3 minute read

EDITORIAL

Editorial

El Grupo de Trabajo de Política Educativa de nuestro Laboratorio de Educación ha iniciado un análisis de las tareas docentes para, a continuación, establecer su relación con las plantillas de profesorado existentes en los centros escolares.

Advertisement

Es lo que hace cualquier empresa a la hora de definir un puesto de trabajo, estableciendo esos mismos parámetros y, como consecuencia, calcular el nº de puestos de trabajo necesarios.

Con esta iniciativa se pretenden los siguientes objetivos concretos: 1. Contribuir a definir el perfil profesional docente. Las Facultades de Educación deberían tenerlos en cuenta en sus planes de estudio.

En una época en la que se subraya la importancia del aprendizaje de competencias, resulta lo más apropiado. Pero esto no implica que se incluya en la formación permanente del profesorado. 2. Aportar cambios sustanciales en el sistema de acceso. 3. Elaborar una herramienta de análisis del desempeño docente, de cara a una evaluación del profesorado en sí misma y como instrumento a incorporar como mérito en la olvidada carrera docente. 4. Contribuir a clarificar los parámetros a tener en cuenta a la hora de determinar las plantillas de los centros. 5. Hacer pedagogía ante la Administración Educativa y la sociedad en general, desmitificando que la labor del maestro se limita a seguir un libro de texto.

Es evidente que las ratios influirán decisivamente a la hora de desempeñarlas y que el primer choque se producirá con Hacienda, siempre reacia a aumentar la financiación.

Pero servirá, al menos, para contener las “ilusiones” que destilan la mayoría de preámbulos de textos normativos cuando se llenan la boca con conceptos como Equidad, Atención a la Diversidad, Excelencia Educativa…

“Dime con qué mimbres cuento y te diré qué cesto puedes esperar que haga”.

En una época como la actual, en la que la demagogia y la manipulación están a la orden del día, es hora de que cada uno cargue con su propia responsabilidad y no trate de culpar a otros. Y en esto, el profesorado tiene una larga experiencia. Hemos pasado del “pasas más hambre que un maestro de escuela” al ¡Qué bien viven los maestros!

El profesorado no debe seguir por más tiempo siendo el chivo expiatorio de los fracasos escolares. En Sanidad, no se culpa a los médicos por lo enfermos que hay o por los que mueren en los hospitales.

Con esto pretendemos prestar un servicio a la Administración Educativa, describiendo el contenido de las funciones y el tiempo necesario estimado para su correcta ejecución.

También pretendemos colaborar con los Sindicatos de la Enseñanza en esta faceta tan fundamental en el desarrollo de las funciones docentes, es decir, en el trabajo diario.

Un aspecto que echamos de menos en Andalucía es la investigación independiente de los temas educativos.

Es verdad que la Consejería de Educación potencia y financia multitud de iniciativas innovadoras desde los centros educativos, CEPs, … pero no estaría de más potenciar la investigación que se hace desde fuera del sistema educativo. Los temas adquieren otras perspectivas y pueden complementarse ambas iniciativas.

En el Censo de Entidades Colaboradoras de la Enseñanza, observamos multitud de entidades (AMPAS y todo tipo de entidades sin ánimo de lucro) que colaboran en proyectos que inciden directamente en el alumnado. Otras se ciñen a temas concretos (Matemáticas, Nuevas Metodologías, perfiles profesionales, …).

Muy pocas tienen como objeto de estudio el propio sistema educativo en todas sus dimensiones. En una época de cambios como la actual, en la que se juntan los efectos de la pandemia con los efectos predecibles de una nueva ordenación del sistema educativa de arriba abajo con la LOMLOE, creemos que sería muy positivo investigar las posibilidades que se presentan y proponer soluciones.

Por otra parte, hay una verdadera avalancha de gurús de la educación que afirman sin el menor recato que disponen del elixir milagroso que solucionará todos los problemas de golpe.

Es hora de estudiar esas propuestas, ensayarlas en los distintos ámbitos educativos, estudiar los resultados obtenidos, … y, de paso, ir separando el grano de la paja.

Esta necesidad no atañe únicamente a los departamentos de Educación. También a la sociedad en general.

This article is from: