Tiempos de A-sombro #1 Punto Cero

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EDITORIAL

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Punto Cero ENTRENAMIENTO CONTINUO INTEGRAL

Una forma de participar en la vida y en el mundo La Casa-Escuela: un espacio para desmalezar todo aquello que nos traba el encuentro con lo más genuino de cada uno de nosotros MIRANDO LA SALUD

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La salud como búsqueda de armonía integral ¿Cómo vivimos lo que significa para nosotros estar o no saludables, y qué comprendemos por “salud”? ÁREA DE EXPRESIÓN ARTÍSTICA Y CULTURAL

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“Quiero, deseo, anhelo un museo…” Red de los Museos de los Pueblos de Olavarría: recuperar y reconstruir la identidad cultural a través de la construcción de museos vivos TRAMA DE PARTICIPACIÓN COMUNITARIA

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Los órdenes del amor Una mirada sistémica e integral para acompañar el proceso evolutivo en los niños y jóvenes desde nuestra responsabilidad como adultos ECONOMÍA HUMANA

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El camino a emprender Soltar las amarras y zarpar rumbo al proyecto propio AGENDA DE ACTIVIDADES

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Hay instantes de gran valor que permiten intuir algo que existe más allá de nosotros. Son los momentos de transición en que un estado está por terminar para dar lugar a otro igual y contrario, cuando el cambio no se ha producido aún. Es el punto cero, el punto de inflexión, el nodo, es el corto instante en que uno se encuentra en el aire cuando da un salto de una orilla a otra. Es el momento de suspenso en que, durante la respiración normal, la inspiración se detiene suavemente para transformarse en exahalación, y viceversa.

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PUNTO CERO

Sentimos una profunda alegría al presentarles este proyecto editorial que lanzamos desde La Casa. Esta revista es hoy un punto de inflexión en el proceso de los cuatro años de trabajo en nuestro espacio. A través de ella damos un salto hacia una apertura y a transitar en el mundo, irradiando la experiencia de una nueva forma de participar en la Vida. Para nosotros, este proyecto es parte de un movimiento de pasaje a una expansión nueva y creativa, nuestra Casa hoy se convierte en Escuela de entrenamiento continuo integral. Como parte de este movimiento, se amalgaman y surgen las áreas que son las diferentes expresiones de la tarea que nos convoca. En todo proceso hay momentos donde, para tomar el impulso que nos llevará de una orilla hacia otra, es necesario volver a hacer contacto con esa fuerza vital, con el sonido inicial que estuvo en el origen. Hoy volvemos a tocar ese punto cero para pasar a un nuevo estado de apertura y consolidación, para abrir nuevos escenarios y compartir nuestra mirada y experiencia en resonancia y afinidad con otros. Esta revista surge de la fuerza de una red de personas que diariamente practicamos un entrenamiento desde lo pequeño y sencillo de nuestras vidas. Hoy celebramos esta nueva fundación y agradecemos a todas aquellas personas que fueron parte en los inicios de esta Casa. En estado permanente de entrega y renuncia hacia las nuevas posibilidades que se nos presentan, es nuestro anhelo acercarles, a través de la lectura de esta publicación, la posibilidad que todos tenemos de constituirnos en puentes vivos hacia Lo Nuevo, para tomar lo propio y creativo para nuestras vidas, en un estado de permanente A–sombro. Anni Schuff, Marisa Reichler y Eleonora Cardoso DIRECCIÓN

EDITORIAL

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La Casa Un espacio donde poder descansar en la sensaci贸n del regreso a nosotros mismos, a nuestra casa, el regreso a nuestro hogar.

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La Casa-Escuela DE ENTRENAMIENTO CONTINUO INTEGRAL

Una forma de participar en la vida y en el mundo La Casa-Escuela de Entrenamiento Continuo Integral es una escuela de vida, es un espacio dedicado al trabajo permanente con uno mismo. Aquí entrenamos la responsabilidad de conducir cada acto que constituye el devenir de nuestra vida hacia nuevas posibilidades en sintonía con lo más esencial de cada uno. “La Casa es el lugar del mundo en el que respiro. Es un espacio donde puedo conectarme conmigo misma, donde puedo abrir mi corazón, y es, por sobre todas las cosas, una escuela para el alma.” MAYRA, 22 años

El trabajo que realizamos diariamente tiene sus bases en una mirada hacia el desenvolvimiento integral del ser humano, basado en la reversibilidad de valores y en la renuncia a los patrones que traemos y que nos impiden la reconciliación e inclusión de las diferentes partes que nos completan. Este entrenamiento brinda a las personas una red para que puedan adentrarse en un proceso de conocimiento, aprendizaje y autotransformación.

ENTRENAMIENTO CONTINUO INTEGRAL

En un trabajo que requiere constancia y aceptación, entrenamos, a partir de diferentes herramientas, la observación y atención en contacto con nuestro cuerpo, con nuestras ideas, sensaciones y percepciones. Podemos de esta forma reconocer la fuerza mecánica que está instalada en nuestra biología (en nuestros hábitos, pensamientos, acciones y valores), que nos lleva a lugares ciegos de repetición y nos traba en el desenvolvimiento de nuestra vida, de lo propio y más creativo de cada uno de nosotros. “La Casa es una suerte de recuerdo constante de que tengo que trabajar todos los días fuertemente para re-encontrarme, para no perderme, para ver lo que retengo, lo que no dejo y me aferro. Un recuerdo de que para que se produzca un cambio, primero tengo que mirar sin prejuicios, aunque sea doloroso, porque es la única manera de seguir adelante. Es un recuerdo constante de que si no trabajo en el presente con mi pasado y lo resuelvo, no hay futuro nuevo y creativo.” CAMILA, 38 años

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En La Casa transitamos un camino hacia el interior de cada uno, para reconocer aquello que permanece en la sombra. Mucha gente teme tocar esos lugares por no saber cómo transitarlos, y es a veces difícil darse cuenta de que el peso que llevamos dentro es mucho más difícil de sostener si no lo reconocemos y aceptamos. Cuando nos abrimos a descubrir que es posible trabajar con nosotros mismos y así vivir más en paz, damos el primer paso para comprender ese proceso, interiorizarnos y confiar en él. “La Casa es un refugio, donde uno llega con la valija de todos sus problemas y puede descansar y puede llorar. Llorar es un descanso... Porque el mundo es muy exigente y algunos corazones no están preparados para esa exigencia.” FIDEL, 37 años

La semilla Cuatro años atrás fundamos nuestra organización en una antigua casa en el barrio de Palermo, bajo el nombre de La Casa Multiespacio, con el fin de contar con un lugar donde trabajar diariamente y llevar a

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cabo las actividades que empezaban a consolidarse. Pero al poco tiempo comenzaron a incluirse más personas con el deseo de participar, y así nos fuimos conformando en una familia en profunda afinidad y resonancia con todo lo que se gestaba en La Casa. Es así que las personas que se acercaron buscando un trabajo personal fueron, gradualmente y acompañando el avance de su propio proceso, brindando a disposición de este espacio y de los que aquí concurren, sus propias habilidades y formas diferentes de ser parte. “Para mí, La Casa es como ‘mi casa’ en un sentido profundo; un lugar de pertenencia adonde siempre es lindo llegar, adonde siempre puedo volver, en donde encuentro armonía, paz y compañía amorosa. Un lugar de confianza, que me brinda herramientas sagradas.” VIRGINIA, 42 años

Así nos fuimos organizando en una red, en los tejedores de una trama, con una particularidad: todos los que aquí participamos trabajamos en primera instancia con nosotros mismos. Comprendemos de esta


manera que, a partir de un entrenamiento propio de reversión de valores y hábitos que traemos que nos distancian y separan de nosotros mismos y de los otros, podemos transmitir con nuestra propia vivencia la posibilidad de emprender un camino hacia la autotransformación. Esta experiencia se irradia, derramándose a la comunidad toda, a un sistema mayor. La condición de tomar el entrenamiento continuo integral para con nosotros mismos, es la garantía de afinidad y pertenencia que se siente en esta Casa y es lo que nos da la posibilidad de ahondar cada vez más en las profundidades de nosotros mismos y descubrir todo lo que hay allí como fuerza creadora y de vida.

Nace La Casa-Escuela Con el devenir del compromiso de quienes participamos en este proyecto fueron confluyendo nuevos procesos sistémicos y una necesidad de expresar y brindar a la comunidad una mirada más amplia sobre las relaciones humanas y sobre el mundo, en estos tiempos de profundas transformaciones. Lo que inició hace tiempo atrás como La Casa Multiespacio hoy da el salto para transformarse en La Casa-Escuela. “Confianza. Entrega. Búsqueda. Trabajo con y para uno mismo.Trabajo con y para los otros. Solidaridad.” RAQUEL, 39 años

Dentro de este nuevo giro que dimos se consolidan las diversas áreas que ponemos a disposición en pos de la participación comunitaria y social, que permiten abarcar de una forma más completa al ser-humano

ENTRENAMIENTO CONTINUO INTEGRAL

y generar espacios donde transmitir los valores esenciales de nuestra organización, para seguir irradiando en una escala mayor la posibilidad de encontrar la paz y reconciliación en nosotros mismos y en los sistemas a los cuales pertenecemos. De allí surgen las cuatro áreas que hoy en día dan forma a nuestra Casa: el área de salud propone correr nuestra mirada y no perder el foco en la posibilidad que tenemos como seres humanos de hacer contacto con la fuente de bienestar constante y permanente que tenemos en nuestro cuerpo y nuestro interior. El área de expresión artística y cultural abre espacios que dan lugar a la creatividad y manifestación de aquellas imágenes e impresiones que aún no tienen formas ni palabras. La propuesta de economía humana promueve partir de la concepción de una sustentabilidad más cercana a nosotros mismos y a los otros. Y, por último, el área de participación comunitaria pone a disposición nuestra experiencia para aquellas instituciones y organizaciones que deseen integrar nuevos recursos al trabajo que ya vienen realizando con familias, niños y adolescentes. “En La Casa están mis llantos, mis miedos, mis iras, mis letargos, mis risas, mis silencios, mis dones, mis pares, mis maestros. Es un abrazo, una experiencia, una práctica cotidiana integral para buscarme sin pausa pero sin prisa. Es el lugar de los grandes y los pequeños hallazgos, donde aprendemos de nuevo a mirar, donde nos redescubrimos a nosotros mismos y al universo.” FLORENCIA, 39 años

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La salud como búsqueda de armonía integral Débora Katz y Betina Lartigue Médica endocrinóloga y médica terapista intensiva Actualmente conviven entre nosotros diferentes miradas y formas de abordar la salud. ¿Cómo vivimos lo que significa para nosotros estar o no saludables, y qué comprendemos por “salud”? Estas preguntas dan cuenta de la necesidad de abordar el tema desde diversos enfoques y hacernos responsables de asumir un proceso consciente para tomar contacto y comprender qué nos dice nuestro propio cuerpo. La salud abarca mucho más que una simple sensación corporal: se crea y se vive en el marco de la vida cotidiana como parte de un proceso personal y colectivo en la búsqueda de la armonía con uno y con lo que nos rodea. Cada momento histórico y lugar tienen sus propias valoraciones sobre lo que es “estar o no sano”. En el transcurso del siglo pasado se pueden identificar dos momen-

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tos importantes en la definición de la salud: uno ocurre en la primera mitad del siglo, cuando la medicina se subordina a la biología desde una mirada estática, ahistórica y positivista, y un segundo momento que se da en a la segunda mitad del siglo, cuando la salud comienza a concebirse como un proceso dinámico y variable de equilibrio entre el organismo humano y su ambiente. Entender la salud como derecho natural y social es trascender el concepto del cuidado del funcionamiento biológico-individual, para introducirnos en la relación de las personas entre sí y en los diferentes contextos que habitan (sean laborales, familiares, sociales) y los hábitos que mantienen en su vida. En el año 1946 surge la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS): “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.” Esta definición, que se puede tomar como un tanto utópica, poco realista, marcó un verdadero punto de inflexión respecto de la concepción clásica de la salud. A partir de este concepto de bienestar, cuyo significado es diferente para cada persona y grupo social , el estado saludable mantiene un carácter subjetivo y difícil de identificar: lo que es saludable en una situación o para una persona puede no serlo para otra. Nuestro organismo tiende a buscar un equilibrio dinámico con los parámetros que le son familiares en estados o situaciones que se le presentan en los diferentes procesos de su devenir cotidiano. Cuando nuestro cuerpo se aleja de su propio equilibrio, se activan los procesos de defensa necesarios para mantenerse dentro de los

MIRANDO LA SALUD

parámetros conocidos. A esta respuesta fisiológica la conocemos como estrés (síndrome general de adaptación). Son estos avisos los que requieren una responsabilidad en nosotros, de cómo volver al estado de equilibrio que pide nuestro organismo. Por eso consideramos que hoy en día es preciso abordar a la persona desde un enfoque sistémico e integral para dar cuenta del concepto de salud. Desde esta mirada, comprendemos que es un proceso que está en continuo cambio, que se crea y se vive en el marco de la vida cotidiana; es un proceso personal y colectivo de búsqueda de la armonía con uno y con el entorno. En cada acto de la vida diaria estamos decidiendo qué camino tomar y hacia dónde llevamos nuestro bienestar, ya que los procesos sutiles del organismo se expresan y existen en lo pequeño de cada gesto. La mayor parte del tiempo la cabeza consigue escindirse del propio cuerpo e ignorar lo que le ocurre, pero éste se expresa siempre que sea necesario. Permitirnos vincular lo visible con lo que no se ve y darle lugar a lo que se expresa a través del cuerpo, como seres humanos integrales que somos, es parte de la tarea que llevamos a cabo como equipo en La Casa-Escuela. Siempre estamos a tiempo de revertir hábitos, para hacernos responsables del propio cuerpo, nuestra casa-cuerpo, y así revelar la capacidad de transformación que éste contiene como posibilidad, una dimensión tal vez impensada para nosotros. Habitemos nuestro cuerpo, evitemos que continúe escapándose de nosotros y la vida con él, como dice Thérèse Bertherat. Esto para nosotros es la salud.

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“Quiero, deseo, anhelo un museo…”

Red de los Museos de los Pueblos de Olavarría: recuperar y reconstruir la identidad cultural a través de la construcción de museos vivos Maribel García trabaja para que se cumpla el sueño de miles de habitantes de las loca­lidades aledañas de Olavarría. Ella es quien dirige la fuerza de un “fenómeno comuni­tario” que lleva el anhelo y la nece­ sidad de dar vida a sus propias historias a través de la construcción de museos. Así, sus viven­cias se revalorizan y generan un nuevo pun­­to de partida para que los veci­ nos recuperen y reconstruyan la identidad de su pueblo. En 2007 surgió en la ciudad de Olavarría La Red de Museos Municipales de los Pue­blos, con el fin de recrear la memoria y dar a conocer las vivencias de diversos pueblos a los visitantes que la recorren. Maribel obtuvo la dirección con el apoyo de la Se­cretaría de Desarrollo Social del

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Go­b ierno Municipal y, al cabo de unos pocos años, siete museos se forjaron en las loca­lida­des aledañas de Colonia Hinojo, Sierras Bayas, Sierra Chica, Colonia San Miguel, Espi­gas y Villa Fortabat-Loma Negra. Si bien el proceso de construcción de cada espacio es similar, cada población es única. Tienen una historia distinta que con­­tar; difieren en sus orígenes, sus habitantes y sus labores. En algunos de los casos los oficios se constituyen en sellos identitarios de esa comunidad, como es el caso de los picapedreros que llegaron desde Italia a Sierra Chica. A diferencia de un museo convencional, quienes expresan el deseo de la creación de estos espacios son los mismos pobla­dores.


Antiguas casas de familias, escuelas, estaciones de tren de principios del siglo pasado se transforman en espacios donde la memoria se multiplica, se actualiza y se hace creativa. Todos los habitantes participan de la cons­ trucción física del museo con obje­tos o mediante actividades, por la simple nece­ sidad de darle lugar al reconocimiento de su propia identidad cultural. Por eso son comunitarios, porque cada objeto pertenece a la historia cotidiana de la gente. No se los mira como una pieza antigua. Allí lo que importa es encontrar la memoria afectiva que guardan para abrir en quienes se acerquen a ellos un proceso de transformación y empatía. Un ejemplo de esto es el de los marrones (grandes martillos que se utilizaban para romper la piedra) que se exhiben en el museo Calera La Libertadora en Sierras

Ba­yas, que pesan alrededor de siete kilos y medio. En aque­lla cantera donde se extraía la cal, la gente no sólo exponía su cuerpo al fuego de los grandes hornos, sino que trabajaba incan­sablemente en jornadas de doce horas para extraer el producto con estos marrones. En el museo se puede ver uno apoyado sobre una base junto a un texto que dice: “Un hombre trabajaba desde las ocho de la mañana hasta las ocho de la noche a pleno sol, pleno frío, partiendo piedra. Levantalo y pensá.” Así, cuando los visitantes lo alzan, experimen­tan con su propio cuerpo cómo hacían ese trabajo con ese peso durante toda una jornada. “Uno puede sentir aquello que se vivió de esa manera, que sucedió y sigue sucediendo…”, reflexiona Maribel. En afinidad con la mirada que sustenta La Casa, Agustina Lipovich, curadora y ges­tora cultural, y Eleonora Cardoso, ges­tora educativa y cultural, llevan a cabo la labor de investigación y la construcción de la museografía

Á R E A D E E X P R E S I Ó N A R T Í S T I C A Y C U LT U R A L

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por vivir la memoria y la identidad desde una perspectiva nueva, y sobre todo desde un proceso participativo.

Memoria creativa

foto de pasaporte de maría y su mamá, llegadas desde el sur de italia a loma negra.

Encontrar la memoria afectiva que guardan los objetos, para abrir en quienes se acerquen a ellos un proceso de transformación y empatía. en esta Villa Fortabat-Loma Negra. A par­tir de entrevistas con los vecinos, especial­mente con los más ancianos de la pobla­ción, recuperan y registran su testimonio, y se reciben en donación los objetos que se clasifican junto a las historias de quie­nes les pertenecieron, y a partir de eso se proyecta el relato curatorial. Este concepto de museo vivo, que recibió en 2011 una mención del Primer Premio Iberoamericano de Educación y Museos, es el fiel testigo de que la museología se está transformando y de que hay una ne­cesidad

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Hace dos años los habitantes de Loma Negra-Villa Fortabat, una localidad de casi 4.000 habitantes que se fundó en 1927 como una villa fabril alrededor de la em­presa de cemento que da nombre al pue­blo, se manifestaron en las redes sociales con el lema: “Quiero, deseo y anhelo un museo para la villa Alfredo Fortabat”, pe­dido que fue recibido por la La Red de Museos de los Pueblos. Originariamente, las instalaciones del mu­seo se asentaban en el Jardín Hogar de la villa, donde 86 años atrás una maestra francesa recibía a los niños, hijos de los in­migrantes de las 17 nacionalidades que lle­garon a trabajar en la fábrica. Así, ellos, a través de diferentes propuestas pedagó­gi­cas de vanguardia, aprenderían a hablar el castellano, mientras se divertían, se adap­­taban y se relacionaban con otros niños. Allí se forjará el nuevo Museo-Hogar que ya recibe a los jóvenes de Loma Negra, como a un grupo de skaters adolescentes que no tenía lugar para reunirse y que en­contó allí un nuevo espacio de perte­nencia. Hacen sus piruetas y cooperan en la res­tauración del espacio, e incluso les permi­tieron acampar y dejar sus mensajes en las paredes del futuro museo en la etapa de remodelación edilicia. Con todo el material recogido y los tes­ timonios de la memoria viva de los habitan­ tes, el equipo de trabajo diseñó el relato del museo, que girará alrededor de la pa­labra fundante de “hogar”. Este Museo-Hogar será un homenaje a los inmigrantes que cruzaron el océano a


“la sala del amor” en el museo de colonia hinojo.

prin­­cipio del siglo pasado. Eleonora explica que es un episodio clave para comprender una huella afectiva que todos los argenti­nos tenemos en nuestra memoria: el origen de una comunidad que alberga diversas nacionalidades. En aquel momento y en aquel espacio de vacío, de transición, de viajar de una ori­lla a la otra, se encuentra la experiencia del punto cero de toda una generación de inmigrantes que llegó con todo el anhelo, el miedo y el dolor de lo que eso implica, y con los valores de la familia y la dignidad del trabajo por sobre todas las cosas. Sólo tenían una ilusión, pero la adrenalina, el valor, la apuesta de dar ese brinco estuvo en ese océano que cruzaron, en ese saltar al vacío, con el anhelo de construir un nuevo hogar.

Son los propios habitantes de cada pueblo quienes expresan la necesidad de darle lugar al reconocimiento de su identidad comunitaria y transmitir este valor de pertenencia. En los museos de La Red confluye una nueva visión sobre la memoria. Son los propios habitantes de cada pueblo quie­nes expresan la necesidad de darle lugar al reconocimiento de su identidad comuni­taria y transmitir este valor de pertenencia. Se trata de espacios de encuentro, de testimonios, de vidas cotidianas, de sueños y esfuerzos compartidos. Son las familias las que dan vida a estos museos, con en­tusiasmo, con agradecimiento, con respeto y con mucha emoción.

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Los órdenes del amor A partir de una mirada sistémica e integral de reconciliación y aceptación, y tomando como base los órdenes del amor y la herramienta de las Constelaciones Familiares, abrimos este espacio de trabajo para compartir la posibilidad de ver el proceso de desenvolvimiento de los chicos y nuestro lugar como padres y educadores. Desde nuestro lugar como adultos, muchas veces sentimos desconcierto al no encontrar herramientas para responder a ciertas problemáticas que los chicos manifiestan en sus relaciones cotidianas, dentro de la familia, en la escuela, con sus pares y también en su salud. Este abordaje permite reconocer que estas situaciones suelen responder a profundas lealtades de los sistemas familiares a los cuales pertenecemos. Desde la mirada que propone Bert Hellinger, los sistemas tienen profundas leyes que él da en llamar órdenes del amor, y en los que afirma que en la conciencia familiar “antes que el amor está el orden”. Aunque nos parezca extraña esta afirmación, ya que solemos creer que el amor está ante todas las cosas, Hellinger nos trae la comprensión de que es necesario en primer lugar considerar el orden en los sistemas familiares para que el amor pueda fluir y expandirse como energía creativa, como energía de vida y hacia la vida. Estos órdenes se extienden a todos los sistemas, sean instituciones educativas, ámbitos laborales, la comunidad, la familia, u otros.

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Los órdenes que subyacen en lo profundo de los sistemas son tres: 1 - Pertenencia y jerarquía 2 - Equilibrio entre el dar y el tomar en el sistema 3 - Normas en los sistemas De acuerdo con el primer orden de pertenencia y jerarquía, todos los miembros del sistema familiar están vinculados por una pertenencia que está impresa en ellos por profundos lazos biológicos. La consciencia familiar reconoce a cada uno de sus miembros como parte de ese sistema, más allá del tiempo y del espacio. Por eso, cuando alguna persona o situación importante fueron dejadas de lado (como hijos no reconocidos, hijos no nacidos, personas o hechos que se han perdido u olvidado, entre otras situaciones), el sistema necesita compensar esta exclusión, y lo hace expresando esta información en las siguientes generaciones. Muchas veces podemos reconocer algún hijo o nieto que manifiesta alguna situación de exclusión en su vida, o cualquier tipo de desorden o llamados de atención,


o alguna enfermedad. En los hilos profundos del sistema se puede reconocer que estas manifestaciones tienen su origen en algún integrante del sistema familiar, que ha vivido en otro tiempo y espacio. Por una lealtad y un amor profundo y ciego hacia el sistema, esta situación que no tuvo lugar en su momento es sostenida por alguno de los miembros de una generación posterior, compensando en su propia vida aquella situación, reeditando la información en un nuevo contexto. Cuando hacemos consciente estas situaciones, podemos reconciliar y ordenar esta información para que no se siga repitiendo. Este primer orden también incluye el respeto a las jerarquías existentes en los sistemas, es decir, respetar el orden de llegada de los miembros: los padres llegaron primero y son los grandes, y los hijos llegaron luego y son los pequeños. Muchas veces podemos reconocer en actos y gestos de nuestra vida cotidiana que este orden se invierte y atrae el desorden. Al revertir y hacer un movimiento reconciliador, todo comienza a ocupar su lugar y atrae la paz al sistema. El segundo orden se refiere al equilibrio entre el dar y el tomar. Todos los sistemas tienen la tendencia y la necesidad de equilibrarse, y en las relaciones humanas esto se manifiesta en la necesidad de dar y tomar. En este movimiento también debe respetarse el lugar y la jerarquía que tiene cada uno en la familia. Es importante reconocer que en el intercambio entre padres e hijos, los padres dan y los hijos toman. Los hijos nunca pueden dar ni sostener a los padres compensando lo que ellos no recibieron por sus historias de vida. Aquellos que llegaron antes dan a

T R A M A D E PA R T I C I PA C I O N C O M U N I TA R I A

Convocamos e invitamos a participar a aquellas instituciones y organizaciones educativas y de asistencia social que deseen conocer e integrar nuevas herramientas al trabajo que ya vienen realizando con familias, niños y adolescentes. info@lacasaescuela.com.ar, 4772-9489

aquellos que vienen después, y esto también se refiere a los hermanos, siguiendo el orden de llegada a la familia. Por último, es necesario tener en cuenta que en las familias conviven y se desarrollan normas y reglas que son compartidas como valores. Estas normas y reglas pueden estar funcionando en lo más profundo, y la relación en cada familia se construye de acuerdo con estos postulados. Esta mirada y consciencia sobre los órdenes requiere de nuestra parte una responsabilidad como adultos, asi como también una mirada libre de prejuicios, que permita acompañar a nuestros chicos en su desenvolvimiento personal con los recursos necesarios, para que ellos puedan expresarse con todo el potencial y la creatividad propios de cada uno. Esta nueva mirada intenta ser un aporte, desde lo pequeño y cotidiano, hacia la reconciliación en pos de la tarea de restituir y tejer la trama social que nos compone.

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El camino a emprender Cada vez se ven más jóvenes que se animan a soltar las amarras y zarpar rumbo a su pro­p io proyecto en una búsqueda más per­sonal sobre quiénes son y lo que desean hacer. Muchos se animan a pegar el gran salto y darle a su vida un giro de ciento ochenta grados. Esa búsqueda general­ mente es el resultado de grandes cambios y procesos personales.

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Poder entablar una relación más armónica con uno mismo y dejar lo que está dado para adentrarse a buscar lo propio. Para algunos, emprender implica un cam­ bio rotundo en su cotidiano: descubrir qué es lo que realmente los apasiona y disfrutar a la hora de hacerlo, para que su


No hay recetas mágicas. Uno debe proveerse de las herramientas nece­sarias para asegurarse el empujón y no quedarse a mitad de camino. hobby, sus habilidades y sus fortalezas se conviertan en una experiencia profesional. Pero es importante comprender que no hay recetas mágicas en el camino; uno debe proveerse de las herramientas nece­sarias para asegurarse el empujón y no quedarse a mitad de camino. Krumble, un catering de antojos, surgió en parte como un juego de Carolina, que en cada reunión aparecía con una torta diferente. Después de cocinar varios años para sus amigos y su familia y ver que las cosas que hacía gustaban mucho, pensó que tal vez era una buena forma de ganar dinero, además de disfrutar lo que estaba haciendo. Carolina asegura que el proyecto crece día a día y se mantiene, porque su prio­ ridad es garantizar la calidad del producto y el servicio. Y aclara que no sólo le da placer hacerlo, la relaja y la divierte, sino que además puede generar una nueva fuente de ingresos. A la hora de encarar un emprendimiento es im­portante contar con la asistencia de distin­tos especialistas y profesionales que nos ayuden a ordenar nuestras ideas y metas, para llegar a ellas de la mejor for­ ma posi­ble. En la actualidad existen talle­ res y acti­v idades que ofrecen diversos recursos para facilitar la concreción de nuestro proyecto: cómo produ­cir un buen plan de negocios, buscar la forma de finan­ ciamiento y ordenar la visión del mercado hacia el que va dirigido.

ECONOMÍA HUMANA

Muchos emprendedores, en una primera etapa, hacen convivir sus proyectos perso­ nales con trabajos que les representan una solvencia económica a la vez que un capital de experiencia profesional, hasta lo­grar la estabilidad. Por ejemplo, además de su emprendi­ miento gastro­nómico, Carolina esta a cargo de la pro­duc­ción de una fábrica de cami­ sas: se ocupa de comprar telas, supervisar la con­fección y diseñar los productos. Pero aquí las decisiones y la forma de implementarlas no son propias. Se trata de una empresa familiar donde “es difícil cambiar viejas maneras y costumbres en las formas de hacer”. En cambio, en Krum­ble todo es propio, “incluso las responsabi­lidades que esto trae”, reconoce Carolina. Hay que animarse a encontrar actividades y profesiones que estén en sintonía con quiénes somos, con nuestras fortalezas, con lo que nos gusta hacer y sobre todo con lo que nos hace felices, aunque eso implique dejar algunas cosas de lado.

Si estás por emprender algo nuevo, ¡animate! Confiá en tus capacidades, hacé lo que sabés hacer.

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Cinco desafíos a los que se enfrenta un emprendedor Juan Pablo Gutiérrez Consultor de Estrategia y Operaciones, especialista en emprendedores y start-up

Tomar la fuerza disponible El Fuego Interior es aquella fuerza que está disponible para vos y te lleva a salir de lo conocido, de la zona de confort. Para figurarlo, basta con imaginarse un carruaje del siglo XIX en donde el coche es el proyecto, vos sos el cochero y el caballo, el fuego interior. ¡A domar esa fuerza! Así dirigirla hacia a donde vos quieras llegar.

Definir con precisión el producto o el servicio a ofrecer Esto es, poder poner en palabras lo que hago. Usualmente disponemos de buenas ideas pero nos quedamos sólo allí, con la idea. ¡No! Este desafío se trata de bajarla y animarse a hacerla, que los destinatarios finales de tu producto o servicio los prueben y que te digan qué piensan de él. Esta información es valiosísima.

Respaldarse en un grupo de contención La familia, tu pareja, los amigos, una red de personas afines.

Cómo resolver el problema financiero Sensación apremiante si las hay. Viendo una película sobre el legado de Gurdjieff, leí en subtítulos que él había enfrentado sus problemas de dinero haciendo lo que sabía hacer. Esta frase aparentemente simple me lleva a dos preguntas: ¿estoy dispuesto a ver qué es lo que sé hacer? Y, además, ¿estoy dispuesto a ganarme el pan con mi quehacer? También hay caminos más cortos pero no por ello más sencillos. Hace dos años, hablando con una emprendedora mexicana, me dijo: “Juan, haz como yo, pídele a tu madre dinero para vivir seis meses y luego comienza a devolvérselo. Yo lo he hecho así”. En verdad, no se qué desafío es más difícil...

¡Animarse! ¿Viste Indiana Jones y la última cruzada? Cuando Indie debe conseguir el Santo Grial para poder curar a su padre (Sean Connery), se enfrenta a un último obstáculo: atravesar un acantilado que se sólo se cruza con un puente que se le aparece a quien tiene fe. ¿Cómo aparece? Dando un paso al vacío. Esto es, nada más y nada menos que dar el salto de fe.

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ECONOMÍA HUMANA


Agenda de actividades

Entrenamiento Continuo Integral

GRUPOS DE ENTRENAMIENTO

Encuentros quincenales de dos horas y media de duración Se requiere entrevista previa. Informes: 15 5810 0777 CONSCIENCIA CORPORAL

Encuentros semanales y grupales de Antigimnasia®, de una hora y media de duración

martes 08:30 y 18:00 miércoles 13:30 jueves 20:00 viernes 09:15

Sesiones individuales de Presencia en Quietud Actividad con inscripción previa

También en La Casa-Escuela YOGA INTEGRAL

Encuentros semanales de una hora y media de duración

lunes 10:00 martes 20:00 viernes 16:00

ASTROLOGÍA SISTÉMICA SESIONES EMF BALANCING TECHNIQUE ® TERAPIAS FLORALES Y NUMEROLOGÍA MASAJES ENERGÉTICOS

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Talleres de Entrenamiento continuo integral mayo-agosto 2013 Intensivo de Antigimnasia®

Constelaciones Familiares y Sistémicas

mayo

viernes 10/5, 16:00 a 20:00

sábado 18/5, 10:00 a 17:30 miércoles 29/5, 18:30 a 22:30

junio

viernes 7/6, 16:00 a 20:00

miércoles 12/6, 18:30 a 22:30 sábado 29/6, 10:00 a 17:30

julio

viernes 5/7, 16:00 a 20:00

miércoles 10/7, 18:30 a 22:30 sábado 27/7, 10:00 a 17:30

agosto

viernes 2/8, 16:00 a 20:00

fechas a definir

Fechas sujetas a posibles modificaciones. Solicitamos inscripción previa.

La Casa-Escuela en Córdoba En el mes de septiembre estaremos en la ciudad de Córdoba realizando una jornada intensiva de Entrenamiento Continuo Integral Contacto: mairasseff@hotmail.com / paoguinaldo@hotmail.com

Viernes 30 de agosto Comienzo de la Formación en los Órdenes del Amor y las Constelaciones Familiares en Convenio entre el Centro Latinoamericano de Constelaciones Familiares y La Casa-Escuela de entrenamiento continuo integral.

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