El Sol de San Telmo

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ENERO 2021 Número 134 - Año 13 -Buenos AiresEjemplar

g r at u i t o

M G C Gorri

Manzana de las Luces

Carlos Gorriarena fue un artista insondable para quien la vida era “una fiesta”. También fue un gran maestro que, desde lo simple, enseñaba lo profundo del arte.

La denominación “Manzana de las Luces” cumple 200 años en 2021 y comparte bicentenario con numerosas instituciones que allí se crearon..

Págs. 4 y 5

Págs. 2 y 3

Un Corredor de las Artes en proceso

“Me gustaría generar en todo espacio que se pueda, interno y externo y en algunas ocasiones, muestras. Un movimiento de artes plásticas, en principio”.

Págs. 6 y 7

Convivencia Nuestras calles se han convertido en lugares donde concurren diferentes intereses, muchas veces contrapuestos. Pág 8

Más árboles cuidados, menos cemento

Pensar en futuro, actuar en presente

Esta época de pandemia trajo consigo una mayor conciencia en la población, de la importancia de los espacios verdes para la salud física y psíquica.

Hay un falso progreso que solo beneficia a unos pocos y en forma rápida. En cambio, nuestro barrio, con su historia, es todo lo opuesto.

Pág 9

Pág 11

“Proteger el patrimonio no significa congelar la ciudad, significa integrarla”.

ARQ. JOSÉ MARÍA PEÑA


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EL SOL DE SAN TELMO

Nuestra MisiĂłn: El Sol de San Telmo es un periĂłdico no-partidario dedicado a fortalecer y celebrar el barrio de San Telmo y el Casco HistĂłrico de la Ciudad AutĂłnoma de Buenos Aires.. Definimos nuestra visiĂłn editorial como periodismo comunitario. Valoramos toda comunicaciĂłn que genere un foro abierto de participaciĂłn y diĂĄlogo para las muchas voces que constituyen la comunidad de

Cuna de prĂłceres y madre de instituciones

San Telmo. Reconocemos que vivimos en una

L A D E N O M I N AC I Ă“ N “ M A N Z A N A D E L AS L UC E S â€? C U M P L E 2 0 0 A Ă‘ O S E N 2 0 2 1 Y CO M PA R T E

ĂŠpoca en la cual los medios (tanto masivos como

B I C E N T E N A R I O CO N N U M E R O SAS I N ST I T UC I O N E S Q U E A L L Ă? S E C R E A R O N .

independientes) ocupan cada vez mĂĄs el espacio de intercambio y comunicaciĂłn que antes ocupaban nuestros espacios pĂşblicos-las plazas, parques y veredas donde nuestros abuelos se juntaban para conectarse con el mundo y con sus comunidades. Por eso queremos revalorar el intercambio y la conexiĂłn humana a travĂŠs de un periĂłdico cuya identidad, contenido, y espĂ­ritu se definen a travĂŠs de la participaciĂłn activa de sus lectores y colaboradores. Todos los que viven o trabajan en el barrio, o simplemente le tienen cariĂąo, estĂĄn invitados a formar parte del debate sobre San Telmo: su patrimonio tangible e intangible, su pueblo y su futuro.

w Propietaria / DirecciĂłn y EdiciĂłn: Isabel BlĂĄser GestiĂłn y distribuciĂłn: Hugo M. Del Pozo DiseĂąo: Samanta Cardo AdministraciĂłn, web y redes sociales:

Hugo Lavorano elsoldestelmo@gmail.com elsol.desantelmo@yahoo.com.ar Isabel.elsol@yahoo.com.ar www.elsoldesantelmo.com.ar El Sol de San Telmo 4307 9704

Carlos Calvo 717 - CABA Colaboraron en este nĂşmero: JosĂŠ Selles MartĂ­nez / Graciela FernĂĄndez / Jorge Carrachino / Hugo CĂŠspedes / Ana Casavelos / MarĂ­a AngĂŠlica Di GiĂĄcomo / Violeta Fijal / EfraĂ­n Cruz / Horacio Cacciabue El arte de nuestro logo es un fileteado del maestro Martiniano Arce

w ISSN: 2313 9722 DNDA 63939703-2020 DiseĂąo: SBC - Tel. 4383 5889 ImpresiĂłn: Editora del Plata S.R.L. Neyra 75 - GualeguaychĂş - E2820DQA Entre RĂ­os - Argentina El Sol de San Telmo es una publicaciĂłn cultural de carĂĄcter comunitario y distribuciĂłn gratuita mensual de 3000 ejemplares, orientada a la difusiĂłn de la historia y actividades barriales del barrio de San Telmo y el Casco HistĂłrico de la Ciudad AutĂłnoma de Buenos Aires. Se autoriza la reproducciĂłn total o parcial de las notas citando la fuente. Los artĂ­culos firmados son de exclusiva responsabilidad de los autores. Fundadores: Catherine Mariko Black y Marcelo BallvĂŠ

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a manzana comprendida por las calles BolĂ­var, Moreno, PerĂş y Alsina fue asignada, segĂşn el plano de Juan de Garay, a los vecinos Pedro Sayas Espeluca, AntĂłn Roberto, PantaleĂłn Alonso Parexo y JosĂŠ Arias. Con el paso del tiempo, la misma devendrĂ­a propiedad de Isabel de GuzmĂĄn, quiĂŠn la dona a la Compaùía de JesĂşs cuando esta debe abandonar el predio en que se habĂ­a instalado a su llegada a Buenos Aires en 1609, el que es hoy la mitad este de la Plaza de Mayo. Los jesuitas se instalaron en su nuevo destino a partir de 1662. AllĂ­ construyeron la iglesia, el colegio y la ProcuradurĂ­a de las Misiones, todas edificaciones de gran relevancia arquitectĂłnica para el lugar y la ĂŠpoca ya que fueron las primeras -en la ciudad- realizadas en ladrillo; hasta el Fuerte estaba construido con adobes y revestido con troncos de algarrobo (aunque a principios del siglo XVIII se revistieron sus murallas con piedra). Al producirse la expulsiĂłn de la Compaùía Manzana JesuĂ­tica hacia mediados del en 1767, el lugar inicia una tradiciĂłn de “usos siglo XVIII. Acuarela de Lola Frexas precariosâ€?, como acertadamente lo bautizara la basada en la reconstrucciĂłn realizada Lic. InĂŠs RodrĂ­guez Aguilar y comienza el desfile por A. de Paula y C. Rando Ferrer. de instituciones y organismos, que se prolonga hasta el presente. ausencia de espacios libres en los que el Estado pudiera construir edificios, la Manzana jesuĂ­tiCon excepciĂłn del Fuerte (luego Casa de ca se convierte en el lugar a ocupar por instituGobierno) y del Cabildo, casi todo el devenir ciones y organismos oficiales. Al comienzo del institucional de la NaciĂłn, de la Provincia de perĂ­odo virreinal se construyĂł un conjunto de Buenos Aires y de la Ciudad estĂĄ asociado, viviendas de alquiler que estaban destinadas a de un modo u otro, a esta histĂłrica Manzana sostener la Universidad de Buenos Aires, cuya hasta finales del siglo XIX, cuando las transfor- creaciĂłn no llegĂł a concretarse y funcionaron maciones institucionales y la modernizaciĂłn de junto a la iglesia, por la calle BolĂ­var, el Real la ciudad hacen que muchas de las institucio- Colegio Carolino, al que sucediĂł el Colegio Connes -que funcionaban casi precariamente en la victorio Carolino cerrado en 1806, instalĂĄndose Manzana- se trasladen a edificios mĂĄs al tono allĂ­ el Cuartel del Regimiento de Patricios. con los ideales de la nueva RepĂşblica. Sucesivas denominaciones y nuevos edifiPrimeros tiempos cios recrean la instituciĂłn creada por los jesuiLuego de la expulsiĂłn de los jesuitas y dada la tas, llegĂĄndose al actual Colegio Nacional de

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Buenos Aires dependiente de la Universidad homónima. Generaciones de hombres públicos que se destacaron en la política, en la guerra, en la industria, en la educación, en el arte, etc. se formaron en estas instituciones. En 1779 se instaló allí el Tribunal del Protomedicato, al aùo siguiente la Imprenta de los Niùos Expósitos. Iniciada en tiempos de la Compaùía, la botica o farmacia siguió funcionando en los locales de la antigua Procuraduría que daban a la calle Alsina, incluso luego de la expulsión, dada la importancia de la misma en la endeble estructura sanitaria de la ciudad. En estos tiempos de pandemia es importante recordar que el Protomedicato se ocupó de iniciar -en el Virreinato- la campaùa de valorización primero (1784) y luego la de vacunación, con el mÊtodo Jenner contra la viruela, creåndose al efecto en el aùo 1805 el Conservatorio


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Artículo publicado en El Argos de Septiembre de 1821 en el que se propone la denominación “Manzana de las Luces”.

de la Vacuna y el cargo de Comisionado General de la Vacuna. En la Manzana funcionó también la célebre Imprenta de Expósitos, creada por el virrey Vértiz para el financiamiento del Hogar de niños Expósitos, que se había instalado en la esquina NE de Perú y Alsina, en donde había funcionado la Casa de Ejercicios Espirituales para mujeres de la Compañía de Jesús y que persistió hasta 1824.

Tiempos de revolución e independencia

El período independiente introduce nuevos usos en los espacios de la Manzana. La Biblioteca Pública, creada en 1810, recién se instala en 1812 en el primer piso de la esquina de Perú y Moreno y en 1813 se incorpora a la misma el Archivo Cartográfico. En 1814 la Biblioteca recibe la donación de la colección de Bartolomé D. Muñoz, dando origen al que en 1824 se denominaría Museo del País y que, con el correr del tiempo y luego de deambular por diferentes sedes, regresaría a la manzana en 1854 para constituir el Museo Público, luego Museo de Ciencias Naturales, que permanecería en la esquina de Perú y Alsina (demolida para el trazado de la Diagonal Sur) hasta su trasladado desde la Manzana al Parque Centenario, en 1940.

1821

Numerosos sucesos marcan el bienio 18211822, pródigo en la creación de nuevos organismos estatales que se instalan en la Manzana. La relevancia educativa, cultural y científica de los nuevos establecimientos y sus antecedentes inmediatos en el sitio hacen que el cronista del diario “El Argos” proponga, en la edición del 1 de septiembre de 1821 que el lugar sea denominado “Manzana de las Luces”, haciendo clara referencia a las luces del saber. Ese año se crea el Departamento de Ingenieros Arquitectos, que daría luego origen a diversas instituciones como el Departamento Topográfico, la Dirección de Geodesia, el Instituto Geográfico Nacional y el CeDIAP. Se funda también y se instala en la En el plano, el epígrafe: La Manzana de las Luces según su representación en el plano del Ingeniero Felipe Bertrés publicado en 1822 y basado en el de Cerviño de 1814.

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Manzana el Archivo General de la Nación. Se inicia la construcción de la Sala de Sesiones de la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires (creada en 1820 al abolirse los cabildos). Esta sala se inaugura en 1822 y será luego sede del Congreso Nacional y de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, para terminar sus días como Aula Magna de la Facultad de Ingeniería, cuando es demolida… y reconstruida con su aspecto inicial, de acuerdo a una única imagen conservada. Se crea ese año de 1821 el Departamento Oficial de Vacunación, que reemplaza a la anterior Administración de la Vacuna y ocupa también un lugar en la Manzana, permaneciendo allí por lo menos hasta fines del siglo XIX.

La creación de la Universidad de Buenos Aires

Pero quizás el hecho más trascendente que tiene lugar ese año desde el punto de vista de la educación, es la creación de la Universidad de Buenos Aires. A ella se incorporan tanto la Academia de Dibujo -que había sido instalada en la Manzana el año anterior y que pasa al Departamento de Ciencias Exactas con la denominación “Cátedra de Dibujo”- como la Escuela de Medicina del Protomedicato, que se transforma en el Departamento de Medicina. La Universidad se integra con otros cuatro Departamentos: Primeras Letras, Estudios Preparatorios, Ciencias Sagradas y Jurisprudencia, siendo su primer rector el Presbítero Antonio Saénz. La UBA es la institución que más tiempo ha permanecido en la Manzana, más incluso que sus fundadores (que la ocuparon 105 años, entre 1662 y 1767). Desde su creación en 1821 hasta el traslado de las facultades de Ciencias Exactas y Naturales y Arquitectura a la sede de la Ciudad Universitaria en 1972, transcurrieron 151 años.

La lista continúa…

Muchas otras instituciones públicas y privadas vieron la luz o funcionaron en la Manzana, pero la lista es demasiado extensa incluso para resumirla en este artículo de presentación. Su tratamiento será motivo de futuras notas que, a lo largo de este año, rememorarán este bicentenario múltiple en sus homenajeados y en sus significaciones. José Selles Martínez Instituto de Investigaciones Históricas de la Manzana de las Luces

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arada de porteño de otrora, ojos de águila en vuelo, manos de carrero metafísico.

Todos lo conocían como Gorri, a secas. Así lo llamaban sus alumnos, sus colegas, sus amigos, los vecinos del barrio, los mozos de los bares, los parroquianos, las amas de casa que cruzaba en los mercados. Él se presentaba así: Gorri.

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GORRI

Nunca se desentendía de los desastres de su tiempo, de las debacles del ser o de la muerte de un amigo. Siempre se demoraba en responder, mientras escondía sus manos en la espalda acomodándose la osamenta. Te miraba a los ojos y se paraba el mundo. El Gorri era enorme.

Carlos Gorriarena recibió en vida los máximos galardones que puede recibir un pintor: el Gran Premio Nacional y el Municipal, el Premio al Mejor Artista, otorgado por la Asociación Internacional de Críticos de Arte y la beca John Simón Guggenheim en la Memorial Foundation, de Nueva York.

“Así, sin querer, en un acto conformaba a mi madre y a mi padre. El cuadro se lo regalé a aquella mujer que laburaba en los quilombos de San Fernando. A veces pienso que toda mi vida navegué en aquel barco”, recordaba siempre.

También realizó muestras antológicas en el Centro Cultural Recoleta, en Arte BA, en el Museo Nacional de Bellas Artes y en la Galería Thomas Cohn de San Pablo.

A los 18 años entró a la Escuela de Bellas Artes, donde tuvo grandes maestros: Antonio Berni, Lucio Fontana, Lino Enea Spilimbergo. Cuando ellos se fueron de la escuela, también lo hizo él para estudiar con Demetrio Urruchúa. “Con el vasco aprendí que había que trabajar largos años y todos los días para ser pintor”.

A fines de los años sesenta se integra al equipo de la mítica La Rosa Blindada; era un activo militante comunista pero, en los años de la resistencia, el Gorri se hizo peronista junto a su cofrade “Juanito” Gelman. El fuego de tu mano queda en el mundo, quema suciedades terrestres, llena la copa de buen ojo, el que mira oleajes de amor y de dolor “Al Gorri lo conocí en el año ¨66¨ -recordaba León Ferrari- en una colectiva de apoyo a Vietnam y nos hicimos amigos para toda la vida”. “En el año ¨69¨ volvimos a encontrarnos en un homenaje al Che Guevara y en la muestra ¨Malvenido Rockefeller¨, en la SAAP”. “El Gorri pintaba fuerte y lo hacía con los militares encima”, recordaba León, que admiraba su obra y su coraje.

Raúl Santana sostiene que Gorriarena es el gran heredero de Antonio Berni. Compartían el compromiso político y una obra muy argentina y voraz en sus formas. “El uso impiadoso de la materia, su cromatismo fauve y orgánico, los machos desbordados y las hembras desbocetadas serán sus marcas”, afirmaba. Gorriarena testimoniaba el dolor, la desesperación, el odio y el espanto. “Alguien muere y Gorriarena va y pinta al muerto”, decía Pablo Suárez. “La materia pesada se agazapa en su mirada serena y gozosa”, sostenía Miguel Briante. “El Gorri se daba lujos líricos e irónicos, pintaba como si fuera Dios mirando el mundo y limándose las uñas”.

Carlos Gorriarena nació en Florida, Buenos Aires, un 20 de diciembre de 1925. Su padre quería que fuera marino; su madre, que fuera pintor. Una prostituta rumana le regaló una caja con colores al óleo, pinceles y trementina, con los que el Gorri pintó su primer cuadro: una fragata en medio del mar.

En 1960, Carlos Gorriarena comienza a exponer su obra. Su pintura transitaba la abstracción expresionista basada en una especie de subversión, para luego iniciar un proceso de exacerbada gestualidad con imágenes icónicas (banderas, orejas, testículos, gritos) en el marco del legado emergente del grupo COBRA mientras que, en esos años, su compromiso político lo posicionó junto a otros pintores contestatarios: Ricardo Carpani, Carlos Alonso y Antonio Berni. “En el cuadro hay que cuestionar lo que hay que cuestionar en la realidad”, afirmaba el Gorri.

ese fuego funda ciudades, soles que no se ven, para a los mazos que golpean en pabellones del espanto

El Gorri era enorme. Carlos Gorriarena fue un artista insondable para quien la vida era “una fiesta”. También fue un gran maestro que, desde lo simple, enseñaba lo profundo del arte. Cuando decidí tomar clases con él yo pintaba desde hacía años; había ganado algún premio y vendía obras de vez en cuando. Mientras subía las escaleras de su taller de la calle Charcas, en mi primera visita, yo ya sabía que sería mi maestro.

“UN ARTISTA ES ARTISTA CUANDO ESTÁ EN PELOTAS. SI NO TE ECHO, SERÁS UN ALUMNO TODA LA VIDA”. “… Tenía familiares cercanos y amigos muertos. Mi hija había tenido que irse del país, mi hijo se fue después. Yo tenía tanto miedo como los demás, pero me impuse como un deber exponer todos los años en mi país”. Gorriarena usó siempre su pincel como máquina de guerra.

Después de mi primera clase, tuve un desprendimiento de retina. Cuando estaba perdido entre las sombras, el Gorri me hizo una visita.“La pintura no tiene que ver con la vista”, me dijo con firmeza. “Hay que capturar la luz, agarrarla, tenerla entre las manos y no dejarla ir. Con la poca luz que tengas, podes pintar todo”. Cuando volví a su taller no veía los pinceles, pero podía pintar los cuadrados de sus ejercicios de interrelación del color. Las clases eran una fiesta y los rituales posteriores, un acto litúrgico. Íbamos a comer a bodegones donde compartíamos, hasta la madrugada, largas charlas regadas de Negroni.

Se había exiliado en Madrid donde trabajó como publicista, pero regresó pronto -en 1973cuando la democracia y el peronismo volvían. A partir de ese momento, sus cuadros se vuelven descarnadamente figurativos y se transformarían en un grito desaforado.

Desde lo simple, Gorriarena enseñaba lo profundo del arte sin atajos ni desvíos. Era un ser del que uno podía aprender desde la enormidad que solo tienen los grandes maestros.

En los años de la dictadura su obra será un faro de la resistencia. Va a denunciar la represión en El regreso de los dinosaurios y Sobre una blanca pared. Y con Hechos y su serie Jardines comprometidos dará testimonio de la lucha de las Madres de Plaza de Mayo. El Gorri era enorme.

“Un pintor debe trabajar de espaldas al éxito”, me dijo cuando vio algunos de mis trabajos.

“Cuando un pintor, a través de su poética, comienza a descubrirse va a transitar el peligro y a construir su propia cárcel”. “Gorri”, óleo de Horacio Cacciabue.

Gorriarena no creía en la función social del arte y despreciaba el poder y el “pietismo” de los


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que cuelgan en sus casas ricas obras con pibes pobres para calmar sus culpas.

Ayudemos para que sea un mejor año

Era un gran gourmet y buen bebedor. Una noche, mientras tomaba su último trago, sin mirarme, me dijo: “Te tenés que ir, ya no te puedo enseñar nada”. Para mí fue una puñalada. Me echaba de sus clases. “Me dejás en pelotas”, le respondí. Como si no me hubiera escuchado, terminó su vino y me dijo con dureza: “Un artista es artista cuando está en pelotas. Si no te echo, serás un alumno toda la vida”. Me dio la espalda y se fue.

Carlos Gorriarena fue mi maestro en el arte y en la vida. De él aprendí todo lo que sé y todo lo que no sé. El Gorri era enorme. contra la perra de la injuria, las mañanas sin leche, las llagas del corazón, el fuego de tu mano arde A fines del 94 el Gorri abría su taller definitivo en el corazón de San Telmo, en el pasaje San Lorenzo. Con Coco Rasdolsky y los planos de Jorge Sábato habíamos estado en su génesis, pero “el maestro” no nos dejaba ir a las clases. Nos juntábamos a comer un congrio con limón en el Almafuerte de México y Defensa o el bife de chorizo de Las Marías de Bolívar casi Estados Unidos o a cantar la marcha en El General de Belgrano y Defensa. Era un ciudadano de San Telmo. En 2005 dejó las clases en el taller para pasar largas temporadas en su casa de La Paloma donde, frente al mar, terminaría su vida.

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ueridos vecinos-amigos, hace muchos meses que estábamos deseando que finalice el 2020 y esto acaba de suceder.

Pero el Gorri nunca se iría de San Telmo. Su enorme obra quedó en manos de su amada compañera Silvia Vesco, habitando su casa y galería de la calle Chacabuco, donde también se realizó un gran mural con una de sus obras. Su hija Andrea vive en la casa del pasaje San Lorenzo. Y en mi taller habita un pastel de su autoría. La última vez que lo vi fue en la despedida de un amigo. Luego de los rituales fuimos a tomar un Negroni en un bar del bajo. Me miró a los ojos y me dijo: “Pude sentir ante la Pietá de Miguel Ángel, ante esos pies y ante esas manos, que allí se originó el espacio y la forma. Fue como si Dios existiera”. El Gorri era enorme. dentrísimo de vos, desde vos, empeñado en alzar lo que es y no fue, mares, mareas, vida, siempre. Este poema fue escrito por Juan Gelman el jueves 16 de enero de 2007, para ser leído por Cristina Banegas en el entierro de Carlos Gorriarena en el cementerio de la Chacarita. Horacio -Indio- Cacciabue

Es cierto que estamos cansados de sostener una situación donde la incertidumbre y la angustia parece que no terminará nunca. De cualquier manera, esto no obsta para que creamos que porque el calendario cambie de número, dejaremos esta rara enfermedad atrás. No es así. L@s médic@s, l@s enfermer@s, el personal auxiliar de todos los institutos de salud están agotados física y psicológicamente de ver y atender enfermos graves y, a muchos, no poder salvarlos de la muerte. Es una falta de respeto y consideración -hasta diría caprichosa y aniñada- el no cumplir con la ÚNICA responsabilidad que tenemos que es la de cuidarnos usando barbijo, manteniendo la distancia social y lavándonos las manos continuamente para que ellos puedan “descansar” un poco de su tremenda tarea profesional. Daría la impresión de que buena parte de la sociedad está jugando a la ruleta rusa con su vida y la de los otros. Es tiempo de que dejen de actuar como adolescentes -etapa en la que se cree que “a mí no me va a pasar”- y se unan a los que cuidan de su salud y la de los demás teniendo responsabilidad individual y social. Solo así será un MEJOR AÑO PARA TODOS. Isabel Bláser


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onocí a Lucia Ocerin cuando recibí la invitación para asistir a la Muestra “El Oro y el Barro”, de las pinturas de Horacio Cacciabue & Gustavo Silva, que se inauguró el 17 de octubre ppdo. en la Galería ZERO618 de la Av. Caseros 528, CABA. A partir de allí supe que se estaba gestando en nuestro barrio un Corredor de las Artes y que Lucía era el contacto directo en este tema, lo que me impulsó a saber más de eso y de ella. Ocerin, nació en Tigre (Prov. de Bs.As.) donde vivió hasta que -luego de casarse- se mudó a Colegiales y actualmente reside en La Boca, desde hace 8 años. Su hija, cuando decidió hacerlo por una cuestión familiar, le dijo que no se iba a adaptar, pero ella, seguramente convencida de su decisión, le señaló que sí “porque soy barriera, me siento muy vecina”, relata casi con orgullo en la entrevista telefónica a la que accedió sin reparos. Con relación a su actividad profesional, nos cuenta que es “dueña de la productora televisiva “BaraKa Producciones” desde hace 26 años, de los cuales hicimos televisión alrededor de 15. Estuvimos siempre en la rama de la arquitectura sustentable, periodismo y arte, por lo que eso hizo que empezara a recorrer actualmente este camino. Más tarde abrí “Artaca Consultora Creativa”. En cuanto a su trabajo en la Galería ZERO618, detalla que: “Llegué de la mano del

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Un Corredor de las Artes en proceso maestro Horacio Cacciabue. Marcelo Bruzzese (dueño de la Galería), buscaba una curadora y acá estamos, trabajando juntos para construir la identidad de la misma. Hace un año (del 7 al 17 de noviembre de 2019) se inauguró con una muestra del artista plástico Norberto Onofrio (1927-2014) luego de lo cual en el mes de febrero de 2020 estuvo cerrada porque tenía previsto llevar una muestra de arte de 150 obras a la Fiesta de la Vendimia en Mendoza, actividad que realizo hace varios años. A mi regreso y por los motivos de público conocimiento relacionados a la pandemia, todo lo que teníamos previsto, como por ejemplo las Clases de Arte o los Relatos Visuales, se suspendió sin saber cuándo podría reanudarse”. Pero -como todos- luego de un tiempo de precaución por la gravedad del tema, su tarea siguió de acuerdo a las posibilidades y formas que se iban presentando. “Por eso, en octubre pasado difundiendo la actividad a través de Artaca y de ZERO618, inauguramos presencialmente con Horacio Cacciabue y Gustavo Silva amigo y artista de la galería, la Muestra “El Oro y el Barro” donde se otorgaron turnos para visitarla. Fue tan prolija y una experien-

cia tan buena, que realmente me animó. A tal punto que estoy en la Galería todos los días de 15 a 19 horas con las puertas abiertas, recibo a la gente con todos los cuidados permitidos y con una asistencia de tres o cuatro personas juntas que disfrutan de las obras”, refiere Lucía. Teniendo en cuenta que San Telmo se caracteriza, entre otras cosas, por ser un crisol de artistas ¿De qué se trata la idea de hacer un Corredor de las Artes? ® L.O.: Precisamente me pregunto cómo no vamos a tener un Corredor de las Artes aquí donde nos circundan artistas muy talentosos y conocidos como Josefina Robirosa, para darte solo un ejemplo que todos admiramos. Pero volviendo a tu pregunta, el año pasado cuando inauguramos en la galería, fui al Museo Histórico Nacional, conocí a su directora de ese momento -Viviana Melloni de Mallol- y le dije que me gustaría que hiciéramos algo juntos porque me parecía que podíamos movilizar la zona desde el punto de vista del arte, teniendo en cuenta la concurrencia de público a los restaurantes y bares del lugar. Porque, por otro lado, sé que a

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los vecinos no les gusta mucho esa movida y creo que se podría -a partir de allí- sacar lo mejor de esos lugares y poner el foco en otros temas e intereses. En definitiva, comprometerlos a que tengan arte y poder hacer una zona donde -como históricamente había en los barrios- se aglutinen todas las movidas culturales. Esa es un poco la idea. ¿Fue buena la repercusión? ® Siento una enorme predisposición a abrir puertas para aceptar esta idea. De cualquier manera, tengo que recorrer los caminos burocráticos necesarios. En principio, a través de Graciela Fernández que me dio el contacto del Presidente de la Comuna 1, le mandé un e-mail del cual todavía no tuve respuesta. Pero lo entiendo porque en estos momentos todo es más lento, dadas las circunstancias que estamos viviendo. En San Telmo hay muchas galerías de arte y lugares donde la música, la escritura, el teatro y cualquier manifestación cultural tienen cabida ¿Te pusiste en contacto con alguno de ellos?


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® Como te dije, primero tengo que transitar el camino burocrático pero, sin perjuicio de eso, ya estoy hablando con algunos como Lidia Casagrande la dueña de la galería Espacio T de la calle Chacabuco al 1000. Y viendo cómo puedo contactarme con otros, como la Librería El Más Acá Club Cultural de Av. Caseros al 500; Fundación Pasaje Ochoseiscinco en Humberto I° o Vesco-Gorriarena Galería de Arte, también de Chacabuco al 800 y muchos lugares más. ¿Cómo te imaginás el proyecto? ® Me gustaría generar en todo espacio que se pueda, interno y externo y en algunas ocasiones, muestras. Un movimiento de artes plásticas, en principio. Me gustaría en el comienzo -y por eso había hablado con Viviana Mallol- que sea respaldado por el Museo Histórico Nacional y gestionado desde ZERO618, porque creo que tiene que haber una gestión y me siento capacitada para hacerla. Todavía no sé cómo plasmarlo porque depende de los lugares, si se puede realizar una vez al mes o cada dos meses, también tendría que haber una pequeña comisión integrada con gente del entorno para que pueda dar su opinión de qué y cómo hacer. Iré recorriendo las etapas para llegar al armado de todo esto. Sé que es una época complicada y que todo se hace más lento, pero no quiere decir que nos tengamos que quedar quietos. ¿Qué actividades proyectás en la Galería ZERO618? ® La Galería, en este momento, es mi

Vista de la Galería ZERO618

ocupación. Aunque no totalmente porque siguen existiendo BaraKa y Artaca, pero los estamos juntando para que puedan enriquecerse los tres. El arte tiene un lenguaje muy amplio y me interesa ir dándole la identidad de un muy buen nivel. En cuanto a la Galería en si, estamos en un momento de realizar un pequeño cambio ya que luego de la Muestra de Cacciabue & Silva, habíamos propuesto realizar una con Juan Cavallero y Paula Benitez. Pero, por razones de fuerza mayor, Juan no puede llegar a la fecha propuesta, entonces en estos días iré a ver la obra de Héctor Meana quien quizás pueda cubrir este imprevisto. Por otro lado, estoy hablando con Pedro Roth que iría junto a Agustina Mazzocco, una joven artista, del 20 al 30 de diciembre próximo. ¿No te interesaría contactarte con los artistas plásticos del barrio, para que ingresen a la galería con sus obras? ® ¿Por qué no? Nosotros teníamos reserva del espacio por artistas que quedaron sin poder exponer, por el tema de la pandemia. Por eso en enero voy a tener una Muestra que es una Celebración al Holocausto; dicho de esta manera como para que no sea un golpe bajo ya que, solo con el nombre Holocausto uno sabe de qué se trata.

Luego estamos viendo, porque recién comenzamos nuevamente la movida. Claro que me interesa acercarme a los artistas que están en la zona. Ahora que el Museo Histórico Nacional volvió a abrir, voy a pedir una reunión con Gabriel Di Meglio, el nuevo director para conversar sobre el proyecto. Seguimos conversando a través del teléfono y me comenta que otra de sus actividades es ser la representante de su amigohermano de la adolescencia, Ciro Fogliatta, músico de notable trayectoria, integrante de Los Gatos la banda fundadora del rock nacional, quien vivió 25 años en Madrid y con el que se reencontró hace once años. “Esto demuestra una vez más que la cultura se entrelaza, no solo desde el placer que es lo artístico sino desde la emoción de hacer con el alma algo que te gusta”, dice Lucía. Aprovecho la charla fluida para insistirle en que San Telmo es un “criadero” de artistas y que sería muy interesante que tuvieran, primordialmente, la oportunidad de mostrarse en ese Corredor de las Artes, de una u otra manera. Y ella, responde: “Me parece bárbaro y muy enriquecedor, porque cuando uno se suma con la gente siempre es para más. Por eso, simplemente, la idea es que sigamos abriendo puertas y que podamos juntarnos para generar cosas que nos sirvan a todos”. Isabel Bláser

Feria de Antigüedades Plaza Dorrego Panadería Cosas Ricas Perú 1081/85 Restaurant Manolo Bolívar 1299 Librería Fedro Carlos Calvo 578 Ferretería San Juan Av. San Juan 574 Inmobiliaria Giesso Cochabamba 524 Di Mitrio Carlos Calvo 691 Mercado de San Telmo Puesto 54 y otros La Simbólica Carlos Calvo 708 Bar La Poesía Chile 502 Bar El Federal Carlos Calvo 599 Bar Hipopótamo Brasil y Defensa Pamela Biazzi Piedras 1055 Panadería y Confitería Europa Carlos Calvo 678 Club San Telmo Cochabamba 657 Peluquería Lito Cochabamba y Chacabuco Panadería Perú Perú 1217 Bicicletería Mila Av. Caseros 402 Defensoría del Pueblo Defensa esq. Cochabamba Emaus Cochabamba 466 Confitería Ronzino Perú 640 Caburé México 620 Granja Mharley Estados Unidos 654 Farmacia Indiana Chacabuco 1301 Panadería La Bohemia Brasil 419 Pulpería Quilapán Defensa 1344 Estación de servicio Chacabuco esq. Chile MAMBA San Juan 300 Museo Histórico Nacional Defensa 1600 Instituto Integral del Sud Defensa 1318 Escuela Nro. 4 Valentín Gómez Independencia 758 Escuela Guillermo Rawson Humberto Primo 343 Kioscos de Diarios: Carlos Calvo y Perú Piedras y Carlos Calvo Piedras y Chile Perú y México Defensa y Brasil Independencia y Piedras Carlos Calvo y Defensa Garay y Bolívar Independencia y Chacabuco Carlos Calvo y Chacabuco Brasil y Perú San Juan y Tacuarí San Juan y Bolívar San Juan y Piedras Caseros al 400


8 -ENERO 2021

EL SOL DE SAN TELMO

Convivencia

A

las autoridades del Gobierno de la Ciudad Buenos Aires y vecin@s de San Telmo:

2020 fue el año en que aprendimos que la vida social -como la conocimos hasta ahoraya no va a ser la misma. El distanciamiento es la forma más efectiva para prevenir contagios (de este y otros virus, conocidos o nuevos); de acá en más, la distancia será una variable que va a intervenir en las formas en que hacemos uso de los espacios urbanos. Y el uso de esos espacios al aire libre debe ser objeto de precisiones, normas, protocolos y acuerdos. En el contexto de la pandemia y de una crisis económica de dimensiones aún desconocidas, los espacios públicos se han convertido en “mercados” de oferta de objetos, servicios gastronómicos, recitales, performances y diversas actividades culturales; todo ello sin duda le da identidad a nuestro barrio. Pero lejos de desarrollarse según protocolos de pandemia e incluso de normas básicas de convivencia, el espacio se habita de modo descontrolado. Sin control, literalmente. Cada fin de semana este escenario se agrava de manera exponencial. Nuestras calles se han convertido en lugares donde concurren diferentes intereses, muchas veces contrapuestos. Existe, por un

lado, la necesidad -legítima- de obtener ingresos a través de actividades y, por otro, el derecho de l@s vecin@s de vivir en un entorno que permita el trabajo, el descanso y la salud ambiental. Si estos conflictos de intereses no son administ rados por las autoridades correspondientes, lo que termina sucediendo es la imposición de uno sobre el otro, vulnerando derechos y contribuyendo a la instalación de un clima de inseguridad y desgobierno del espacio público. L@s vecin@s de San Telmo apelamos a la autoridad competente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para que haga efectivo -en todo momento- el equilibrio entre el comercio (especialmente el referido a bares y restaurantes del barrio, que terminan saturando el espacio público) y las personas que habitamos o transitan nuestras calles; poniendo más énfasis en reducir los abusos, sobre todo en tiempos de pandemia. Esta responsabilidad, es indelegable. De no tener respuestas inmediatas por parte de las autoridades, la comunidad de vecin@s buscará los caminos que crea convenientes para alcanzar una convivencia equilibrada dentro del barrio. Texto y fotos: Ana Casavelos

Estados Unidos al 400, a las 2 de la mañana. Aglomeración de gente comprando cerveza en la calle.

Bolívar al 900, una multitud que no cumple con las medidas sanitarias mínimas exigidas por las autoridades de la ciudad.

Instalación de amplificadores sin autorización.


EL SOL DE SAN TELMO

T

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Más árboles cuidados, menos cemento

erminando el año 2020 tan singular en muchos aspectos, pensamos en lo que aprendimos, lo que hicimos y lo que vivimos.

En nuestro grupo ciudadano aprendimos a seguir con nuestras tareas de concientización en estas condiciones de virtualidad, a establecer nuevos lazos más allá de la cercanía física y a intensificar nuestro trabajo en red.

y brindis en el que no pudimos acompañar con el cuerpo tantos dolores, tantas luchas, pero que se llenó de palabras alentadoras, de amor demostrado en cada pantalla, quiero agradecer a todas las personas que nos apoyaron, que difundieron nuestra lucha, que dieron conferencias en nuestro ciclo de charlas, a quienes asistieron a ellas, enviaron mails, mensajes por las redes y permitieron -con cada granito de arena- que nuestra red se ampliara.

Humberto Primo y Balcarce

Permanecimos unidxs, seguimos intentando proteger a nuestros árboles, esos compañeros cotidianos que -en el aislamiento- cobraron nueva dimensión. Como el árbol de mi vereda que por fin ha alcanzado mi ventana porque se salvó de la poda, al igual que los demás árboles de la ciudad. Para ellos fue un buen año y se nota en el follaje que se despliega libre por las calles y plazas. Pero ¿Cuántos árboles añosos han sido talados y extraídos este año? Árboles centenarios en muchos casos, que estaban allí desde antes de nuestro nacimiento, han caído bajo la motosierra; sus hojas ya no renacerán cada primavera ni los pájaros tendrán donde cobijarse, por eso el canto cristalino y alegre del zorzal se ha retirado de algunas ventanas. Troncos con muchos anillos, tendidos en las calles, como muestra dolorosa de con qué poco cuidado y respeto se trata a nuestro arbolado en esta ciudad.

física y psíquica. Y así también se expandió la lucha por las tierras públicas, por la ribera y por el río, por un ambiente sano y natural. Estas multitudes haciéndose escuchar, traen consigo un aire fresco de esperanza. Muchas personas comprendieron cómo la problemática socioambiental de cada región golpea nuestras conciencias y nos abre los ojos a la realidad de un territorio devastado y una naturaleza destruida. De algún modo espero que hayamos aprendido Esta época de pandemia trajo consigo una que la vida no es reemplazable. mayor conciencia en la población, de la importancia de los espacios verdes para la salud En el año que terminó, en el que tuvimos

Sin agua no hay vida

H

ace escasos días se realizó en el barrio un nutrido grupo de actividades con el fin de “establecer” un nexo de unión entre las dos partes del mismo, separadas por la autopista. O sea, entre Plaza Dorrego y el Parque Lezama. Fuera de la opinión que cada quien pueda tener sobre la intervención en cuestión, quiero destacar el estado de las plantas colocadas en el cantero de Cochabamba y Defensa porque parece que a nadie le importan. Basta verlas para saber que se acerca su triste final. Las plantas no tienen la culpa de los desencuentros entre los diferentes sectores de la sociedad, ellas solo necesitan un poco de agua. Si las autoridades se ocupan de colocarlas pero no de mantenerlas vivas ¿Seremos capaces los vecinos de demostrarles que nosotros sí? Empiezo yo...

Fotos: Graciela Ferández

Graciela Fernández

que adaptarnos a una nueva manera de vivir nuestra vida cotidiana, en el que extrañamos tantas cosas que hacíamos libremente sin preocupaciones, en ese año tan vacío de abrazos

Una red que no oprime sino que sostiene y de la que también forma parte todo el equipo de El Sol de San Telmo, que continúa con su trabajo comprometido con el bien común, el patrimonio y una vida más digna en el pedacito de mundo al que llamamos barrio. María Angélica Di Giacomo

BASTA DE MUTILAR NUESTROS ÁRBOLES WWW.FACEBOOK.COM/GROUPS/389226501126926 WWW.INSTAGRAM.COM/BASTADEMUTILAR/ @BASTADEMUTILAR WWW.YOUTUBE.COM/CHANNEL/UC7X84_ZKX4W6BVGNZLM6ARA ARBOLADOURBANOCABA@GMAIL.COM


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EL SOL DE SAN TELMO

¿Alguien sabe por qué?

B

asta de Mutilar Nuestros Árboles nos alertó que el GCBA ordenó extraer 23 árboles, algunos en espacios públicos y otros de alineación.

Es muy peligroso creer que la ciudad tiene dueño... Isabel Bláser

Fotos: Graciela Fernández

Dos de ellos se talaron en nuestro Parque Lezama. Si hubo necesidad de hacerlo -por seguridad o algo lógico- ya que los árboles del lugar son añosos y hace mucho que no tienen el cuidado especial que requieren, es fundamental que se informe a la comunidad del por qué dejando adherido al árbol los motivos, avalados por un profesional en la materia. Esto evitaría todo tipo de conjeturas e indignación frente a tamaña decisión e indiferencia para con los vecinos.

Parque Lezama

Estados Unidos 454, San Telmo -CABA6062 6286 Take away y delivery


EL SOL DE SAN TELMO

l año pasado ha expuesto, a todo nivel y escala, que muchas cosas no estaban funcionando bien y exigen que las cambiemos.

¿Qué cambios nos atrevemos pensar para nuestro barrio? Creo que habría que sincronizar las visiones de contexto cercano y mundial. Dejar de considerar la inmediatez, acciones que están concebidas para fotos de instagram pero que serán irrelevantes en el tiempo. Pensamiento Durlock lo llamaría, que es muy propio de nuestra época. Cuando se proyectaron las estaciones Constitución o Retiro-Mitre se pensaron en términos de siglo, por eso vemos que hoy día acompañan el flujo actual de pasajeros sin problemas.

Todas las ciudades son lugares artificiales -separados de la naturaleza- que hemos creado. Y esas decisiones ahora empiezan a mostrarnos que estamos equivocados; ya que, al generar gandes ciudades cementadas hemos producido enormes problemas ambientales. El arbolado urbano cumple una función importantísima como es la de mitigar parte de esos problemas. Foto: Efrain Cruz

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ENERO 2021 - 11

¡Nuestro barrio es único! Junto con Monserrat es el más antiguo de la ciudad y en el que emergió la idea de país, descartando ser colonia. Esto por si solo conlleva una enorme responsabilidad para actuar en él. Se deben implementar medidas pensadas desde la mirada de nuestro Casco Histórico y en el marco mundial de crisis ambiental. ¡Sí estamos en una crisis! En ese sentido bienvenida la pandemia, porque es un “baño” de realidad que nos impone “reverdecer” las ciudades y hacerlo de una manera SERIA, porque en ello se juega nuestra salud. En París, la Alcaldesa Anne Hidalgo es una de las pioneras en esa línea ya que en las próximas décadas, según los expertos en clima, tendrán olas de calor de 50 grados (!).

Pensar en futuro, actuar en presente

Todo emprendimiento inmobiliario deberia contemplar el arbolado preexistente y respetarlo, porque -aunque estén dentro de un predio privado- los beneficios ambientales que aportan son públicos. En 2019 se vendió el predio de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico -SEDRONAR- (Azopardo y Venezuela) y el actual desarrollo inmobiliario taló tres arboles gigantescos. ¡Cemento + vidrio x Árboles es una mala ecuación!

IMITAR A LA NATURALEZA

Foto: Efrain Cruz

Nuestro futuro, en todo sentido, es desandar el camino que hemos emprendido como civilización separada de la naturaleza.

En este verano podemos vivenciar en una noche de calor la diferencia de temperaEspacios privados mixtos tura que hay entre Puerto Madero y San TelmoExisten varias playas de estacionamiento Monserrat, comprobando el efecto isla de calor abiertas que están cerradas los fines de semay cómo los espacios verdes son vitales para na y más aún en pandemia. Ver un espacio enteramente cementado y vacío genera una aridez mitigar ese efecto. y desolación visual tremenda. Podría articularTechos verdes se desde el Estado, en conjunto con el sector Hace 15 años un equipo argentino recibió el privado, medidas para convertir esos lugares primer premio en la competencia internacional vacantes en nuevos espacios vegetalizados de Holcim (que alienta la respuesta sustentable en uso mixto. Si el piso tuviera una superficie temas tecnológicos, ambientales, culturales y absorbente y con sectores transformables socioeconómicos que afecten la construcción, tanto global como regional) con un proyecto de cubiertas verdes para la ciudad. Es hora de avanzar en esa linea, en el ámbito privado cada obra nueva o refuncionalización debe tener sí o sí un techo vegetalizado. En el ámbito público reconvirtiendo escuelas y dependencias gubernamentales con techos verdes, jardines verticales y huertas urbanas, en la medida que técnicamente sea posible. En 2011 el GCBA instaló un techo verde en la escuela primaria Nº 6 -French y Beruti- en Retiro; esa excelente idea no fue continuada. Necesitamos espacios verdes en cantidad y CALIDAD. ¡San Telmo y Monserrat tienen la triste estadística de tener los PEORES índices de espacios con cobertura vegetal y arbolado de la ciudad!

en patios de juegos o de reunión, se le daria un uso -ahora inexistente- que aportaría una mejor calidad de vida

Bajo Autopista

Asistimos, tristemente, al piloto de una intervención de “urbanismo táctico” como lo describe el GCBA y el BID, que deja muchísimo que desear. La concepción de nuevos espacios verdes -como declaró la Ministra de Espacio Público de CABA, Clara Muzzio-, es la colocación de maceteros. Estos espacios se caracterizan por ser oscuros, sin iluminación natural, con lo cual impiden que se puedan vegetalizar correctamente. Hace tiempo que existen tecnologías para transportar luz natural a lugares confinados, por ejemplo. En este caso seria viable el sistema con fibra óptica, con colectores solares en superficie y colimadores en el otro extremo. Con esto podríamos pensar en tener un Bajo Autopista como corredor verde natural, con huertas urbanas, bicisendas que vayan interconectando los barrios y que se convierta en un lugar disfrutable con naturaleza. La propuesta para reconvertir un espacio público con graffitis y negocios, es muy pobre desde lo conceptual.

Plazas

Arbolado urbano

Foto: Hugo Céspedes

Pedimos la Plaza Benoit (Av. Independencia y Bolívar) ¡Cuán diferente hubiera sido pasar la cuarentena estricta con esa plaza! ¡En seis manzanas a la redonda, en esta parte del Casco Histórico, no hay plazas! Las personas mayores que pueden caminar muy poco y los chicos, son los que más sufren esta falta de espacio.

Además de la obligación que les compete a las Comunas (ya que el mantenimiento del arbolado es descentralizado), tenemos que tomar muy en cuenta nuestra responsabilidad a la hora del cuidado.

Debemos cambiar la mirada sobre estos seres. Aunque parezca mentira, a mucha gente no les gustan porque “ensucian” o “rompen la vereda”, “juntan bichos” o piensan que al tapar las luminarias crean inseguridad.

Debemos entender nuestra existencia como parte de la misma y no como un objeto al que podemos controlar, domesticar y destruir.

Ese, es un camino sin salida cuyo fin está muy próximo. Debemos volver sobre nuestros pasos. Existe una rama de la ciencia que se llama Biomimesis, que estudia a la naturaleza para resolver los problemas que hemos creado y Ella ha resuelto. Observándola, nos damos cuenta que todo está perfectamente equilibrado y en armonia, cada parte forma un todo y ese todo sustenta la VIDA. Deberiamos entenderlo y aplicarlo como regla, por ejemplo en nuestro barrio, entendiendo y valorando el concepto de comunidad que tanto se está dañado. Comprendiendo que la mejor opcion es vivir en equilibrio, por ejemplo no hubiera ocurrido el profundo proceso de deterorio social en nuestro Mercado, priorizando una parte por sobre el resto. No se habla de que nada cambie, sino todo lo contrario: Que cambie con ARMONÍA Y EQUILIBRIO. Por este motivo los cambios drásticos llevan a una pérdida de IDENTIDAD, que es un valor muy preciado y buscado. Y el mismo criterio podría aplicarse a las demoliciones de edificaciones patrimoniales. Hay un falso progreso que solo beneficia a unos pocos y en forma rápida. En cambio, nuestro barrio, con su historia, es todo lo opuesto. Ojalá que los profundos cambios que estamos transitando nos lleven a expandir nuestra visión para lograr un barrio, una ciudad, un país y un mundo mejor. Jorge Carrachino


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EL SOL DE SAN TELMO

Dibujo de Violeta Fijal INSTAGRAM: @VIOLETAFIJAL

Perú esquina Carlos Calvo -CABA-


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