CURACAS Y HECHICEROS DE JAUJA

Page 236

Los curacas hechiceros de Jauja

­ enunciado. De ejercer el gobierno don Cristóbal, sería su «padre y amparo y todo d nuestro descanso», esto último quizá en alusión a la exoneración de ciertas cargas propias del sistema colonial. Una hechicera declaró que don Lorenzo Cusichaqui, el flamante cacique principal, «era muy niño que no se sabia limpiar» (f. 85v). Para los contemporáneos, la lógica detrás de los aciagos sucesos en el pueblo Atunjauja era clara. Atacando mágicamente a los Cusichaqui de la parentela cercana de doña Sebastiana, los Calderón Canchaya y los Ticsi Cusichaqui buscaban revertir la decisión de la Corona de reconocer a la parte contraria. Los enfrentamientos por el curacazgo de Atunjauja fueron el hilo conductor de los acontecimientos ocurridos en el repartimiento, aquel que les dio coherencia interna y permitió que las muertes aisladas fueran concebidas como parte de un solo plan general que buscaba hacer el mal a la familia que ahora estaba en el poder. Desde la posición desfavorable de la parte acusada por el visitador de la idolatría, la hechicería era un mecanismo efectivo para disputar el poder, una vía paralela a las batallas legales por los curacazgos que caracterizaron el periodo colonial. Los hechizos eran un complemento de la confrontación política más directa. Desde la perspectiva de los agredidos, en cambio, las muertes por brujería «confirmaban» las sospechas de mala voluntad que se atribuyeron luego a los rivales políticos. También, ofrecían una explicación coherente para un eventual triunfo de los opositores políticos. Gracias a su efectividad para deshacer relaciones familiares que se habían vuelto insostenibles, la brujería en Atunjauja trazó una frontera definitiva entre los grupos que se enfrentaban por dicho curacazgo. Después de todo, los rivales eran vecinos y parientes muy cercanos, lo que pone de manifiesto el carácter ambiguo y riesgoso de las relaciones familiares. Dichas relaciones podían sustentar la autoridad y el poder, pero también podían ser el origen de la más encarnizada competencia. 2. Cincuenta años de inestabilidad Para entender la historia detrás de la denuncia de don Carlos Apoalaya ante el visitador de la idolatría en 1689, es preciso remontarse hasta la década de 1640. La perspectiva histórica permite interpretar los papeles de la idolatría como parte de un proceso, penetrando así en la dinámica más general de las sociedades en las cuales se gestaron. Como se adelantara, las acusaciones de hechicería surgían allí donde otras tensiones recorrían el tejido social. Las acusaciones eran, por lo mismo, expresión de esas tensiones. A la vez, les daban forma legal, lo que facilitaba que los tribunales decidieran el resultado de la pugna a favor de una de las partes. En realidad, los pleitos judiciales, los asesinatos y las vendettas en que se vieron envueltos los miembros del linaje de los Cusichaqui impidieron que hubiera un cacique principal y gobernador estable —reconocido tanto por la Corona cuanto por la elite nativa del repartimiento— al menos desde la segunda mitad de la década de 1640. Este 236


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook

Articles inside

5. Caciques forasteros y un heredero barbero

22min
pages 265-274

Bibliografía

49min
pages 275-306

4. Los hechiceros contra los tribunales del Rey

30min
pages 253-264

3. Fieles vasallos y apos rebeldes

30min
pages 241-252

2. Cincuenta años de inestabilidad

10min
pages 236-240

1. «La Justificación de mi querella es solo mirar la honrra de Dios»

15min
pages 230-235

Batallas mágicas y legales

7min
pages 227-229

3. La red de alianzas

10min
pages 212-215

2. Curacas legítimos e ilegítimos

22min
pages 203-211

1. El curaca, los hechiceros y el poder

8min
pages 200-202

4. Caciques contra caciques

24min
pages 216-224

5. Palabras finales

4min
pages 225-226

Juan Picho, curaca y hechicero

7min
pages 197-199

5. El destierro del cacique

5min
pages 195-196

4. Obstinados denunciantes

39min
pages 180-194

Las mujeres del curaca

4min
pages 165-166

3. Señor del «tiempo del Inga»

10min
pages 176-179

2. Ausencia de parientes

15min
pages 170-175

1. Las culpas de don Juan

8min
pages 167-169

5. A manera de síntesis

5min
pages 160-164

4. Ananguanca, la reinvención de la autoridad

12min
pages 154-159

3. Luringuanca, cuatro herederos para un curacazgo

20min
pages 146-153

2. Atunjauja, la reorganización pacífica

7min
pages 143-145

2. Jerarquías de la autoridad nativa

38min
pages 108-122

3. Curacas y riqueza material

26min
pages 123-132

1. Francisco de Toledo en el valle de Jauja

15min
pages 137-142

1. El escenario de las acusaciones

39min
pages 93-107

De señor de diez mil indios a cacique principal

10min
pages 133-136

2. Extirpación, hechiceros y prácticas mágico-religiosas

37min
pages 74-90

El escenario

4min
pages 91-92

1. La naturaleza de las acusaciones

26min
pages 63-73

Acusaciones de brujería

4min
pages 61-62

1. Arzobispos, visitadores y campañas

27min
pages 33-43

2. Religión andina, entre la historia y la antropología

37min
pages 44-60

Introducción

26min
pages 17-30

Extirpación de idolatrías

4min
pages 31-32

Prefacio

9min
pages 11-14

Capítulo

1min
pages 7-10

Agradecimientos

2min
pages 15-16

Capítulo

1min
page 6
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.
CURACAS Y HECHICEROS DE JAUJA by CÉSAR GUILLERMO GONZÁLEZ DELGADO - Issuu