¿Se imaginan a un Elefante bien orondo estirando las patas en la mitad de sala y que la gente pase por un ladito haciendo como que no lo ve? ¿Se imaginan que ese Elefante sea la violencia política y la sala sea su país, su barrio, su hogar? ¿Qué tal si hablamos del Elefante antes de que seamos nosotros quienes no quepamos en la sala?
¡1,2,3 por el Elefante en la sala!