
UNIVERSIDAD METROPOLITANA DE EDUCACION, CIENCIA Y TECNOLOGIA
Decreto ejecutivo 575 del 21 de Julio de 2004
Acreditada mediante Resolución N°15 del 31 de octubre de 2012
FACULTAD DE CIENCIAS NAUTICAS
MAESTRIA EN ADMINISTRACION DE NEGOCIOS MARITIMOS Y GESTION
LOGISTICA
Revista Digital Estudiante: Jaime Ledezma 8-965-1682
Tutor: Gabriel Froilán Penagos Panamá, Julio, 2024
Glosario
1. Autonomía: Capacidad de una embarcación para navegar independientemente sin necesidad de reabastecimiento de combustible, víveres o agua durante un periodo específico de tiempo. La autonomía de un buque está determinada por la capacidad de sus tanques de combustible y víveres, así como por su eficiencia en el consumo de estos recursos.
2. Buque: Un buque es una embarcación de gran tamaño diseñada para transportar personas, mercancías u otros tipos de carga a través de cuerpos de agua como mares, océanos, ríos o lagos. Los buques pueden variar considerablemente en tamaño y propósito, desde pequeñas embarcaciones hasta grandes navíos utilizados para el transporte de contenedores o petróleo.
3. Capacidad de carga: Es la cantidad máxima de peso o volumen de carga que puede transportar un buque sin exceder sus límites de seguridad estructural o de estabilidad. La capacidad de carga incluye tanto la carga útil como los equipos, combustible, agua y suministros necesarios para la navegación.
4. Cartilla de trazado: Documento náutico que contiene representaciones gráficas detalladas de las características geométricas de un buque, como sus planos y líneas de diseño, utilizadas durante su construcción y mantenimiento.
5. Estabilidad: En navegación, la estabilidad se refiere a la capacidad de un buque para mantener su equilibrio y no volcarse bajo la influencia de fuerzas externas como el viento, las olas o la carga. La estabilidad se evalúa mediante el cálculo de metacentros y ángulos de inclinación crítica.
6. Estanqueidad: Propiedad de un buque de ser hermético, es decir, de mantener el agua fuera del casco para garantizar la flotabilidad y la seguridad de la tripulación y la carga.
7. Estructura flotante: Conjunto de elementos y componentes de un buque que contribuyen a su capacidad de flotación, resistencia y capacidad de carga, incluyendo el casco, la cubierta, las superestructuras y los compartimentos estancos.
8. Flotabilidad: Capacidad de un buque para mantenerse sobre la superficie del agua sin hundirse, determinada por el volumen del casco que desplaza una masa equivalente de agua.
9. Línea de flotación: Línea que marca el nivel del agua en el casco de un buque cuando está completamente cargado, determinada por el equilibrio entre la flotabilidad y el peso total del buque y su carga.
10. Líneas de crujía y central del buque: Líneas imaginarias que atraviesan el buque longitudinal y verticalmente respectivamente, utilizadas en el diseño, construcción y mantenimiento naval para determinar dimensiones y alineaciones.
11. Maniobrabilidad: Capacidad de un buque para realizar maniobras con facilidad y precisión, influenciada por su diseño, propulsión y configuración de timón.
12. Perpendicular de proa: Línea vertical imaginaria que pasa por la proa de un buque, utilizada como referencia para mediciones y dimensiones durante el diseño y la construcción naval.
13. Plano base: Plano de referencia desde el cual se miden las alturas de los diferentes puntos y estructuras de un buque, como la altura de la cubierta principal o las superestructuras.
14. Plano diametral o central: Plano vertical que divide un buque en dos partes simétricas a lo largo de su eslora, utilizado para la representación y análisis de su forma y estructura.
15. Propulsor: Dispositivo o sistema utilizado para generar movimiento y propulsar un buque a través del agua, como motores de combustión interna, motores eléctricos o hélices.
16. Resistencia: Fuerza que se opone al avance de un buque a través del agua, provocada por la resistencia hidrodinámica, fricción y otros factores como la forma del casco y la velocidad de desplazamiento.
17. Sección media: Sección transversal del buque que se encuentra en su parte media longitudinal, utilizada para evaluar su forma, resistencia y capacidad de carga durante el diseño y la construcción.
18. Solidez estructural: Capacidad de un buque para resistir cargas y presiones sin deformaciones excesivas o fallos estructurales, garantizando la seguridad y la integridad durante su operación.
19. Superficie de trazado: Superficie plana imaginaria sobre la cual se proyectan todas las líneas y dimensiones de un buque durante su diseño y construcción, facilitando la visualización y el análisis de su forma y estructura.
20. Velocidad: Velocidad a la cual se desplaza un buque a través del agua, medida en nudos (nautical miles per hour), influenciada por la potencia de propulsión, la resistencia hidrodinámica y las condiciones meteorológicas y marítimas.
Teoría de Buque: Una Mirada Profunda a su Estructura y Funcionamiento
Introducción
El estudio de la teoría de buque es fundamental para comprender no solo la construcción naval, sino también la operación y el comportamiento de las embarcaciones en diferentes condiciones marítimas. En este ensayo, exploraremos las cualidades, partes principales, medidas, calados, desplazamientos, arqueo y la terminología náutica asociada, proporcionando una visión integral de este campo crucial en la ingeniería naval.
Cualidades del Buque
Las cualidades de un buque se refieren a las características que determinan su desempeño en el agua. Entre las principales cualidades se encuentran la estabilidad, la maniobrabilidad, la capacidad de carga, la velocidad y la resistencia al avance. La estabilidad es crucial para evitar el vuelco, asegurando que el buque mantenga su posición correcta incluso en condiciones adversas. La maniobrabilidad se refiere a la capacidad de dirigir el buque con precisión, mientras que la capacidad de carga determina cuánta carga puede transportar sin comprometer su seguridad y rendimiento. La velocidad es esencial tanto para el transporte eficiente como para las operaciones de rescate y emergencia. Por último, la resistencia al avance asegura que el buque pueda moverse a través del agua con eficiencia energética. El diseño de un buque se compone de varias partes principales que cumplen funciones específicas para su operación. La estructura básica incluye el casco, la superestructura y la cubierta.
El casco: es la estructura principal que proporciona la forma y la resistencia del buque.
La superestructura: está ubicada sobre el casco y alberga las cabinas de los tripulantes y pasajeros, así como los sistemas de navegación y comunicación.
La cubierta: es la superficie superior del buque donde se cargan y descargan mercancías, y donde se instalan equipos como grúas y contenedores.
Medidas Principales del Buque
Las medidas principales de un buque incluyen la eslora (longitud), la manga (ancho) y el puntal (altura desde la quilla hasta la cubierta principal). La eslora determina la longitud total del buque, mientras que la manga afecta su estabilidad y capacidad de maniobra. El puntal influye directamente en la estabilidad, desplazamiento del buque, capacidad de carga y la resistencia estructural del buque.
El calado de un buque se refiere a la profundidad medida desde la línea de flotación hasta la quilla. Existen diferentes escalas para medir el calado, como el calado de verano, el calado de carga máxima y el calado ligero. Estas mediciones son fundamentales para determinar la cantidad de carga que puede transportar el buque de manera segura y eficiente.
Calado de verano: es la profundidad máxima a la que puede sumergirse un buque cuando está totalmente cargado con su carga de verano típica. La medida se diseñó para garantizar que el buque pueda operar segura y eficientemente en la temporada de navegación con capacidad de carga prevista. Por lo general, se considera una referencia estándar para los operadores marítimos y las autoridades portuarias al calcular la capacidad de transporte y la navegabilidad del buque en condiciones normales de carga. Durante el proceso de diseño y construcción de un buque, los ingenieros navales calculan y especifican el calado de verano para asegurarse de que el buque pueda cumplir con los requisitos de carga sin comprometer su estabilidad ni su seguridad. Esto implica considerar factores como el desplazamiento total, la distribución de la carga y las condiciones del agua en las rutas de navegación planificadas.
Calado de carga máxima: profundidad máxima a la que puede sumergirse un buque cuando está completamente cargado con su máxima capacidad de carga autorizada. Esta medida es crucial para garantizar que el buque pueda transportar la mayor cantidad posible de carga sin exceder los límites de seguridad establecidos por las regulaciones marítimas y las especificaciones de diseño del buque. El cálculo del calado de carga máxima considera diversos factores, como el tipo de carga transportada, la estabilidad del buque, la profundidad del agua en puertos y canales navegables y las condiciones meteorológicas y de marea. Es común que los buques tengan restricciones específicas de calado de carga máxima según los puertos y las rutas
comerciales que frecuentan, lo que asegura el cumplimiento de normativas internacionales de seguridad marítima y la protección del medio ambiente marino.
Calado ligero: se refiere a la profundidad a la que se sumerge un buque cuando no lleva carga adicional, está vacío, excepto el equipo y los suministros básicos necesarios para operar y navegar. Este término también se conoce como "calado en lastre" o "calado en vacío". El calado ligero es importante para determinar la altura mínima de la quilla que debe respetarse al operar el buque en aguas poco profundas o al atracar en puertos con restricciones de profundidad.
El desplazamiento es el peso total de agua desplazada por el buque cuando está sumergido. Se calcula multiplicando el volumen del casco por la densidad del agua. El arco se refiere al volumen interno total del buque y se utiliza para fines de registro y clasificación. La terminología náutica abarca términos específicos usados en la

navegación y la ingeniería naval. Esto incluye términos para partes del buque (por ejemplo, proa, popa, babor, estribor), términos para medidas (eslora, manga, puntal, calado), y términos para equipos y operaciones marítimas (ancla, timón, navegación, maniobra).
Conclusión
En resumen, la teoría de buque es un campo multidisciplinario que combina principios de ingeniería, física y navegación para diseñar y operar buques de manera segura y eficiente. Comprender las cualidades, partes principales, medidas, calados,
desplazamientos, arqueo y terminología náutica es esencial para todos los involucrados en la industria marítima, desde ingenieros y arquitectos navales hasta capitanes y tripulaciones. Este conocimiento no solo mejora la seguridad y el rendimiento de los buques, sino que también contribuye al avance continuo de la navegación y el transporte marítimo en todo el mundo.



Análisis de la noticia
El artículo de Mundo Marítimo titulado "Acciones de líneas navieras chinas caen tras informes sobre posible alto al fuego en Gaza" analiza cómo las noticias sobre un posible alto al fuego en Gaza han afectado negativamente a las acciones de varias líneas navieras chinas. Este análisis proporciona una visión profunda del impacto que tienen los eventos geopolíticos en los mercados financieros y en la industria del transporte marítimo en particular.
Las acciones de importantes compañías navieras chinas, como Orient Overseas International Limited (OOIL) y Cosco Shipping, han sufrido una caída significativa en los mercados de Hong Kong y Shanghái. Esta caída refleja la reacción inmediata de los inversores ante la posibilidad de un alto al fuego en Gaza, lo que podría influir en la demanda de servicios de transporte marítimo en la región. La disminución de las tensiones en el Medio Oriente reduciría los riesgos de la navegación en zonas de conflicto, pero también bajaría las tarifas de flete por la estabilización de la región.
El conflicto en Gaza ha sido un punto crítico para el comercio global, afectando no solo a las rutas marítimas y puertos en la región, sino también a la percepción de riesgo en la industria del transporte marítimo. Un alto al fuego podría cambiar la dinámica actual, aliviando algunos de los riesgos, pero también provocando una reevaluación de las tarifas de flete y la demanda de servicios de transporte. Este tipo de noticias geopolíticas a menudo tienen un efecto de onda en los mercados financieros, y la reacción de los inversores puede ser volátil a corto plazo. A pesar de la caída inicial de las acciones, los analistas sugieren que las tarifas de flete no volverán a los niveles previos a las disrupciones de manera inmediata. La recuperación del equilibrio en el mercado puede tomar tiempo, ya que las compañías navieras ajustan sus estrategias para adaptarse a las nuevas condiciones. La gestión del riesgo y la diversificación de rutas son esenciales para mitigar los impactos de estos eventos geopolíticos. Las líneas navieras chinas, en particular, deberán evaluar sus operaciones y considerar cómo los cambios en la demanda de servicios pueden afectar sus ingresos y estabilidad financiera. Es
crucial que las compañías navieras mantengan una vigilancia constante sobre los desarrollos geopolíticos y ajusten sus estrategias de manera proactiva. La planificación estratégica y la capacidad de adaptación serán determinantes para navegar en un entorno incierto y volátil. Las lecciones aprendidas de situaciones anteriores, como el conflicto en Gaza, pueden ayudar a las empresas a estar mejor preparadas para enfrentar futuros desafíos y mantener su posición en el mercado global.
Además, la evolución de la situación en Gaza y las respuestas de las partes involucradas seguirán siendo factores determinantes para el futuro de la industria naviera en la región y a nivel global. La incertidumbre en torno a los eventos geopolíticos subraya la importancia de la resiliencia y la capacidad de adaptación en la industria del transporte marítimo. Las compañías navieras deben estar preparadas para enfrentar estos desafíos y ajustar sus operaciones para mantener la estabilidad y el crecimiento en un entorno dinámico.
En conclusión, el artículo de Mundo Marítimo destaca la interconexión entre los eventos geopolíticos y la economía global, enfatizando cómo las noticias sobre un posible alto al fuego en Gaza han afectado a las acciones de las líneas navieras chinas. Las compañías navieras deben estar preparadas para adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado y gestionar los riesgos asociados con los eventos geopolíticos para mantener su estabilidad financiera y operativa. Para obtener más detalles sobre este tema y su impacto en la industria naviera.
Referencia: https://www.mundomaritimo.cl/noticias/acciones-de-lineasnavieras-chinas-caen-tras-informes-sobre-posible-alto-al-fuego-en-gaza
Foro
Pregunta: ¿Como se clasifican las cargas que se mueven en los puertos panameños, en función de la evolución que ha tenido, su origen y su destino?
Las cargas que se mueven en los puertos panameños se clasifican según su evolución, origen y destino. Históricamente, Panamá ha sido clave en el comercio global debido a su ubicación y al Canal de Panamá, que conecta los océanos Atlántico y Pacífico. Inicialmente, las cargas incluían productos agrícolas, minerales y bienes manufacturados. En las últimas décadas, han crecido las importaciones y exportaciones de productos electrónicos, maquinaria y componentes automotrices, reflejando cambios en las dinámicas de producción global.
Panamá recibe y envía mercancías a nivel mundial. El Canal facilita el tránsito entre Asia, Europa y las Américas, con China como un socio crucial. Europa es también un origen y destino importante para productos industriales y bienes de consumo. El comercio interamericano ha aumentado con el intercambio de productos agrícolas y manufacturados entre América Latina y los Estados Unidos, apoyado por acuerdos de libre comercio y mejoras en la infraestructura portuaria.
Puertos como Balboa y Colón han desarrollado capacidades especializadas para manejar diferentes tipos de cargas. La carga contenerizada ha crecido significativamente gracias a inversiones en tecnología avanzada. La carga a granel, como minerales y productos agrícolas, se maneja en instalaciones dedicadas para una transferencia eficiente. La expansión del Canal de Panamá en 2016 permitió el tránsito de buques Neopanamax, incrementando la competitividad de los puertos panameños.
En resumen, la clasificación de las cargas en los puertos panameños refleja la interacción de factores históricos, geográficos, tecnológicos y económicos, con
una evolución en los tipos de cargas y en sus orígenes y destinos, impulsada por el comercio global, mejoras en la infraestructura y políticas comerciales favorables.
El sistema portuario de Panamá
Uno de los más estratégicos y dinámicos a nivel mundial, gracias a su ubicación geográfica privilegiada y al Canal de Panamá, que conecta el Atlántico y el Pacífico, facilitando el comercio global. Este análisis abarca la infraestructura portuaria, la evolución histórica, los factores económicos y tecnológicos, así como los desafíos y oportunidades que enfrenta.
Los principales puertos de Panamá son Balboa y Colón, ubicados en cada extremo del Canal. El puerto de Balboa, en el Pacífico, es uno de los más importantes de América Latina, especializado en el manejo de contenedores. Por otro lado, el puerto de Colón, en el Atlántico, es crucial para el comercio internacional, con una fuerte presencia en el transbordo de mercancías. Ambos puertos han invertido significativamente en tecnología y expansión para aumentar su capacidad y eficiencia, permitiendo el manejo de buques de gran tamaño, incluidos los Neopanamax.
Desde su inauguración en 1914, el Canal de Panamá ha sido un punto neurálgico en el comercio marítimo global. La ampliación del canal, completada en 2016, permitió el tránsito de buques más grandes, incrementando la capacidad de carga y consolidando a Panamá como un centro logístico global. Esta expansión ha atraído más inversiones y ha impulsado el desarrollo de infraestructura portuaria adicional.
Factores Económicos y Tecnológicos
El crecimiento del comercio global, especialmente entre Asia y América, ha aumentado la demanda de servicios portuarios en Panamá. La modernización tecnológica, con la implementación de grúas automatizadas y sistemas de gestión
de carga avanzados, ha mejorado la eficiencia operativa. Además, la estabilidad económica y política de Panamá, junto con su régimen fiscal favorable, ha atraído a empresas de logística y comercio internacional.
A pesar de su éxito, el sistema portuario de Panamá enfrenta varios desafíos. La competencia regional, especialmente de puertos en América del Sur y el Caribe, representa una amenaza constante. Además, la congestión y los problemas de capacidad pueden limitar el crecimiento futuro si no se gestionan adecuadamente. La necesidad de mantener y actualizar la infraestructura para manejar las demandas crecientes también es un reto significativo.
Oportunidades
Las oportunidades para el sistema portuario de Panamá son vastas. La continua expansión del comercio entre Asia y América crea una demanda sostenida de servicios portuarios eficientes. La posibilidad de desarrollar más zonas logísticas y parques industriales alrededor de los puertos puede atraer inversiones adicionales. Además, las iniciativas de sostenibilidad y tecnología verde pueden posicionar a Panamá como un líder en operaciones portuarias ecológicas.
En resumen, el sistema portuario de Panamá es fundamental para el comercio global, beneficiándose de su ubicación estratégica y de inversiones continuas en infraestructura y tecnología. Sin embargo, para mantener su competitividad, Panamá debe enfrentar desafíos como la congestión y la competencia regional, al mismo tiempo que aprovecha oportunidades para crecimiento y desarrollo sostenible.

Tendencias de los fletes internacionales marítimos
Esto reflejo una combinación de factores económicos, logísticos y geopolíticos que impactaron las tarifas y la dinámica del comercio global. A continuación, se analizan los principales factores y tendencias observadas durante ese año.
El 2023 vio una moderación en la demanda de bienes de consumo en comparación con los picos observados durante la pandemia de COVID-19. Esto se debió en parte a la normalización de las cadenas de suministro y a una disminución en el consumo exagerado de productos a medida que las economías comenzaron a reabrirse y los patrones de consumo se estabilizaron. La reducción en la demanda contribuyó a una disminución en las tarifas de flete en algunas rutas comerciales clave.
La capacidad de transporte marítimo se mantuvo relativamente estable, con algunos incrementos debido a la incorporación de nuevos buques y la optimización de rutas. Sin embargo, la oferta aún superaba la demanda en ciertas rutas, lo que presionó a la baja las tarifas de flete. Las líneas navieras ajustaron sus estrategias, incluyendo la gestión de capacidad y la implementación de alianzas estratégicas para equilibrar la oferta y la demanda.
Las tensiones geopolíticas, especialmente entre grandes economías como Estados Unidos y China, continuaron influyendo en las rutas y costos del comercio marítimo. Las sanciones y restricciones comerciales afectaron el flujo de ciertos productos, alterando las rutas comerciales tradicionales y, en algunos casos, aumentando los costos de flete debido a la necesidad de rutas más largas o menos eficientes.
La creciente presión por adoptar prácticas sostenibles y cumplir con normativas ambientales más estrictas también impactó los fletes marítimos en 2023. Las líneas navieras invirtieron en tecnologías más limpias y en la adaptación de sus flotas para cumplir con las regulaciones de emisiones de carbono. Estas inversiones, aunque necesarias, representaron costos adicionales que algunas empresas trasladaron parcialmente a los precios de los fletes.
La inflación global y el aumento en los costos operativos, incluyendo el combustible y los salarios, también jugaron un papel en las tarifas de flete. Aunque la inflación afectó a varios sectores, las líneas navieras enfrentaron el desafío de equilibrar estos costos mientras mantenían competitivas sus tarifas de flete.
En las rutas transpacíficas, las tarifas de flete mostraron una tendencia a la baja en comparación con los niveles extremadamente altos de 2021 y 2022, impulsados por una disminución en la demanda de productos electrónicos y bienes de consumo. En las rutas entre Europa y Asia, las tarifas también disminuyeron, aunque en menor medida, debido a una demanda más sostenida de bienes manufacturados.
En resumen, las tendencias de los fletes internacionales marítimos en 2023 estuvieron marcadas por una moderación en la demanda, ajustes en la capacidad de transporte, influencias geopolíticas, y un enfoque creciente en la sostenibilidad y el cumplimiento ambiental. Estos factores, combinados con la inflación y el aumento de los costos operativos, configuraron un año de estabilización y ajuste en el sector del transporte marítimo global.
