VÍNCULO n°29

Page 1

MAYO 2018

N° 29

“Sabiduría” a los venezolanos

94 aniversario del Diario Católico

El Diario Católico de Venezuela, medio impreso y digital conocido como el “decano de la prensa tachirense”, cumplió el 14 de mayo su aniversario noventa y cuatro de su AÑO 2017 - ENERO fundación, renovando su compromiso evangelizador y con la libertad de prensa en el país.

Creada nueva Diócesis de Tigre

Amigos ¡Hasta los confines de la tierra! Con la fuerza del Espíritu Santo Y Dios ¿Qué?

El Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, monseñor Mario Moronta, celebró una misa de acción de gracias en las instalaciones del rotativo, compartiendo la alegría de la efeméride con los trabajadores y amigos del Diario Católico.

Eucaristía por las embarazadas Fiesta de La Santa Cruz en Rubio Primera convivencia vocacional 2018 Fiesta de San Juan Nepomuceno


Venezuela: El Papa desea “sabiduría” al pueblo y a los gobernantes

En el Regina Coeli que celebró el 20 de mayo de 2018, el día de las elecciones presidenciales en Venezuela, el Papa Francisco deseó “sabiduría” al pueblo y a los gobernantes. Desde la plaza de San Pedro, después de la oración mariana, el Papa dirigió “un pensamiento particular a la amada Venezuela”: “Pido que el Espíritu Santo de a todo el pueblo

venezolano, -a todos, gobernantes, pueblo-, sabiduría para tomar el camino de la paz y la unidad.” “También rezo por los detenidos que murieron ayer”, agregó. Un motín dejó 11 muertos y 30 heridos en una prisión en el norte del país. El actual presidente venezolano, Nicolás Maduro, podría ser reelegido, a pesar de la preocupante situación económica. La oposición se retiró de la votación. (zenit)


El Papa erige la nueva diócesis de El Tigre

El Santo Padre ha erigido la nueva diócesis de El Tigre (Venezuela), con territorio desmembrado de la diócesis de Barcelona y haciéndola sufragánea de la archidiócesis metropolitana de Cumaná. En este contexto, el Papa ha nombrado primer obispo de la diócesis de El Tigre (Venezuela) a Mons. José Manuel Romero Barrios hasta ahora obispo titular de Materiana y auxiliar de Barcelona. Así lo ha comunicado la Oficina de Prensa de la Santa Sede, esta mañana, 31 de mayo de 2018. Mons. José Manuel Romero Barrios Mons. José Manuel Romero Barrios nació en Pariaguán, hasta ahora diócesis de Barcelona, desde hoy diócesis de El Tigre, el 9 de abril de 1955. Realizó sus estudios eclesiásticos de Filosofía en el Seminario Mayor Interdiocesano de Caracas, y de Teología en la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, obteniendo una Licenciatura en Teología Dogmática. Recibió la ordenación sacerdotal el 1 de diciembre de 1979 para la diócesis de Barcelona. Como sacerdote ha ocupado los siguientes cargos: vicepárroco de “San Juan Bautista” en Aragua de Barcelona, Vicerrector y Prefecto de

disciplina del Seminario Menor de Barcelona, Rector del Seminario Menor, párroco de “Nuestra Señora del Carmen” en Barcelona, párroco de la catedral de Barcelona, director adjunto de la Universidad / Seminario “Santa Rosa de Lima” en Caracas, Rector del Teologaado del Seminario interdiocesano de Caracas, Vicerrector de la Universidad “Santa Rosa de Lima” en Caracas, vicario episcopal para la pastoral, párroco de “El Espíritu Santo” en Barcelona y vicario general de la diócesis. El 2 de febrero de 2012 fue nombrado obispo titular de Materiana y auxiliar de Barcelona. Recibió la Consagración Episcopal el 14 de abril de 2012. Neo-erecta diócesis de El Tigre La nueva diócesis de El Tigre corresponde a la zona sur del territorio civil del Estado Anzoátegui, específicamente a los municipios civiles de Simón Rodríguez (El Tigre), Guanipa (El Tigrito), Independencia (Soledad), Miranda (Pariaguán), y Monagas (Mapire), la parroquia civil Cachipo, del municipio Aragua de Barcelona y la parroquia civil de San Tomé, del municipio de Pedro María Freites (Hugo Chávez Frías), hasta ahora pertenecientes a la diócesis de Barcelona. (Zenit)


¡AMIGOS! Llama la atención que Jesús, además de invitar a sus discípulos a permanecer unidos a él y dar un fruto abundante, les da la clave para poder hacerlo: el amor. Amar como él ama. Desde este horizonte, en el discurso después de la Última Cena, Jesús da un paso interesante, que viene a ratificar su enseñanza previa en el lavatorio de los pies. Él se hace servidor de todos y pide que ellos, sus discípulos, también sean capaces de hacerlo viviendo el amor fraterno. Es la mejor manera de identificarse como sus seguidores. Quien sigue a Jesús debe ser capaz de imitarlo y lavarles los pies a los demás. Es decir, hacer lo mismo que Jesús hiciera. En el fondo, ese gesto era un signo profético de lo que haría horas más tarde con su entrega generosa y radical en la Cruz. Entonces, en su enseñanza dirigida a quienes estaban con él de la cual todos los cristianos somos herederos, Jesús da un paso importante: No considera a los discípulos como siervos. Los eleva a la categoría de “amigos”. Los asocia a su misión y les entregará la tarea de actuar como amigos, dando la vida por los demás, al igual que Jesús lo hizo. Hay un elemento muy interesante: es Jesús quien elige a “sus amigos”. No son ellos los que lo han elegido, es Jesús quien los ha llamado. Esto ratifica que siempre la iniciativa proviene de Dios. Jesús, elige a unos cuantos para que sean sus discípulos y los asocia a Él, para lo cual los convierte en amigos. Por eso, podrán permanecer unidos a él, dar fruto y ser capaces de “amar como Jesús ama”. Esta realidad propuesta en el evangelio de Juan encierra una llamada a actuar en el

nombre de Jesús y a ser como él, santos. Son amigos que participan de su acción redentora y que gozan de los beneficios de ésta: por eso pueden llegar a ser hijos de Dios. Asimismo, los elegidos para ser amigos deben asumir dos características esenciales de toda amistad: la lealtad y la fidelidad. Lealtad, porque no pueden traicionar a quien los ha elegido a ser amigos. Fidelidad a su confianza y a su amor. Para ello, deben actuar en la fe y en la esperanza, con la perseverancia que viene del amor para así dar testimonio del “amigo” que convoca y elige. Jesús es modelo de amistad: ante quien lo negó, prefirió el perdón que la exclusión y lo asoció de tal manera que le pidió fuera el pastor capaz de apacentar sus ovejas y corderos. El mundo de hoy, como nos lo está pidiendo la Palabra de Dios y la enseñanza de la Iglesia, requiere de cristianos capaces de demostrar que actúan como “amigos” de Jesús. El Papa Francisco nos lo ha indicado en su reciente Exhortación “GAUDETE ET EXSULTATE”, sobre la santidad. Para ser santos hemos de transfigurar al Santo por excelencia, Jesús, el señor. Y esto se puede realizar desde la experiencia del encuentro permanente con él, desde la amistad de comunión con él, enriquecida por la Palabra, los sacramentos y la oración, a la par que es manifestada por medio de las obras de misericordia y caridad. Quien es amigo de verdad, permanece unido al Señor y está capacitado para dar fruto abundante. +Mons Mario Moronta, Obispo de San Cristóbal 6 de mayo de 2018.


¡…Hasta los confines de la tierra!

Jesús va cumpliendo la voluntad del padre y las promesas que les hiciera a sus discípulos. La obra de salvación se ha realizado con su muerte y su resurrección. El día de Pascua les da el Espíritu Santo y les promete que vendrá posteriormente para darles el entusiasmo evangelizador que requieren. Con dicho entusiasmo deberán comenzar la misión en el mundo de proclamar el evangelio y hacer nuevos discípulos. El retorna al Padre y vendrá al final de los tiempos. Los discípulos del señor, en especial los Apóstoles, reciben el destino de evangelizar. Para ello, el día de Pentecostés van a ser ungidos; es decir, consagrados para la misión. El día de la ascensión, luego de la intensa preparación de los cuarenta días después de la Resurrección, el Señor los envía a anunciar el evangelio a todos los pueblos para así hacer nuevos discípulos que crezcan y sean capaces de ayudar a sus nuevos hermanos en la fe. Para ello, les da la cualidad de ser sus testigos desde Jerusalén para todo el mundo, con la fuerza del Espíritu que recibirán. La Misión no es para un rato ni para un solo sitio. Hay una expresión que marcará tanto el tiempo como el espacio de su misión evangelizadora: “¡…

hasta los confines de la tierra!”. Marcará el tiempo, al hacerles sentir que deben acudir en todo momento a anunciar el evangelio en todos los rincones del mundo. Cosa que se ha ido cumpliendo hasta nuestros días. Y, a la vez, destaca el lugar: no se pueden reducir a Jerusalén, sino que han de ir al encuentro de todos los pueblos para poder encarnar el mensaje de Jesús en todas partes. No hay límites para la misión: los confines de la tierra constituyen la frontera de dicha acción evangelizadora. El Libro de los Hechos de los Apóstoles es un hermoso ejemplo de lo que significa ir hasta los confines de la tierra. Poco a poco, los apóstoles y los nuevos discípulos van yendo por el mundo que les rodea y van dando a conocer a Jesús e invitando a su seguimiento. Lo hacen siendo testigos alegres y convincentes de lo que anuncian: de allí que fuera creciendo el número de los que querían salvarse; es decir seguir a Jesús. Asimismo, la Iglesia va creciendo poco a poco. Con la conversión de Pablo, se abre un nuevo episodio evangelizador. El ferviente judío es invitado a convertirse en un predicador decidido de la palabra de Dios y de la salvación de Jesús. Su


misión tiene que ver con el mundo pagano: es allí donde es enviado de manera particular. Por eso se le llama el “apóstol de los gentiles o de las naciones”. Acompañado de otros discípulos va mostrando cómo hay que ir hasta los confines de la tierra… sin temores ni vacilaciones, sino con la seguridad que le da ser testigo de Jesús, el Cristo. Todo esto no se acaba con los Apóstoles y primeros discípulos. Los primeros cristianos van entendiendo cómo hay que ir a todas partes para edificar el reino de Dios con el anuncio del Evangelio. Esto implica, de verdad, el romper las fronteras para poder llegar a todas partes. Hay una garantía: la fuerza del Espíritu. Pentecostés no se limitó a un día, sino que permanece en el tiempo para hacer de los discípulos de Jesús, en todo tiempo y lugar, misioneros. Por eso, a lo largo de los siglos, luego de la Ascensión del señor, se ha podido comprobar cómo la Iglesia se ha ido haciendo presente en todas las culturas y naciones del mundo habitado. Hoy mismo, la Iglesia mantiene viva esa misión y busca, con la ayuda del espíritu, acudir a todos los confines de la tierra. No se limita sólo a lo geográfico. Va al encuentro de la humanidad. El Papa Francisco nos lo recuerda con dos ideas: una, es la invitación a mostrar una Iglesia en salida; y la otra, con el requerimiento de ir a todas las periferias humanas: no se reduce a lugares, sino que la Iglesia se debe abrir a todas las culturas, a todos los seres humanos en sus situaciones particulares. Nosotros somos herederos de esa misión. Más aún, forma parte constitutiva de nuestra vocación de bautizados. Por el hecho de ser

hijos de Dios, de ser bautizados y miembros de la Iglesia nos hemos convertido en discípulos misioneros de Cristo… y esto implica que salgamos al encuentro de todos, en cada lugar, en cada situación, para hacerles sentir la fuerza transformadora y renovadora del Evangelio. No podemos quedarnos encerrados en las comodidades de una fe mediocre o llena de pietismo. Nos corresponde manifestarnos como miembros de una Iglesia en salida. Los confines de la tierra para cada uno de nosotros está en la propia familia, en la escuela o universidad, en los lugares de trabajo, en los vecindarios e instituciones en las que participamos y compartimos la vida… sin olvidar que muchos han sido convocados por Dios y la Iglesia para ir a la misión en otros pueblos y naciones. La ascensión del Señor nos permite entender dos cosas importantes: la gran confianza que Jesús ha depositado en sus discípulos, pues los manda a evangelizar “hasta los confines de la tierra”. De igual manera, es el acontecimiento que define nuestra condición de discípulos misioneros, también “hasta los confines de la tierra”. +Mario Moronta R., Obispo de San Cristóbal. 13 de mayo de 2018.


Con la fuerza del Espíritu Santo

Una de las grandes tentaciones que se le presentan al creyente hoy, es la de pensar que sólo con sus fuerzas y capacidades pueden conseguir la perfección personal y la plenitud. De esto habla el Papa Francisco en GAUDETE ET EXSULTATE, su última exhortación apostólica, al denunciar la tendencia de un nuevo pelagianismo presente en estos tiempos. Es cierto que Dios le ha dado al ser humano muchas capacidades para ponerlas a producir en beneficio de todos. También es verdad que con los sacramentos, particularmente el bautismo y la eucaristía, el creyente, adquiere una condición particular que le permite estar en el camino de la salvación. Pero, no basta eso. Se requiere en todo momento la acción de la gracia divina. Esta se manifiesta como un don del Espíritu Santo. Los escritos del Nuevo Testamento y de los padres de la Iglesia insisten en la acción del Espíritu Santo, quien da una especial fuerza al creyente para poder cumplir con su misión en la fidelidad a la respuesta que ha de dar a la

llamada de Dios. San Pablo habla de los frutos del Espíritu Santo que se pueden conseguir con la ayuda del mismo Espíritu Santo. En la Carta a los Gálatas, advierte el Apóstol que no se ha de quedar uno sólo con la fuerza de la carne, pues ésta puede derivar más bien en acciones negativas. Las capacidades de cada uno, lo que se recibe en el Bautismo, serán secundados y fortalecidos por el Espíritu Santo a fin de dar frutos permanentes, poder caminar hacia el encuentro definitivo con la Trinidad y dar testimonio de caridad en medio de los hermanos. Esta fuerza no interrumpe el ejercicio de la libertad del creyente, sino que la orienta hacia la plenitud de vida. Jesús había prometido el envío del Espíritu Santo a sus discípulos para que pudieran tener lo necesario para su fidelidad. El día de la Resurrección, cuando se les apareció, les concedió el Espíritu para ser discípulos decididos de su amor. A la vez, les preparó, durante la cuarentena pascual para lanzarlos a


la apasionante tarea de la evangelización, contando con la gracia del Espíritu Santo. Y llegó Pentecostés. Reunidos estaban los apóstoles y algunos discípulos más, junto con María. En forma de un viento impetuoso y con el símbolo de lenguas de fuego, ellos recibieron una nueva efusión del Espíritu Santo. Entonces comenzó la gran aventura de la evangelización. Sin miedo y con perseverancia, los apóstoles y los discípulos de Jesús fueron llegando hasta los confines de la tierra. Por supuesto que contaban con sus propias capacidades, pero ante todo con los dones del Espíritu Santo, cuya fuerza los fortalecía y les guiaba para mantenerse en unidad y conseguir un fruto abundante, sobre todo cuando muchos se unían a ellos para seguir a Jesús. Es necesario tener muy en consideración lo que hace el Espíritu Santo. Hay muchas cosas sobre las cuales se puede reflexionar. Pero hay tres de ellas que nos pueden ayudar en estos momentos. Una primera es que el Espíritu une a los creyentes. Por eso, hay que invocarlo para que haga crecer la comunión. La unidad de la Iglesia, de los discípulos, es un signo concreto de su acción; con esa unidad el mundo podrá creer en el Padre, como bien lo atestiguó Jesús. Un ejemplo claro de ello lo encontramos en el libro de los Hechos cuando se reporta el “Concilio de Jerusalén”. El Espíritu ilumina a los apóstoles quienes proclaman que Él y ellos han decidido no cargar con fardos pesados los hombros de los creyentes. En segundo lugar, el Espíritu actúa en cada persona y en cada comunidad. De ahí la necesidad de invocarlo y pedirles siempre su asistencia. Es quien ilumina y hace eficaz la oración. El Espíritu es quien impulsa a los

creyentes a reconocer que Dios es Padre. Es el Espíritu Santo, con sus siete dones, quien alienta el apostolado y el testimonio de vida del creyente. Es el Espíritu Santo quien santifica. Y la tercera cosa que debemos tener presente, entre otras más, es un fruto necesario de la fe y opción por Cristo, de lo cual hace mención el libro de los Hechos y la Carta a los Hebreos: la perseverancia. Ésta no consiste en soportar o permanecer en el camino porque no hay otro remedio. La perseverancia encierra dos actitudes irrenunciables: el entusiasmo y la fidelidad. Fidelidad que implica la respuesta continúa a Dios, a la vez, que el creyente sea reconocido como hombre de fe, testigo decidido del resucitado. Asimismo, el entusiasmo es, junto a la total disponibilidad para la misión, la alegría y la decisión a mantenerse firme en el compromiso adquirido desde el Bautismo. Por eso, se entiende lo que se ha ido subrayando en los últimos tiempos, que el Espíritu Santo es el protagonista de la misión. Pentecostés no es simplemente una celebración litúrgica. Es fiesta y memoria. Fiesta que conmemora el inicio de la Iglesia en misión, la presencia permanente y actuante del Espíritu. Y es memoria: de esa misma presencia del Espíritu en cada uno de los creyentes, en medio de la humanidad, para que se pueda seguir disfrutando de los frutos de la Pascua redentora y liberadora de Cristo. +Mario Moronta R., Obispo de San Cristóbal. 20 de mayo de 2018


y Dios ¿qué?

Desde los inicios de la humanidad hasta nuestros días, siempre ha sido apasionante el estudio sobre Dios. Se presentan muchas interrogantes, entre las cuales surge la de su no-existencia. Son muchas las respuestas a la pregunta sobre Dios. También lo son las expresiones religiosas que nos presentan diversas doctrinas acerca de este tema. Cuando se trata de estudiarlas, se apela a lo que denominamos “la Historia de las religiones”. Luego la filosofía y la teología van delineando doctrinas acerca de su ser y existencia. También la sociología habla acerca del fenómeno religioso presente en las diversas culturas. En todas las diversas facetas desde las que se suele enfrentar el tema “Dios”, siempre se corre el peligro de querer manipular el concepto y la doctrina acerca de la divinidad. Sea porque se imponen criterios humanoculturales, sea porque se le quiera dar a dicho concepto y tema apreciaciones demasiado subjetivas.

Los cristianos tenemos todo un acervo doctrinal acerca de la divinidad. Para nosotros, el concepto de Dios no ha sido inventado por los seres humanos, aunque se emplee el lenguaje y cultural de cada época para tratar de explicarlo o difundirlo. Para los discípulos de Jesús, la idea y el concepto de Dios nos han sido revelados por Él mismo, quien se presenta como comunión trinitaria: un Dios en tres Personas. Una de esas Personas se hizo hombre y así nos dio a conocer al Padre y nos concedió la gracia del Espíritu Santo. Aquí nos conseguimos con la principal diferencia frente a las demás expresiones religiosas: la imagen que tenemos de Dios no ha sido inventada por los creyentes, como sí sucede en otras religiones, las cuales han fabricado su idea y hasta la figura (imagen) de Dios. Es lo que denominamos los ídolos. Jesús, el Hijo de Dios Padre, Dios humanado, nos ha dado a conocer la profundidad de la divinidad. Quien lo ve con ojos de fe puede


acceder también al Padre. Más aún, por su acción redentora y salvífica, ha dado un paso inédito en la historia de las religiones: nos ha permitido llegar a ser “hijos de Dios Padre”. Y el Espíritu Santo, la Tercera Persona de la Trinidad Santa, nos concede la luz y la fuerza para reconocer, desde nuestra experiencia humana y de creyentes, que somos eso, hijos de Dios Padre. Es importante tener en cuenta todo esto: somos seguidores de una Persona que nos da a conocer el misterio de Dios y nos introduce en él, para que podamos alcanzar la plenitud. Los mandamientos que nos pide cumplir Dios, se centran en algo importante que deviene en su definición como ser trascendente: el Amor. No deja de presentarse la tentación de querer manipular y convertir al Dios Uno y Trino en una especie de ídolo: cuando no actuamos en su nombre, cuando le exigimos que haga lo que queremos, cuando reducimos la práctica de fe a meros elementos formales… Hay muchos que se dicen creyentes en Dios, pero a su manera… y no a la de Dios. La única manera de tener fe en el Dios Uno y Trino es la que Él nos pide: con la fuerza del amor. Por eso, un cristiano, creyente y testigo de Dios, debe distinguirse por el amor; nunca puede permitir que el odio, o la maldad, o la corrupción, o el pecado, o la mediocridad… se hagan presentes como estilo de vida. Un creyente en el Dios Uno y Trino manifiesta en su vida que está en comunión con Él. Y así mismo, al hacer vida cotidiana su fe, se

convierte en una página viva de la Palabra de Dios… sencillamente, permite que quien lo vea como un creyente, pueda conocer quién es el Dios que refleja con su actuación y su existencia. El mundo de hoy trata de separarse de Dios. O, si no, también busca someter a Dios a sus criterios. No deja de hacerse presente la acción y tentación del maligno, quien siempre ha querido destruir y desplazar a Dios. Por eso, la pregunta: Y Dios ¿qué? Diera la impresión que no es una pregunta para ser respondida sino para someter a los criterios egoístas y secularizantes la idea o el tema de Dios. Pero, para un creyente cristiano, esa pregunta tiene una sola respuesta; la misma de Pedro ante la interrogante de Jesús luego del discurso acerca del pan de vida: “Y ¿a quién iremos si sólo Tú tienes palabras de vida eterna?” Se ha repetido últimamente que la gente prefiere seguir a los testigos. Es el desafío de los creyentes en el mundo de hoy. Y Dios ¿qué?… Sencilla y claramente, es el Dios de la vida, que nos ha introducido en su mundo y nos ha hecho participar de su naturaleza divina, para alcanzar la única y verdadera plenitud que eleva nuestra dignidad humana al rango de ser hijos de Dios.

+Mario Moronta R., Obispo de San Cristóbal. 27 de mayo de 2018


Iglesia San José celebrará Eucaristía por las embarazadas

El domingo 06 de mayo, a las 12 del mediodía en la Iglesia San José ubicada en el centro de la ciudad de San Cristóbal, se celebró la Eucaristía por las mujeres embarazadas y las que no han podido concebir, en el marco del “Día del Niño por Nacer”. La información la dieron a conocer Humberto y Blanca Urbina, matrimonio coordinador de la Pastoral Familiar del Táchira, quienes dijeron que la celebración se da en ocasión del día de La Anunciación y día del Niño por Nacer, festividad de todos los 25 de marzo, pero que este año al coincidir la semana santa con esa fecha la celebración fue pospuesta. Asimismo, indicaron que al término de la misa se realizó el rito de la bendición de vientres, en el cual, los sacerdotes presentes harán imposición de manos a cada una de las mujeres en estado de gravidez y las que no hayan podido concebir, orando por los niños

desde el seno materno para que el amor de Dios sea haga fecundo en las familias. Los esposos Urbina hacen invitación a todas las mujeres embarazadas y las que anhelan tener un hijo a que participen en esta Eucaristía, y, además, exhortan a todos los Párrocos de la Diócesis de San Cristóbal para que, con su equipo de Pastoral Familiar, organicen lo propio en cada parroquia, alcanzando ampliar esta celebración que promueve la defensa de la vida y la promoción de la familia como iglesia domestica donde Dios habite para la felicidad de sus miembros. (Prensa DiócesisSC)


Fiesta patronal de La Santa Cruz en Rubio: “Dios nos ama porque Él es amor”

La comunidad parroquial de La Santa Cruz de Rubio celebró el domingo 6 de mayo su fiesta patronal con la visita del Obispo, Mario del Valle Moronta, quien presidió la Eucaristía exhortando a los fieles a contemplar en la Cruz la manifestación más grande amor. También participaron en la celebración el presbítero Roger Cáceres, párroco de La Santa Cruz, y los sacerdotes Asdrúbal Morales, Johan Pacheco y Ricardo Casanova. La parroquia ofreció la Eucaristía en acción de gracias por los 43 años de vida sacerdotal del Obispo que recientemente los celebró. “La Cruz en un signo de victoria gracias al amor de Dios –dijo monseñor Moronta-, las lecturas de la liturgia de este VI Domingo de Pascua hablan del amor: el que cree en Dios ama y cumple su mandamiento, como Él nos lo demostró desde la Cruz”, reflexionó el

Prelado relacionando la fiesta de la Santa Cruz y la liturgia de este domingo. Manifestó monseñor Moronta que “Dios nos ama porque Él es amor, pero no es sentimentalismo, sino compartir de su abundante misericordia, su santidad y su sabiduría. Por su amor fuimos creados, y por amor nos salvó Cristo en la Cruz gloriosa”. Por ello el Obispo exhortó a encontrar en la Cruz la más grande manifestación de “amor de Dios a la humanidad. La Cruz de Cristo tienen fuerza gracias a la resurrección, la Cruz que es dolor y suplicio se convierte en un árbol que da fruto: la salvación”, dijo. Finalmente, el padre Roger Cáceres agradeció al Obispo su participación en la fiesta patronal y a los fieles por su motivación en la preparación de la misma. (Prensa DiócesisSC)


Seminario Santo Tomás de Aquino realizó primera convivencia vocacional

En las instalaciones del seminario diocesano Santo Tomás de Aquino -en Palmira- se realizó el 4 y 5 de mayo, la primera convivencia vocacional 2018 con jóvenes, adolescentes y niños con inquietud vocacional. Participaron 33 aspirantes al seminario mayor y 130 niños al seminario menor. Informó el presbítero José Lucio León Duque, Rector del Seminario Diocesano Santo Tomás de Aquino, que “la participación numerosa de los aspirantes es fruto de las tres jornadas vocacionales que se han tenido en este año escolar, las dos semanas vocacionales cuyo objetivo era las visitas a las instituciones educativas, así como la pascua vocacional que se realizó en Palmira con todas las congregaciones religiosas de la Diócesis”. El segundo día de la convivencia vocacional los aspirantes recibieron la visita del Obispo diocesano, monseñor Mario Moronta, quien

presidió la Eucaristía y exhortó a los participantes a perseverar sin miedo en la vocación sacerdotal: “la perseverancia es un constante sí al Señor, con una respuesta sincera y efectiva para responder a Dios. No tengan miedo de seguir a Jesús”, dijo. Ésta jornada organizada por el Secretariado Diocesano de Pastoral Vocacional, diseñó un nuevo formato de convivencia, ofreciendo a los aspirantes a ingresar al seminario diocesano la experiencia de las áreas formativas. El Director del Secretariado Vocacional, presbítero Jesús Miguel Romero, anunció que “la segunda convivencia se realizará los días 21 y 22 de junio para los aspirantes al seminario mayor, y para los aspirantes al seminario menor el sábado el 22 de junio”. (Prensa DiócesisSC)


Diario Católico celebra “94 años caminando hacia el futuro”

El Diario Católico de Venezuela, medio impreso y digital conocido como el “decano de la prensa tachirense”, cumplió el 14 de mayo su aniversario noventa y cuatro de su fundación, renovando su compromiso evangelizador y con la libertad de prensa en el país. El Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, monseñor Mario Moronta, celebró una misa de acción de gracias en las instalaciones del rotativo, compartiendo la alegría de la efeméride con los trabajadores y amigos del Diario Católico. “Estamos celebrando los 94 años del Diario Católico, gracias a la visión de futuro del Siervo de Dios Tomás Antonio Sanmiguel. Y éste medio de evangelización, formación e información debe seguir cumpliendo su misión, son 94 años caminando hacia el futuro”, manifestó el Obispo diocesano. También monseñor Moronta se cuestionó sobre el futuro del Diario Católico: “¿qué debemos hacer de cara al futuro?, no debemos quedarnos nostálgicos con el pasado. El Diario Católico debe seguir hacia a

delante, en medio de una nación en crisis, apostando al futuro venciendo las dificultades guiados por el Espíritu Santo, buscando nuevos canales de divulgación de la noticia y del Evangelio”, dijo. El Obispo exhortó a seguir apoyando al Diario Católico material y espiritualmente, promoviendo la buena prensa y fortaleciendo “un periodismo de paz”, como lo pide el Papa Francisco en la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales 2018. Luego de la eucaristía también el presbítero Johan Pacheco, gerente del Diario Católico, agradeció a quienes forman parte de esta casa editorial por su dedicada labor, y destacó que el “Diario Católico a pesar de las adversidades seguirá siendo principalmente, un compromiso con la evangelización y el buen periodismo”. Actualmente el Diario Católico circula semanalmente en su edición impresa, y ofrece actualización diaria de las noticias de la Iglesia, Venezuela y la frontera colombovenezolana a través de su portal web. (Prensa DiócesisSC)


Michelena celebró a San Juan Nepomuceno Los habitantes del municipio Michelena celebraron el miércoles, 16 de mayo, la Eucaristía solemne en honor a su patrono San Juan Nepomuceno. La misa fue presidida por el Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, Monseñor Mario del Valle Moronta Rodríguez, la concelebración de seis sacerdotes y la presencia de fieles de los diversos sectores que conforman esta comunidad parroquial. También estaban presentes en la misa patronal habitantes de los caseríos quienes trajeron los frutos de sus cosechas como ofrenda ante el altar. Durante la homilía el Obispo resaltó que los sacerdotes deben ser fieles al ministerio sacerdotal y ser signos visibles de la misericordia de Dios por medio del sacramento de la confesión. Indicó Monseñor Mario que el patrono de Michelena es un ejemplo sacerdotal a seguir por los presbíteros e invitó a la feligresía a orar por sus sacerdotes, acompañarlos en sus trabajos pastorales y agradeció a las autoridades por el homenaje que cada año en la fiesta patronal les brindan a los presbíteros que cumplen bodas de oro o plata sacerdotales. Imagen de San Juan Nepomuceno recorrió a Michelena Desde el viernes 04 de mayo la imagen del patrono de San Juan Nepomuceno visitó algunos sectores de Michelena, lugares en los que fue recibido por los niños, jóvenes, adultos y ancianos. El martes 15 se llevó a cabo una caravana por las principales calles de Michelena y posteriormente en el atrio del templo una serenata en honor a San Juan Nepomuceno, en la que las instituciones y comunidades de base efectuaron sus presentaciones culturales al patrono parroquial. Durante todos estos días de recorrido, los fieles se sumaron y colaboraron con las procesiones y celebraciones establecidas y en los días venideros, la imagen peregrina de

San Juan Nepomuceno recorrerá otros sectores que faltan por visitar, agregó el sacerdote párroco, presbítero David Aroldo Pabón Corredor. Homenaje a los sacerdotes Cada año como parte de las fiestas patronales de Michelena en honor a San Juan Nepomuceno, la Alcaldía del municipio y el Concejo municipal, ofrecen un homenaje a los sacerdotes de la Diócesis que celebran bodas de plata o bodas de oro sacerdotal. Este año correspondió la condecoración Orden Presbítero José Amando Pérez Arellano en su primera clase al presbítero Luis Gilberto Santander Ramírez, por sus 50 años de vida sacerdotal –quien por motivos de salud no estuvo presente, pero fue recibida por el vicario parroquial de Michelena, presbítero José Vicente Carvajal – y la misma orden, en su segunda clase, fue otorgada a los presbíteros: Felipe Sánchez Sánchez y Gonzalo Ontiveros Vivas por sus 25 años de sacerdocio. Los homenajeados concelebraron durante la misa junto al Obispo Diocesano y como orador de orden durante la sesión solemne estuvo el presbítero José Lucio León Duque, quien es el rector del Seminario Diocesano “Santo Tomás de Aquino”. Estuvo presente también el presbítero Yeison Rivas, quien es nativo de Michelena y fue ordenado el pasado 30 de diciembre del 2017, en esta misma población, y es el sacerdote con menor tiempo de ordenación sacerdotal en la Diócesis de San Cristóbal. (Prensa DiócesisSC)


www.diariocatolico.press


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.