
3 minute read
Un camino de resiliencia
Hija de matemáticos ateos, descubrió su fe desde muy niña, solía ir a misa a escondidas en las mañanas antes de que sus papás se despertaran y se sentaba en la parte posterior al sentirse indigna por no estar bautizada.
A los 9 años decide que quiere ser bautizada, sus padres para cumplir sus deseos, hacen la debida investigación y les indican que ellos deben estar bautizados, ellos se niegan. Recurren a un primo sacerdote, quien se niega a realizarle el sacramento debido a tener padres ateos, finalmente un cura docente, compañero de su madre, la bautiza a cambio de una botella de whisky. Dice que esto es prueba de que siempre ha sido de fe, pues a pesar de tantos inconvenientes logró ser bautizada. Habla de que se trata de un don, si uno se entrega a Dios y se transmite y se sigue trabajando, el don se va esparciendo.
La fe ha sido un factor determinante en la manera en la que ha abordado las distintas problemáticas que se han presentado a lo largo de su vida: desde el fallecimiento de sus padres, quienes eran sus consejeros en todos los aspectos de su vida, hasta el proceso en el que vendió LiSim y la volvió a comprar. Ha tenido épocas duras, pero ha salido airosa gracias al empeño y la determinación.

La venta de LiSim fue algo que le resultó extremadamente complicado, ya que no tenía control de la empresa y cuando la creó no pensó en venderla nunca. Ahora recomienda que las empresas deben ser vistas como los hijos, deben crearse para que hagan su propio camino y sean independientes. Soltar esas responsabilidades le permite vivir tranquila, aunque admite que si no hubiese sido a las malas no lo hubiese hecho.
Tras la venta de LiSim y gracias a que una antigua pupila se pone en contacto con ella, evidencia que LiSim tiene en realidad mucho potencial pero tiene problemas en su gestión, por lo cual informa de esto a las nuevas directivas, sin pensar en la sorpresa que se llevaría cuando la propuesta sería que volviera a comprar la empresa.
Esa nueva decisión hizo que por el estrés se enfermara nuevamente, pidió consejos a varios familiares quienes le dijeron que no la volviera a comprar, pero esa opción no le daba tranquilidad, oró bastante y trató de aclarar sus pensamientos. En ese proceso recordó a sus padres y los extrañó, siempre le ayudaron a tomar decisiones, les pidió sabiduría y tras un momento sintió que le dijeron “es tan fácil destruir y tan difícil construir”. Así, decidió volver a comprar pero sin estar al frente de la compañía, quería apoyar sin estar en el ajetreo del día a día.
El proceso de reorganizar LiSim fue muy complejo, hubo épocas difíciles y una gran inversión económica, pero este proyecto una vez más dio sus frutos y le brindó nuevas enseñanzas. Una de las cosas que aprendió en el proceso de venta y posterior compra de su empresa es que nadie es indispensable, así como LiSim logró continuar sin ella a cargo, cosa que en un inicio era algo impensable. Otra gran enseñanza es que se debe aprender a dejar ir, tanto a personas como a proyectos, desprenderse puede ser liberador; no se debe tratar de amarrar a nada ni a nadie, sobre todo si el resultado es provechoso para ambas partes.
Ahora bien, uno de sus mayores retos lo vive actualmente: su único hijo padece cáncer, una enfermedad que le ha enseñado muchas cosas y ha puesto nuevamente a prueba su fe, a partir del momento del diagnóstico se dedicó enteramente a su hijo. Considera que Dios le ha permitido vivir muchas experiencias, adicionalmente siempre le ha gustado hablar y esto, sumado a que cree que compartir experiencias es de gran ayuda, ha hecho que desee concientizar sobre el cáncer infantil, pues esta situación le ha permitido notar los muchos tabúes alrededor de la enfermedad.
El tratamiento de Philip, su hijo, ha sido exitoso y el proceso avanza con muy buenos pronósticos desde la perspectiva médica, por lo que hoy en día se encuentra un poco más tranquila y disfrutando de la etapa que vive junto a su familia. Siempre soñó con llegar a un momento en el que se dedicara a su familia primordialmente y en tiempos libres estar en juntas directivas, asistir y dar charlas, y así es como vive ahora.