PAGINA CUATRO
LA ISLA y los barcos
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:."-nc', 21 de septiembre 1973
EL DÍA
llegar
Para las primeras horas de la mañana de hoy está prevista la llegada a nuestro puerto de la fragata «Danmark», buque-escuela de la Marina Mercante danesa, De nuevo se adornará el pue to ds Santa Cruz de Tenerife con la blanca poesía de ¡as velas, de esas pirámides de blancas lonas que, en palos de mucha guinda y esbeltos baupresesf van poco a poco desapa^ reciendo, llevándose tras sí la época de —como bien dicen los Ingleses— los hombres de hle• rro tripulando barcos de madera. Durante unos días. Santa Cruz de Tenerife tendrá en su banía una representación de aquellos años que» Idos para siempre, por paradoja son para nosotros una realidad puesf durante e! último, han desfilado por ¡as aguas tranquilas —aguas domesticadas—- bs grandes vele ros «Gloria», «Dar Pomorza», «Juan Sebastián Elcano», «T0 varicht» y «Starrat Lekmkuhl». Pío Baraja, Neruda, Francisco Izquierdo, Tomás Morales, Jordan y otros muchos cantaron fas glorias de ios grandes veleros. Pero fue Zunzuneguí el que en ellos vio algo música! a! com pararlos, con toda propiedad, como una guitarra en que, ei casco, hace de caja de resonancia mientras el viento —con SMS largos y finos dedos— arranca del aparejo música a la vez du'ce y bronca, música del mar eneres pado y el viento silbado»-. ios y, con el motor auxiliar, as aparato de radiotelegrafía. Se considera por muchos ana En 1922 fue nuevamente mocanza media' de 5 nudos, velocrónica la estampa de un velero dernizada pero, cuando en 1933 cidad suficiente para las maniocon todo él trapo largo al vlsn se propuso su sustitución por bras en las aguas congestionato, sirviendo, además, para la una nueva fragata, queda ama das por e! tráfico y, especialinstrucción de marinos —todos rrada en puerto. mente, en las recaladas, entrafuturos oficiales— en una époAllí permaneció hasta que, en das o sai ¡das de puerto. ca en que alborea, es casi rea1934, Alian Villiers —e! conociUna vez termina su crusero La fragata «Danmark» cuando» después de sti última visita, lidad para la marina mercante, do escritor inglés— que bus- anual, los propios cadetes ¡Ses© hacía m la ve!a —(Foto Juan Hernández). s la propulsión atómica. caba un velero para su proyec- van a cabo ía tarea de calar los Se justifica su airosa presen- toda clase de tiempo, tiampla fuera de ia borda, si bien per-tada vuelta a! mundo lijó su masteleros, desenverqar las vecia en los mares por una razón ei cuerpo y e! espíritu Je ?os Jó- fectamente trincados a son de atención en la vieja «George más en consonancia con e! sen venes que han sabido respon- mar. Stage». Su oferta fue aceptada tido de la actualidad, Y es que der a ía llamada muda y profunE! 25 de junio de 1905, la y ? e! 29 de agosto del mismo ei trabajo en las jarcias, OOP da de la mar. «George Stage» fue abordada año, fue arrimado e! pabellón cerca de Copenhague por ei va- danés y, en su lugar, se izó ^! por inglés «Aítona», de leíth, y, «Red Duster», —en pocos minutos— sa hundió Con e! nuevo nombre de «Jo^ y con ella desaparecieron vein- seph Conrad», Alan vníiers, lleqoe . 19 fowne- vio n f^ mar con sus llancas &Q tidós de Jos cadetes que, libres vó a ía p^qu^ña f ^g?ta % travelera tenía para los fu- ías mientras que, er) Sas ;;a!í de servicio, dormían e ni ei-solía- vés de todos los 0063008 de!' turos oficiales daneses se com- das de puerto y recaudas, dé la \ do. mundo y, en noviembre de 19365 prendió perfectamente en ¡s se- chimenea en candela surgía el La Svítzers procedió ai salva- ta. vendió en Nueva York a Mr gunda mitad del píSido siglo, negro penacho que daba sombra mento de la pequeña fragata Hartford que, después de moder= Entonces hubo, como es nato» a Sa esteta, que, cinco semanas más tarde, nizarla totalmente —incluso ins-
El 1 de novíemlre de 1933, y al mando del Akerson, llego por vez a Santa Cruz de Tenerife De la fragata "Georg a la hoy en puerto, más de 90 anos de vida y La primera -de solo metros de eslora- compartió sus con la (i)
Por Juan-Antonfo
Los primeros
daneses
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El bríebarea «Viking» que, durante muchos anos, fus buque-escueia de la naviera Forenede» taje, continuó sus singladuras, En 1910 fue adquirida por el armador J = W. Broiln, de Soder» hamnf y hasta poco antes de que comenzase la primera guerra mundia! siguió en la mar. También en los últimos años de IB década de! pasado siglo navegó otro pequeño buque-es= cuela danés. Este, de sólo 30 toneladas, era de procedencia holandesa —había sido botado en 1869— y, en 1879, fue adqui rído por e! armador danés J, N Jessen, de Fano, que lo trans= formó para su utilización como pesquero, si bien también navegó a! cabotaje en las costas de Dinamarca. En 1895 ia Fano Praktiske Sornandskde lo adquirió para la práctica de sus alumnos y transformó su aparejo y, como goleta de velacho, el «Fortuna», dio comienzo a sus tareas formativas con alumnos del citado centro docente en materias náuticas, En 1907, e! «Fortuna* no esta ba ya en condiciones de navegar y, como simple pontón, con-
ga a ia entidad propietaria y en una misión que cumplió plenael muelle de armamento de la mente- la de dar ai curso IniBurmeister Wain se daban los cial de futuros oficiales de la últimos toques = E! día 189 una Marina Mercante un bagaje de repentina y fuerte ráfaga de cualidades —abnegación, sereniviento hizo que comenzase a dad, resistencia a ia fatiga, etc. escorar —-los tanques estaban — que condujese a cada indivacíos y aún no se les haoía ! -e viduo a adquirir confianza en sí nado con las 1=300 toneladas de mismo y sentir, al propio tiemlastre líquido—y, antes de que po, ia satisfacción de su capase pudiese evitar lo que se ave- cidada física y mental, Los incinaba, la «Viking» quedó tumba- capaces para el mando eran'allí da sobra el muelle y los palos reconocidos inmediatamente pay vergas sufrieron graves des-ra su eliminación. La vida a bordo del velero —de todos los trozos. además, No quedó afectado e! casco, veleros— presenta, pero sí toda ia arboladura que una Sucha duradera, constante, tuvo que ser renovada por com- entre e! hombre y ia Naturaleza, pleto, faena que se llevó a ca- lucha en la cual trata aquel de bo con rapidez y, ei 16 de junio, mantener en calidad de vencese celebró la firma de la entre- dor, y para ello le son necega del hermoso velero a la en- sarias las condiciones físicas y mentales™ las decisiones rápitidad propietaria. El coste de la «Viking» fue de das— que la dura y efectiva es591,000 coronas danesas y ? una cuela de la navegación a vela vez finalizadas las pruebas a proporciona* que fue sometido en el Mar del Durante los años de ia gueNorte, e! 19 de junio —con 80 rra mundial de 1914 a 1918, ia cadetes a su bordo— se hizo a «Viking» permaneció amarrado la vela con rumbo a! puerto de en Copenhague. Era la época Hamburgo, Allí tomó un carga- de pocos barcos y muy elevados fletes, pero sí bien fueron muchas las ofertas que por él se hicieron, la entidad propietaria no aceptó ninguna que no fuese para dedicarlo a la nnísión para ia que se había eonstrufdo= . . V con esta condición pasó, a la aquí tan conocida Forenede, naviera que, con una flota da 127 barcos de todo tipo y tonelaje, necesitaba dar a sus oficíales una perfecta formación práctica en la mar.