Fecha: 16 de marzo 2008 Sección: Lencería fina Página:
Lencería fina Teresa Berengueras
El domingo, después de votar, nos acercamos hasta La Llotja de Mar, cerca de la Barceloneta, donde Quim Vila, propietario de Vila Viniteca, nos había convocado para ser testigos del “Primer Premio Vila Viniteca de Cata por Parejas”. Quim Vila en sus ansias por fomentar el mundo del vino viene convocando toda clase de catas a lo largo del año así como jornadas abiertas para conocer mejor las diversas bodegas con presencia en los anaqueles de su establecimiento. En esta ocasión la cata se ha realizado por parejas siendo más de ochenta los dúos participantes que cataron siete vinos: 2 blancos, 3 tintos y 2 especiales (champagnes, cavas, jereces, oportos, etc.) para que el jurado formado por Juan Muñoz, Juan Manuel Bellver, Dirk van Niepoort, Fernando Guanchauri y José Peñín eligieran a los diez finalistas. Mientras los concursantes cataban los vinos y anotaban sus juicios y las cualidades de los mismos, y el jurado deliberaba, los asistentes paseábamos por el recinto gótico de La Llotja catando los caldos de las 20 bodegas que aprovechaban el evento para mostrar sus productos. El descanso del mediodía nos sirvió para degustar, en un salón con reminiscencias versallescas, el magnífico y largo menú del catering servido por El Bulli. Después que los 10 finalistas cataran otros 7 vinos el jurado, tras arduas deliberaciones, dio como ganadora a la pareja formada por David Martinez (jefe de sala y sumiller del restaurante El Velero de Sitges) y Rafael Sabadi (jefe de sala y sumiller del restaurante Roser 2 de L’Escala). Los ganadores recibieron un talón de 12.000 euros y un viaje a la fábrica Riedel (Alemania), la segunda pareja 4.000 euros y un lote de 48 copas Riedel y la tercera pareja 2.000 euros y un decantador Riedel Vinum. Las tres parejas viajarán dos días al Piamonte italiano para visitar la Bodega Ceretto y cenar en el restaurante Piazza Duomo de Alba, con una estrella Michelín. Fue una grata velada a la espera de los resultados electorales disfrutando de vinos producidos en diversas regiones españolas y algunos de más allá de los Pirineos.