
17 minute read
ESPACIOS PARA LA CULTURA Y LA RECREACIÓN
concerniente a la cultura del municipio de Itagüí. Dentro de las actividades se desarrollan sesiones académicas y alianzas estratégicas con diferentes grupos y entidades del municipio.
Desde el siglo XVII algunas costumbres españolas como las riñas de gallos, teatrinos, lidia de toros, juegos de naipes y celebraciones religiosas, entre otras, fueron importadas a América. Muchas de estas, las acostumbraban los pobladores en su tiempo de esparcimiento así como sancochos, paseos y excursiones familiares al Pico Manzanillo, cerros y veredas aledañas; otras actividades eran los baños públicos en la quebrada la Muñoz, en el río Medellín y sobre todo en la quebrada Doña María; la feria de ganado26 ofrecía además de la oportunidad de comerciar con otros ganaderos del departamento y del país constituyó, un importante punto de encuentro que influyó en las tradiciones y costumbres de la municipalidad (Correa y Rúa, 2014).
Advertisement
Clímaco Agudelo (2001) describe algunas de las actividades que los habitantes del barrio el Tablazo realizaban:
Los habitantes del barrio a pesar de no tener servicios como luz, agua, teléfono y menos caminos, buscaban sus diversiones sanas y sencillas como el juego de la lotería; los sábados y domingos se reunían en determinada casa hasta altas horas de la noche, tam-
26. En 1873 se crea la Feria de ganado de Itagüí la cual estuvo favorecida por la abundancia de trapiches y por la dedicación de muchos vecinos al comercio de ganado.
bién jugaban dominó, tute y 31, muchas veces se reunían en alguna casa para contar cuentos o escuchar canciones de algún aficionado vecino del barrio o un amigo invitado de otra parte. Todo esto era mucho, porque en ese tiempo no había teatros, ni circos, ni deporte, no existía ninguna clase de diversión para distraer a las gentes de los barrios humildes.
La escasa urbanización de Itagüí, permitió que hasta la década de 1960 contara con paisajes generosos, donde los árboles y quebradas limpias, eran agentes y fuentes de diversión. La quebrada Doña María y el río Medellín fueron sitios obligados de miles de bañistas (Hoyos y Molina, 1994:7).
La niñez de ese entonces disfrutaba de charcos de la quebrada la Limoná, donde también pescaban, de los juegos infantiles, de los mangos de entonces, donde elevaban cometas. Jugaban pelotas y degustaban de los naranjos, guayabas y guamas de árboles frutales del sector, hoy acabados por la creciente población en el barrio y la construcción de edificios y urbanizaciones (Palacio, 2012).
Eso que llamábamos ´nuestro hogar´, propiedad privada de la Cervecería Unión –Pilsen, fue la que posibilitó que cuando apenas tenía siete años (1966), diversos árboles frutales, una pequeña quebrada y muchos animales fueran todo mi universo… …Los tarros de leche Klim o de galletas La Rosa eran los recipientes en los que recogíamos una gran variedad de frutas: guayabas, moras y uchuvas eran nuestro mecato. Bañarnos en la quebrada y atrapar peces de coloridos visos eran nuestras distracciones después de la escuela´ (Osorio Duque, entrevista 2016). Los pobladores participan en las fiestas de la parroquia Nuestra Señora del Rosario que se celebra en octubre27 y
27. Mucha era la pólvora que se consumía y mucho entusiasmo de sus habitantes que salían todos estrenando de pies a cabeza.
la Semana Santa las que congregaban a las gentes, quienes iban ´estrenando´ a las procesiones por las calles y a los actos litúrgicos. Otra de las fiestas era el Corpus Christie. En la vida cotidiana de los feligreses, tuvieron mucha importancia las ´novenas´ y la navidad, que permitieron se conformara una tradición culinaria proveniente de las labores económicas, de los trapiches, y el ganado. Aunque muchos fueran pobres, no faltaban los intercambios vecinales de natilla y buñuelos, y los dulces de bicarbonato, leche, azúcar y sal. Los ricos mataban marrano, comían natilla de maíz, arequipe de arroz y leche, miel en los manjares (Agudelo, 2001:69).
´En el barrio (Playa Rica) fomenté el pesebre comunitario; y allí era muy grato ver a las familias congregadas para la celebración de la novena navideña, en donde recogíamos regalos para los niños, compartíamos natilla, buñuelos, hojuelas; y el 24 de diciembre, jugábamos a encontrar al niño Dios y con el ánimo de premiar al pequeño o al joven que lo hallara´ (Ospina, entrevista). Las ´Romerías´ fueron de mucha significación. Se celebraban con un poco más de autonomía ya que se hacían en los diferentes barrios, generalmente los domingos. Se invitaba a los curas, realizan rifas y bazares para conseguir fondos para las parroquias, se representaban comedias y se vendía comida (morcilla, empanadas, cerveza, etc.) (Hoyos y Molina, 1994:101).
Algo característico de uno de los barrios eran los saineteros que empezaban a salir desde el 7 de diciembre de cada año y recorrían todos los barrios. Los saineteros eran unos hombres artesanos, campesinos o gentes sin oficio que se preparaban previamente para montar sus espectáculos
En las fiestas abundaba la pólvora y las gentes concurrían a ellas a pesar del peligro que causaban los triki- trakes, las perdices, la vacaloca, busca nigua y las temibles gargantillas que hacían correr a los parroquianos (Agudelo, 2001).
y salir a los barrios a divertir a sus gentes, especialmente a los niños. Todos ellos llevaban disfraces de colores subidos y máscaras horrorosas, llevaban también en los calzones bombachos adheridos a la parte inferior gran cantidad de cascabeles que resonaban al bailar y caminar.
Según Clímaco Agudelo (2001:68) otros acontecimientos eran los carnavales organizados por la administración para la inauguración de alguna obra que mereciera la pena, únicamente se permitían los juegos prohibidos, riñas de gallos, corridas de toros en las calles públicas y bailes en algunas trastiendas del pueblo. Estos carnavales servían para atraer gentes de otras partes y dinamizar el comercio, en el lugar donde se fuera a inaugurar la obra se servía una copa de champaña. Los últimos carnavales en Itagüí, fueron en el año de 1938, cuando se inauguró el busto del expresidente Enrique Olaya Herrera en la plaza principal, la que fue dinamitada en 1948.
En la parte céntrica del parque de Itagüí, fue construido un llamativo quiosco en 1939 por el concejo municipal con la colaboración de la S.M.P.I. ´Este quiosco estaba destinado a biblioteca, pero como no resultaron libros ni tampoco lectores, resolvieron darlo en arriendo para un negocio productivo aún fuera una cantina (Agudelo Ángel 2001: 76). Este quiosco adquirió mucha fama porque allí concurrían personajes de todas las clases sociales: negociantes, comisionistas, políticos- como: Eduardo Santos, siendo presidente de Colombia; Jorge Eliécer Gaitán, cuando fue ministro de Educación, y otros altos personajes que lanzaban arengas al pueblo desde la terraza-. Se comentaba todos los últimos acontecimientos, los enamorados conversaban con las novias y amigas y no podían faltar los patos del pueblo que ocupaban una mesa y pedían un tinto para sentarse a criticar a las solteronas y a la gente que les diera papaya (Correa y Rúa, 2014)
La plaza principal28 fue el único espacio público del que dispusieron los pobladores hasta los años 40´s. En él se llevó a cabo durante varios años la feria de ganados29 y el mercado30. El parque obrero y Santander inaugurados en 1940 constituyeron también puntos importantes para el desarrollo de actividades culturales31 .
En el parque obrero comenzaron los trabajos en 1940 y fue inaugurado en diciembre del mismo año. El maestro de la obra fue Domingo Cuartas, quien desarrolló los planos que elaboró Julián de la Cuesta. Este parque y el Santander se diseñaron a partir del Plan municipal Itagüí Futuro concebido por la Administración municipal y la Sociedad
28. El parque principal en los municipios es para sus habitantes, el lugar urbano más significativo, y se constituye como el centro representativo de lo civil, lo religioso, lo colectivo. Los parques tienen gran valor simbólico porque desde allí se han establecido centros históricos y, durante la primera mitad del siglo XX, han constituido el espacio que estructura el crecimiento de la trama urbana. En torno a ellos se localizaron los pobladores de mayor status económico que construyeron sus viviendas y locales comerciales de acuerdo con los patrones estilísticos de la época (Área metropolitana, 2010). 29. Llegó a tener importancia nacional y solo desapareció cuando Medellín consolidó la suya. Fue también sede de grandes empresarios de la arriería, transportadores de la época; el comercio se estableció con Riosucio (Caldas) y el Valle del Cauca, en general toda la zona de colonización antioqueña. 30. El 13 de febrero de 1944 fue trasladado el mercado público del parque a la plaza. 31. ´Los parques son patrimonio urbano y arquitectónico, uno de los legados primigenios de los poblados. Su reconocimiento parte de una lectura como lugares emblemáticos, sociales, estratégicos en lo religioso, gubernamental y cultural por excelencia. El tiempo de sus transformaciones es disímil pues obedece a las condiciones económicas, culturales y sociales de cada lugar´ (Área metropolitana, 2010).
de Mejoras Públicas. La escultura representa al obrero con su yunque, tenazas y mazo, actividad industrial que a partir de esa década comenzó a caracterizar a Itagüí. Para la inauguración fue invitado el expresidente Alfonso López Pumarejo, quien había otorgado todas las prestaciones sociales a los trabajadores colombianos, que hasta ese momento no tenían cesantías, ni vacaciones, ni derecho a médico y la jornada laboral era de 10 a 12 horas.
Monumento al obrero - Fotografía Amantina Osorio 2012
Parque obrero actual - Fotografía Amantina Osorio 2017

En los primeros tiempos en el parque se llevaban a cabo las fiestas del Primero de Mayo, en las cuales se desplegaban grandes manifestaciones de trabajadores de toda parte con intervención de oradores venidos de Medellín y/o de Itagüí. Se conformó el entorno con algunos barrios habitados principalmente por obreros, que con el paso de los años se fue convirtiendo en un espacio tanto para la recreación y el arte, así como para la formación de ciudadanos y el fortalecimiento de la democracia. ´Desde su fundación el parque ha sido un centro de diversiones y hoy más que nunca, tanto éste como sus alrededores, están saturados de negocios de diferentes clases, como cafés, cantinas, tabernas, fotografías, la Clínica Casa de la Salud, la Biblioteca, muy cerca está la Registraduría del Estado Civil y hace tiempo funcionó en la esquina de la carrera 51ª con calle 47 el famoso café Volga cuyo propietario llenó de mesas y taburetes metálicos, los andenes del parque para atender a su numerosa clientela que a diario lo frecuentaba´. (Sitio de Itagüí Historia Itagüí Alcaldía internet). El parque obrero y el parque Brasil han sufrido varias remodelaciones, la última realizada a partir de 2014 en la que se unieron los dos parques, como parte del proyecto “Itagüí tiene Centro”.
El resultado es el Parque Obrero – Brasil, convertido en una zona cultural de encuentro y servicios comunitarios, y se conformó un sistema urbano de espacios públicos complementario al parque principal32. Cuenta con un componente
32. El secretario Escobar comentó que la Administración del Municipio fomentará las manifestaciones deportivas, culturales y de familia en este espacio. “En cuanto a lo deportivo se fomentarán actividades como los aeróbicos; además, este es un referente cultural muy importante, entonces se dejaron unos espacios para que se pongan carpas y que podamos hacer todo un desarrollo en temas culturales y lúdicos en nuestro municipio”. El mundo 23 de diciembre 2015
Parque Obrero-Brasil homenaje a personajes del municipio

artístico por las obras instaladas: ´El flautista´ del escultor Rodrigo Arenas Betancur, maestro antioqueño reconocido mundialmente; ´Umbrales´ del escultor Ronny Vayda Adler; los bustos de Antonio Nariño y Diego Echavarría Misas, del maestro Octavio Montoya y los bustos del General Santander y de Avelino Saldarriaga, del maestro Gabriel Restrepo.
El parque El Brasil denominado antes parque Santander había sido parte de la finca denominada El Brasil, adquirido por el comerciante Samuel Álvarez Abad a finales del siglo XIX, después que lo urbanizó fue comprado por el Municipio para un parque y levantar un monumento en honor al general Francisco de Paula Santander con motivo del primer centenario de su muerte el 6 de mayo de 1940. En 1948 el monumento fue retirado y el pedestal destruido por la Administración. El busto de Santander y las placas fueron llevados al almacén municipal, donde se conservaron por un tiempo hasta desaparecer. Existen rumores que afirman que el monumento fue dinamitado por un grupo de políticos intolerantes.

Parque El Brasil tomada de www.panoramio.com

Parque El Brasil Fotografía de Amantina Osorio R. 2017 Durante un tiempo el parque se caracterizó por estar ocupado por carretas, caballos, camiones y taxis y montallantas. Pero con la construcción de la Cámara de Comercio del Aburrá Sur en uno de sus costados en el año 2008 propició una remodelación que hizo que fueran reubicados los ocupantes anteriormente mencionados.
En una de las esquinas del parque El Brasil se construyó el Café Brasil en 1927 cuyos dueños eran Luis Alfonso González, y Samuel Álvarez (El Ñato Perucho); fue de fama nacional, porque allí concurrían todos los personajes importantes del Departamento. Tenía un salón de baile y una magnifica gallera que llamaba la atención de todas las gentes de Antioquia porque traían los mejores gallos de diferentes partes del país y se jugaban grandes cantidades de dinero.

Café Brasil En la década de los 70, la colonial plaza principal fue transformada, introduciéndole senderos peatonales y se destacaba su alta arborización. Las especies vegetales que poblaban la plaza o parque incluían ceibas, araucarias, almendros, cauchos, carboneros y palmas. El comercio alrededor del parque era intenso: bares, cantinas y juegos de azar predominaban.
Iglesia Nuestra Señora del Rosario


Iglesia Nuestra Señora del Rosario 2018
En el año 2003 la plaza sufrió una transformación que implicó la tala de una ceiba centenaria y de algunas araucanas y guayacanes que fueron sembrados en 1991, lo que en su momento causó indignación de algunos sectores. En 2014 el parque tuvo una nueva remodelación en la que se construyó una gran plazoleta de un solo nivel.
Otro de los lugares importantes para la recreación y el divertimento de los ciudadanos de Medellín y toda el área metropolitana tras su fundación en junio de 1942, fue el estadio y el hipódromo San Fernando, edificio que para su época era considerado fuera de serie en las construcciones de su clase. ´Las tardes de hípica eran acompañadas por bandas y grupos musicales. Las tertulias, los bailes, las reuniones sociales y el encuentro de apostadores y aficionados creaban un ambiente que posibilitaba el encuentro y la socialización de distintos sectores de la sociedad´ (Valencia, 2017:74). Este espacio pasó a la historia por ser el escenario del primer partido del fútbol colombiano en territorio antioqueño. El hipódromo - estadio funcionó hasta el año de 1952. Actualmente en esos predios está ubicada la Central Mayorista de Antioquia.
La estación para la llegada del Ferrocarril de Amagá al municipio fue construida en 1911. Este hecho significó el estrechamiento de los vínculos comerciales con los municipios vecinos. Cabe señalar que donde se ubicaron las estaciones se fueron fundando pueblos impulsando el desarrollo económico y social de la región: Caldas presentó un rápido auge en el crecimiento urbano con casas, hoteles, almacenes, fincas y cantinas; Envigado adquirió un mayor dinamismo, lo mismo que Bello. De la estación de Itagüí se llevaba cerveza de Pilsen hacia la Costa atlántica, Santander y al Valle. De regreso traían envases vacíos, cebada, carbón, sorgo y arroz para la Plaza Mayorista hasta que a comienzos de los años 90 se cerró la estación. ´A nosotros nos gustaba mucho ir a Yarumito donde estaba la estación y ver el tren. Le poníamos el oído a los rieles y así sabíamos cuando venía (Ochoa entrevista, 2018).
Estación Yarumito 2015 Fotografía Amantina Osorio R.

En 2017, Invías le entregó la estación en comodato al municipio con la misión de que se utilizara para promover la cultura y la educación. ´Yarumito es hoy centro cultural del barrio con una nutrida programación que va desde clubes de lectura, talleres de historia y exposiciones, hasta la proyección de películas, en las que los niños son los principales espectadores (Luján, 2018).
El Club Rotario en la celebración de sus 50 años señala el ambiente que se vivía en Itagüí para la década de los sesenta: ´la juventud itagüiseña se divertía de lo lindo, la ciudad se había convertido en la ´zona rosa´ del Valle de Aburrá, los estaderos ´El gran Pandequeso´ en límites con Envigado, ´El Venado´ en la autopista sur, ´La Villa del Mar´ en el sector de Villa Paula y los clubes ´Covadonga´ y ´La Pradera´ en el parque principal, eran la oferta parrandera de los 60s´ (Club Rotario, 2015:3).
Otra fuente de entretenimiento eran los teatros ´Joci´, México´ y el ´Caribe´, cada uno con su oferta bien particular33 .
33. Dos hombres aportaron al desarrollo del cine en la región Camilo Correa convirtió a Itagüí en la ´meca´ del cine colom-
El teatro Caribe estaba desde los años 50 era realmente un símbolo de arte en Itagüí. ´Allí se veían películas de arte, aunque también había la posibilidad de ver de pistoleros, gladiadores y otras. El cineclub comenzó allí para la época del octubre cultural 1977-78´ (Cardona 2018).
Casa Ditaires - Fotografía Amantina Osorio R. 2005

Coliseo Ditaires - Fotografía Flickr Otros centros para la recreación y la cultura se fueron desarrollando:

El Centro de Convenciones Ditaires, La construcción existió de tiempo atrás y fue conocida como finca La Carola.
biano con la primera empresa productora de cine nacional ´Procinal S.A.´ e igualmente, don Guillermo Isaza, quien diseñó una filmadora con sonido directo incorporado para hacer cuñas y cortometrajes.
En 1936 fue adquirida por Diego Echavarría Misas y su familia quien le dio el nombre de Hacienda Ditaires. Está destinado a las bellas artes y a la capacitación profesional, considerado patrimonio arquitectónico y cultural de Antioquia. Actualmente tiene un balneario compuesto de piscina de olas, toboganes, piscina de niños con parque infantil.
A su vez, existen los Auditorios Culturales del Sur y del Norte, construidos contiguamente a los colegios Instituto Técnico de Bachillerato Comercial y Liceo Enrique Vélez Escobar, respectivamente. El Parque de Simón Bolívar. Está localizado exactamente donde funcionó el trapiche del Dr. Avelino Saldarriaga, la escuela Simón Bolívar y el Liceo, están donde eran las ramadas en el que preparaban la miel y secaban el bagazo. Su construcción data aproximadamente de 1955, fecha que coincide con la construcción del barrio, del mismo nombre. La vieja hacienda de Avelino Saldarriaga, fue vendida por sus herederos a los señores Gilberto Zapata Isaza y Hernando Gaviria, quienes la urbanizaron.
El Parque del Artista, ubicado sobre la vía principal del municipio, es otro espacio constituido como teatro al aire libre. Como parque presta los servicios de un lugar para el encuentro de personas, el esparcimiento de familias y ami-
Parque del artista - Fotografías Amantina Osorio R.2018

gos, como también para la realización de diferentes actividades culturales. Se encuentra allí El Reto, escultura simbólica de Itagüí, realizada por Salvador Arango, en 1993.

Antiguo Centro Administrativo tomada de Facebook
Actual CAMI Fotografías Amantina Osorio 2016 La Plaza Cívica del CAMI (Centro Administrativo Municipal de Itagüí), se constituye en espacio cultural en el que se desarrollan actividades como El Momento de la Música. En ella están ubicadas ´la dama Arpa´ y ´la dama Flauta´, de Salvador Arango y, en el Hall del edificio administrativo, se encuentra la obra de Darío Rojas, ´Fragmentos Indígenas de Antioquia´.

El Parque de Las Chimeneas. Estas chimeneas son testimonio del desaparecido Galpón Guayabal que funcionó hasta fines de la década de 1980, tejar y fábrica de materiales en arcilla para la construcción. El parque, inaugurado en el año de 1994, tiene como principal atractivo diversos juegos mecánicos para la diversión popular, destacándose el conjunto de chimeneas como elemento paisajístico que alude a la permanencia de la industria local de tejares y ladrilleras del municipio, y que marcan simbólicamente el ingreso a Itagüí.
La mayoría de estos lugares han sido intervenidos en los últimos años y tienen en el momento actual modificaciones.

Parque de las chimeneas - Fotografías Amantina Osorio 2009 y 2018
