

Nombre y Dirección

Salmo 91.BAJO LA SOMBRA DE CRISTO
El que vive bajo la sombra protectora del Altísimo y Todopoderoso, 2dice al Señor: «Tú eres mi refugio, mi castillo, ¡mi Dios, en quien confío!» 3Sólo él puede librarte de trampas ocultas y plagas mortales, 4pues te cubrirá con sus alas, y bajo ellas estarás seguro. ¡Su fidelidad te protegerá como un escudo! 5No tengas miedo a los peligrosnocturnos,nialasflechaslanzadasde día, 6nialasplagasquelleganconlaoscuridad, ni a las que destruyen a pleno sol; 7pues mil caerán muertos a tu izquierda y diez mil a tu derecha, pero a ti nada te pasará. 8Solamentelohabrásdepresenciar.


Dolores
Cultos. Primer y tercer domingo.
Liga Femenina: Primer martes de cada mes hora 17,30.
Viernes 7 celebración del Día Mundial de Oración hora 16.
Catecismo: Se anunciará localmente.
Escuela Bíblicas: Se anunciará localmente.
Cañada Nieto.
Viernes 7: Día Mundial de Oración y estudio bíblico. Hora 19.
Palmitas
Las actividades se anunciarán localmente.
Historia
Nuestra fe, que parte del Evangelio, nos desafía a transformar nuestra manera de pensar y de vivir hacia una vida más plena para todos y todas; a defender los espaciosdeencuentrodondevivirnuestrafedediversas maneras; a ser una iglesia que acunelas diferencias y se proponga como alternativa al individualismo; a cuidarnos y cuidar a toda la Creación. Extraido https://iglesia-valdense.org/

TIEMPO DE CUARESMA
Romanos10:8-9
Estamos comenzando el tiempo litúrgico en que la iglesia toda reflexiona sobre el sentido de nuestra vida como testigos de Cristo en el mundo. Camino que es la expresión máxima de Su entrega total al Padre y a la humanidad.
Morir para dar vida ¡Que paradoja ¡Pero, acaso nuestra vida toda? no es una paradoja? Con un quiero hacer algo, pero no debo, debo, pero no quiero, quiero, pero no puedo…y tantos sí, pero no. Nuestro texto de hoy nos habla de la coherencia.
De la coherencia de nuestra vida como bautizados. La coherencia entre lo que se cree con el corazón y lo que se confiesa con la boca. No basta con decir: yo creo en el Dios de amor cuando nuestro corazón esta tan endurecido que no puede compadecerse y solidarizarse con el sufrimiento de un hermano.
No basta con decir: Creo en el Dios de la justicia y la paz, cuando cerramos los ojos a tanta injusticia. Martin Lutero decía que la vida cristiana consiste en creer y amar. Y es en esto que se muestra nuestra coherencia como hombres y mujeres de fe, en la fe que tenemos en Dios y en el amor que tenemos al prójimo.
Esa fe que confesamos en ese Dios que en su gracia nos da vida plena, es la que nos capacita y nos mueve a ser instrumentos suyoS entregando nuestras vidas al servicio del prójimo. De esto se trata el confesar con la boca y el creer con el corazón.

(Extraído de Lecturas Diarias.)