Edición 306- Revista Aeronáutica

NUESTRO OBJETIVO:

llegar a las estrellas

Desde que nuestras aeronaves se elevaron en los cielos de Cundinamarca y Valle del Cauca, para dominar la geografía de nuestra Patria, defender a los colombianos, nuestra democracia, derechos y libertades, hemos crecido en capacidades, doctrina, capital humano e ideales. Todo un camino que ha marcado la senda que hemos recorrido paso a paso, sobreponiéndonos a desafíos enormes.

Así, con empeño y disciplina remontamos las alturas y marcamos un nuevo punto de partida: el espacio. Esto, nos ha llevado a emprender, modernizarnos, fortalecer nuestro capital humano y establecer vínculos con la academia, entidades privadas y otros países. Es así como en 2012 se da inicio al proyecto FACSAT, que abre la puerta a una espiral ascendente de investigación, innovación y desarrollo en el campo aeroespacial colombiano.

Al FACSAT-1, lanzado en 2018, se sumará el FACSAT-2, satélite desarrollado por nuestro Centro de Investigación en Tecnologías Aeroespaciales, CITAE, junto a importantes aliados, nacionales e internacionales. Unimos nuestra voluntad al apoyo de la academia, la sociedad civil, sectores públicos y privados para tener un nuevo activo que superará las prestaciones y características de su antecesor. De esta forma, seguiremos garantizando una capacidad espacial fundamental para el país, sobre todo, en ramas tan sensibles como el cambio climático, la protección del medio ambiente, la planeación territorial, nuestra seguridad y defensa nacional, entre otros. Prestamos un servicio público de gran valía para los compatriotas.

A lo anterior, se suma el Space Operations Center, SpOC, proyecto tecnológico y de infraestructura que permitirá el planeamiento de misiones, el comando, control y programación satelital, así como el procesamiento y entrega de productos derivados de las capacidades satelitales. Un gran avance que tiene como sede, nuestra Escuela Militar de Aviación, EMAVI.

El país nos demanda continuar creciendo, promoviendo el desarrollo de activos para la exploración y explotación del dominio ultraterrestre, proyectando el capital humano idóneo y fortaleciendo la

soberanía tecnológica nacional. El FACSAT-3 estará alineado con estos objetivos, satélite que será creado netamente con arquitectura, diseño y desarrollos colombianos.

Soñamos con ambición y damos pasos contundentes para lograrlo. La misión que desplegará un equipo que representa a nuestros hombres y mujeres en Polonia para ser certificados como astronautas análogos, es un paso contundente para llevar al primer colombiano al espacio en la próxima década. Una misión que demuestra el gran compromiso que tenemos con nuestra estrategia aeroespacial y que articula educación al más alto nivel, construcción de saberes científicos y una activa diplomacia para la defensa.

La cooperación interinstitucional e internacional nos permitirá llegar más lejos, más alto y más rápido a nuestros objetivos La Comisión Colombiana del Espacio, entidad estatal en la cual ejercemos la secretaría general, las redes de investigación con Universidades, gremios y emprendedores de la industria aeroespacial, al igual que la relación que tenemos con importantes aliados, como los Estados Unidos, con quienes firmamos un acuerdo de cooperación, constituyen pasos contundentes en la consolidación de una capacidad cuyos beneficios, son transversales al desarrollo humano del país: el espacio es una fuente inagotable de oportunidades. Nuestro compromiso, misión y visión, se erigen en ese nuevo horizonte; una frontera que nos demanda, llegar a las estrellas, ¡Ad Astra!

Comandante Fuerza Aérea Colombiana Mayor General Luis Carlos Córdoba Avendaño.

Sumario

Fotografía: Técnico Tercero

Angie Milena Sánchez Tovar Diseño: Javier Aurelio Rodríguez

Afiche:

Imagen Satelital Islas de Providencia

Fotografía: Centro Nacional de

Consejo Editorial

Mayor General Carlos Fernando Silva Rueda Presidente

Mayor Heiny F. Pérez Rueda Director

ASD2. Rosa Eliana Caipa Rozo Jefe de Redacción Correctora de Estilo

Anny Rocío Palencia Salcedo Asistente de Redacción

Coronel (RA) Mayerlin Galindo Lúligo, Teniente Coronel Jair Ramiro Ocampo Bustos, Mayor Juan Manuel Cárdenas García, Mayor César “Barbarroja” Triviño, Mayor Iván Darío Cárdenas Rodríguez, Mayor Manuel Ricardo Riaño Pulido, Mayor Jaime Daniel Montoya Gaviria, Mayor Juan Carlos Pinilla Latorre, Mayor Eliana Jennifer Marín Arteaga, Mayor Heiny Fernel Pérez Rueda, Capitán Felipe Arroyo Benavides, Capitán Nilsa Leal Mora, Capitán María Eugenia Castaño Garcés, Capitán Grace Martínez Guevara, Teniente María Camila Cruz Bogotá, Teniente Liliam Martínez Montenegro, Técnico Jefe Carlos Andrés Ríos Acosta, Sargento New Kenneth 12th USAF, ASD2. Eliana Caipa Rozo, Anny Rocío Palencia Salcedo, Andrés Hurtado García. Articulistas

Coronel Daniel Ricardo Zaque Alfonso, Capitán Grace Martínez Guevara, Capitán Johanna Katherin Gómez Suancha, Capitán Diego Armando Moreno Murcia, Subteniente Astrid Alexandra León Leyton, TSgt Taylor Cifuentes, Sargento New Kenneth 12th USAF, Técnico Segundo César Fabián Prada Aponte, Técnico Segundo Adriana Carolina Zedán López. Técnico Tercero Banessa Ruíz Morales, Técnico Tercero Angie Milena Sánchez Tovar, Aerotécnico Silvia Paola Bustamante Rincón, Andrés Hurtado García, Víctor Manuel Holguín Restrepo, Centro Nacional de Observación Aeroespacial, Archivo Personal Coronel Antonio Delgado, Departamentos de Acción Integral Comando Aéreo de Combate No. 2 y 4, Grupo Aéreo del Caribe, Grupo Aéreo del Casanare. Fotografías

Archivo General Fuerzas Militares

Escuadrilla de Idiomas EPFAC

Audiovisuales FAC Agradecimientos

FUERZA AÉREA

Técnico Tercero Angie Milena Sánchez Tovar Reportería Gráfica

Teniente Coronel Edisson Alexander Piraquive Riveros Ilustración Aeronáutica

Teniente Melly Zaret Carreño Martínez Especialista de Mercadeo

Aerotécnico María Camila Calderón Alvao

AA11. Zulma lngrid Méndez Buitrago

AS14. Nancy Jeannette Tovar Piraquive Circulación y Atención al Cliente

Javier Aurelio Rodríguez Pérez Diseño y diagramación

Técnico Primero Eddie Orlay Ceballos Solórzano Diseño gráfico digital

Oficina Comunicaciones Estratégicas Fuerza Aérea Colombiana

Casa Editorial El Tiempo Preprensa - Impresión

Revista Aeronáutica

Una publicación de la Fuerza Aérea Colombiana al servicio de la Aviación Nacional.

Fundada en 1933 • Circula desde 1947 • Decreto No. 602, marzo 08 de 1949. ISNN 0034-6942 • NIT 860016710-1.

www.revistaaeronautica.mil.co

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Edición 306 - julio 2022

Incluye Afiche Imagen Satelital Islas de Providencia

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pS OC, el Espacio al Servicio de colombia

Por: Mayor Heiny F. Pérez Rueda.

Si usted considera que el espacio exterior está relacionado solo con astronautas y planetas, debería tener en cuenta que está presente en su vida cotidiana al utilizar cualquier aplicación de geolocalización para ahorrar tiempo en el tráfico. Emplear la tecnología satelital también facilita su conexión a internet, prever el estado del tiempo o que su vuelo llegue al destino indicado Así, los avances tecnológicos han permitido que los recursos del espacio exterior sean empleados por la mayoría de las personas.

Sobre su uso en el ámbito mundial, aquellos países que han dedicado recursos, creado entidades y destinado talento humano para el avance de tecnología espacial, son precisamente los que lideran la geopolítica y el desarrollo económico en beneficio de su población.

“Mientras nuestras empresas agrícolas usan métodos tradicionales en la producción, por ejemplo, seis toneladas por hectárea de algún grano, en otras naciones donde manejan información satelital de precisión para saber en tiempo real qué necesidades de riego o abono tiene cada planta, están logrando 22 toneladas en la misma área”, asegura el Teniente Coronel Guillermo Alberto Poveda Zamora, Jefe de Operaciones Espaciales de la Fuerza Aérea Colombiana, Máster en Ingeniería con énfasis en Ingeniería Aeroespacial.

Por usos similares en la agricultura, el transporte o las comunicaciones, los países desarrollados tienen un incremento sostenido de su Producto Interno Bruto. De ahí que la comprensión y provecho de la tecnología espacial no sea solo una opción de desarrollo nacional, sino un proyecto estratégico que ha sido liderado por su Fuerza Aérea Colombiana.

EL SpOC Y LA COMPRENSIÓN DEL ESPACIO

El Centro de Operaciones Espaciales, Space Operations Center, SpOC, por sus siglas en inglés, es un logro sin precedentes en la historia de Colombia, permitiendo a la Institución seguir ofreciendo los múltiples beneficios de la tecnología espacial al servicio de sus habitantes, mediante las entidades relacionadas, el sector productivo y la academia. Así, esta capacidad sirve más allá de la seguridad, ya que es empleada por las autoridades de gestión del riesgo con el fin de identificar las probabilidades de futuros desastres naturales; las alcaldías en planificación urbana y catastro, entre otros, teniendo en cuenta que existe la capacidad instalada.

Su reciente inauguración en la Escuela Militar de Aviación es un paso decisivo para la observación y seguimiento del nanosatélite FACSAT-1, lanzado por la Fuerza Aérea en 2018; la comprensión de las órbitas y del uso de la información espacial dirigidas a la seguridad y desarrollo del país.

“Antes del SpOC éramos solo usuarios de imágenes, ahora, entramos de lleno en la cadena operativa del dominio espacial. Además, en el nuevo escenario global de los conflictos, si se quiere tener superioridad aérea, se deberá tener también superioridad espacial. De lo contrario, el poder aéreo no podrá usar ninguna tecnología que dependa del espacio”, aseguró el Teniente Coronel Poveda.

Una buena manera de comprender el dominio del espacio es recordar qué ha consolidado la Fuerza en el dominio del aire. Por ejemplo, para que un avión o helicóptero vuele, se requiere antes un complejo engranaje de tripulaciones certificadas, instructores, programas de vuelo, doctrina, personal de mantenimiento, expertos en meteorología, hangares, pistas, torres de comunicación, entre muchos otros aspectos. Así mismo, el dominio espacial contempla la articulación de diversos recursos humanos y técnicos.

“Por eso el SpOC es tan importante. Tenemos a los operadores de satélites entrenando y a otras personas analizando las amenazas o la meteorología espacial. Para enfrentar estos desafíos desarrollamos procedimientos que permitan entender las geometrías de las órbitas Si el dominio del aire es complejo, el del espacio lo es aún más porque también se requieren expertos en medicina aeroespacial, derecho o sistemas, es decir este dominio es transversal a todas las áreas del conocimiento. Esa es la diferencia entre ser usuario de productos espaciales y tener capacidades espaciales”, resaltó el Oficial.

La puesta en funcionamiento del Centro de Operaciones Espaciales significa una evolución exponencial de la Fuerza Aérea para entender este nuevo dominio y hacer operaciones efectivas que sigan ofreciendo múltiples ventajas al país. Así lo afirmó el Teniente Coronel Poveda: “Por ejemplo, las imágenes que actualmente se compran no son ni el cinco por ciento de las requeridas por las entidades estatales, el sector productivo o la academia”.

Otra muestra del fortalecimiento de estas capacidades es la construcción de un segundo satélite, el “FACSAT-II Chiribiquete”, que será lanzado en 2023. Desde su nombre alusivo al emblemático Parque Nacional Natural, la Institución enfatiza la misión que adelantará para contribuir a la vigilancia y conservación del medio ambiente y predicción de órbitas en tiempo real.

Así, su Fuerza Aérea se está anticipando al futuro con determinación y visión de largo plazo. Logrando metas ambiciosas que antes parecían inalcanzables y que la consolidan como una Institución líder en la región, para gran satisfacción de sus integrantes y de todos los colombianos.

Fotografía: TécnicoTerceroAngieMilenaSánchezTovar.

de las Estrellas UN PASO MÁS CERCA

El dominio en el aire, el espacio y el ciberespacio es una de las premisas enmarcadas en la misión y visión de la Fuerza Aérea Colombiana, por tanto, alcanzar esta meta se traduce en acciones transversales a la Institución. Siendo una muestra que desde su creación en 1919 la mirada de quienes ascendían al espacio aéreo iba mucho más lejos, al espacio ultraterrestre.

Acercamientos al tema espacial y lo vivido al respecto en otros países como Estados Unidos y Rusia eran asuntos de interés para la Revista Aeronáutica, que desde sus primeros números, registraba en su mayoría artículos traducidos de la Fuerza Aérea del país norteamericano. Actualmente, lo sigue haciendo, pero los protagonistas han cambiado, ahora narra la historia de su Fuerza Aérea Colombiana en el camino hacia el dominio del espacio.

En 2002, se crea en la Escuela Militar de Aviación el Centro de Investigaciones en Tecnología Aeronáutica, CITA, como medio idóneo para el desarrollo y aplicación de la investigación técnico-

científica en la solución de las necesidades específicas de la Fuerza. Once años después, con el liderazgo de la Dirección de Asuntos Espaciales se efectúan diversas investigaciones y proyectos, entre ellos el lanzamiento experimental de globos sonda, como instrumento que permitiría mediciones meteorológicas y el Centro adoptaría el espacio como área de investigación. En 2018, se lanza el satélite FACSAT-1.

Así se genera la necesidad de contar con la sección que representa a la Fuerza Aérea Colombiana ante los organismos nacionales e internacionales en temas referentes al espacio y regulara dentro de la Institución los desarrollos, procesos y operaciones que implica avanzar en este dominio. Nace la Jefatura de Operaciones Espaciales, JEOES como resultado a necesidades frente a los retos mundiales del dominio espacial.

Esta evolución ligada al proceso de transformación de la Fuerza, implicó que la Jefatura de Educación Aeronáutica cambiara a Jefatura de Educación Aeronáutica y Espacial, JEAES, y liderara proyectos que inicialmente surgieron en JEOES, entre ellos la hoja de ruta del astronauta colombiano.

Por: Asesor de Defensa 2 Eliana Caipa Rozo.

SIETE DÍAS EN EL ESPACIO DESDE LA TIERRA

En febrero de 1958, el piloto Donal G. Farrell, de 23 años, fue el primer hombre en realizar un vuelo simulado a la Luna, al permanecer siete días en una cabina espacial experimental en la Base de la Fuerza Aérea Randolph, Estados Unidos. Así lo registró The New York Times y la Revista Aeronáutica en su edición 63. El experimento, como fue catalogado, estuvo bajo supervisión del Doctor Hubertus Strughold, primera autoridad mundial en los aspectos médicos del vuelo en el espacio.

Este hecho histórico que daría paso a muchas más pruebas, también fue el primer acercamiento para responder la pregunta que en aquella época se hacían ¿Podrá el hombre tan frágil y cuyas tolerancias fisiológicas y psicológicas son limitadas, sobrevivir dentro de este medio ambiente totalmente nuevo?

Sin duda, esta preparación experimental dio sus frutos en 1969 cuando en la misión Apolo 11 llegó el hombre a la Luna.

El 19 de agosto de 2022, cinco integrantes de su Fuerza Aérea Colombiana iniciaron una misión análoga espacial en el Centro de Entrenamiento de Asuntos Análogos en Polonia, convirtiéndose en la primera tripulación del país que se prepara en ambientes simulados para una futura exploración a Marte o la Luna.

En siete días de confinamiento y aislamiento tres Oficiales, una Oficial y un médico, dedicados a la investigación desde diferentes áreas del conocimiento, se adentraron a un hábitat espacial para realizar actividades que ponen a prueba dos categorías: la física y sicológica.

El Capitán Diego Ernesto Cortés Guaje, Comandante de Misión; los Subtenientes Ingrid Xiomara Bejarano Cifuentes, ingeniera electrónica; Christian Antonio Campos Chaparro, licenciado en Biología y Química; Josep Cepeda Román, ingeniero de sistemas, y el Doctor Diego Malpica Hincapie, le apostaron a la investigación y encontraron en la Fuerza Aérea Colombiana el receptor a ideas, sueños y proyectos. Ahora enfrentan desafíos y sin duda esperan desarrollar su carrera siendo pioneros en el país, recibiendo su certificado como astronautas análogos, que les permitirá adelantar diversos procesos nacionales e internacionales relacionados con el tema espacial y compartir sus experimentos de investigación en ponencias internacionales, junto con personal de la NASA y agencias europeas que ponderan en este momento en el campo espacial.

Poder Espacial

BENEFICIO PARA LA HUMANIDAD

Por: Anny Rocío Palencia Salcedo.

En busca de alcanzar un nuevo horizonte más allá de las estrellas como lo reza el lema “SIC ITUR AD ASTRA” “Así se va a las Estrellas”, la Fuerza Aérea Colombiana se ha consolidado como una institución líder en el desarrollo, acceso y explotación del espacio para el beneficio de la sociedad colombiana

Esta nueva capacidad, construida bajo una robusta estrategia soportada en la metodología DOMPI, Doctrina, Organización, Material y Equipo, Personal e Infraestructura, ha logrado significativos avances en estas áreas, que van desde la incorporación del dominio del espacio en su misión y visión; la cualificación profesional y científica del personal para entender y generar conocimiento; el trabajo articulado con centros de investigación, entidades de educación superior y Universidades; hasta alcanzar capacidades distintivas en infraestructura con modernas instalaciones, estaciones terrenas y el centro de operaciones espaciales.

Uno de los pilares fundamentales del poder espacial de la Fuerza Aérea Colombiana lo constituye la Jefatura de Operaciones Espaciales que tiene como misión “ejercer el contrapoder espacial mediante la explotación de activos espaciales para garantizar la libertad de acción en el espacio, con el fin de proteger los intereses nacionales”.

Esta Jefatura lidera la integración de la capacidad espacial del sector defensa en pro del desarrollo de los demás poderes del Estado, para reducir problemáticas existentes en el territorio nacional a través del uso de capacidades actuales y desarrolladas por la Institución, impulsando la investigación y generación de conocimiento técnico y científico del país, necesarios para suplir las necesidades en campos como la agricultura, ordenamiento territorial, minería ilegal, lucha de amenazas, entre otras.

Teniendo en cuenta la relevancia y el crecimiento del dominio espacial, la Fuerza Aérea le ha apostado a fortalecer los lazos con grupos de valor por medio de convenios y alianzas con entidades públicas y privadas nacionales e internacionales incluyendo universidades, que tienen como propósito aunar esfuerzos para la investigación, desarrollo científico, tecnológico e innovación, seguridad, que conllevan al fortalecimiento y progreso de Colombia.

Se han realizado actividades de divulgación tales como, congresos, simposios, seminarios, workshops y cursos, con una participación de más de 1.200 personas, los cuales orientan procesos participativos y colectivos en torno al desarrollo espacial de la Nación. Ha contribuido a la formación de recurso humano con pasantías institucionales, trabajos de grado de pregrado y posgrado, aportando a la educación de más de 37 estudiantes en el país.

Fotografía: Técnico Tercero Angie Milena Sánchez Tovar.

Así mismo, ha apoyado a seis entidades, entre ellas la Universidad de Antioquia, la Universidad Pontificia Bolivariana y la Universidad de los Andes en proyectos que requieren pruebas y lanzamiento de objetos suborbitales bajo los más altos estándares de seguridad física y operacional.

Respaldó a la Corporación CIPSELA que promueve actividades en educación STEM, por sus siglas en inglés, Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, con currículos basados en ciencia y tecnología aérea y espacial; efectuó el acompañamiento al lanzamiento de dos globos con cápsulas y experimentos creados por 26 jóvenes del Semillero Aeroespacial de Rionegro y colaboró en la fundación de la Red Académica Aeroespacial de Colombia, RAAC, compuesta por 17 universidades y la Fuerza Aérea Colombiana.

Finalmente, la FAC hizo parte de las actividades que desencadenaron en la firma con los Estados Unidos para la participación de Colombia en los acuerdos Artemis, programa de la NASA que llevará la primera mujer a la Luna y el primer hombre a Marte. Esto supone la oportunidad de participación del país en la conducción de experimentos científicos y la exploración espacial.

La Institución pretende seguir con la formación, capacitación, instrucción o entrenamiento nacional e internacional de su personal en áreas relacionadas con las ciencias del espacio, para diferentes proyectos de investigación, desarrollo y transferencia de tecnología que cimentarán las bases de un programa espacial basado en nano y/o mini satélites, que den continuidad a los programas de observación de la Tierra como FACSAT.

Además, se proyecta el lanzamiento y puesta en órbita del FACSAT-II en el primer semestre de 2023 y la otra gran apuesta consiste en trazar una hoja de ruta que permita llevar un colombiano al espacio, así como ser capaces de desarrollar satélites propios.

En 2019, como resultado de un convenio interinstitucional con la Universidad Distrital “Francisco José de Caldas” se desarrolló el proyecto ‘Delfos’...

ImagensatelitalrelievesterrestresgigantescosenelParqueNacionalNaturalSerraníadelChiribiquete. Fotografía:CentroNacionaldeObservaciónAeroespacial.

Separata Especial

Red Flag Rescue 22-1 RESCUE MISSION COMMANDER

En mayo de 2022, la Fuerza Aérea Colombiana participó en el ejercicio internacional Red Flag Rescue, RFR 22-1, con el despliegue de dos helicópteros UH-60L “PANTHER”, un avión ECN-235 “TALON” y el Grupo de Comandos Especiales Aéreos, para desarrollar misiones de rescate en combate junto a aeronaves y equipos de otros países en ambientes simulados de alta amenaza.

Llevar a cabo esta misión requiere de un planeamiento detallado, articulando los medios aéreos y terrestres, unido a la ejecución, donde se asuman los diferentes riesgos de las amenazas y así cumplir el objetivo y función del Rescue Mission Commander, RMC, rescatar a un “aislado” en un entorno de gran peligro.

Durante el ejercicio tuve la oportunidad de asumir el rol de RMC, por primera vez para la planta de helicópteros de la Fuerza Aérea Colombiana en un entrenamiento de este nivel, demostrando el ingenio y la experiencia adquirida por las tripulaciones en nuevos escenarios de combate.

¿QUIÉN ES EL RESCUE MISSION COMMANDER?

Generalmente, en este tipo de misiones se utiliza un gran número de medios o aeronaves que cumplen ciertos roles. Coordinar y armonizar estos equipos requiere de la experiencia y creatividad de un

líder que, junto a un equipo multidisciplinar, además mitigue los diferentes riesgos a los cuales se va a enfrentar la Fuerza de Tarea de Búsqueda y Rescate en Combate, C-SAR Task Force, para evitar la pérdida de más medios y vidas; ya que existe gran cantidad de variables que afectan el teatro operacional y pueden influir directamente en el resultado. Razón por la cual, de los diferentes equipos de aeronaves son seleccionados RMC.

Durante Red Flag Rescue observamos a tripulantes expertos de los escuadrones de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, USAF, especialistas en rescate, como pilotos de HH-60G, A-10, C-130 y AH-64, quienes buscan ser calificados para asumir la misión, liderando la fase de planeamiento y ejecución en diversos escenarios que plantea el ejercicio. RFR 22-1 es un entrenamiento donde se ponen a prueba las personas y las capacidades para poder rescatar a un compañero en el marco de un escenario bélico del Siglo XXI. Además, en la historia, se ha demostrado que el nivel de ambigüedad y la disponibilidad de información para el planeamiento de las misiones de rescate es retador.

En ese sentido y con miras a mantener la capacidad de su Fuerza Aérea de realizar rescate en combate, la USAF selecciona un personal idóneo para calificarse como Mission Planning Cell Chief, MPCC, y/o Rescue Mission Commander, RMC. Función que también se brinda a países aliados con los cuales, en un futuro hipotético, se podrían desarrollar misiones tipo C-SAR; entre ellos se encuentra Colombia, por lo tanto su Fuerza Aérea y en específico el equipo Black Hawk UH-60, tuvo la oportunidad de desempeñarse en este rol durante el ejercicio, reconociendo nuestra capacidad y experiencia de más de tres décadas.

Por: Mayor César “Barbarroja” Triviño.

Fotografía: Capitán Diego Armando Moreno Murcia.

Realizadalaubicaciónyextracciónhelicoportada,elequipoC-SARdelaFuerzaAérea Colombianaentregaalpersonalevacuadoenunabasederecuperación. Fotografía:CapitánGraceMartínezGuevara.

PLANEAMIENTO DE UNA MISIÓN C-SAR

De acuerdo a los estándares establecidos para las Fuerzas Militares de los Estados Unidos, en el planeamiento se debe abarcar cada participante con su rol, así como los propósitos establecidos, previendo la mayor gama de posibles situaciones. La cadena de mando de este planeamiento está muy bien definida, va desde el Comandante del Componente Aéreo Combinado, Combined Forces Air Component Commander, CFACC, pasando por el Centro Conjunto de Recuperación de Personal, Joint Personnel Recovery Center, JPRC, asignado a una Célula de Planeamiento de Misión, Mission Planning Cell, y dirigido por el Jefe de la Célula de Planemiento de Misión, Mission Planning Cell Chief, MPCC. El arte del comandante se refleja, no solo con tener equipos, aeronaves, medios y personal, también es necesaria la habilidad en resolución de problemas a lo largo del proceso.

Luego de recibir una información inicial sobre la intención del comandante y los medios disponibles, el MPCC plantea el problema táctico principal y genera las ideas para resolverlo; una vez se consideran las soluciones se selecciona el curso de acción más apropiado. Durante el desarrollo del planeamiento es normal que cambie la información inicial o surjan dudas y requerimientos, por lo cual es un proceso dinámico y necesita de retroalimentación constante. Verificar las contingencias o “What If ’s” de la misión, que son los más críticos, determinan el éxito o el fracaso. Cuando se tiene un plan sólido, es necesario que pase por una fase de aprobación del CFACC y JPRC.

Así, llega a la fase de ejecución. Si el plan es robusto y contempla los diferentes escenarios que pueden ocurrir, los participantes saben qué hacer en cada momento, como en un guion. Pero solo en la ejecución se pueden observar las fallas y fortalezas del plan seleccionado, por lo que nunca hay un plan perfecto ni se tendrá el tiempo suficiente para trazarlo. Hay que trabajar con los medios y el tiempo disponible, tal como en la vida real.

LA MISIÓN

El viernes 13 de mayo, con la superstición a la orden del día, recibí la información por parte de la organización de RFR sobre la misión a desarrollar, cabe aclarar que es un escenario ficticio ajustado a las realidades de los probables conflictos del Siglo XXI, ya que el país de “Donovia” invadió el territorio de “Solistan” en represalia a las operaciones sostenidas que se habían realizado por parte de la coalición contra los separatistas solistenios de “PRoM- People of the Republic of Milán”, el simulado “Pueblo de la República de Milán”, y con el propósito de recuperar un territorio que con anterioridad le había pertenecido.

El Comandante de las Fuerzas Combinadas, Combined Forces Commander, CFC, ordenó efectuar una misión de Interdicción Aérea, en respuesta a la ocupación de las fuerzas enemigas en “Solistan” con el fin de debilitar el avance y el comando y control de las fuerzas enemigas en el territorio invadido. Un ataque conducido con aeronaves B-1B, F-16CJ y F-15E, donde la probabilidad de que fueran derribados por el sistema de defensa aérea enemigo era muy alta.

El CFACC a través del JPRC nos ordenó planear una misión código XSAR, Alerta de Búsqueda y Rescate en Vuelo, Airborne Alert Search and Rescue, para soportar el paquete inicial de AI y responder sin demora a la activación de cualquier evento de personal aislado en el área de la operación y yo como el MPCC/ RMC designado.

PresentacióndeláreadeoperacionesalBrigadierGeneralFernandoCorrea, ComandanteRedFlagRescue22-1. Fotografía:SargentoNewKenneth12thUSAF.

ejercicio multinacional en

DAVIS-MONTHAN Davis-Monthan

Las fuerzas aéreas de varios países, incluida la Fuerza Aérea Colombiana, viajaron a la Base de la Fuerza Aérea Davis-Monthan, Arizona, para participar en Red Flag Rescue, el principal ejercicio de búsqueda y rescate en combate del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, del 7 al 20 de mayo de 2022.

Red Flag Rescue proporciona un entrenamiento de búsqueda y rescate de combate realista y de alta fidelidad en un entorno robusto, degradado y operacionalmente limitado para fortalecer la interoperabilidad entre los Estados Unidos y las naciones asociadas.

“Red Flag Rescue se remonta a 1975, después de la guerra de Vietnam, donde se reconoció que muchos de nuestros aviadores se perdían debido a la inexperiencia. Este ejercicio se creó para proporcionar pruebas de combate simuladas y experiencias realistas en un esfuerzo por mitigar esa inexperiencia”, señaló el Teniente Coronel de la Fuerza Aérea de EE.UU. Robert Allen, Comandante del ejercicio Red Flag Rescue.

Este ejercicio, que se realiza anualmente, ofrece una oportunidad única para compartir información, mejores prácticas y crear cooperación

MULTINATIONAL EXERCISE IN

Multiple countries, including the Colombian Air Force, traveled to Davis-Monthan Air Force Base, Arizona to participate in Red Flag-Rescue, the Department of Defense’s premier combat search and rescue exercise, May 7 – 20, 2022.

Red Flag-Rescue provides realistic, high fidelity combat search and rescue training in a robust contested, degraded and operationally limited environment to strengthen interoperability between the U.S. and partner nations.

“Red Flag-Rescue dates back to 1975 after the Vietnam war where it was recognized that many of our Airmen were lost due to inexperience. This exercise was created to provide simulated combat tests and realistic experiences in an effort to mitigate that inexperience,” said U.S. Air Force Lt. Col. Robert Allen, Red FlagRescue Exercise Commander.

Occurring annually, this exercise offers a unique opportunity to share feedback, best practices and build partnership with each iteration. The intent is to provide realistic scenarios to exercise

Por: Sargento New Kenneth 12th USAF. Traducción: Escuadrilla de Idiomas, EPFAC.

Fotografía: Capitán Diego Armando Moreno Murcia.

con cada entrenamiento. La intención es proveer escenarios realistas para ejercitar las tácticas necesarias para proporcionar una respuesta de combate y rescate rápida y decisiva.

“Durante casi 50 años, Red Flag Rescue ha sido el principal lugar de entrenamiento para las Fuerzas Aéreas de todo el mundo. Todos los pilotos, el personal de mantenimiento, los planificadores y el personal de inteligencia se llevan una gran experiencia de este ejercicio”, explicó el General de División Barry Cornish, Comandante de la 12ª Fuerza Aérea (Fuerzas Aéreas del Sur).

En un periodo de dos semanas, aproximadamente 840 personas volaron más de 190 misiones para practicar la interoperabilidad, la integración de fuerzas y la búsqueda y el rescate en combate en la Base Aérea de Davis-Monthan, Arizona. Este año marca el segundo año de participación de la Fuerza Aérea Colombiana. A través de ejercicios de asociación regional como éste, se continúa fortaleciendo los lazos, capacidades e interoperabilidad para reforzar efectivamente la seguridad y prosperidad del hemisferio occidental.

“Hemos mantenido una relación muy larga y productiva con la Fuerza Aérea Colombiana a lo largo de los años. Los intercambios de expertos en la materia son solo una de las formas en que trabajamos juntos para fortalecer la seguridad regional; Red Flag Rescue es un ejemplo perfecto de ello, donde podemos entrenar unos junto a otros y podemos interoperar, compartir ideas y construir relaciones para contrarrestar y disuadir las amenazas en nuestro hemisferio y a nivel internacional”, indicó el Mayor General Cornish.

El ejercicio de este año reunió a cinco países diferentes y más de 30 aeronaves para su ejecución. La inclusión de dos UH-60 Black Hawk de la Fuerza Aérea Colombiana y un avión de transporte ECN-235 amplió el ya complejo entorno. Esto exhibió la capacidad de las Fuerzas para integrarse sin problemas y garantizar el éxito de la misión.

“Me gustaría dar las gracias a los hombres y mujeres de servicio colombianos que han venido aquí para el ejercicio; quienes han sido extremadamente profesionales, de gran talento y muy abiertos y dispuestos a participar y aportar su experiencia. Eso nos ayuda a todos a compartir y a crecer como una comunidad aliada de profesionales”, afirmó el Teniente Coronel Allen.

the tactics necessary to provide rapid and decisive combat and rescue response.

“Red Flag-Rescue, for almost 50 years, has been the premier training venue for Air Forces all over the world. All of the pilots, maintenance crews, planners, the intelligence personnel, they all take great experience away from this exercise,” explained Maj. Gen. Barry Cornish, 12th Air Force (Air Forces Southern) Commander.

Over a two week period approximately 840 personnel flew over 190 sorties practicing interoperability, force integration and Combat Search and Rescue at Davis-Monthan Air Force Base, Arizona. This year marks the second year of participation by the Colombian Air Force. Through regional partnership exercises such as this one, we continue to strengthen our bond, capabilities and interoperability to effectively bolster the security and prosperity of the Western Hemisphere.

“We’ve had a very long and very productive relationship wth the Colombian Air Force over the years. Subject Matter Expert exchanges are just one of the ways we work together to strengthen regional security; Red Flag-Rescue is a perfect example of that, where we can train alongside each other and we can interoperate, share ideas and build relationships to counter and deter threats in our hemisphere and internationally,” Maj. Gen. Cornish said.

This year’s exercise brought together five different countries and more than 30 aircraft for its execution. The inclusion of two Colombian Air Force UH-60 Black Hawks and one ECN-235 transport aircraft expanded upon the already complex environment. This showcased the capability of our forces to seamlessly integrate and ensure mission success.

“I’d like to thank the Colombian service men and women who came out here for the exercise; they have been extremely professional, highly talented, and very open and willing to participate and provide their expertise. That helps us all share and grow as an allied community of professionals,” said Lt. Col. Allen.

DuranteRedFlagRescue22-1pilotosdelaFACintercambiaronconocimientoscon tripulacionesdelaFuerzaAéreadelosEstadosUnidos. Fotografía:TSgtTaylorCifuentes.

Separata Especial

PARA QUE OTROS PUEDAN VIVIR J

«ueves, 14 de agosto de 2014, 02:00 a.m.» Tumaco es un municipio del Pacífico Nariñense con una riqueza natural inigualable, paraíso con un dosel de exóticos árboles centenarios que alcanzan hasta 30 metros de altura, donde se estima habita el 30 por ciento de especies en flora y fauna terrestre del planeta, sin embargo, es una de las zonas más desconocidas de Colombia. La selva, un ambiente hostil e implacable, la temperatura, la humedad y un universo inconmensurable de insectos se conjugan para desgastar la atención de los centinelas de una patrulla de la Policía Nacional, quienes no advierten la mirada vigilante de hombres integrantes de la Columna Móvil Daniel Aldana que opera en la zona, dentro de una larga lista de criminales buscados en el marco de la ofensiva adelantada en contra de estructuras al margen de la ley.

La patrulla es emboscada con un saldo inicial de tres heridos, entre ellos el Capitán Comandante de la patrulla y un Sargento, quienes, a pesar de las heridas logran maniobrar de manera ágil para salir del acecho y ubicarse en un perímetro seguro. Luego de reportar lo sucedido, se alerta al Centro Nacional de Recuperación de Personal, CENRP, de la Fuerza Aérea Colombiana para iniciar la evacuación de los heridos, empleando una tripulación de Búsqueda y Rescate en Combate, C-SAR, a bordo de un helicóptero Black Hawk UH-60 “Ángel”, destacado en la Base Naval de Bahía Málaga.

Las difíciles condiciones del terreno y la amenaza circundante dificultan el desplazamiento de los policías hasta un área abierta, sin posibilidad de aterrizar la aeronave de forma segura, por eso, se decide hacer la operación con grúa de rescate, insertando a los rescatistas en un agujero realizado por el personal en tierra, quienes despejan arbustos y obstáculos en un área no mayor a 5x5 metros rodeado por árboles que superan los 25 metros de altura. Con una precisión milimétrica sumado a la coordinación entre la tripulación, el operador de la grúa y los Rescatistas de Personal, RP, se ejecuta la inserción de dos Comandos, en una misión que no debería tardar más de seis minutos.

Una vez en tierra, los rescatistas recibieron información sobre la maniobra de evasión: otros tres integrantes de la patrulla fueron impactados; los RP en tierra verifican signos vitales y aplican la atención médica básica a fin de evacuarlos de manera segura. Se requiere un cambio en el plan para extraer seis heridos y dos rescatistas en cuatro ciclos de grúa, con una duración estimada de dos a tres minutos por ciclo, lo que implica un vuelo estacionario de al menos diez minutos y el aumento del riesgo de ataque, esto obligaría a que los rescatistas tuviesen que quedarse en tierra con la tropa y buscar un punto alterno para la extracción.

Sin dudarlo comienza la maniobra, los Comandos aseguran al personal al asiento de rescate y son subidos al helicóptero en casi 12 minutos, en este tiempo la concentración, el autocontrol y el profesionalismo del equipo son puestos a prueba. Una vez en la aeronave, con gestos de asombro, satisfacción y emoción las

Por: Mayor Iván Darío Cárdenas Rodríguez.

Fotografía: Capitán Grace Martínez Guevara.

miradas se centran en los rescatistas, quienes a pesar de la agotadora misión siguen brindando soporte vital básico e intermedio, aplicando compresas, vendajes, poniendo inmovilizadores y suministrando líquidos endovenosos para monitorear permanentemente los signos vitales de los heridos más críticos, quienes 20 minutos después son entregados estables y a salvo al Establecimiento de Sanidad del Batallón Fluvial de Infantería de Marina de Tumaco.

FUERZAS ESPECIALES DE RECUPERACIÓN DE PERSONAL

“Operaciones de recuperación de personal de la Fuerza Aérea. Es mi deber, como miembro del Servicio de Rescate Aéreo, salvar vidas y asistir a los heridos. Estaré preparado en todo momento para realizar mis deberes, por encima de mis deseos y comodidades personales. Estas cosas hago

PARA QUE OTROS PUEDAN VIVIR”1

Brig Gen Richard Kight, Commander Air Rescue Service (Primero de diciembre de 1946 - 8 de julio de 1952)

Misiones como la descrita son llevadas a cabo por hombres y mujeres RP pertenecientes a la Especialidad de Seguridad y Defensa de Bases de la Fuerza Aérea Colombiana, quienes deben cumplir estrictos parámetros físicos para iniciar su preparación, que les permitirá desempeñarse en las tareas que ejecutan los equipos de Recuperación de Personal en diferentes terrenos y ambientes, tanto en agua como en tierra.

Este personal realiza programas de entrenamiento enfocados en rescate y atención pre-hospitalaria básica, impartidos por la Dirección de Medicina Aeroespacial, DIMAE; la Dirección de Sanidad y la Escuela de Instrucción Militar Aérea, ESIMA; sumado a la certificación en cursos de Contraguerrilla, Lancero, Curso Básico de Combate Irregular, Infiltración a gran y baja altura mediante paracaídas, entre otros.

Dependiendo de sus capacidades en cada equipo designado para una misión, se desempeñan como:

Pararrescatista, RP: Entrenados en el manejo de trauma básico y avanzado en combate.

SERE: Experto en técnicas de Supervivencia - EvasiónResistencia - Escape.

Jefe de Asalto Aéreo – Rope Master: Entrenados en técnicas especiales de infiltración y exfiltración mediante cuerdas o sogas.

Controlador Aéreo de Ataque Terminal o Controlador de Ataque Terminal Conjunto: Personal con entrenamiento, formación y conocimiento de las capacidades de entrega de armamento de las aeronaves, en caso de requerirse Apoyo Aéreo Cercano o Close Air Support, CAS, de manera eficiente y efectiva.

Por su nivel de especialización, las Fuerzas Especiales de Recuperación de Personal de la Fuerza Aérea Colombiana son un selecto grupo con capacidades únicas tanto en las Fuerzas Armadas del país, como en la región, con una proyección demostrada a través de prácticas estandarizadas que los hacen interoperables en escenarios nacionales

1 USAF. (2020) Air Force Personnel Recovery. 2020 Pág. 15 “Operations It is my duty, as a member of the Air Rescue Service, to save life and aid the injured. I will be prepared at all times to perform my assigned duties quickly and efficiently, placing these duties before personal desires and comforts. These things I do THAT OTHERS MAY LIVE”. Brig Gen Richard Kight, Commander Air Rescue Service”

e internacionales, con la misión de salvar vidas en todo tiempo, circunstancia y lugar.

RED FLAG RESCUE 22-1

Un equipo de Fuerzas Especiales de Recuperación de Personal de la Fuerza Aérea Colombiana, FAC, participó por primera vez en Red Flag Rescue, ejercicio internacional de Búsqueda y Rescate en Combate, C-SAR, del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, que de manera realista busca entrenar e integrar las Fuerzas de Superficie o Pararescue Jumper, PJ, con los medios aéreos disponibles en ambientes operacionales hostiles, degradados y operacionalmente limitados, que tuvo como escenario el inmenso desierto que rodea áreas cercanas a Tucson, Arizona.

Bajo el liderazgo del suscrito, el equipo estuvo conformado por: Mayor Óscar “Artic” Zabala, Capitán Nelson “CJ” Barrero, Capitán Jennifer “Lion” León, Subteniente Daniel “Patojo” Muñoz, Técnico Segundo Byron “Lord Byron” Bustos, Técnico Segundo Óscar “Frito” Rodríguez, Técnico Segundo Leonardo “Loco” Martínez y Técnico Tercero Jerison “Cyborg” Camacho, quienes fueron seleccionados entre 139 candidatos en un proceso de entrenamiento de seis meses, en el que demostraron su experiencia en operaciones reales, las competencias a la hora de desarrollar Técnicas, Tácticas y Procedimientos de Recuperación de Personal y el dominio del idioma inglés para una interacción eficiente con los demás participantes del ejercicio.

Ejecutaron 13 maniobras terrestres, diurnas y nocturnas, para identificar, asegurar y recuperar al personal aislado en ambientes ajenos, integrándose operativamente con los diferentes equipos aéreos que participaron en las misiones, tales como, UH-60Colombia, A-10 Reaper - Estados Unidos, AH-64 Apache - Singapur, AC-130 – Estados Unidos, EC-135 – Colombia y F-16 - Estados Unidos, demostrando durante el ejercicio su profesionalismo y experiencia. El lema de las Fuerzas Especiales de Recuperación de Personal de la Fuerza Aérea Colombiana “Para que otros puedan vivir”, de forma altruista representa el lema del ejercicio “We leave no one behind” No dejamos a nadie atrás.

Fotografía:CapitánGraceMartínezGuevara.

Fuerzas Unidas por la Protección DEL CANAL DE PANAMÁ

Las Fuerzas Militares de 20 países se unieron para conformar el ‘Muntinational Forces South’, Fuerzas Multinacionales del Sur, dentro del ejercicio PANAMAX 2022, el cual contó con el liderazgo de su Fuerza Aérea Colombiana representado en el señor Mayor General Carlos Fernando Silva, Segundo Comandante de la Fuerza Aérea, como Comandante del Componente Aéreo de las Fuerzas Combianadas.

PANAMAX, llevado a cabo del primero al 11 de agosto, es un entrenamiento simulado que se realiza cada dos años en Estados Unidos. Expone un escenario de interoperabilidad entre los países participantes que los ayuda a contrarrestar amenazas nacionales y alteraciones de orden público impuestas por un grupo al margen de la ley, realizar ayudas humanitarias de acuerdo con las necesidades, así como mantener el acceso de tránsito y comercio libre y fluido en el Canal de Panamá. Un verdadero reto para las Fuerzas Multinacionales desde sus capaciadades y roles.

En esta ocasión, la Fuerza Aérea Colombiana lideró el componente aéreo que se encontraba en la Base ‘Davis Monthan’, sede de la Doceava Fuerza Aérea de los Estados Unidos, en Tucson, Arizona. El señor Mayor General Silva fue el encargado de dirigir en el nivel estratégico, operacional y táctico las capacidades aéreas de 11 países del continente americano, entre ellas aeronaves F-16, Kfir, A-10, A-29B, A-4R, MQ-9, KC-767, KC-135, KC-390, R-99, ECN-235, C-130, UH-60 y AH-60.

Por: Mayor Juan Carlos Pinilla Latorre. Teniente María Camila Cruz Bogotá. Fotografías: Sargento New Kenneth 12th USAF

ParticipantesdelaFuerzaAéreaColombianayelenlacedelaaviacióndelEjército NacionalduranteelejercicioPANAMAX.

Cabe destacar que este ejercicio se llevó a cabo simultáneamente en diferentes sitios como el Joint Staff Exercise Directorate en Suffolk, Virginia; U.S. Southern Command en Doral, Florida; Fort Sam Houston en San Antonio, Texas; Homestead Air Reserve Base en Homestead, Florida; Davis-Monthan Air Force Base en Tucson, Arizona, y Naval Station Mayport en Florida; desde estas ubicaciones se plantearon objetivos con estándares operacionales OTAN o multinacionales, planeamiento y desarrollo de operaciones multidominio, entre las cuales se incluían el espacio ultraterrestre y comunicaciones estratégicas.

La Fuerza Aérea Colombiana participó en el planeamiento, estrategia, desarrollo y toma de decisiones con personal perteneciente a la especialidad de vuelo, inteligencia, operaciones espaciales, asesoría jurídico operacional y comunicaciones estratégicas, quienes durante los 12 días del ejercicio se enfrentaron a diversos desafíos en situaciones de riesgo y orden público, generando los mejores cursos de acción derivados del trabajo en equipo con personal de otros países, teniendo en cuenta la misión e intención del Comandante

Durante este ejercicio, por primera vez, la Fuerza Aérea Colombiana hizo parte de los componentes en los dominios de Space Operations, Operaciones Espaciales, y Public Affairs, Asuntos Públicos o Comunicaciones Estratégicas, quienes aplicando conocimientos e interoperabilidad propusieron dentro de cada área la explotación de las capacidades inherentes y elevar el conocimiento a los aliados sobre lo adquirido y desarrollado por la FAC. Fue así, como se utilizó el satélite FACSAT-1 e imágenes bajo demanda para el entrenamiento y se trabajaron temas concernientes a boletines de prensa, contenido para redes sociales y entrevistas a comandantes.

El señor Mayor General Silva afirmó que “basado en la experiencia operacional que tiene Colombia nos dedicamos al planeamiento, ejecución y análisis de un ejercicio que tiene como propósito cuidar

los intereses de toda una región y traer la paz a nuestros países”. Siendo esta una forma de mantener nuestro potencial como aliado estratégico de Estados Unidos y referente en la región por las capacidades multidominio.

Al final de PANAMAX 2022, cuatro de los participantes de la Fuerza Aérea Colombiana obtuvieron reconocimiento por parte de la Doceava Fuerza Aérea de los Estados Unidos como ‘Top Performer’, por su trabajo destacado durante el entrenamiento, siendo la delegación invitada con más reconocimientos.

En este tipo de entrenamientos conjuntos y combinados con diferentes Fuerzas Militares de los países de la región, la Fuerza Aérea Colombiana busca hacer intercambio de experiencias y conocimientos entre todas las Fuerzas hermanas del continente.

DelegacionesdelospaísesqueintegraronelComponenteCombinadodelasFuerzasAéreasdelSurenlamuestradelascapacidadesdel A-10Thunderbolt.

Briefingdeactualizacióndiario,lideradoporelComandantedelComponenteAéreo, señorMayorGeneralCarlosFernandoSilva.

Médico Colombiano en la USAF ANTONIO DELGADO

Por: Coronel (RA) Mayerlin Galindo Lúligo. Fotografías: Archivo Personal Coronel Antonio Delgado.

Nacional, área selvática donde adquirió una amplia experiencia clínica en medicina tropical y operacional en el manejo de trauma en combate. Fue un momento de grandes aprendizajes considerando el momento histórico social de nuestro país. Al finalizar su servicio social, llega a Bogotá y decide unirse a la Cruz Roja Colombiana como médico de emergencia, área que lo inspiró para adelantar en 1992 su maestría en Farmacología de la Universidad Nacional. Sin embargo, su proyecto de vida apuntaba a nuevos horizontes.

La idea de continuar sus estudios superiores en Estados Unidos, fue un firme deseo de trascender en conocimiento y fronteras para el que fue necesario incrementar su nivel de inglés, proceso que le ayudó a obtener su aprobación en las pruebas e iniciar su residencia en medicina interna de 1993 a 1996 en el Hospital del Condado de Cook, en Chicago, Illinois, una experiencia satisfactoria personal y profesional; sin embargo, seguía en su panorama la imagen de aquellos momentos de fragor en que sirvió al Ejército y la Policía Nacional en Colombia y rondaba en su mente esa posibilidad.

Creer en las infinitas posibilidades de llegar lejos y muy alto, siempre con el deseo de servir, es el ejemplo de vida del Coronel Antonio Delgado, un profesional médico colombiano, bogotano, que ocupa uno de los cargos más importantes en la Medicina Aeroespacial, en la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. Actualmente, es el Comandante de Vuelo de la Clínica de Medicina Hiperbárica, la cámara más grande del Departamento de Defensa y la segunda de Estados Unidos, en el Centro Médico David Grant donde se encuentra asignado al 60th OMRS, Operational Medical Readiness Squadron.

En 1979, terminó su secundaria en el Colegio Santo Tomás en Bogotá y en 1988 recibió su título profesional en medicina de la Universidad Nacional de Colombia, un año después completó su internado rotatorio en el Hospital Central de la Policía Nacional con sede en Bogotá, para luego cumplir con su requisito de servicio social nacional en el Batallón Bombona de la Cuarta Brigada del Ejército

Estados Unidos

Colombia

Un día, el menos pensado, el Coronel Delgado nos cuenta que recibió la mejor charla de su vida que duró 15 minutos, como si la divina providencia a través de uno de sus mejores amigos y colegas ginecobstetra, quien formaba parte de la Guardia Nacional de Illinois, le habló de la opción de vincularse a la Fuerza Aérea de Estados Unidos; así nace un nuevo proyecto de vida en 2007, obteniendo el grado de Mayor con 39 años, como oficial de los servicios.

Su primera asignación en la Base de la ciudad de Brooks, Texas, donde culminó con éxito el Curso Primario de Medicina Aeroespacial y en 2008 recibió sus alas de Cirujano de Vuelo, vinculándolo en la parte operacional, un rol preponderante que lo integró rápidamente a las tripulaciones aéreas con los mismos estándares de un piloto; tienen la responsabilidad de mantener estrictos protocolos médicos, especialmente a quienes se encuentran en estado de vuelo, salto (aerotransportado), siempre velando por el bienestar y salud, particularmente cuando se despliegan a misiones u operaciones fuera del país, como el caso de Afganistán.

En 2009, surge la oportunidad de adelantar estudios en Medicina Submarina e Hiperbárica, otra especialidad fundamental del Centro de Medicina Aeroespacial, lo que le permitió abordar este campo del conocimiento en Wilford Hall Medical Center en Lackland AFB TX. Subsecuentemente fue transferido a Travis AFB, en el norte de California, donde fue asignado durante tres años, como Comandante Adjunto del Escuadrón de Medicina Aeroespacial 60 y Comandante de la Clínica de Medicina Hiperbárica.

Capacitacióndecuidadocríticoaestudiantesdemedicinadela Universidad Naval en ciudad de México.

306 Ediciones

Celebramos 75 años de labor periodística, dando a conocer momentos cruciales de la transformación tecnológica y profesional de la Fuerza Aérea Colombiana y, por ende, de la aviación militar en el país. Esta trayectoria se fundamenta en nuestros fieles suscriptores y lectores, quienes se constituyen en la mayor motivación a la hora de producir cada número. Hacemos parte de la vida de quienes llevan la aviación en el alma y seguiremos trabajando para que a través de artículos, crónicas, entrevistas, reportajes, fotografías e ilustraciones vivan “La Pasión del Aire en una Revista”.

4 Ejemplares al año

23 Años presentes en la FILBO

20 Fotógrafos profesionales nacionales e internacionales

37 Directores

118 Afiches de colección

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Medalla Orden de la Democracia Simón Bolívar en el grado de Cruz Comendador

Entrevista a personajes Internacionales

General del Aire don Juan Antonio Lombo López, Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire. Edición 228

Rosa Ávalos Chumpitazi, Primera Mujer en Latinoamérica Ingeniera Aeroespacial, Nuclear y Matemáticas Aplicadas. Edición 278

Adriana Ocampo Uria, Geóloga Planetaria y Científica. Edición 285

William Knox Martin Jr, Hijo del Pionero de la Aviación. Edición 295

Mayor General Barry Cornish, Comandante de la Duodécima Fuerza Aérea. Edición 300

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Exposición fotográfica

Diana Trujillo, Ingeniera Aeroespacial Directora de Vuelo en la NASA. Edición 301

6 Libros de la Fuerza Aérea

Colombiana

CENRP

, su misión: Salvar vidas

Entre los mayores atributos de la Fuerza Aérea Colombiana están el alcance y la rapidez, destinados al cumplimiento del mandato constitucional de velar por la seguridad y la soberanía nacional; así mismo, aeronaves y tripulaciones llegan todos los días a las áreas más apartadas de la geografía con el propósito de ayudar a las poblaciones que no tienen acceso a atención médica especializada y de calidad, una labor que se traduce en unir a Colombia y llevar esperanza a quienes más lo necesitan.

Sin embargo, más allá de brindar un servicio a la población civil por condiciones desfavorables de salud, es inminente la disponibilidad de su poder aéreo para atender emergencias causadas por desastres naturales, recuperación y evacuación de personal herido en combate, protección del medio ambiente a través de la extinción de incendios forestales y transporte de ayuda humanitaria a otros países del mundo.

En busca de optimizar el tiempo de respuesta y garantizar mayor eficiencia en estos requerimientos, en 2008 se creó el Centro Nacional de Recuperación de Personal, CENRP, dependencia del Comando de Operaciones Aéreas de la FAC, con el principio de control centralizado y ejecución descentralizada, mediante el cual se coordina, autoriza y planea la ejecución de las misiones.

Está conformado por Oficiales, Suboficiales y personal civil de las especialidades de Vuelo, Defensa Aérea y Seguridad y Defensa de Bases, además cuenta con aeronaves medicalizadas como el SK350 King Air, C-208 Caravan, Casa C-295 y helicópteros tipo UH-60, Bell 212 y Huey II. No obstante, cualquier equipo que posea la Institución puede ser desplegado y utilizado para la atención de emergencias en cumplimiento de la ley 1523 de 2012 que faculta a la Fuerza Aérea Colombiana como miembro del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo.

De junio de 2021 a junio de 2022, el CENRP realizó 368 misiones de evacuación aeromédica beneficiando a 59 pacientes civiles y 466 militares; 561 traslados aeromédicos de 368 civiles y 246 militares;

Por: Teniente Coronel Jair Ramiro Ocampo Bustos. Capitán Felipe Arroyo Benavides.

Fotografía: Archivo Fotográfico Revista Aeronáutica.

igualmente, empleó más de 70 horas de vuelo en la extinción de incendios forestales.

El 17 de julio de 2022, se conmemoraron 14 años de servicio de esta dependencia, eje transversal de la labor de responsabilidad social que cumple la Fuerza Aérea por los colombianos. Ocasión que motivó rememorar tres sucesos donde se muestran el funcionamiento y la capacidad de respuesta oportuna y eficaz del CENRP; así como, la disposición de los hombres y mujeres que día a día trabajan cumpliendo la sublime misión de salvar vidas.

EL INESPERADO HURACÁN

El 14 de noviembre de 2020, una llamada por parte de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD, advertía la posibilidad de una tormenta tropical con variación no estipulada que podría convertirse en huracán y afectar el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. De inmediato y con la instauración de un Puesto de Mando Unificado en Bogotá, se pone en alerta a las tripulaciones de la Fuerza Aérea Colombiana para cumplir, como miembro activo del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo, la atención de la emergencia.

Al día siguiente, la UNGRD notificó la activación del sistema de emergencia debido a los estragos generados por el Huracán Iota. Las imágenes eran fuertes y desgarradoras, en cuestión de segundos la Isla de Providencia se vio reducida a escombros y las afectaciones, aunque con menor proporción en San Andrés, también tenían consecuencias.

El Comando Aéreo de Transporte Militar, CATAM, puso a disposición sus aeronaves C-130, Boeing 737, Boeing 767 y C-295 para el transporte de personal y ayuda humanitaria requerida. Los integrantes del Grupo Aéreo del Caribe, GACAR, testigos del acontecimiento, desde el primer momento apoyaron todas las actividades establecidas por el Comando de Operaciones Aéreas y Espaciales.

La Fuerza Aérea se vio enfrentada a escenarios complejos que nunca antes había experimentado y al haber tantas necesidades sobre la mesa, en colaboración con la UNGRD y raizales de la isla, se debió priorizar y organizar la maniobra.

La desesperación era tal que el traslado de los afectados de Providencia a San Andrés era cada vez más difícil, ya que determinar quién debía subir a las aeronaves era complejo. Así mismo, el traslado de carga se dificultaba porque no existían lugares de

abastecimiento, ni era claro cómo distribuir las ayudas, por lo tanto, se buscó cubrir las necesidades básicas que se presentaron en la isla.

El agradecimiento de la población de San Andrés y Providencia fue muy especial, se pudo demostrar las capacidades de la Fuerza Aérea Colombiana y las habilidades de las tripulaciones que participaron en misiones de gestión del riesgo, traslados aeromédicos, búsqueda y salvamento de personal. Cabe destacar que, por la magnitud de la emergencia, la Institución a través del CENRP ha

ApoyodesuFuerzaAéreaColombianaenlaboresdeconstrucción de vivienda en la Isla de San Andrés. Fotografía:AerotécnicoSilviaPaolaBustamanteRincón.

TRANSPORTE DE PERSONAL Y CARGA ISLAS DE SAN ANDRÉS Y PROVIDENCIA

Ilustración Aeronáutica