evento
el invitado especial de esta fiesta espiritual que paralizó Antananarivo. En la jornada inaugural, el pastor Guerra se encargó de compartir las buenas nuevas del Creador por medio de una prédica basada en el Salmo 115, que sirvió para que el ministro del Altísimo hablara acerca de las cuatro promesas que el Todopoderoso hizo a su iglesia. En ese sentido, el Rev. Guerra acotó que “Dios nos ayudará, nos protegerá, nos bendecirá y nos aumentará”. Luego, en la segunda fecha, se desarrollaron dos cultos para la gloria de Jehová. Por la mañana, el misionero Guerra predicó el Evangelio y desarrolló el tema “El poder de la Pala-
bra de Dios”. Después, por la noche, la hermana Suhé Reenis, responsable de la iglesia en Madagascar, tuvo a su cargo la prédica “Hay que renunciar para seguir”. En el último día, el reverendo Guerra vol-
vió a evangelizar a los seguidores del Señor con la alocución “El poder de la presencia de Dios”. Basado en Éxodo 33:14, el siervo abordó la obra misionera desplegada por el Movimiento Misionero Mundial en el ámbito internacional.
diciembre 2017 / Impacto evangelístico
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