El ladrón de salchichas. Había una vez un pequeño pueblo llamado Saldichaslandia, allí solo se veían salchichas, y solo se podía comer salchichas, pero Jorge Beanzas y Berto Pelotón, dos niños muy desastrosos eran atan atrevidos que en vez de comer salchichas comían salchichón. Tenían un perro llamado Dichicha Cornicha, que siempre vigilaba la ciudad. Se sentaba con sus amos y ¡a vigilar!, claro que para ellos no era divertido. Cuando veía a alguien que no estaba haciendo algo bueno sus amos decían: - Una infracción de seguridad. Un día, a Salchichalandia fue un nuevo puesto de salchichas, y como no, allí se presentaba todos los días Dichicha Cornicha y un día tenía tanta hambre que se escapó y fue al puesto sin dinero y robó cuatro salchichas y se fue. Cuando Robie Retos, que era el dueño del puesto, llegó se encontró cuatro salchichas menos gritó: - ¡¡¡Alto al ladrón de salchichas!!! Y ¿A que no sabéis quienes llegaron?, Jorge y Berto, al ver con la boca llena de kepchup dijeron: - ¡Ay, ay, ay, madre mía en la que nos hemos metido! Estela 3º primaria
La crisis Esto era una familia que vivía muy bien y estaban acostumbrados a manejar mucho dinero, un día llegó la crisis y les costaba mucho trabajo vivir humildemente sin tanto dinero. No se podía vivir con tanto lujo, no salir tanto y sobre todo, gastar mucho dinero en tanto capricho. Antonio Joaquín 3º de primaria