p r o f u n d i d a d e n
Fumar en el trabajo tiene fecha de caducidad Mal olor, despachos humeantes, ceniceros encolillados hasta el borde, ceniza por doquier y, sobre todo, horas vacías de disputas irresolubles. Y es que fumar en la empresa se ha convertido, en los últimos años, en uno de los temas más frecuentes de discusión entre compañeros de trabajo, o mejor dicho, entre acérrimos enemigos: los amantes del cigarrillo y los defensores de los espacios sin humo 26
selectionmagazine
L
a salomónica solución a tal dilema, empero, no ha dejado satisfechas a todas las partes, ya que el gobierno ha
puesto fecha de caducidad a fumar en el trabajo. Aunque como reza el dicho, 'quien no quiere estar contento es porque no quiere'. Muchas compañías y organismos ponen al alcance de la mano de los fumadores soluciones casi infalibles para dejar el vicio y recuperar su mermada salud. Si usted es una ellas, fúmese leyendo este artículo el que posiblemente será uno de sus últimos pitillos. El anteproyecto de ley contra el tabaco es preciso: a partir del 2007, estará prohibido fumar en los espacios cerrados de los centros de trabajo, sean públicos o privados. Y su incumplimiento será considerado como una "infracción grave". Esto significa que quienes no cumplan la norma deberán enfrentarse a multas que pueden alcanzar los 10.000 euros. Así como el negocio del tabaco movió fortunas en campañas de promoción, ahora la nueva legislación plantea que el mejor negocio de cualquier empresario es tener empleados no fumadores. Y los