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e acuerdo a distintos estudios recientes, la actual participación femenina en la gran minería nacional se sitúa en torno al 15%. Cifra, sin duda, todavía insuficiente, en la voz de representantes del sector, más aún considerando que otros múltiples análisis demuestran que la presencia de las mujeres en las empresas impulsa su productividad. No obstante, ese porcentaje es más que el doble del que se registraba a comienzos de la década pasada. La mayor contratación femenina en el rubro ha ido aparejada con su creciente digitalización. Stephanie Wilhelm, presidenta de la Red de Ingenieras de Minas (RIM) de Chile, explica que este proceso “permite a las mujeres realizar una mayor cantidad de funciones de manera remota y en ciudades, abriendo campo a personas que requieren más flexibilidad laboral para aportar a negocios con tiempos y estructuras más dinámicas. Esto se nota mayormente en las áreas de diseño, planificación, sustentabilidad y control geomecánico, las cuales, si bien requieren presencia en terreno, por su digitalización contribuyen a disminuir la frecuencia de inspecciones y facilitan la coordinación entre áreas. Sin duda, esta flexibilidad atrae a más mujeres al rubro minero, pero también a todos los profesionales que
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buscan compatibilizar la vida personal con la laboral”. A su juicio, esta nueva forma de hacer minería posibilita, además, que las mujeres encuentren más oportunidades de crecimiento, se especialicen en sus áreas y logren avanzar en sus carreras profesionales. Nuevos roles y más seguros Joanna Pérez, líder del Comité de Innovación de Women In Mining (WIM) Chile, agrega que la digitalización “ha permitido que las mujeres accedan a roles antes dominados por hombres en campos como la ingeniería, geología y operaciones mineras, a través de plataformas digitales y tecnologías remotas. Es un proceso que ha acelerado la automatización de las labores, lo que ha reducido la necesidad de trabajo físico intensivo, que históricamente ha sido una barrera para la incorporación de mujeres en la minería. Esto no sólo ha facilitado su ingreso, sino que también
ha promovido entornos de trabajo más seguros en las faenas”. Destaca, asimismo, que los horarios flexibles y la creación de roles en áreas como la sostenibilidad y la gestión ambiental ha facilitado el acercamiento femenino al rubro. Adriana Bassi, también de WIM Chile, expone que la digitalización ofrece oportunidades de desarrollo profesional para las mujeres en la industria minera “al proporcionar acceso a programas de capacitación en tecnologías digitales y oportunidades de especialización en áreas emergentes como la analítica de datos y la gestión de sistemas automatizados. Esto les permite adquirir nuevas habilidades y avanzar en sus carreras dentro del sector”. Por su parte, Natalia Morales, gerenta del Consejo de Competencias Mineras (alianza CCM-Eleva), acota que “una minería intensiva en tecnología es menos hostil, por lo tanto, se abren oportunida-
Foto: Gentileza Antofagasta Minerals
Minería Sustentable
Impulsadas por la digitalización de sus operaciones, las compañías mineras están incorporando cada vez más mujeres a su dotación.
Participación femenina en la minería:
Por la veta digital
Febrero 2024 / nº 512 • www.mch.cl
La creciente digitalización de la industria minera nacional está atrayendo a más mujeres al rubro. Tres de ellas, representantes de organizaciones del ecosistema minero, exponen los beneficios que esto implica.