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Periódico El Sol de Puerto Rico Del 1 al 15 de febrero de 2016.
Breves del Sur
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Seguridad para fiscales, una propuesta que no debe responder a la euforia
Por Agustín Muñoz Periódico El Sol de Puerto Rico
La trágica muerte de la joven fiscal Francelis Ortiz Pagán a manos de desconocidos planteó la interrogante sobre la fragilidad de la seguridad que rodea a los integrantes del ministerio público cuya vida está en continuo riesgo. Varias propuestas comenzaron a divulgarse, entre éstas, acuerdos colaborativos del Departamento de Justicia con los municipios para el uso de la Policía Municipal como escolta. Para el ex Fiscal General de Puerto Rico, licenciado Pedro G. Goyco Amador, es necesario que el Estado adopte medidas que provean equilibrio entre el trabajo arriesgado de un fiscal y su seguridad personal. “Los fiscales estamos todo el tiempo investigando y procesando por crímenes violentos. Muchos de los individuos con los que intervenimos son peligrosos, por lo tanto, es necesario que se refuerce la seguridad”, dijo Goyco Amador al Periódico El Sol de Puerto Rico. Fue claro al destacar que la labor de un fiscal “es un trabajo sumamente peligroso y arriesgado”. En su experimentada carrera de más de 30 años como fiscal investigador y jefe de fiscales, el abogado ponceño fue testigo de innumerables incidentes que involucró a sus compañeros. Recordó el asesinato del fiscal José Ismael Rivera en Juana Díaz, ocurrido en marzo de 1983; tiroteos en Ponce y otros ataques similares. En aquellas ocasiones, Justicia tomó medidas internas en conjunto con la Policía, pero hasta ahí. El Secretario de Justicia, César Miranda, reconoció
que esa agencia no cuenta con un esquema interno que se active de inmediato cuando uno de sus fiscales está en peligro o ha sido víctima de un atentado. No obstante, comentó que cuando un fiscal trabaja en un caso delicado, la Policía se ocupa de proveerle transportación de su residencia al tribunal y viceversa. Goyco Amador propuso que el Departamento de Justicia estructure cursos de seguridad para sus fiscales que incluya qué hacer en casos de amenazas, cómo descubrir un posible atentado a su integridad física y otras medidas. Reforzar los lugares donde haya mayor vulnerabilidad para la seguridad, como por ejemplo, cuando acuden a escenas de donde se cometió un crimen, abundó. Además, instó a la Administración de Tribunales a proveer accesos privados para esos interventores. “Cuando van al tribunal deben tener un acceso distinto para que no tengan que coincidir con acusados”, sugirió. A los fiscales, Goyco Amador les aconsejó a “no hacer rutinas, ser cuidadosos”.
Puntos divergentes Recién, el alcalde de San Germán, Isidro Negrón, lanzó la idea de que agentes municipales les ofrezcan escolta a los fiscales residentes en su ciudad. Por su parte, el representante Ángel Martínez Santiago dijo
que presentó una medida legislativa que respalda la iniciativa del alcalde Negrón dirigida a que el Departamento de Justicia consienta en acuerdos colaborativos con los municipios. Sin embargo, el alcalde de Peñuelas, Walter Torres Maldonado, levantó bandera al sostener que cualquier legislación sobre el tema de las escoltas debe ser bien pensada y con los pies en la tierra. “Hay que tener cuidado con legislación que quiere quedar bien con todo el mundo y que suenen bonitas. Hay que tener cuidado con la euforia”, dijo Torres Maldonado a este medio. El alcalde peñolano mantuvo distancia ante la propuesta de su compañero de San Germán al recordar que hay municipios donde no existe un cuerpo de seguridad municipal. Al mismo tiempo, expresó que antes de responder a la euforia y ampararnos en el dolor humano para hacer recomendaciones de esa naturaleza, se debe trabajar con la sociedad y su comportamiento. “Nos quejamos de las escoltas a los exgobernadores, a los jueces y ahora proponemos escoltas. Se nos olvidan las críticas anteriores para quedar bien”, subrayó el alcalde de Peñuelas. Por su parte, el alcalde de Santa Isabel, publicó que puso su Policía Municipal a disposición de las fiscalías de Ponce y Guayama para ofrecer servicios de seguridad y escolta a los fiscales “porque son los defensores del pueblo”. Indicó que remitió una comunicación a ambas oficinas distritales con su intención.