2 minute read

Rechaza Senado de EUA introducir la igualdad de género en la Constitución

El Senado de Estados Unidos rechazó una resolución que hubiera permitido votar para introducir la Enmienda de Igualdad de Derechos, que prohíbe la discriminación por motivos de género, en la Constitución.

La enmienda, que fue propuesta en 1923, ha sido ratificada desde entonces por 38 estados, el número necesario para que sea incorporada a la Carta Magna. Pero algunos territorios la ratificaron después de que expirara el plazo que dictaminó el Congreso, según recoge la cadena CNN.

Advertisement

La resolución rechazada este jueves (27) hubiera invalidado ese plazo para que la enmienda se considerase ratificada, permitiendo su votación por ambas cámaras y la firma del presidente, pasos necesarios para ser adoptada.

El proyecto, pese a tener el apoyo de 2 senadoras republicanas, falló por 51 votos frente a 47 en la Cámara Alta, donde los demócratas tienen una ajustadísima mayoría de

51 votos y la mayoría de iniciativas necesitan al menos 60 para superar la regla del filibusterismo.

El líder de los progresistas en la cámara, Chuck Schumer, lamentó en una rueda de prensa posterior a la votación el resultado, aunque avisó: “Vamos a ganar esta batalla”.

El demócrata opinó que en 2023 las mujeres están siendo “atacadas, políticamente, de muchas maneras”, como con las restricciones al aborto aprobadas en varios estados tras la eliminación el verano pasado del derecho constitucional al procedi - miento por el Tribunal Supremo.

La Casa Blanca pidió al Senado que aprobara la resolución, argumentando que “ya es hora de incluir el principio de la libertad de género de manera definitiva en la Constitución”, según CNN.

La mayoría de republicanos argumentan, sin embargo, que la igualdad entre hombres y mujeres ya está protegida por la decimocuarta enmienda, que establece que las leyes protegen de la misma manera a todos los ciudadanos estadounidenses.

El texto pide a los talibanes que “rápidamente den marcha atrás a las políticas y prácticas que restringen a niñas y mujeres el disfrute total de sus derechos humanos y sus libertades fundamentales”, e insta a los estados miembros a “usar toda su influencia para promover la rápida revocación de esas prácticas y políticas”.

Japón y Emiratos Árabes Unidos fueron los impulsores de la resolución, que negociaron en las últimas semanas con el resto de países para encontrar un documento de compromiso. Las potencias con poder de veto en el Consejo de Seguridad mantienen importantes diferencias sobre cómo gestionar la situación en Afganistán: EUA, Francia y el Reino Unido abogan por una posición más firme en cuanto a las exigencias de respeto a los derechos humanos, mientras que China y Rusia dan más importancia a mantener abierta una relación con los talibanes dar respuestas a la aguda crisis económica en el país.

Desde que los talibanes se hicieron con el poder, la ONU ha continuado operando en Afganistán para tratar de apoyar a la población y manteniéndose en contacto con el grupo radical, buscando siempre un cierto equilibrio en sus declaraciones para defender sus principios y, a la vez, mantener vías de comunicación con ellos.

La Secretaría General de la organización, sin embargo, ha criticado repetidamente los ataques a los derechos de la mujer y ha calificado de “inaceptable” e “inconcebible” el veto a las trabajadores afganas, que considera imprescindibles para el suministro de ayuda humanitaria y otras operaciones clave.

El pronunciamiento hoy del Consejo de Seguridad llega mientras se prepara una reunión internacional la próxima semana en Doha sobre Afganistán, en la que Naciones Unidas y los representantes de varios países discutirán la situación en el país y cómo tratar con los talibanes.

This article is from: