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er autodidacta tiene muchos pros y contras, pero conocer los beneficios que tiene este método de aprendizaje, sin lugar a duda, te hará querer por lo menos intentarlo en estos tiempos de pandemia. Después de todo, dedicar el mucho tiempo libre que ahora nos sobra en aprender algo nuevo es una de las decisiones más productivas y beneficiosas para nosotros mismos que podemos tomar ahora. Te contaré que en la preparatoria donde estudié no había maestros: todo era a través de computadoras e internet, y por lo tanto mi única opción fue aprender por mi cuenta, por lo que casi sin darme cuenta acabé convirtiéndome en una persona autodidacta. Claro, al principio fue difícil, pero poco a poco fui encontrando los grandes beneficios que podría traerme el adquirir conocimientos por mi cuenta. Así, me dediqué con ingenio y esmero a “hackear” al sistema educativo tradicional.
M auricio Gutiérrez Pavón
¡Pero no me mal entiendas! Sí, todos saben que un “hacker” es una persona que se dedica a detectar fallos en el funcionamiento de los sistemas de información, para evadir o romper sus barreras de seguridad y acceder a datos de suma importancia para él o para alguien más que los necesite. Tradicionalmente se le considera una actividad delictiva y por lo tanto reprobable, pero al decirte que me convertí en un “hacker” de la educación no me refería a que decidí cometer un crimen metiéndome en sitios prohibidos, sino a utilizar mis conocimientos para encontrar información que está ahí, pero que para desapercibida para muchos. Al convertirte en un autodidacta te conviertes precisamente en una especie de “hacker”, pues al mo-
Hackeando el
sistema
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Generación l UMAD