Editorial. #HablemosDelElefanteEnLaSala

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HABLEMOS DEL ELEFANTE EN LA SALA

MPAÑA SÚMATE A LA CA

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En la página 298 del Cambridge Academic Content Dictionary, dice que en inglés, elephant in the room «elefante en la habitación» es una expresión metafórica que se aplica a un problema obvio que nadie quiere discutir. La gentil wikipedia nos amplía con amabilidad el asunto que hace referencia a una verdad evidente que es ignorada o pasa inadvertida.

Esta expresión, «se basa en la idea de que sería imposible pasar por alto la presencia de un elefante en una habitación; entonces, las personas en la habitación que fingen que el elefante no está ahí han elegido evitar lidiar con el enorme problema que implica» dice Ignacio Sánchez-Cuenca en su columna El elefante en la habitación, publicada en 2017 para hablar sobre la cuestión política en España.

la profesora Sandra tuvo la sensatez de hablar de algo tan extremadamente obvio que parece irrisorio siquiera que se levanten resquemores, pero eso es justamente lo que ocurre cuando se habla de violencia política en un país que ha sido incapaz de conocer y contener sus propios conflictos.

La violencia política (manifestada en repertorios atroces como masacres, secuestros, desapariciones, desplazamientos

Hablar del elefante en la sala, o de uno de los cientos de elefantes que tenemos en la sala colombiana, es lo que hizo la profesora Sandra Ximena Caicedo, quien imparte clases en la institución educativa Libardo Madrid de la ciudad de Cali. Motivo suficiente para recibir amenazas, reproches, censura…

forzados, entre otros) se ha naturalizado en la experiencia cotidiana de muchos de nosotros, y a pesar de todo, o tal vez por ello, parece seguir siendo innombrable, no porque escaseen palabras para hablar de eso sino porque hay acontecimientos que por dogmas impuestos culturalmente se vuelven indecibles, incluso por exceso de palabras,

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Y entonces decimos que “en la mesa no se

Por ello, desde Bibliotecas A La Calle,

habla de política, ni de religión, ni de fútbol” o

asumimos que el llamado es también para

decimos como el abogado Jaime Arizabaleta,

nosotros. Creemos que es necesario sumar

que “la tarea no hace parte de un ejercicio

nuestros esfuerzos para caminar hacia una

educativo, sino de “politiquería”, cuando una

sociedad en paz, en tanto reconocemos que

maestra busca que sus estudiantes investiguen

también los bibliotecarios, bibliotecólogos,

por la realidad atroz del país en el que viven,

mediadores LEO somos sujetos políticos y

temiendo quizás que también ellos, en algún

las bibliotecas son instituciones de memoria

momento caigan víctimas de guerreros

y dispositivos culturales desde los cuales

inescrupulosos que avivan día a día la llama de

podemos y debemos aportar a la

la guerra.

construcción de escenarios dónde “hablar del elefante en la sala”, de eso que parece

La profesora Sandra hizo lo que todos y todas

obvio pero que muchos de nosotros sigue

deberíamos hacer desde los distintos lugares de

sin saber cómo hablar.

enunciación que ocupamos en el planeta, porque transformar las dinámicas culturales que

Compañeros bibliotecarios, promotores LEO,

nos mantienen sometidos a ridículos escenarios

archivistas, bibliotecólogos, mediadores

de violencia no es simplemente una tarea de

culturales, debemos desmitificar eso de ser

colegio, ni es el deber de la Comisión de la

neutrales y no asumir posturas “políticas”

Verdad. Es deber de todos, como padres y

como si lo político se restringiera a un

madres de familia, vecinos, profesionales,

ejercicio partidista electoral. Transitemos

académicos, hacer que cada espacio en el que

juntos el camino hacia una sociedad capaz

estamos, sea un escenario emancipador, un

de tener mejores conflictos, una sociedad

lugar para hablar de lo que no nos atrevemos a

que desde las palabras de Estanislao Zuleta,

hablar y que por múltiples razones se vuelve

sea capaz de conocerlos y de contenerlos.

silencio cómplice para que las atrocidades de la

De vivir no a pesar de ellos, sino productiva

violencia se sigan reproduciendo.

e inteligentemente en ellos. Que sólo un pueblo escéptico sobre la fiesta de la guerra, maduro para el conflicto, es un pueblo maduro para la paz”.

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Para ello queremos invitarlos a ser parte de la campaña

#HablemosDelElefanteEnlaSala una propuesta en la que buscamos compartir referentes literarios, metodológicos pero también experiencias y reflexiones que nos ayuden a sacar a la calle aquel animal grandote que es la violencia política, ese mamotreto que se nos metió a la intimidad de la casa y que más nos vale nombrar antes de que seamos nosotros quienes no quepamos en nuestro propio hogar.

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