TATUAJES DE AGUA

Page 1






Transmutación

En el arcano del tarot un ángel vierte una sustancia líquida entre dos ánforas; presumiblemente transforma el agua en un destilado, base de la obtención alquímica de la medicina de las plantas. Mississippi es la voz ojibwe que denota al Padre de las aguas. El conocimiento que tienen los pueblos originarios de los fenómenos naturales y la observancia por sus expresiones más sutiles les han permitido comprender los principios sanadores que existen en el agua, en las piedras, en las plantas y los animales gracias a que su relación con ellos es de pares.





El laberinto de Harold Fisk La Investigación geológica de valle aluvial del bajo Río Mississippi incluye un prodigioso mapa: una proyección del mundo que demuestra que el cartógrafo Harold Fisk reconoció la totalidad del río a lo largo del tiempo y del espacio, frente a la paradoja del esfuerzo absurdo de los hombres para contenerlo. Si las líneas de los mapas de Fisk registran de manera acuciosa los cursos del Mississippi por milenios, quiere decir que también contienen la memoria de los grupos humanos que habitaron en sus márgenes, e invariablemente la de las otras especies que empezaron a correr, a nadar o a volar allí antes de la llegada de nuestros primeros abuelos. De igual modo, los pueblos que se asentaron a lo largo del continente durante migraciones seculares fueron precedidos por peces, aves e insectos trashumantes.





Robert Morris En palabras de Marguerite Yourcenar «el tiempo esculpe más y mejor que la mano del artista, ya que no trabaja en la superficie, sino en la profundidad.» Así han grabado los ríos la faz de la tierra. Los tatuajes de la acción geológica son inconmensurables. Los mapas pueden ser su representación, y acaso en la vocación del Landart pueda decantarse aquella fuerza telúrica de forma simbólica, en construcciones tan osadas como las líneas de Nazca o en el gesto humilde del laberinto erigido a escasos centímetros de la tierra por Robert Morris, del todo alejado al objetivo del ejército de los EE. UU., quien, a través de su Corporación de Ingenieros, suponía que podría contener un río como el Mississippi.





Linaje de Hiawatha El detonador para desarrollar una zaga de obra gráfica a partir de la cartografía del río Mississippi fue eminentemente estético. Del mismo modo, el interés por la figura de Hiawatha, obedece al lirismo más puro. De ningún modo pretendo insinuar que el linaje de este jefe tribal pacificador, del s. XIV se halla diseminado por todo el continente. Aludo sí, a los movimientos migratorios inspirados en la búsqueda de tierras prometidas referidas en relatos míticos, y por otro, al desplazamiento secular de peces, aves, insectos, así como los millones de toneladas de sedimentos pétreos movidos por el río más caudaloso de Norteamérica, con repercusiones ecológicas a lo largo de su recorrido y en su desembocadura. Aquellos abuelos que algún día cruzaron Bering, u otros que hubiesen navegado desde tierras más australes, compartieron con «Hiawathas» de distintos tiempos y latitudes, la visión de englobar y preservar de manera holística el mundo animal, mineral y floral.





Isla Tortuga Para diversas tradiciones de las Primeras Naciones –los pobladores de la franja septentrional de nuestro continente, que se asentaron allí antes de las migraciones europeas– lo que se conoce como América del Norte en verdad debería llamarse

Isla de la Tortuga. Son varios los vasos comunicantes que vinculan dichas tradiciones con el pensamiento y el sentir de los pueblos mesoamericanos y los de tierras más australes: en particular, el hecho de que «promuevan una poderosa visión de la gobernanza y administración indígena de las tierras, las aguas y los recursos del planeta como una alternativa viable a la visión truncada y los sistemas rotos que amenazan nuestro futuro colectivo». * * Julian Brave NoiseCat: Escritor y activista canadiense de linaje indígena





Glifo de agua Atribuido a manos de escribas indígenas, versados en la iconografía mexica anterior a la Conquista, el Códice de Mendoza, del s. XVI, da cuenta como ningún otro, de la historia del pueblo que se estableció en las cuencas lacustres del Valle de México para fundar la antigua capital azteca. En él aparece el glifo de Atenco: «a la orilla del agua». Si se buscara una traducción al lenguaje de ciencias como la ecología, el glifo podría remitir al concepto de «humedal». Los humedales representan ecosistemas estratégicos de gran importancia para la conservación de la biodiversidad y el bienestar de las comunidades humanas, por lo que son fundamentales las acciones que aseguren el mantenimiento de sus características ecológicas. El éxito de los programas de rescate y restauración que velan por su salud depende en gran medida de los pueblos originarios o de las comunidades locales. .





Loto blanco En el mundo maya la flor de esta planta acuática representaba el inframundo como el útero universal que incuba toda la creación. Era una flor asociada con la fertilidad femenina que destacaba la energía creadora: la de las fuerzas telúricas y la de la magia. El loto blanco, naab -en maya peninsular- y Nymphaea ampla su nombre científico, aparece repetidamente en códices, vasijas, relieves de estuco y estelas mayas. La flor, el fruto y las raíces de diferentes especies de nenúfar tienen propiedades psicoactivas, razón por la cual era utilizada por los sacerdotes mayas para establecer contacto con sus ancestros a través de visiones oraculares. .





Aebeja y serpiente

En algunas tradiciones de Mesoamérica, particularmente entre los mexicas, la serpiente está asociada a la fertilidad. A ella se vinculan también las abejas, merced a su actividad polinizadora. Hoy en día la preservación de las abejas nativas recoge prácticas utilizadas varios siglos antes de la llegada de los europeos a nuestro continente. El Códice Trocortesiano, documento de los antiguos mayas, incluye el tratado de zootecnia más antiguo en el mundo dedicado a las abejas sin aguijón.





Abeja nocturna

La actividad polinizadora de las abejas tiene lugar, fundamentalmente, durante el día, bajo de los rayos del sol. Pero mientras unas descansan, otras laboran en distintos rincones del orbe. Con la excepción de los mares y los cascos polares, las abejas habitan en todos los paisajes. Existen más de 20,000 especies. Dos mil son mexicanas. Solo 5% viven de manera gregaria.





Agave 14 No hay tantas especies del género al que pertenecen los agaves en otro rincón del planeta como en Mesoamérica. En el actual territorio mexicano, específicamente en la Sierra Mixteca –entre los Estados de Puebla y Oaxaca– es particular la abundancia de diversas plantas suculentas. Los parajes en los que crecen –hoy tierras árida– paradójicamente fueron tallados en anteriores eras geológicas por caudalosos ríos. Magueyes, cactus columnares, nopales… pareciera que les fuera conferido a las plantas del desierto, comunicar el mensaje para las generaciones posteriores sobre la presencia de agua abundante en otras épocas. No faltan las tesis de antropólogos que suponen que en plantas como ellas basaran nuestros abuelos nómadas el suministro de su líquido vital.





Maguey

En las regiones más alejadas a las cuencas fluviales de Aridoamérica y Mesoamérica abundan especies de cactus y agaves que dan cuenta de la presencia de agua: la acumulada en sus tejidos. El jesuita José de Acosta, en su Historia Natural y Moral de las Indias, escribía a finales del s. XVI que «el árbol de las maravillas es el maguey, del que los colonizadores recién llegados de España suelen escribir milagros, de que da agua y vino, aceite y vinagre, miel, arrope e hilo, aguja y otras cien cosas».





Seis chapulines «El saltamontes tenía un alto valor sagrado y representaba el poder sobrenatural para los mexicas. En los códices, como el Boturini o Mendoza se usó al chapulín encima de un cerro para indicar el topónimo de Chapultepec. Una ración de 100 gramos de estos insectos puede contener hasta 80 gramos de proteínas y solo cuatro de grasas no saturadas, además de varios minerales. Hay 54 especies de chapulines comestibles registradas en México». * * Los insectos en la cultura mexica | Lucrecia Arellano | INECOL





Chapultepec

El Cerro del Chapulín en castellano remite a un punto en el mapa o a una demarcación geográfica. Para lenguas como el náhuatl implica quizá todos los momentos de la vida y la muerte del chapulín: los espíritus que los habitan, sus restos sedimentados por generaciones en sus microsistemas e incluso los emplastos que resultan de mezclarlos con el lodo del lugar para sanar el alma y el cuerpo. En el pensamiento de los antiguos pobladores del continente, en sus dichos y cantares, las concepciones del todo y las partes son integrales y complementarias.





Cangrejo

Los minerales resultantes de la descomposición de las osamentas de invertebrados como los cangrejos se suman a los sedimentos pétreos movidos por las corrientes fluviales. De este modo, las aguas de un río ayudan al desplazamiento de especies migratorias en sus distintos estados; incluso el de la esencia mítica que hace convivir en sus cantos a seres animados e inanimados.





Qayaq de Lake Moon La acepción más consensuada para qayaq (vocablo inuit, uno de los grupos indígenas más numerosos del Ártico) se reduce a la de barca de cazador. Aunque antes de su producción con materiales sintéticos los hubo de dos o tres plazas, el kayak milenario pertenecía a un solo cazador, construido de forma puntual y específica para ese único usuario. Se decía que si un esquimal salía a cazar y no regresaba era porque había usado un bote prestado. La maestría del uso del kayak equiparaba el desarrollo personal del cazador con la solidez de su vínculo comunitario, así como el grado de relación con su geografía y entorno natural, del cual tomaba lo estrictamente necesario. Encuentro en la concepción de esta barca, una expresión tecnológica que expande la herramienta hasta la noción simbólica de mayor respeto por la ecología: nada más alejado de las prácticas extractivas antropocéntricas.





Ollin Yoliztli

Voces del náhuatl -o mexica- que significan «movimiento permanente y vida». Los antiguos mexicanos fueron transmisores de la mayor obra cultural y tecnológica de Mesoamérica: la domesticación del maíz. Una de las expresiones más impactantes de poder ciudadano en México se encuentra en la demanda colectiva que defiende de la manipulación genética industrializada a la planta más cultivada en el continente a lo largo de 8,000 años. El proceso lleva 9 años en los tribunales y aboga por el derecho a una alimentación sana y la preservación de la biodiversidad.







La colección de estampas Tatuajes de agua fue exhibida en Factoría Habana, en la muestra La poética del vacío, curada por Concha Fontenla. La exposición fue parte de la 14 Bienal de la Habana 2021 – 2022. Foto © Alejandro Montes González




Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.