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El Proceso de Compraventa

Es muy importante entender el aspecto más importante de cómo se llevan a cabo las transacciones de bienes raíces en el Estado de Nueva York. El comprador no tiene la obligación de comprar y no se encuentra protegido contra otros compradores que puedan adquirir la propiedad en la que esté interesado, a menos y en el único caso que tenga un contrato firmado y otorgado por la(s) parte(s) compradora(s) y vendedora(s). Ninguna otra oferta verbal, oferta aceptable, oferta por escrito y firmada, compromiso verbal o escrito, promesa, ni ninguna otra cosa, protegerá la compraventa de una propiedad. Sin importar lo que se haya acordado verbalmente entre el comprador y el vendedor o las conversaciones que hayan tenido los abogados, el contr ato que crea obligaciones no existirá hasta que se haya otorgado el contrato de compraventa.

Esto significa que mientras el comprador fija la inspección, los abogados hablan de los puntos del contrato, etc., la propiedad se seguirá mostrando a otros compradores. Cualquier otro comprador tiene el derecho de presentarle una oferta al vendedor, y si se encuentra suficientemente motivado, así lo hará. Y, si el comprador desea aceptar la nueva oferta, puede hacerlo. Si el comprador ha pagado la solicitud de un préstamo hipotecario, puntos, tarifas de congelamiento de precios, inspecciones de la casa, honorarios de abogados, tasación, etc., pero no tiene un contrato firmado y otorgado, el vendedor tiene el derecho de cancelar el trato y venderle a otro comprador en cualquier momento dado. El vendedor NO está obligado por ley a rembolsarle al comprador ninguno de los gastos formulados. Además, sin importar cuánto se ha confiado el vendedor en que el comprador adquirirá la propiedad, el comprador tiene el derecho de cancelar el trato en cualquier momento dado. Por lo tanto, siempre recuerde y nunca olvide que cuando el comprador encuentre la propiedad que quiere comprar, debe hacer las cosas lo más rápido posible. Las mejores intenciones y conversaciones razonables no le garantizan la venta de una casa. Sólo el contrato otorgado protege a un comprador de otros compradores, o de la decisión de cancelar la transacción. Por lo tanto, hasta que se haya otorgado el contrato, recuerde que todos están en riesgo.