Hablar de igualdad, como tal es un derecho humano, que su antecedente es la Revolución Francesa. Ahora la igualdad es mantenernos al mismo nivel de derechos, circunstancias y facultades para ejercer derechos ante la ley
y ante los tribunales impartidores de justicia, manteniendo el equilibrio entre las demás personas, sin discriminar por ninguna circunstancia, ni embestidura,
ni género, ni estatus social o económico.