los ejemplares capturados contenidos dentro de la red pueden serán transferidos a una cámara letal o a frascos con alcohol al 70% para su preservación.

Algunos inventarios de biodiversidad están enfocados en grupos taxonómicos particulares, cuyo principal objetivo es promover el conocimiento de los patrones de diversidad en diferentes tipos de paisajes, requiriendo diferentes estrategias en sus métodos de muestreo. Por tal razón, en grupos como las

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mariposas la búsqueda directa con red entomológica se complementa con el uso de atrayentes que potencian la efectividad del método, como se ha demostrado en los estudios de Ríos-Málaver (2019). En este, la aspersión de ceviche de camarón y bagre con orina humana sobre papel absorbente blanco de diferentes tamaños, dispuestos a lo largo de transectos en varias regiones de Colombia, permitió una mejor detección, caracterización y estimación de los ensamblajes de mariposas (Figura 3).

b.

a.

Figura 3. Recolecta de mariposas con red entomológica: a. Búsqueda directa; b. Atrayente con base en camarones y pescado disperso sobre el follaje. Fotos: J. González-Arteaga (2019)

Trampas van Someren-Rydon De acuerdo con Freitas et al. (2014), las trampas van Someren-Rydon consisten en un cilindro de tela de malla de colores oscuros como verde, negro o gris, cerrado en la parte superior y abierto en el parte inferior, unido a una base de plástico donde se coloca un plato con el cebo. Las trampas deben tener una altura entre 100-130 cm para evitar que las mariposas escapen, así como guardar un diámetro de mínimo 25 cm que permita la captura de especies grandes como las mariposas búho (Satyrinae: Brassolini). Teniendo en cuenta las especificaciones de Andrade-Correa et al. (2013), la distancia mínima que separa la parte inferior de la trampa y la base debe ser de 2,5 cm (Figura 4), Las mariposas que queden atrapadas deben ser sacrificadas o identificadas, marcadas y liberadas sin causarles daño, de acuerdo con los objetivos del inventario.

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Figura 4. Trampas Van Someren-Rydon.

Tipos de cebos -

Banano y jugo de caña de azúcar: para Freitas et al. (2014) los cebos utilizados en estas trampas van desde las frutas fermentadas jugosas como el mango, la piña y el plátano. La efectividad probada de esta última la ha posicionado como “cebo estándar”, potenciando su acción con jugo de caña, ampliamente usado en Brasil y otros países del neotrópico. Su preparación incluye una mezcla de plátano maduro macerado a mano o en trozos, jugo de caña de azúcar, o jugo de azúcar morena, frutas o bebidas alcohólicas como cerveza (en caso de no contar con jugo de caña), permitiendo humedecer el cebo en días o lugares secos (Vargas-Fernández et al., 1994) y facilitar su proceso de fermentación, el cual debe tomar entre 2-5 días para que sea más atractivo para las mariposas que se alimentan de frutas (Pereira-Santos et al., 2016).

-

Pescado en descomposición: el pescado podrido también ha sido ampliamente utilizado, el cual no sólo atrae a las mariposas que se alimentan de frutas, sino también a otros grupos de mariposas, especialmente del género Adelpha (Nymphalidae: Limenitidinae) y varios Riodinidae, por lo que se considera especialmente bueno para ser utilizado en inventarios maximizados y de corto plazo.

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Heces: las heces de diferentes especies también son visitadas frecuentemente por muchas especies de mariposas, incluidos algunas consideradas frugívoras, siendo el caso de los Satirinos o las que se alimentan de néctar. Se recomienda usarlas como atrayente en inventarios generales, atrayendo a muchas especies de Charaxinae (géneros Prepona, Archaeprepona, Fountainea y Memphis) y algunas Biblidinae (especialmente Eunica, Nessaea y algunos Callicorini) (Freitas et al., 2014).

Trabajar con este tipo de atrayentes es decisión de los investigadores, dado lo desagradable que puede llegar a ser para las personas.

Red de golpeteo o batido del follaje Este método consiste en una vara de ca. 60 cm y una superficie receptora, puede ser un cuadrado de tela blanca de 1 m2 con las esquinas reforzadas por una cruz desarmable o plegable de madera o metal (Figura 5). La red se coloca debajo de las ramas, reteniendo de esta forma los organismos que puedan caer de las ramas del árbol o arbusto a muestrear.

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La red de golpeo es empleada para recolectar insectos pequeños encontrados en árboles y arbustos, difíciles de ver a simple vista. Durante el muestreo la red de golpeo se sostiene colocándola debajo del follaje y con la otra mano libre, las ramas se golpean enérgicamente con una vara de madera por períodos cortos. A medida que los insectos caen sobre la red, se trasladan a frascos con etanol al 70% para su preservación. Este método se considera efectivo para la captura de insectos poco voladores o estados inmaduros de los órdenes Hemiptera, Coleoptera, Hymenoptera y Diptera.

Figura 5. Red o pantalla de golpeteo.

Trampa de caída Consiste en un contenedor pequeño de boca ancha que se entierra hasta la boca del frasco, quedando al nivel del suelo (Figura 6). Los insectos caen en las trampas mientras se desplazan por su territorio, el frasco contiene alcohol etílico, o una mezcla entre alcohol-detergente o agua-detergente. En este último caso, los especímenes deben sacarse con rapidez para evitar su descomposición.

De acuerdo con los objetivos del estudio, las trampas pueden ser revisadas cada 24-72 horas, cada 4 horas para evaluar la actividad diaria, o al amanecer y atardecer para separar organismos nocturnos y diurnos.

Entre los insectos más comunes capturados con este método se encuentran cucarachas (Dyctioptera), escarabajos (Coleoptera) y hormigas (Hymenoptera, Formicidae).

Para el muestreo de coleópteros, las trampas son cebadas con excrementos humanos con la intención de atraer escarabajos coprófagos (Noriega et al., 2008, 2016).

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Figura 6. Trampa de caída.

Trampa automática de luz ultravioleta El fundamento de este método es atraer o capturar insectos nocturnos y crepusculares con lámparas u otras fuentes de luz artificial que generan fuertes emisiones en el rango ultravioleta del espectro, como son los tubos fluorescentes y de luz negra (125 W).

En este caso, la lámpara de luz se acopla a una estructura para la captura de los insectos, colocado sobre un embudo que dirige a los individuos atraídos por la luz a un recipiente, el cual puede o no contener alcohol al 70% con el propósito de preservar la integridad de los ejemplares (Figura 8).

Figura 8. Trampa automática de luz (ultravioleta).

Esta trampa puede colgarse dentro del bosque, colocarse en el suelo, o disponerse en áreas abiertas y sin vegetación. En inventarios deberá usarse en periodos de 2-4 horas, durante las cuales se debe revisar y

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recolectar en intervalos definidos por el investigador con el fin de evitar daños en los ejemplares por acumulación (p.ej. revisiones cada 10 minutos y recolección durante 5 minutos).

Aspirador Esta trampa es empleada para el tratamiento de especímenes pequeños que son difíciles o riesgosos de capturar manualmente. Funciona aplicando la técnica de succión, de manera que los ejemplares se desplacen por los tubos y sean retenidos por un malla o liencillo, evitando que sean succionados a la boca al ejecutar la aspiración (Figura 9).

Al recolectar hormigas hay que tener en cuenta que, aunque estas no se ingieran, las secreciones defensivas pueden penetrar en la boca y ser muy desagradables o alérgicas, especialmente si los individuos son grandes y/o abundantes.

Figura 9. Aspirador. Fuente: internet

Trampa de Intersección en vuelo Son usadas para capturar a los insectos interrumpiendo su vuelo. Para ello se utiliza una malla fina, transparente/negra o verde y de forma rectangular, con dimensiones variables de acuerdo con el área de muestreo, reforzada en los laterales con un borde estrecho de tela más resistente con ojales o lazos, y sujetada a dos postes o troncos, tensionándola para mantener su posición vertical respecto a la vegetación.

Sobre la línea media se coloca una serie de bandejas o recipientes rectangulares de plástico o metal de poca profundidad, los cuales se disponen uno al lado del otro sin dejar espacio entre ellos. Estos deben contener detergente líquido sin olor para eliminar la tensión superficial del agua y permitir que los insectos se sumerjan, o alcohol al 70% como preservante. Se recomienda dejar la trampa abierta por ca. 72 horas (Figura 7).

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Figura 7. Trampa de intersección en vuelo.

MANEJO Y TRANSPORTE DE MATERIAL EN CAMPO Las muestras recolectadas deben separarse en frascos, sobres de papel mantequilla o glasé (glassine), o de plástico con cierre hermético, de acuerdo con la localidad y el tipo de sustrato, sin mezclar ejemplares capturados en diferentes sitios y fechas. Para el manejo, sacrificio y preservación de los especímenes se requieren materiales adicionales como: -

Frascos con tapa de cierre hermético Bolsas de plástico con cierre hermético tamaño mediano a grande Papel absorbente, algodón en lámina Etiquetas de papel libre de ácido o papel pergamino Lápiz o plumones de tinta indeleble

Sacrificio y preservación Cada método de muestreo requiere insumos particulares para preservación, dentro de estos se destacan: -

Líquidos Acetona: embebida en un copo de algodón depositado sobre un frasco dentro de la cámara letal, empleada para el sacrificio de ejemplares que se recolectan mediante captura manual.

Alcohol: usado a una concentración de 70% (3 partes de alcohol por 1 de agua), como medio para sacrificar y preservar la mayoría de los insectos a los cuales no afecte la integridad de su exoesqueleto

-

Sobres de papel: se emplea un papel libre de ácido de textura suave con la intención de preservar insectos de cuerpo delicado como mariposas, libélulas y neurópteros. Deben ser almacenados en cajas de plástico cerradas herméticamente para su transporte y posterior procesamiento en la Colección (Figura 10).

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Figura 10. Sobres de papel como medio de almacenamiento de material. Foto: J. González-Arteaga (2019)

-

Cajas entomológicas: usadas para almacenar insectos de cuerpo duro, los cuales son colocados sobre algodón o papel absorbente dentro de una caja de cartón libre de ácido bien cerrada. Por lo general, los adultos de los diferentes órdenes pueden sacrificarse y preservarse en seco, siendo el caso de Lepidoptera.

El proceso de sacrificio estará asociado al método de preservación del ejemplar. Si se planea su preservación en seco debe usarse cámara letal, o en el caso puntual de las mariposas, presión digital en el tórax (Andrade-Correa et al., 2013; Gibb, 2014) (Figura 11).

Figura 11. Método de presión digital en el tórax. Foto: J. González-Arteaga (2019)

FOTOGRAFÍAS EN CAMPO Las fotografías digitales que se tomen a los ejemplares en campo deberán entregarse organizadas, rotuladas con los códigos únicos de seguimiento de los especímenes y su determinación taxonómica, y almacenadas en una carpeta anexa a los formatos de campo diligenciados y sistematizados.

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INFORMACIÓN BÁSICA Algunos datos mínimos deben ser registrados en el terreno con el propósito de documentar el evento de muestreo y el sitio de estudio, siendo consignados como respaldo en formatos impresos, plantillas automatizadas o libretas de campo proporcionadas para el proyecto respectivo:

-

Datos del recolector: en campo se hará seguimiento del material mediante los códigos únicos de identificación de los responsables y sus consecutivos personales de recolecta. Para los formatos y etiquetas manuscritas debe registrarse el primer apellido seguido de la inicial del nombre propio y el consecutivo de recolecta, antecedido por la abreviatura “Rec.” (en referencia al recolector).

-

Fecha de captura: tanto para los datos manuscritos como sistematizados se debe registrar en orden jerárquico año-mes-día, ajustándose al estándar ISO 8601 (YYYY-MM-DD, p.ej. 2021-06-18)

-

Localidad: los datos deben proporcionarse siguiendo un orden jerárquico: país, departamento, municipio/corregimiento, vereda, toponimia detallada (nombre como se conoce el sitio y forma de acceder al mismo).

-

Coordenadas y elevación: deben ser capturadas con dispositivos GPS y altímetro barométrico.

Estas serán corroboradas posteriormente mediante comparación con cartografía oficial y modelos digitales de elevación.

-

Tipo de vegetación o sustrato: documentación del sitio o sustrato donde fue recolectado el individuo respectivo. En el caso del orden Hemiptera, y en particular de los insectos escama, es esencial conocer el sustrato en donde se encontraban adheridos los especímenes.

-

Datos ambientales (complementarios): observaciones sobre las condiciones climáticas durante el evento de muestreo (p ej: temperatura, humedad, día lluvioso, soleado etc.).

FORMATOS DE CAMPO Al comienzo de cada proyecto se entregará al personal responsable algunos formatos y plantillas en medio físico y digital, diseñados para facilitar el registro sistemático de información de los muestreos.

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1.

Formatos impresos, diseñados para consignar datos de recolectas entomológicas (entrega física) (Figura 12).

Figura 12. Aspecto del formato de recolecta de información en campo para muestreos entomológicos

*Nota: El formato impreso está diseñado para la toma de datos básicos basados en la recolecta de los grupos de insectos más representativos, diversos y de taxonomía conocida (Lepidoptera, Coleoptera, Hemiptera, Diptera e Hymenoptera).

En caso de usar un formato adicional, debe adjuntase a la hoja del envío formal de la información.

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2.

Plantilla de sistematización de datos en Microsoft Excel® en estándar DarwinCore (Entrega Digital) (Figura 13).

Figura 13. Aspecto de la plantilla de sistematización bajo los estándares del SIB Colombia.

*Nota: Junto con la planilla de sistematización, el responsable tendrá a su disposición un conjunto de definiciones de los campos incluidos en el mismo archivo de la planilla, que podrá consultar en caso de duda.

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3.

Formato de entrega de material, cantidad y estado de ejemplares (Figura 14).

Figura 14. Aspecto del formato de entrega de material, cantidad y estado de ejemplares

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4.

Formato para curaduría de los ejemplares (Figura 15).

Figura 15. Aspecto del formato de curaduría de ejemplares

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