ENRICO ROBLES:
“ES NECESARIO QUE EL EMPRENDEDOR EXITOSO APUESTE POR LA SIGUIENTE GENERACIÓN”
E
nrico Robles goza de una formación académica y profesional que le permite diseccionar con agudeza la situación del ecosistema emprendedor en México. Egresado de la Licenciatura en Finanzas Corporativas y Banca por la Universidad Anáhuac, continuó su educación en el Instituto Tecnológico Autónomo de México con un Master of Business Administration, y en el IPADE con un programa en Alta Dirección en Capital Privado. Actualmente, se desempeña como director de inteligencia de Endeavor en México, una de las organizaciones líderes en emprendimiento de alto impacto. Fundada en 1997, Endeavor opera en más de 31 países y 50 ciudades, apoyando a cerca de 1,500 emprendedores que dirigen poco más de 900 empresas de gran crecimiento, las cuales han generado una cifra superior a los 700,000 empleos y obtenido ventas por más de 10,000 millones de dólares. Enrico Robles define el emprendimiento de alto impacto como aquellas ideas innovadoras o modelos de negocios que están generando una disrupción en su industria; que cuentan, además, con capacidad de ejecución y de escalabilidad; y que crean riqueza y cambios sociales. En este sentido, de acuerdo con el director de inteligencia de Endeavor, desde 2014 el ecosistema de emprendimiento de alto impacto
mexicano ha venido mostrando un desarrollo óptimo, principalmente en la Ciudad de México: se han observado, con mayor frecuencia, emprendedores capaces de levantar rondas de financiamiento Serie B o de varios millones de dólares. Este levantamiento de capital se ha venido consiguiendo con la participación de fondos de inversión extranjeros, lo cual demuestra que “hay inversores fuera de México dispuestos a apostar por emprendedores mexicanos, porque les auguran un alto potencial. Si hubiera incertidumbre o riesgos considerables, no habrían invertido estas cantidades de dinero”. Pero Enrico Robles ha detectado algunos vacíos o brechas en los ecosistemas locales fuera de las grandes metrópolis, como son Ciudad de México, Guadalajara o Monterrey. Para empezar, explica, si un entorno quiere crear un ecosistema de emprendimiento necesita de emprendedores exitosos que se conviertan en ejemplos; casos de éxito que inspiren a otras personas a seguir sus pasos. Para el ejecutivo de Endeavor no solo es necesario que los emprendedores exitosos inspiren a la siguiente generación; sino que también se requiere que apuesten por ella, que inviertan y se transformen en un “ángel inversionista” para quienes apenas incursionan en el mundo empresarial. “Hay que democratizar las redes de contacto. Ver cómo hacer para que estos
emprendedores locales, que apenas van iniciando, puedan acceder a acercamientos con los emprendedores exitosos, y motivar a estos últimos a que se vuelvan inversionistas ángeles. El capital que inyecten puede representar la diferencia entre el éxito y el fracaso de un emprendedor y que, a la larga, decida si un ecosistema local funciona o no”, explica Robles. En tercer lugar, el ecosistema tiene que operar como un engranaje en el cual cada actor coopere e impulse el desarrollo de estos nuevos emprendedores: “Dentro del entorno hay incubadoras y aceleradoras, por lo tanto hay que buscar apalancarnos de estas organizaciones que ya existen. Que en el momento en que alguien necesite una mentoría o una inversión, el ecosistema colabore y democratice esas redes de acceso a capital y conocimiento, las cuales son sumamente fundamentales”. Por otra parte, sostiene Enrico Robles, se vuelve prioritario crear espacios colaborativos, donde pueda existir la transmisión de conocimiento entre un actor y otro: “Es preciso idear espacios para que la gente se conozca. Necesitas crear espacios de networking donde esto funcione. Lo ves en Silicon Valley: en un rango de kilómetros, vas a un café y puedes encontrarte a los grandes emprendedores del mundo. ¿Cómo podemos generar eso a nivel local? Si te enfocas únicamente a crear eventos donde la gente se presente, el ecosistema va a ser muy limitado”.
JUNIO 2018
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