Reporte Perspectivas Económicas
20 de diciembre de 2019
¿Crisis en la Actividad Industrial.
Volumen 2, N°295
¿Crisis en la Actividad Industrial?
La actividad industrial se redujo 1.8% en los primeros 10 meses de 2019. En octubre pasado las exportaciones totales de automóviles se contrajeron 6.2% en términos anuales.
La actividad industria mexicana ha tenido malos resultados a lo largo de todo el 2019, situación que ha frenado la evolución de la economía nacional debido a que se ha quedado solo con el sector de los servicios como principal motor de crecimiento el cual también ha comenzado a desacelerarse. Lejos de observar una recuperación para finales de año, es muy probable que la recesión presente en la industria de nuestro país se prolongue hasta la primera mitad del 2020. En el mes de octubre del presente año la actividad industrial registró una caída de 3.0%, la más severa observada desde mayo de 2019 (3.3%). Con esta es la doceava ocasión consecutiva en la que la industria de nuestro país se ubica en territorio negativo, es decir, desde noviembre de 2018 se han presentado ajustes a la baja en el desempeño general de las actividades secundarias. En términos acumulados, la industria mexicana muestra una reducción de 1.8% considerando los primeros meses del año en curso con relación al mismo período de 2018. Esta contracción es la cuarta más significativa desde que se tiene registro considerando las cifras de enero a octubre de cada año. El primer lugar lo ocupa la contracción de 11.6% acontecida en 1995 como resultado de la crisis económica que sufrió nuestro país tras los hechos conocidos como “el error de diciembre”. En el segundo puesto se ubica la caída de 8.6% en 2009 como consecuencia de la crisis hipotecaria originada en Estados Unidos y que fue contagiada hacia nuestro país. Finalmente, en el tercer lugar se presenta el ajuste a la baja de 2.1% como respuesta al endurecimiento de las políticas comerciales que llevó a cabo nuestro vecino del norte tras los atentados ocurridos en Nueva York y Washington. A diferencia de los acontecimientos mencionados, los malos resultados de la industria mexicana durante 2019 no venían precedidos por una crisis económica o por un evento internacional que incidiera en su desempeño. La crisis en la que se encuentra la minería desde 2013, los malos resultados de la construcción en los que solo en uno de los últimos 15 meses ha mostrado una tasa de variación anual positiva, así como la desaceleración de las manufacturas que se intensificó en los últimos meses del presente año formaron la tormenta perfecta para que la industria mexicana se encuentre actualmente en recesión. Lo más grave es que dicha condición podría permanecer vigente durante la primera mitad del año entrante.
La falta de inversión ha sido uno de los factores que más han perjudicado la evolución de la construcción. Durante el pasado mes de septiembre la inversión fija bruta en construcción se redujo 7.3% en términos anuales, mientras que en el acumulado de los primeros 9 meses de 2019 mostró una variación negativa de 3.2%. Aunado a lo anterior, la tendencia de la inversión fija bruta en la construcción exhibe una trayectoria a la baja, por lo que no se vislumbran señales de una recuperación en el corto plazo. En el caso de las manufacturas, solo 6 subsectores de los 21 que las conforman registraron un crecimiento acumulado positivo durante los primeros 10 meses de 2019 e incluso las exportaciones automotrices han perdido fuerza en la última parte del año llegando incluso a reportar variaciones negativas (-6.2% en octubre pasado). Ante el escenario descrito, no se puede dejar pasar más tiempo para corregir el mal desempeño por el que atraviesa la industria de nuestro país. No reaccionar proactivamente tan solo agravará más la recesión de la industria lo cual podría traer consigo afectaciones severas al mercado laboral ya que tanto las manufacturas como la construcción son algunas de las actividades económicas que más contribuyen a la generación de empleo formal en nuestro país. ¿Crisis en la Actividad Industrial.
Actividad industrial Durante el pasado mes de octubre la actividad industrial de nuestro país mostró nuevamente una variación anual negativa. En esta ocasión el descenso alcanzó una magnitud de -3.0% considerando cifras originales. El mal desempeño de la actividad industrial obedece a que la mayoría de sus componentes se ubicó en terreno negativo. Únicamente la generación de energía eléctrica y suministro de agua reportó un comportamiento favorable al exhibir un crecimiento de 4.1%. Por su parte, la caída más severa se presentó en el sector de la construcción al exhibir un retroceso de 9.3%, seguido por la minería con una contracción de 2.1% y de las manufacturas con 1.2%.
Fuente: INEGI.
Es de esperar que la actividad industrial mantenga un desempeño desfavorable en los meses por venir ya que la trayectoria de su tendencia permanece a la baja. En una situación similar se encuentran las tendencias de las manufacturas y la construcción, de manera que en tanto no se presente una corrección en dichos componentes, resultará complicado vislumbrar una recuperación en la actividad industrial. En lo que respecta a los ciclos, se observa un panorama similar ya que tanto el total de la actividad industrial, así como sus dos componentes principales, reflejan un movimiento a la baja que se localiza por debajo del potencial. Ante tal escenario, la industria mexicana cerrará el 2019 con resultados poco alentadores, los cuales podrían permanecer vigentes durante el primer trimestre del 2020.
Fuente: INEGI.
¿Crisis en la Actividad Industrial.
Al revisar más a fondo los resultados de la construcción se observa que el desempeño negativo del sector se dio como resultado de que todos los subsectores que lo conforman exhibieron tasas de crecimiento negativas. La caída menos severa se presentó en el ramo de la ingeniería civil el cual disminuyó 4.7%, sin embargo, esta caída ya venía precedida por un ajuste a la baja más fuerte durante octubre de 2018 (-11.2%). Por su parte, la edificación sufrió una caída significativa de 9.2% debido a que la falta de inversión tanto del sector público como del sector privado han detenido la evolución de dicho rubro. Adicionalmente, los trabajos especializados en construcción también se ubicaron en terreno negativo y aunque su participación no es tan alta en comparación con la de los dos rubros antes mencionados, destaca el hecho de que su ajuste a la baja fue de doble dígito (-15.0%). El panorama para la industria de la construcción luce complicado, la falta de inversión sin duda ha afectado significativamente su evolución y mientras no existan medidas que faciliten la llegada de recursos para la puesta en marcha de proyectos, su desempeña continuará siendo desfavorable en los meses por venir. Lo anterior se puede vislumbrar gracias a las trayectorias exhibidas por los ciclos de las actividades de construcción en donde ninguna se ubica por encima de la tendencia de largo plazo. El único ciclo que presenta un movimiento favorable es el de los trabajos especializados para la construcción, pero ante la caída observada, esto solo se puede traducir en que dicha actividad enfrenta un menor potencial.
Fuente: INEGI.
En lo que respecta a las manufacturas, la desaceleración que habían mostrado durante períodos anteriores se tradujo en una variación anual negativa durante el mes de octubre del año en curso. Los malos resultados de la principal actividad del sector secundario se dieron como resultado de la caída anualizada en 12 de los 21 subsectores que lo conforman, aunado a que solo 4 de los 9 que se ubicaron en terreno positivo lograron una tasa de crecimiento superior al 2%. Precisamente algunos de los sectores que lograron resultados favorables fueron el de los alimentos y el de las bebidas y el tabaco con incrementos anuales de 3.7% y 5.0%, respectivamente. No obstante, el panorama para dichos ramos podría moderarse en los períodos por venir debido a que si bien su ciclo todavía permanece por encima de la tendencia del largo plazo, su trayectoria ha comenzado a perder dinamismo de tal forma que se podrían visualizar tasas de crecimiento positivas, pero de una magnitud inferior en comparación con las observadas recientemente.
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Fuente: INEGI.
La industria textil fue una de las más afectadas durante este período, particularmente si se le compara con los resultados que había obtenido durante el año pasado. En octubre de 2018, solo el subsector de la confección de productos de cuero había presentado una variación negativa, mientras que durante el mismo mes del año en curso el mismo subsector fue el único que registró una variación positiva (1.1%). El ramo de las prendas de vestir fue el que presentó la caída de mayor magnitud (-5.2%), seguido por los insumos textiles (-3.8%) y los productos textiles (-2.0%). Adicionalmente, el panorama no se vislumbra favorecedor para la industria textil debido a que las trayectorias de los ciclos de las actividades que la conforman muestran movimientos a la baja, con excepción de los productos textiles cuya trayectoria va en ascenso. Lo anterior implica que la mayoría de los componentes de la industria textil podrían permanecer en terreno negativo durante los próximos períodos.
Fuente: INEGI.
¿Crisis en la Actividad Industrial.
El subsector de las manufacturas que tuvo el peor desempeño fue el de la impresión con una caída de 13.2% luego de que durante el año pasado había mostrado un incremento de una magnitud similar (11.4%), de manera que con el ajuste a la baja se perdió el avance logrado en octubre de 2018. En contraste, el subsector que exhibió el incremento más significativo fue el de los derivados del petróleo al aumentar 8.9%. Dicho resultado es importante debido a que dicho subsector había permanecido en territorio negativo en 40 de los últimos 44 meses, sin embargo, es necesario que dicho comportamiento se mantenga a lo largo de los meses por venir para comenzar a vislumbrar una recuperación del subsector. Por otro lado, la industria del papel mostró una variación a la baja de 1.9% y la industria de la madera se mantuvo sin cambios (0.0%) luego de que ambos subsectores habían logrado tasas de variación positiva durante el año pasado. Con excepción de los derivados del petróleo, el resto de los subsectores mencionados no vislumbran un mejor desempeño en el corto plazo ya que sus ciclos reflejan un comportamiento a la baja e incluso se ubican por debajo de la tendencia de largo plazo, de tal forma que las cifras negativas podrían presentarse en los próximos meses.
Fuente: INEGI.
La industria metalmecánica fue otra en la que los resultados de los subsectores que la conforman fueron en su mayoría negativos. Solamente las industrias metálicas básicas mostraron una variación anual positiva, pero esta fue apenas marginal (0.8%). Por su parte, el ajuste a la baja más importante ocurrió en el subsector de los productos metálicos con una caída de 6.1%, seguidos por el subsector de los minerales no metálicos el cual se contrajo 3.0%. Adicionalmente, la industria química logró posicionarse nuevamente en terreno positivo, pero se crecimiento fue de apenas 0.1% con lo cual no logró recuperar el terreno perdido durante octubre de 2018. Luce complicada una recuperación de dicha industria en los próximos períodos ya que aun cuando su ciclo se localiza por arriba de la tendencia del largo plazo, su trayectoria muestras señales de estancamiento de tal forma que se podrían presentar tasas de crecimiento positivo, pero su magnitud tenderá a ser poco significativa. Para el caso de los componentes de la industria metalmecánica, únicamente los productos metálicos muestran un movimiento positivo, sin embargo, tanto el ciclo de dicho subsector como el de las industrias metálicas básicas y el de los minerales no metálicos se localizan por debajo del potencial, de manera que es probable que se vuelvan a presentar variaciones negativas en algunos de ellos en los próximos períodos.
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Fuente: INEGI.
La desaceleración continúa vigente en algunas manufacturas de exportación, ejemplo de ello es la fabricación de equipo eléctrico que durante octubre del año en curso presentó una tasa de crecimiento de menor magnitud (1.3%), en comparación con la obtenida durante el mismo mes de 2018. Una situación similar se presentó en la fabricación de equipo de cómputo donde el año pasado los resultados fueron mejores (5.2%) con respecto a los obtenidos en el presente año (2.9%). Por su parte, el escenario menos favorable ocurrió en el subsector de la fabricación de maquinaria y equipo ya que no solo mantuvo su desaceleración, sino que ésta se intensificó de manera que su tasa de variación se ubicó en terreno negativo (-6.1%). Es de esperar que se mantenga un comportamiento similar para dichos sectores en los períodos por venir ya que su ciclo permanece por dejo del potencial. Sin embargo, la fabricación de equipo de cómputo podría presentar variaciones negativas como resultado de que ya su ciclo exhibe una trayectoria negativa.
Fuente: INEGI.
¿Crisis en la Actividad Industrial.
Uno de los resultados que tuvieron un impacto significativo en el desempeño general de las manufacturas de nuestro país fue la importante reducción en la fabricación de equipo de transporte. Después de que dicho rubro reportara un crecimiento de 3.6% durante octubre de 2018, un año después la cifra alcanzada resultó ser de 7.7%. Tal comportamiento se dio debido a la mejor demanda de automóviles tanto en el sector externo, como en el mercado interno. Lo más grave es que tal escenario podría mantenerse durante los meses por venir debido a que el ciclo de la fabricación de equipo de transporte mantiene una trayectoria pronunciada a la baja y se localiza por debajo de la tendencia de largo plazo.
Fuente: INEGI.
Industria automotriz El sector automotriz ha sido la punta de la lanza en la actividad económica de varias entidades de nuestro país jugando en papel principal en materia de exportación. Las ventas automotrices en el extranjero ocupan el primer lugar de las exportaciones manufactureras mexicanas, de manera que de cada dólar que ingresa a territorio nacional como resultado de una exportación, 0.32 centavos tuvieron como origen el sector automotriz. Durante el pasado mes de noviembre los resultados de la industria automotriz fueron poco favorables. En cuanto a la producción en nuestro país, se presentó una caída de 13.0% en términos anuales de tal forma que es el segundo año consecutivo en el que la producción se contrae durante el mes de noviembre. Por su parte, al considerar el desempeño de la producción automotriz durante los primeros 11 meses del 2019 se aprecia una caída de 3.5% como resultado de una menor demanda de vehículos tanto a nivel nacional como internacional.
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Fuente: INEGI.
En materia de ventas de automóviles dentro de territorio nacional, se presentó una situación similar a la observada en la producción. En noviembre de 2019 las ventas exhibieron una caída anualizada de 7.0% de tal forma que acumular 3 años consecutivos con ajustes a la baja durante el onceavo mes del año. En términos acumulados, las ventas disminuyeron 7.6% en los meses comprendidos de enero a noviembre con respecto al mismo período de 2018. Con este también ya suman 3 períodos consecutivos de caídas en el desempeño acumulado de las ventas de automóviles, siendo este último el más severo.
Fuente: INEGI.
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Por otro lado, las exportaciones de vehículos tampoco mostraron resultados favorables. Si bien las caídas no fueron tan profundas como las exhibidas por las ventas dentro de territorio nacional, sí se aprecia una desaceleración importante. Con respecto al desempeño durante el mes de noviembre las exportaciones de vehículos retrocedieron 2.2% luego de que en el mismo mes de 2018 había alcanzado un incremento anualizado de 6.3%. Por su parte, en el acumulado de enero a noviembre del año en curso, las exportaciones de vehículos registraron una contracción de 7.2%, de tal forma que ya acumula dos períodos consecutivos en territorio negativo (una caída de 0.2% en el período de enero a noviembre de 2018).
Fuente: INEGI.
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Dra. María F. Fonseca Paredes Directora del Instituto de la Familia Empresaria para México y LATAM Directora del CIEN Escuela de Negocios Tecnológico de Monterrey Tel.: +52 1(55) 2737 5691 maria.fonseca@itesm.mx
Máster Héctor Manuel Magaña Rodríguez Coordinador de Análisis e Investigación del CIEN Tel.: +52 (55) 5864 5630 Cel: 5517603293 hector.magana@itesm.mx
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