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Páramo “del Almorzadero”, santuario de vida
Resaltan d o y con ocien d o la imp or tan cia d e las mar avillas d e n u estr a “ P ach amama”
Anclado en las formidables montañas de la cordillera oriental, entre los departamentos de Norte de Santander y Santander a una distancia de 38.7 km. del municipio de Chitagá, podemos encontrar una riqueza natural que fascina a esos que se atreven a descubrirlo: el páramo “del Almorzadero”. Este hábitat de alturas, arraigado entre los 2.800 y 4.530 metros sobre el nivel del mar, es reconocido como un santuario de vida por la esplendorosa diversidad de flora y fauna. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística “DANE”, el páramo “del Almorzadero” cuenta con 5.882 habitantes; para ellos más que fotos es fundamental que cada ser humano se lleve algo en el corazón y en la mente, cumpliendo su tarea con la “Pachamama”.
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En Chitagá podemos encontrar aproximadamente el 35% de este majestuoso lugar, el nombre páramo “del Almorzadero” se dio gracias a una de las rutas libertadoras que pasaba por allí, conocida como una ruta real, por lo que pasaban muchos viajeros y hacían sus paradas para poder almorzar y de allí su peculiar nombre. Este sublime lugar recibe a sus visitantes cotidianamente con una temperatura aproximada de 2 a 5 °C en sus días más grises y 15 a 20 °C en verano, sus épocas más calurosas.
El páramo “del Almorzadero” se despliega grandiosamente a lo largo y ancho de 157.704,90 hectáreas, garantizando un resguardo seguro para una amplia gama de flora y fauna silvestre, numerosas de ellas son locales y están en peligro de extinción.
En este terreno abrupto y gracias al particular clima de esta región, se ven allí animales como el cóndor andino, el venado de cola blanca y lochoz, guartinajos, puma, armadillos y gran diversidad de aves habiten cómodamente como si de un paraíso se tratara. En su flora podemos encontrar cualquier tipo de plantas, los ancestros dicen que el páramo es la bendición más grande por la variedad en su vegetación, que sirven para sanar enfermedades; Las más comunes son el hitamos real, anamú, anica, lunaria, frailejon, pira pira. Hay plantas curativas y otras altamente agresivas para la salud.
Sumado a su huella ecológica, este santuario es un punto de interés para los turistas dando paso a esos que anhelan tener una conexión más profunda con la “Pachamama”. Los visitantes pueden maravillarse con senderismos curvilíneos que brindan una vista panorámica extraordinaria de los valles cercanos y las grandiosas cumbres de montañas; mientras sus guías trabajan la constante lucha de concientización ya que la idea es que no solo que quienes visiten el lugar se tomen fotos, lo más significativo es cambiar hábitos para crear un mejor espacio. Su neblina enigmática que abraza al páramo le da un encanto especial a la experiencia.
El páramo es un escenario de gran importancia para los campesinos, ya que ellos están orgullosos de contar a sus visitantes las increíbles historias de sus antepasados, el cómo caminaban descalzos largas horas hasta llegar a recoger a sus animales. También en sus creencias se resalta la gran importancia que le dan a las asombrosas lagunas que allí se encuentran, esto por los diferentes relatos que cuentan sobre los tesoros que alberga este santuario de vida y estos lugares merecen un respeto ya que son sagrados y son un resguardo seguro.
Las principales actividades económicas de este majestuoso páramo “del Almorzadero” son la ganadería y agricultura. Es reconocido por sus cultivos de durazno que, según el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Sostenible, representan el 9.2%, sumado al cultivo de papa que es alrededor del 3,3% de la región. A pesar de la gran calidad que estos productos ofrecen y el importante papel que han tenido en el desarrollo económico de este bello lugar, esto también ha causado daños irreparables en el páramo debido al uso excesivo de los pesticidas, dando como resultado el daño a las fuentes hídricas y los suelos.
No obstante los daños ambientales generados en estas zonas, a través del tiempo, según el Ministerio de Ambiente se ha evidenciado una disminución del 5,2% en la deforestación en áreas de este territorio. En los últimos años la relación de los campesinos con la “Pachamama” ha cambiado positivamente, por lo que se ha visto una mayor concientización de estas lindas áreas sagradas.
Las personas que en este fascinante lugar habitan, han logrado una mayor conexión con este sitio, no solo porque les permite desarrollar diversas actividades económicas, sino sobre todo por la energía que en este lugar se puede encontrar.
“Los turistas no son los únicos felices de disfrutar las maravillas ambientales de este páramo, sus habitantes también disfrutan de este santuario” dijo Luz Marina, habitante de este lugar. Muchas personas, las cuales no son oriundos de Chitagá, han decidido quedarse porque es un lugar que les transmite paz. Ellos cuidan hasta el más mínimo detalle para su buena preservación, ya que mas que un lugar turístico, es un lugar sagrado, el cual con el pasar del tiempo se ha convertido en su hogar. Permitiéndoles reconectar con el ambiente, y así encontrar esa tranquilidad que solo en este bello municipio se puede hallar.
