Los árboles mueren de pie en la América Latina Las Chapeadas el desconocido bosque primario chuquisaqueño amenazado por desmontes para ganadería Pese a ser uno de los pocos bosques primarios que quedan en el departamento de Chuquisaca y a su importancia para el ecosistema y la biodiversidad, el lugar no se encuentra declarado como área protegida, quedando a merced de los desmontes por la actividad ganadera. Ser testigo de los estrellados anocheceres, los paradisíacos paisajes boscosos e incontables historias que ofrece el lugar, es un privilegio del que pocos pueden disfrutar. Situada entre los municipios de Culpina e Incahuasi pertenecientes al departamento de Chuquisaca, en el corazón de Bolivia, Las Chapeadas o Montes Chapeados son un pequeño paraíso de la biodiversidad al que pocos han podido acceder debido a su desafiante acceso y desconocido atractivo. Un verdadero tesoro escondido.
Preciada por ser parte del bosque TucumanoBoliviano, Las Chapeadas es el registro más austral que se tiene del emblemático oso jucumari u oso andino (Tremarctos ornatus), según informan desde la fundación Naturaleza, Tierra y Vida (Nativa), pues su bosque frondoso y la presencia de bromelias, una de las principales fuentes de alimento del oso, la convierten en un lugar adecuado para su conservación. Por su parte, es hogar del loro pinero (Amazona tucumana), el cual ha sido categorizado como Vulnerable según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y el Libro Rojo de la Fauna Silvestre de Vertebrados de Bolivia, y cuya distribución se restringe a la estrecha franja de bosques nublados del sur de Bolivia y Argentina, siendo Las Chapeadas una de las zonas donde se encuentra la mayor concentración de esta especie.