4 minute read

Todas las sillas del Papa

Curiosidad

Sillas de plástico, asientos del autobús, sillones fabricados por reclusos TODAS LAS SILLAS DEL PAPA FRANCISCO

Advertisement

por Redacción

“La Cátedra de San Pedro, cuyo concepto se remonta al banco de madera sobre el que se sentó San Pedro cuando enseñaba a la comunidad de Roma, se encuentra en el ábside de la Basílica de San Pedro. Obra de Bernini, realizada en forma de gran trono de bronce, está sostenida por las estatuas de cuatro doctores de la Iglesia, dos de Occidente, san Agustín y san Ambrosio, y dos de Oriente, san Juan Crisóstomo y san Atanasio. El pequeño asiento de madera y marfil de Pedro se encuentra hoy custodiado en este magnífico altar de bronce que se levanta bajo la imagen del Espíritu Santo. Que la autoridad y el prestigio no deriven de sentarse en un trono es algo que el papa Francisco nos recuerda cotidianamente en cada cosa que hace. Empezando por rechazar los “tronos”. El Papa prefiere encontrar la mirada de su interlocutor y no la comodidad de un sillón lujoso. Así, en los viajes, Francisco no pide nunca un puesto privilegiado: le basta una simple silla como la que cualquiera pudiera ofrecerle. Repasamos a continuación algunas de las situaciones que incluso una simple silla ha convertido en inolvidables.

Obra maestra. Francisco celebra una misa en el altar de la Cátedra: detrás se halla el monumento de Gian Lorenzo Bernini (1666) que custodia la Cátedra de Pedro (en el círculo).

En México. En la misa celebrada en el parque Chamizal de Ciudad de Juárez el Papa utiliza una silla de madera de pino tallada a mano por los artesanos juarenses.

En Bolivia. En Santa Cruz, julio de 2015, Francisco utilizó los muebles realizados por la familia de artesanos de Don Bosco, un proyecto salesiano de formación para jóvenes. En Asís. El puesto del Papa en el almuerzo de la Jornada de Oración por la paz del 20 de septiembre del 2016 no tiene nada de especial, un tipo de silla común en los hogares.

En EE.UU. En la cárcel Curran-Fromhold de Filadelfia (27/9/2015) el Papa agradeció a los presos la “cátedra” hecha por ellos.

En Filadelfia.

Durante el encuentro por la libertad religiosa, el Papa ha utilizado una silla típica del final de siglo XVIII en USA: la “Windsor”.

En la Jornada Mundial de la Juventud. Francisco utilizaba siempre el transporte público en Buenos Aires; también lo hizo en Cracovia, el 28 de julio de 2016, para ir a a hablar a los jóvenes: para él hay un puesto en el tranvía.

En Auschwitz. 29 de julio de 2016, el Papa reza en la celda del padre Kolbe y (en el círculo) frente a las barracas: solo y en silencio. Para él, dos sillas sencillas. En Roma. El 14 de octubre de 2016 Francisco visita al cardenal Cordero di Montezemolo, ingresado en el hospital. Entre ellos no hay formalidades y el Papa utiliza una silla “de servicio”.

En el lenguaje común es el trono de los Papas, pero la denominación del sillón en el que durante siglos han sido llevados los Pontífices sobre los hombros de los sediarios (seis por cada lado) es la silla gestatoria, del latín “gestare”, transportar. La silla no era solo un símbolo de la importancia “sobrehumana” del Papa, sino también el único modo para hacerlo visible a los fieles durante los años en los que no existían videocámaras y cámaras fotográficas. El Pontífice podía así ser visto en la plaza de San Pedro, en la Basílica o donde se encontrase, en cualquier situación pública, desde una procesión o una visita, solo haciéndose elevar por encima del gentío. Para Pablo VI la silla era “incomoda” y daba la “impresión de los mares, de las mareas”, aunque se adaptó a pesar del balanceo, como hizo también Juan Pablo I, que en septiembre de 1978 fue el último Papa que utilizó la silla gestatoria.

PÍO X (1912) JUAN XXIII (1962)

PABLO VI (1977) JUAN PABLO I (1978)