NOVIEMBRE 2021 - 31
PORTADA
CONVERTIR LOS SUEÑOS EN REALIDAD, NO ES DIFÍCIL EN LA LITERA Parafraseando a Martin Luther King, y salvando las distancias, yo tuve un sueño que, como el Kinder, incluía tres deseos: escribir una novela por entregas, hacer una versión en radionovela y que sus dos últimos capítulos se representaran en el Teatro Municipal de los Titiriteros de Binéfar. En cualquier otro lugar, esto sería simplemente imposible, o muy trabajoso y muy caro. Solo tuve que contarle mi sueño a Paco Aznar (qué peligro tiene el sujeto); él contactó con Emma Bravo, que a su vez puso en marcha al grupo de teatro Inestable de Ponent, junto a otros colaboradores que me ofrecieron desinteresadamente su concurso. Terminadas las grabaciones, Paco pidió ayuda a su amigo y socio Óscar Prado. Yo, para confeccionar la sintonía, conté con la producción de Luis Sanvicente y para la última fase, con la ayuda del concejal, Juan Carlos García Cazcarra y de la técnico de Cultura, Laura Baquero. Y, cómo no, también conté con la total predisposición de mi admirado, Ernesto Romeu. Compromiso, colaboración, ganas, trabajo bien hecho… y todo prácticamente sin presupuesto. A esto, súmale la solidaridad de los literanos y en una suerte de efecto mariposa, la recaudación se va para la isla de La Palma que, en palabras de Ernesto, les hace más falta que aquí. ¡¿Cómo no va a ser ésta una tierra de emprendedores?! Mi gratitud a la misma y a sus gentes.
FUE UN HONOR, AUNQUE NO SEA MI DIVISA Hace algo más de un año recibí una llamada en el móvil que, a fuer de ser sincera, nunca hubiera esperado: era Paco Aznar para proponernos a mí y al teatro Inestable de Ponent un proyecto totalmente inusual por el soporte y el formato que había de tener: convertir una novela por entregas en un serial radiofónico y, para rematar, los dos últimos capítulos reconvertirlos en una representación teatral sobre un escenario y en la que el público asistiera en directo a la grabación de dichos capítulos. Lógicamente, esos dos últimos capítulos no podíamos grabarlos de forma estática, sentados delante de los micros de Somos Litera Radio. Había que dar un cierto movimiento a los actores y pensar en una puesta en escena. Todo eso se me apareció de repente, mientras Paco me iba contando el proyecto. También se me aparecieron conceptos que mezclaban terror y comedia a partes iguales (recuerden “La mansión”) como: serial, Sautier Casaseca, Lucecita… Y todo eso quedaba excluido de la trayectoria del Inestable y, además, anclado en un tiempo oscuro y de bombillas de cuarenta vatios. Confieso que, hasta que no leí los primeros capítulos y hasta que,
en una primera reunión, Paco y el autor, Pedro Torréns, no me desgranaron de qué iba el serial, tuve mis dudas. Lo que pudo haber terminado de mala manera sin ni siquiera haber empezado, se convirtió desde ese momento en un proyecto común después de que, presentado a los componentes del Inestable, todos dijeran “sí” a un pretendiente tan apetitoso. Y como sabíamos por experiencia que el que juega por necesidad, pierde por obligación, nunca nos planteamos la obligación de colaborar en el proyecto pero sí la necesidad. Necesitábamos que un golpe de aire fresco nos abriera la puerta del letargo pandémico para devolvernos a la acción. Así fue cómo tuvimos motivos y oportunidad de quitarnos el mal sabor de boca que nos dejó el haber tenido que anular, “in extremis”, el estreno de nuestro último montaje previsto para el 14 de marzo de 2020, día del confinamiento: aquello fue como un “visto para sentencia” con veredicto de reclusión final. De este modo se comenzó por hacer el trabajo de silla y mesa, o mejor, de ordenador: trasladar el texto a guion de radio, corregirlo, distribuir los innumerables personajes entre los actores del Inestable a cuya lista hay que agradecer que se añadieran tres voluntarios de Binéfar, organizar ensayos, grabaciones, etc. Y por medio, con renglones torcidos, apareció la enésima ola de la pandemia,
paralizando de nuevo un proyecto. Pero arrieros somos y lo hemos sido, así que, en cuanto se pudo, ya en la primavera/ verano del 2021, comenzamos a levantar de las páginas impresas a los personajes para darles voz y alma. De esa manera, un proyecto sobre papel acabó siendo una realidad tangible de principio a fin. Fue una experiencia nueva, con mucho trabajo de por medio, pero muy satisfactoria una vez visto el resultado final. Fue divertido y gratificante trabajar en la radio y con Paco, trabajar con Pedro el texto y en los ensayos y fue un placer haber conocido a esos tres nuevos integrantes del reparto radiofónico: José Luis Arilla, Montse Nuez y Teresa Aznar. Fue un honor, aunque no sea mi divisa, haber participado en un proyecto como éste con gente como ésta. “Vos sos un ganador”… frase que recuerda la del “caballo ganador” que ha terminado siendo, se mire por donde se mire, el testimonio de Evaristo, las sentencias legítimamente dictadas por los residentes y el alegato final de que un consejo de ancianos debería impartir justicia. Y si esto no es así, que no será, nunca deberíamos olvidar que, en algún momento, en el camino nos encontraremos. Vos sos un jugador y en el camino nos encontraremos.
Pedro Torréns, como autor de Arrieros Somos, y Emma Bravo, como directora de la radionovela, nos ofrecen su valoración final sobre la experiencia acumulada.