Guía del Viajero Interdialéctico

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GUÍA DEL VIAJERO INTERDIALÉCTICO Ó DEL CÓMO LEER A PLATÓN

Alejandra Olivas Dávila Material Didáctico Universidad Autónoma de Chihuahua

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Al abrir un diálogo de Platón por primera vez puede que te resulte muy fácil leerle. Tan fácil, que te puedes sentir inseguridad de estarlo leyendo con el suficiente detenimiento.

Tal vez te ocurre lo opuesto. Algunas personas desisten de leer a Platón porque les suena muy confuso. Platón puede ser muy sencillo o complicado dependiendo del diálogo en cuestión.

Pero también tiene elementos que pertenecen a una tradición, momento histórico y seguimiento del discurso que lo pueden hacer un tanto inaccesible para el lector inicial. La siguiente lista te ayudará a navegar las, aparentemente oscuras, aguas platónicas. ¡No caigas en pánico!

A manera de lectura general, considera que: 1.

Como en cualquier lectura de Filosofía, es importante considerar aspectos logísticos previos a abrir el libro:  Encuentra un espacio tranquilo, cómodo, libre de distracciones.  Encuentra un tiempo del día/semana que te permita estar en tranquilidad pero a la vez te permita retener atención a lo que estás leyendo.  Asegúrate de tener a la mano todas tus herramientas de lectura: paráfrasis, toma de notas, marcadores de párrafo, marcadores de página, detección de ideas principales, detección de cambios, conclusiones e implicaciones.  Establece una calendarización. Si tienes una semana para entregar una actividad, considera que tu lectura requiere tiempo y detenimiento. Un día antes de la entrega resultará en una lectura muy pobre, y una actividad aún más pobre.

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

Si lees a Platón por gusto, no por tarea, una calendarización te puede ayudar a mantenerte en contacto con el argumento. No lo dejes pasar mucho tiempo para mantener tu lectura y entendimiento fresco. Ejercitar la mente puede ser similar a ejercitar el cuerpo, si le dejas pasar es más dificil regresar.

Dicho esto, la mejor forma de leer a Platón parte de: 2.

1

Considerar que los diálogos de Platón son más un “Cómo pensar” que un “qué pensar”, esto es, mientras que un “cómo pensar” consiste en un esqueleto de pautas críticas que puedes aplicar en otras instancias, un “qué pensar” es un juicio concreto. Un “cómo pensar” se puede utilizar varias veces ya que es un bosquejo abstracto que se adpata a otras situaciones. Un “qué pensar” tiene un solo uso. Platón es un maestro (ahem…rey filósofo) que quiere sacarte de la caverna.

Por medio de Sócrates se te invita a “parir ideas” 1 y aprender a pensar, particularmente, aprender a formular mejores preguntas y no conformarte con “lo dado” y “lo aparente”. Para entender el cómo pensar hay que prestar atención a la serie de preguntas que hace Sócrates. Si en el camino te das cuentas que no estás de acuerdo con las preguntas planteadas, si las crees tendenciosas o mal planteadas, entonces ya estás pensando por tí mismo y con bases críticas.

El “parir ideas” es un tecnicismo importante en Platón. Así como hablamos de tecnicismos grandes como la teoría de las formas, teoría de la recolección, línea dividida, así también hay elementos menos grandisosos pero muy esclarecedores. Para leer más al respecto puedes dirigirte al dialogo Teeteto o de la ciencia. En la discusión preliminar, Sócrates le comenta a Teeteto y a Teodoro una anécdota sobre su madre, quien era una excelente partera, y deriva una analogía de las labores de su madre hacia su propio quehacer filosófico.

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3.

Disfruta el recorrido mental dejando los argumentos grandes para el final, o para una segunda lectura. Es muy tentador tratar de lograr un entendimiento integral, pero hacerlo de manera prematura puede resultar detrimental para tu desarrollo crítico.

4.

Extrae la manera en que se cuestiona una situación determinada. Has que tu cabeza sufra un poco con cada refutación. Esto ocurre también en autores como Aristóteles y Descartes. Utilizan muchas refutaciones. Es sumamente util detenerse a analizar qué se está refutando y cómo. De manera adicional puedes, antes de avanzar tu lectura, cuestionarte ¿para qué estamos refutando? Puedes ir armando en tu mente un pronóstico del desarrollo del texto.

Si bien tu pronostico puede resultar falso ya una vez que completes tu lectura, la expectativa te puede acercar más a las ideas.

5.

Regresa al diálogo después de un tiempo, aunque se desborde del significado de “regreso”. En una lectura inicial se nos presenta un territorio nuevo y lleno de extrañezas. En una relectura te permitirás entender mejor el proceso de cuestionamiento. Posiblemente te haga cuestionar a Platón.

De ser así, has cumplido con el propósito del autor.

La segunda mejor forma, y la más específica, consiste en: 6.

Determinar el objeto del diálogo desde el inicio. Esta recomendación es opuesta a la recomendación 3.

Normalmente el objeto del diálogo queda establecido en el título con mínimas variaciones o agregados. Por ejemplo, en El Banquete, o del amor el objeto del diálogo es debatir y cuestionar ¿qué es el amor? ¿qué forma tiene? ¿cual es su origen? ¿cómo se manifiesta?

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Analizar el objeto principal del diálogo previamente a tu lectura puede ser útil ya que te dará una expectativa, similar a lo que comentábamos en (4). No obstante, hay que tener en mente que la manera en que nosotros concebimos un tema puede ser radicalmente distinta a la manera que nos va a explicar Platón. Retomando el ejemplo de El Banquete, es posible que mi entendimiento de la noción “amor” no sea evaluado tal cual a lo largo del diálogo. Para evitar decepciones caprichosas sobre el abordaje de un tema es importante, mas que generar una expectativa propia, hacer uso del contexto histórico. Analizar el momento en el que se desarrolla el diálogo y tomar eso como punto de partida.

Muchas de las aportaciones platonistas son perenes, pero algunas otras son totalmente dependientes a su contexto histórico y ya no funcionan a corde a nuestro contexto.

7.

Detecta cómo los interlocutores del diálogo comprenden el objeto del diálogo. a. Puedes llevar una tabla de posturas y cambios donde especifiques si el interlocutor va cambiando su postura inicial, o en su caso, cómo se mantiene, durante el cuestionamiento de Sócrates. En caso de no haber un cuestionamiento claro, puedes simplemente discernir cada postura, o la postura que parece ser favorecida a lo largo del diálogo. Esto es particularmente útil al inicio de La República. Una comparación entre Céfalo, Polemarco y Trasímaco puede aclarar los elementos iniciales que detonan el abordaje de la ciudad ideal.

Particularmente resalta la contribución de Trasímaco, quien queda insatisfecho con las respuestas y preguntas de Sócrates, y ha tenido gran seguimiento por parte de los especialistas en la obra de Platón. Más adelante en la República, las intervenciones de

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Glaucón y Adimanto también implican un giro en el discurso. Vaya, no es solo el trabajo de Sócrates el que determina aportaciones críticas, también hay que seguir los aportes de los interlocutores. b. Sócrates puede ser sumamente tramposo, en ocasiones decide no atender preguntas relevantes, o redirige el tema hacia puntos forzados. Detectar cuando ocurren estos detalles te invitará a detecar por qué. Estas detecciones serán mas eficientes en lecturas posteriores ya que se requiere mayor dominio integral del diálogo. En ocasiones la redirección del dircurso por parte de Sócrates es forzada y errónea, pero en otras ocasiones, mas que tramposa necesaria para regresar al tema inicial. Los interlocutores pueden sacar de contexto el tema principal muy facilmente y Sócrates trata de moderar el diálogo. c. En ocasiones la postura favorecida no tiene un final feliz. Esto es, hay diálogos en donde se concluye X, solo para llegar a una segunda conclusión donde X no es posible realmente, o X es incompleta porque Y. Este es un punto muy importante en tu lectura. Considera la recomendación (2). A Platón parece interesarle más el hecho de que puedas pensar por ti mismo, y cuestionar lo dado que llegar a una conclusión fija. Si bien te dará el mejor argumento para X, X siempre parece estar en tela de juicio.

8.

¡Se vale hacer un poco de trampa! Pero solo un poco. Realiza búsquedas breves, en fuentes colegiadas, que te permitan discernir los conceptos grandes que están en juego. A pesar de las muchas aporías de los diálogos, se pueden extraer aspectos básicos que se mantienen en todos los diálogos y

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le dan cohesión a la obra platónica. Por ejemplo, infórmate sobre la Teoría de las Ideas, el Mito de Recolección y la Línea Dividida.

9.

Ahora bien ¿Dónde empezar? ¿me doy un clavado en cualquier diálogo? ¿hay un orden? ¿será mejor empezar leyendo un libro <sobre Platón> en vez de <a Platón> a. Si lo estás leyendo para clase, bueno, no tienes mucha opción, inicia donde te indica tu maestro. b. Pero si lees por iniciativa propia, el mejor lugar para empezar es el “Banquete, o del amor”. Es un diálogo sencillo en su estructura ya que cada interlocutor va presentando su postura, y conforme van avanzando va mejorando la retórica. El tema del amor es de interés general así que logrará captar tu atención de manera rápida. Finalmente, la exposición al tema es suficientemente independiente así que no requiere conocimiento previo sobre los diálogos Platónicos.

Desde luego puedes empezar en donde quieras, esto es solo una sugerencia. c. El orden de publicación es muy debatido entre los historiadores y especialistas en Platón. Así que leer en el orden que Platón escribió es relativamente manejable. Hay clasificaciones por tema (cluster) que te pueden dar una idea más amplia clara de cada abordaje temático. Por ejemplo: {Banquete, Fedro, República, Fedón}. Leer por cluster puede tener sus desventajas ya que en un mismo cluster puede haber diálogos sencillos de leer {Banquete, Fedón} y otros más difíciles {República, Fedro}. d. Leer sobre Platón te puede dar un contexto, pero a la vez te limita. La invitación que te hace esta guía es leer

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directamente a Platón. Desde luego consulta tus dudas en fuentes externas (colegiadas), pero intenta encarar a los diálogos por tus propios medios. El propósito es que logres pensar por ti.

10. Actualmente

la filosofía es una disciplina sumamente especializada. Esto ha resultado en una estampida de tecnicismos, acceso privativo, y sobre-publicación en temas de poco rango. Por ejemplo, muchos autores se especializan en temas específicos de la obra de Platón. Platón, por otro lado, trató todo tipo de temas. Si bien hay un 8 enfoque en “lo bueno” o bien, lo ético, también se cubren temáticas de estética, metafísica, epistemología, política, educación, y demás. En ese sentido, hay que leer a Platón con la mente abierta a una red de aportaciones sumamente amplia y divergente con respecto a la metodología de la filosofía contemporánea. Dicho eso, cabe aclarar que aunque el estilo y rango de Platón es distinto al contemporáneo, sus propuestas aún tienen gran influencia, incluso fuera de la filosofía académica.

11. Los

diálogos son de naturaleza exploratoria y su misma estructura nos reivindica este aspecto. A continuación te dejo 3 tips más específicos que te apoyar para detectar con mayor facilidad, y refinar tu entendimiento de las ideas de cada diálogo: a. Al inicio de cada diálogo hay que prestar atención a la primera línea. Esta primera línea puede pasar desapercibida. No obstante, la primera línea de cada diálogo es premonitoria con respecto al resto del texto. Por ejemplo: “Aquí está Sócrates” en el Crátilo o de la propiedad de los nombres hace una analogía a la función referencial que sostiene un nombre con su

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b.

c.

objeto. “Yo no sé, atenienses” en la Apología se reseña de la falta de bases en la acusación que se le hace a Sócrates. Analizar la primera línea de cada diálogo es un trabajo más sencillo de llevar a cabo ya una vez finalizada la lectura, no obstante, puedes ir tratando de descifrarla a lo largo de tu lectura.

El proceso es dialéctico en tanto a que pretende responder y mejorar preguntas. Aun en la Apología, donde Sócrates incurre en monólogo, hay un diálogo con el material de acusación, las leyes y la posibilidad de la virtud. Aquí entra el control de cambios recomendado en (7.a) Hacia el final de un diálogo, nos encontramos con la resolución del proceso de cuestionamiento. Y pareciera que ya hemos llegado a una conclusión tangible. Sin embargo, casi todos los diálogos acaban en aporía. Esto es, después de concluir la mejor versión de la respuesta, Sócrates (en ocasiones algún otro interlocutor) nos presenta la imposibilidad de llevar a cabo esa “mejor versión” y se da por terminado el diálogo dado un rotundo impasse. Este atolladero conceptual se presta a la exploración de la misma noción en algún otro diálogo o simplemente deja la pregunta abierta. Por ejemplo, el final del Teeteto acaba en aporía ya que lograr, en sí, la explicación en la ciencia es imposible. Si bien no se puede solucionar el detalle de la explicación, en el Sofista se continua con la discusión cediendo hacia un análisis más mundano del conocimiento. De manera que hay que leer y leer y leer hasta lograr un mejor contexto platónico, aunque cada dialogo acabe un poco agridulce.

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12. Si

bien en el punto anterior (10.c) puede ser un poco desalentador, recuerda que Platón es uno de los más grandes filósofos. Para algunos es el más grande. Esto no es una apreciación fortuita. Platón logra plasmar en su obra una serie de problemas que hasta la fecha carecen de respuesta, seguimos cuestionando o tomamos como base para desarrollar cuestiones más específicas. En ese sentido, el trabajo de Platón es altamente profundo. No te rindas en la confusión que puede generar una lectura superficial.

Inversamente, no te rindas al dar por hecho elementos que aun a la fecha estamos analizando.

TRABAJOS CONSULTADOS Platón, Apología de Sócrates --,Fedro --,Fedón --,República --,Crátilo, Diálogos de Platón, Editores Mexicanos Unidos. México: DF ISBN 978-607-14-1757-2 --, Teeteto --, Sofista, Diálogos V, 2008 Gredos ISBN 978-842-49-1279-6