Opinión
La industria textil y de las confecciones necesita respuestas urgentes te el 48% del costo total de una prenda, se concluye que producir en Asia cuesta un 43% menos que en Colombia, lo cual nos resta competitividad. Así mismo, y teniendo en cuenta el costo país, la energía en Colombia cuesta tres veces más que en Asia, razón por la que producir en esos países termina siendo un 45 % más barato que en nuestro territorio. Sumado a ello, contamos con una informalidad del 72% en el sector y afrontamos el flagelo del contrabando, que continúa generando daños al aparato productivo nacional. Por: Enrique Gómez Vicepresidente Cámara Colombiana de la Confección y Afines.
L
a industria textil y de las confecciones de Colombia pasa por el momento más difícil de su historia. Es tan grave la crisis, que el sector podría desaparecer junto con 1 millón 800 mil empleos si el Gobierno Nacional no toma medidas de choque urgentes. Las principales causas de esta difícil situación tienen que ver con la mano de obra barata en países asiáticos, el contrabando técnico, los altos costos de la energía eléctrica y la informalidad. La mano de obra en países como Vietnam, Laos, Camboya, entre otros, tiene precios irrisorios que rayan con la esclavitud. En estos países una operaria recibe una remuneración de entre 30 y 40 dólares mensuales con jornadas laborales de 14 horas diarias, mientras que en Colombia esta misma operaria gana aproximadamente 400 dólares mensuales con jornadas laborales de 8 horas diarias. Al tener en cuenta que la mano de obra es aproximadamen-
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En estas circunstancias, proponemos que el Gobierno Nacional aplique las siguientes medidas de choque para salvar la industria textil y de las confecciones: 1. Aumentar el arancel de importación para prendas de vestir, de tal manera que suba del 15 al 40 por ciento, que es el arancel máximo permitido por la OMC. Esto nos permitiría recuperar un 25% de competitividad. 2. Fijar el Monotributo como un mecanismo orientado a formalizar masivamente el sector. Este ya se aplica en países como Argentina y Brasil con resultados positivos. 3. Créditos blandos desembolsados a través de Bancoldex para capital de trabajo. De igual manera, y toda vez que hoy se discute en el país la suerte de la industria nacional y la política económica que debe impulsarla, proponemos estos cinco puntos para que sean aplicados en el marco de una nueva política industrial: