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La importancia de fortalecer nuestro SISTEMA INMUNE

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Uno de los aprendizajes que nos dejó esta PANDEMIA, es la importancia de mantener, conservar, cuidar y mejorar nuestra salud y la de nuestros seres queridos, la alimentación, buenos hábitos, ejercicio y control médico frecuente, son fundamentales para enfrentar y superar cualquier amenaza a nuestra integridad física y mental.

La INMUNOTERAPIA o terapia para mejorar las defensas, nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmune entrenándolo para enfrentar a diferentes microorganismos causantes de diversas patologías, hoy más que nunca MANTENER UN SISTEMA INMUNE COMPETENTE es fundamental para evitar enfermedades.

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La vacuna oral Polivalente Bacteriana

La VACUNA ORAL POLIVALENTE BACTERIANA es de mucha utilidad y ha demostrado ser un gran aliado para mejorar la salud de niños adolescentes y adultos que sufren INFECCIONES DE VÍAS RESPIRATORIAS RECURRENTES, PROBLEMAS ALÉRGICOS, ASMÁTICOS. La inmunización pasiva de un individuo mediante la administración de anticuerpos específicos, generalmente contenidos en un suero, que se realiza con fines curativos o preventivos es una manera segura y efectiva de mantener, preservar y recuperar la salud.

La vacuna polivalente bacteriana sublingual simple, se compone de lisados bacterianos procedentes exclusivamente de bacterias aisladas, procesadas por técnicas de laboratorio de la más alta tecnología, la autovacuna polivalente bacteriana sublingual mixta es una vacunas simple suplementada con bacterias seleccionadas por el médico especialista para el adecuado tratamiento del paciente.

La inmunoterapia bacteriana consiste en una preparación antigénica capaz de inducir una inmunidad específica y activa en un paciente frente a un agente infeccioso. Esta respuesta inmunitaria incluye la inducción de los mecanismos innatos y de adaptación (celular y humoral) del sistema inmunitario.

La vía de administración es sublingual. Se recomienda depositar las gotas indicadas, en ayunas, bajo la lengua durante un minuto y su posterior deglución. Se recomienda administrar el medicamento, por las mañanas 15 minutos antes del desayuno.

La inmunoterapia bacteriana actual, consistente en la administración de bacterias o productos derivados de ellas a pacientes, son vacunas que suelen prepararse a partir de bacterias comunes que causan enfermedades generalmente leves en el ser humano. La inmunoterapia bacteriana también recibe la denominación de VACUNAS POLIVALENTES BACTERIANAS.

Los resultados de varios estudios muestran que la inmunoterapia a base de lisados bacterianos tiene un efecto inmuno-modulador que se ha relacionado a una reducción del número y severidad de infecciones respiratorias y un aumento en la eficacia de la inmunoterapia específica contra pólenes cuando se utiliza conjuntamente con productos derivados de bacterias. Según el experto, los resultados de algunos estudios recientes sugieren que los estímulos bacterianos inclinan el sistema inmunológico hacia una situación antialérgica, lo que proporcionaría un efecto sinérgico con la inmunoterapia alérgeno-específica como la de ácaros o pólenes.

También se han realizado estudios acerca de la inmunoterapia bacteriana para el asma alérgica y rinitis alérgica. Hay resultados recientes en los que estas vacunas, tal y como se ha apuntado anteriormente, pueden ayudar a reconducir el sistema inmunológico hacia una posición no alérgica: Esto facilitaría la mejor evolución de un asma o una rinitis alérgica. Por otro lado, la protección frente a infecciones respiratorias (aunque sean virales, para las que también hay datos favorables al utilizar estas vacunas) favorece también la mejor evolución del asma; debe tenerse en cuenta que una buena proporción de los episodios de asma se debe a infecciones respiratorias virales.

Es más, la inmunoterapia bacteriana podría tener aplicación en otro tipo de alergias, más allá de los ácaros, polen, asma y rinitis, tal y como señalan los especialistas: Las vacunas polivalentes bacterianas actuales siguen demostrando una activación del sistema inmune innato que favorece la vuelta a la situación normal desde una situación pro-alérgica, por lo que podrían ser de ayuda, en cualquier enfermedad alérgica. Para los investigadores está claro que la inmunoterapia bacteriana puede aplicarse perfectamente en pacientes alérgicos pediátricos: Creemos que estas vacunas funcionan reorientando el sistema inmunológico. Esta reorientación es probablemente más fácil y duradera en el caso de sistemas inmunológicos que aún están madurando.

En el contexto de las sibilancias en lactantes (un problema que tiene 1 de cada 3 lactantes al menos una vez, en el primer año de la vida) probablemente es la mejor forma para probar la eficacia de estas modernas vacunas bacterianas. Sin ir más lejos, algunos datos indican que el número de episodios de sibilancias es significativamente menor en los niños vacunados que en los no vacunados. También es cierto que cuanto más frecuentes y graves sean esos episodios (causados por diversos tipos de virus) más probabilidades hay que el niño afectado acabe desarrollando asma. Si, por medio de las nuevas vacunas bacterianas, disminuimos el número y gravedad de los episodios de sibilancias, probablemente disminuiremos la prevalencia de asma.

Los posibles beneficios de la estrategia inmunoterapia bacteriana en pacientes pediátricos con alergia, se puede aplicar el razonamiento de la reorientación del sistema inmunológico.

Uno de las novedades terapéuticas de los últimos años en la otorrinolaringología es la aplicación de inmunoterapia bacteriana, también conocidas como vacunas polivalentes bacterianas.

La inmunoterapia está indicada en cuadros infecciosos o inflamatorios de origen bacteriano bien recurrentes o que responden mal al tratamiento antibiótico. En el área ORL ha demostrado grandes beneficios en el tratamiento de las faringitis, amigdalitis, otitis media aguda, otitis media serosa, adenoiditis, sinusitis y rinitis.

Las vacunas bacterianas crean un estado defensivo del organismo frente a los microorganismos, o sus productos tóxicos. Inducen anticuerpos (IgA, IgG e IgM) y estimulan la respuesta celular defensiva por activación de linfocitos T cooperadores y macrófagos.

Las vacunas bacterianas suelen elaborarse, mediante preparados de bacterias archivadas en los laboratorios (suspensiones bacterianas). Se administran por vía sublingual con excelente resultados que pueden llegar a evitar cirugías.

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