PIEL REPTILDE
Piel de reptil Edgar Nicolás Ponce Primera Edición © NS Books © 2021 2022 Editado por NS Books Revisado en Quito, Ecuador Fecha de este escrito: 15/06//2022 Libro de poemas, revisado por el autor
Neblina
Cuida mi vida con cariño, te la dejo en tus recuerdos.
Ed. Nicolás
Taciturnidades
Hay situaciones que llegan a chocarte, te mueven por completo todo el armazón del ser, te dejan quieto y cabizbajo porque había cierta certeza de que no pasarían; como una mirada tímida, común y corriente, por ejemplo, que termina embistiendo el cuerpo de forma interna para generar combustión. Llegó como una bala, impactando frío en la zona media del cuerpo, instaurándose sin dolor y abriéndose como lo hacen las flores más soberbias del mundo. Desde entonces, ese lugar es el hogar de mis momentos felices, de aquellas tempestades que me hicieron regresar al caos.
Sin embargo, hay un silencio tenebroso que intenta empujarme fuera de ella, me lanza violentamente hacia la incertidumbre. ¿Cuánta confianza puede dar un silencio? Me lo he preguntado cada vez que la miro. He entrado en trance desde entonces, no puedo dejar de atacarla con miradas grotescas que anhelan llegar hasta su mejilla para acariciar su sonrisa. Esa maldita sonrisa, aquel demonio que sostiene el equilibrio de mi locura y tranquilidad, mi éxtasis y saciedad, mi todo y nada.
Nos hemos robado las promesas del mañana para sacarles brillo el día de hoy, las tiraremos hacia la incertidumbre y seguiremos el camino de los residuos, con el viento de nuestro lado. Seguramente no comportamos de un amor nunca, pero sí de una locura única que nos hace correr tras de todo lo Elladesconocido.poseepupilas demoníacas, te hipnotizan, lanzan hechizos para permanecer inolvidables en el tiempo, aterrizan en tu interior y empiezan a adherirse inconscientemente a todo lo que amas; así es como se pierde un mundo por el caos bello de una estrella.
Me ha empujado fuera de mi normalidad para enseñarme nuevos atajos hacia el infierno, y hemos saltado miles de veces encima del fuego. Ambos nos quemamos, ambos queremos arder: morir ardiendo, vivir riendo.
Al final, siempre nos reímos consumiéndonos el uno al otro, disfrutándonos. ¿Cómo puedo escapar? ¿Cómo no caerme en esos abismos? ¿Cómo puedo dejar estas ganas de amar que ni amándote se van?
Las temperaturas bajas son para que nos acerquemos más, me resulta una excusa perfecta para seguir su sombra, sin incomodarla, pero siguiendo su danza.
Las tragedias escalan las paredes y las manchan con dolor, encerrado entre esos muros quedo anestesiado de tanta contaminación de sentimientos fuertes, con pasiones reprimidas hasta el día de la muerte. El corazón se termina desgastando, ¿la causa? Seguramente las personas que tienen pecados más grandes que los nuestros, lugar natural de las tragedias: donde el amor y el terror se conectan, es un infierno por naturaleza. De hecho, en el infierno no existen pecados ni malas conductas ni límites, tan solo hay una realidad dolorosa, bastante similar a la Piensonuestra.que darle el corazón a un desconocido es como darle una bala extra a tu asesino, confiando que no disparará, que no te dolerá, pero, entonces, la confianza se disuelve y la oscuridad empieza a invadir el cuerpo. ¿Dulce justicia? ¿Dulce tragedia? No, a esto le apodan “el mejor sentimiento del mundo”, y no me Ensorprende.fin,notodo en el mundo es sufrimiento. Lo mejor de todo es encontrar a alguien que también tiene el corazón irritado, podría ser debido a exceso de sentimientos ―que usualmente pasa―.
Corazones irritados
Aún así, mi corazón, en su necedad y su terrible irritabilidad, anhela conocer alguien que cambie toda esta situación. La inquietud que guardo, sin embargo, es que mi paciencia es infinita y podría esperar hasta después de mi muerte. Confío en el vacío. Quiero dejar que mi destino haga su mejor jugada en este tablero de ajedrez. ¿Nuestra estrategia? Fácil, revivir, otra vez, gracias al juego de una reina solitaria.
También odio las mentiras, ¿quién no? Las mentiras tienen su propia realidad y un mundo propio, no sé si sea bello u horrible, solo sé que existe. Sin embargo, las falsas palabras son nuestros mejores héroes, nos dejan descansar un poco más antes del golpe; otras veces, terminan matando sentimientos en el aire que no lastimaban a nadie. Al final de todo, toda letra mal dicha se transforma en una flecha, afilada con tanto cuidado que termina llegando el corazón, y allí se queda: contaminando los otros deseos y sentimientos. Termina por irritar el corazón, atrofia la mente, tergiversa el pasado.
Sé que no todo el amor debe terminar en esto, pero llega un inevitable momento, casi siempre, en el que hay que lastimar o dejar ser lastimado. ¿Qué se elige si al final se termina perdiendo todo?
He preferido guardar distancia para verte mejor, tengo muchas intenciones de acercarme al fuego, calentarme y flagelarme; sé que en tu infierno no existen pecados, así que estaré seguro allá. Es extraño que no te conozca mucho, pero sienta conocerte de toda la vida, pareciera que estuviste siempre aquí.
Sempiterno
Con oscuras baladas, tibias tempestades, inconsciencias revoltosas te sentí llegar. Me había equivocado de sentimiento muchas veces, supongo que es lo que sucede cuando esperas algo toda tu vida y llega de repente.
Cuando cuidaste de mí, pensé que no habría nada de malo en descubrir el misterio de esos ojos, lo cruel de aquella sonrisa, lo desgarrador de tu realidad. Fue un golpe de ilusión que sigue en el aire porque ahí nos gusta que esté, no tan cerca ni tan lejos, pero siempre presente: eterno y sempiterno.
Creo que tenemos los mismos rasguños, producto de haber luchado en las mismas batallas, claro, contra enemigos diferentes, pero, en fin: similares situaciones. No podemos curarnos las heridas, pero nos acompañamos hasta que estás se disuelvan con
el tiempo: se van volviendo fantasmas que se marchan a recorrer el mundo lejos de nosotros. Estuvimos para amarnos en otra vida, quizá en esta, podamos estar para conocer mejor porque la vida es una bala divina que hay que esquivarla diariamente, y muchas veces se nos olvida la felicidad.
¿Desde cuándo estamos perdidos en la mirada del otro? Pues yo creo que nuestros cuerpos se irán, pero nuestros sentimientos serán sempiternos.
La vida me empezó a gustar desde que estás, en cada lugar que no estás te pienso; es verdad que he tenido una vida antes de conocerte, pero no sé cómo era. Pareciera que todo este cuento empezó desde que te escuché hablar por primera vez. O esa vez que entre risas nos acercamos tanto, no supimos quiénes éramos, solo conectamos con la locura de nuestras mentes un momento e hicimos magia.
¿El destino sabrá que quiero tu presencia siempre en mi vida? ¿Cómo puedo decirle esto? Mis deseos sobrepasan la realidad y mis sueños me acercan más a ti. Seguramente hay otros mundos allá fuera, miles de terrenos codiciados por los seres más viles, pero no tengo ánimo de conocerlos porque lejos de ti solo hay tristes caminos que conducen a la normalidad.
Poema 12: Neblina A quien corresponda. Ed. Nicolás
